tag:blogger.com,1999:blog-45687669099548019532024-02-06T20:26:44.655-08:00Orden Hsu Yun, Budismo chan/zen Mar del Plata, Argupasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.comBlogger42125tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-2709027539963131222010-01-07T16:51:00.000-08:002010-01-07T16:56:53.735-08:00<center> <span style="color:#8a2be2;"><h2>Issa y Basho o las dos caras del Samsara<br /><span style="font-family:Verdana;font-size:-2;"> dedicado a David Lanoue. 4 de diciembre.,2000</span></h2> </span> </center> <center>I</center><br /> <span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> </span><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> Kobayashi Yataro nació en 1763 y eligió como seudonimo Issa, que significa "taza de té". Su vida registra una serie de sucesos imprevistos y dolorosos, que sin duda moldearon su personalidad. Entre ellos, se destaca la muerte de su madre cuando tenía tres años, la incomprensión y hostilidad por parte de su madrastra, -que seguramente determinó el abandono del hogar familiar cuando tenía 15 años- y la muerte de su abuela que había quedado a cargo de su cuidado. </span></p><p> </p><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> En 1813 a los 52 años se casa con Kiku que tenía 28. Entre 1816 y 1820 mueren tres de los hijos de la pareja y en 1823 muere su esposa, poco tiempo después de traer al mundo al cuarto hijo que también morirá en 1823. En 1824 se casa nuevamente y se separa un año después. De un tercer matrimonio en 1826 nace la única hija que llegó a la edad adulta, pero Issa muere antes de su nacimiento. </span></p><p> </p><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> Tal historia de vida sin duda resulta no sólo conmovedora, sino que invita a encontrar un nexo entre el contenido y significación de sus haiku y los infortunios que tuvo que sobrellevar. En este sentido, gran cantidad de eruditos han escrito análisis interpretativos de muchos de sus haiku. Pero esta hermenéutica, sumamente atendible, puede de alguna manera padecer de unilateralidad y dejar de lado otros aspectos esenciales en las características del arte de Issa que trasciendan su sufrimiento personal. Sólo quisiera agregar un elemento a lo que ha sido profundamente analizado y que puedo apreciar en los haiku del "Sacerdote Taza-de- té del Templo del Haiku" como se llamó a si mismo. </span></p><p> </p><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> La serie de eventos trágicos a lo largo de su vida, tienen en su mayoría, una cualidad especialísima que los destaca. Y es que son acontecimientos sorpresivos, inesperados y bruscos. En este sentido las muertes de figuras altamente significativas desde su infancia, son el leit- motiv de su destino. Estos hechos podrían haber moldeado una cierta característica que encuentro en los haiku del poeta. Me refiero al carácter brusco e imprevisto en la resolución del poema en su tercera linea. Si bien ésta es una característica del haiku, en Issa parece estar destacada y magnificada. Cuan diferente a la definición propia de Basho, que modula sin tropiezos -casi deslizándose-, esa tercera linea con una continuidad, sin bien contrastante con las anteriores, profundamente fluente y armónica. </span></p><p> </p><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> No pretendo establecer una relación de causalidad unidireccional entre el carácter sobresaltante de las experiencias de la vida de Issa y la posíble influencia en su arte, sino por el contrario, generar un leve nexo de sentido llamando la atención sobre una modalidad del haiku de Issa, en un contexto que integra su biografía. Pues sin duda su penosa historia familiar lo insertan tempranamente en el mundo, con un entramado previo sumamente singular. Issa parecería haber sido <i>“arrojado”</i> a la realidad cotidiana, en lugar de haberla ido asimilando paulatinamente en sus aspectos más crudos. Es así que en sus obras encontramos no sólo la belleza y el arrobamiento propio de los haikus de <i>Matsuo Basho</i>, sino aristas sumamente alejadas de lo habitual. Piojos, orina, corrupción del cuerpo, emergen como un aspecto más de la realidad fenoménica y conviven con el loto, la luna y el té.<br /><br /><br /> </span></p><center><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;">II</span></center> <span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><br /><br /> </span><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> <i>Jodo-shinshu</i>. La Escuela de la Tierra Pura, que gira en torno a la épica de Amitaba, encuentra en Issa uno de sus seguidores. De acuerdo a esta vertiente del Budismo aquellos que repitan el nombre de Amida, encontrarán la <i>liberación</i> renaciendo en el <i>Paraíso del Oeste</i>. Simplemente con la monótona reiteración de la fórmula <i>Namu Amida Butsu o Nembutsu</i> encontrarán la salvacion. Alan Watts anota que ésta es la expresión exóterica de dicha doctrina y agrega que el suelo <i>esotérico</i> es otro: Amitaba es nuestro propio ser. Somos Amitaba. No necesitamos alcanzar el <i>satori</i>, estamos <i>iluminados</i>. Despojado de esa <i>tiránica búsqueda</i> Kobayashi Issa puede entregarse de pleno a los ritmos y colores del Samsara en toda su abigarrada versatilidad. Y quizás en la intimidad de su corazón repetía cada tanto, <i>Nembutsu, Nembutsu, Nembutsu...</i> </span></p><p> </p><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> En el otro polo, para <i>Matsuo Basho</i>, la vía hacia el <i>satori</i>, pasa por el haiku como profundización de la realidad y <i>liberación</i> definitiva. En este sentido el arte de Basho es sustancialmente contemplativo y se define como una <i>búsqueda</i>. En sus <i>haikus</i> se enseñorea la captación sutil, por la agudeza en la observación al servicio de la inteligencia. Y la ligazón de la tercera línea, si bien adquiere la sorpresa del <i>koan</i> está suavemente modulada, siempre sorprendente, pero nunca impactante como en Issa, debido a una temática cotidiana quintaesenciada por la elegancia en su presentación y la lírica de su movimiento. </span></p><p> </p><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> En el mundo de <i>Basho</i> hay lugar para lo cotidiano, ya sean los mosquitos o las prostitutas, pero estos son absorbidos por una visión contemplativa mas abarcativa que se dirige a un más allá de los hechos y de la mente. Sendero tras sendero, provincia tras provincia de su largo peregrinaje, cada haiku parece representar un paso más hacia la meta anhelada. Arte sutil y sugestivo, cuya melodía continua resonando largamente en nuestras mentes como el eco en la montaña. <i>Koan</i> que se desenvuelve en la suspensión de la realidad, en la forja por parte del poeta de una estática, de la captura de un instante que fija y sobre el que graba su reflexión y progresión en la vía. </span></p><p> </p><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> En cambio Issa, imprime una dinámica sin concesiones a sus imágenes, una síncopa inesperada, que se acerca más a la chispa eléctrica que a la serenidad contemplativa. No se ejercita como Basho en su interioridad para concentrarse en los frutos de su observación, retirándose a una cabaña para meditar y apartándose del mundo por un tiempo. Issa entra de lleno en el mundo de lo fenómenico como una daga, para capturar sin mediación alguna, la cotidianidad de la realidad en sus más ríspidas aristas. De ese modo pueden observar el mismo suceso o paisaje pero con un resultado totalmente distinto en su <i>arte del haiku</i>. </span></p><p> </p><p style="margin: 10px;" align="justify"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> <i>Basho e Issa,</i> dos sensibilidades diferentes, la una en búsqueda de una revelación, la otra sabiendo que ya ha llegado y lo impregna. Pero sería erróneo introducir alguna medida en su arte, inclinando el platillo de la balanza hacia uno de ellos. Pues sus dos rostros, son el mismo rostro en la mente del Buda. "El Samsara es el Nirvana y el Nirvana es el Samsara" repite monótonamente la sentencia oriental. Pues si <i>Basho</i> en sus haiku mostró la íntima belleza del mundo en su estática, <i>Issa</i> dotándolo de movimiento, le agregó al Samsara, textura y rugosidad... </span></p><p> <span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"> </span> </p><p> </p><p> </p><p style="margin: 10px;" align="justify"> <span style="font-family:Staccato222 BT;"><span style="font-size:+2;"><b>Carlos Fleitas</b></span></span> </p>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-81979618948955111022009-11-24T16:32:00.000-08:002009-11-24T16:33:53.840-08:00Dos mentes unidas<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXHJks6baBW-iUbQVFaSWAbo_jxx1ucMpDNFxkhmbqcVIdY5ZLwv4oDrl0FtDqaMbXYxHK8WQacSNvJCsR_HjZTiCF81ssglpl0eWi-1Od4mLu0QBE8wUYCkhfeGk5cEMwvGxNr89w7TWi/s1600/fotos+camara+123.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 320px; height: 240px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXHJks6baBW-iUbQVFaSWAbo_jxx1ucMpDNFxkhmbqcVIdY5ZLwv4oDrl0FtDqaMbXYxHK8WQacSNvJCsR_HjZTiCF81ssglpl0eWi-1Od4mLu0QBE8wUYCkhfeGk5cEMwvGxNr89w7TWi/s320/fotos+camara+123.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5407832863666264450" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-61334513357099919682009-11-24T16:25:00.000-08:002009-11-24T16:28:07.458-08:00Buda de la patagonia, pintura de Alberto Tenaglia<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgajksKXxv5NG9_tEChG6orNLspDW-acKSeDlJraHVP5fCdwTQEXvPHtBc8h83qdNkm-IFXITdKexnsegZPi12vnS3TYuuK87DDUmUVlB61zoumaBZBGe8fjz3R8ZvdOP7WEr7xGWqkcaa3/s1600/buda_patagonia_2.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 320px; height: 209px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgajksKXxv5NG9_tEChG6orNLspDW-acKSeDlJraHVP5fCdwTQEXvPHtBc8h83qdNkm-IFXITdKexnsegZPi12vnS3TYuuK87DDUmUVlB61zoumaBZBGe8fjz3R8ZvdOP7WEr7xGWqkcaa3/s320/buda_patagonia_2.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5407831260109102866" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-74095547374060584692009-11-24T16:20:00.000-08:002009-11-24T16:21:02.390-08:00Escritos en un amananecer de domingo<p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Escritos en un amanecer de domingo<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><span style=""> </span>1<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Muéstrate serpiente, no te escondas en el pasto,<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">muéstrate… te veo, aunque trates de anudar mi libertad al pasado.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Muéstrate, quién puede sentir miedo, estás ahí, te veo completa<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">sé donde terminas, soy la libertad que te observa, ya no puedes atacarme por sorpresa.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Sigo mi camino, sigo las huellas borradas de los sabios, para expandirme, hasta que contenga en la conciencia<span style=""> </span>el universo entero.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Ya no puedes atacar,sé donde comienzas y donde terminas, mientras mi ser que es el ser de todos los seres, se abisma en la plenitud infinita del amor.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><span style=""> </span>2<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Las rocas agitadas por el viento, rodean praderas en la altitud de las tinieblas,<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">mientras, las olas cruzan sus crestas, acariciando el soplido cíclico de los días.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><span style=""> </span>3<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Abismarse en la plenitud de lo desconocido,<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">acariciando, una a una, las hojas caidas del bosque.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Acontecer fugaz de un sentimiento súbito,<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">hasta llegar a la orilla, para reconciliar sueños dispersos por el viento.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><span style=""> </span>4<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Lluvia tenue sobre el tejado de los días.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Danza de insectos felices en el aire.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Ladrido de perros se escuchan desde el oeste,<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">esperando la ola que les haga escalar los cerros, para ver el océano ígneo de la inquietud contemplada.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><span style=""> </span>5<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Loado sea el ser de todos los seres,<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">loado sea el infinito envolvente, <o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><span style=""> </span>Namo Amida Butsu, Namo Amida Butsu, susurra el universo,<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">¿Quién soy yo?, la pregunta incesante, no hay ninguna “cosa” más allá de todas las cosas,<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">no hay ningún “que” al que aferrarnos,<span style=""> </span>solo hay que soltarse con las manos libres y rugir de alegría ante el abismo eterno.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><o:p> </o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR"><span style=""> </span>6<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Ayer, hoy, mañana, solo son trampas de la carcajada cósmica. La eternidad las contiene en un abrir y cerrar de ojos.<o:p></o:p></span></p> <p class="MsoNormal"><span style="" lang="ES-AR">Morir por la fulguración del rayo celeste, es nacer desde las noches, en la que el ser y el no ser se funden pero no se confunden, en una distinción sin diferencia.<o:p></o:p></span></p> <span style="" lang="ES-AR">El momento no lo sabemos, el llegará como un ladrón en la noche, para arrebatar nuestras ficticias ilusiones.</span>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-31302119638703494582009-11-24T16:07:00.000-08:002009-11-24T16:08:10.194-08:00El ego<p class="ecxMsoBodyText3"><b style=""><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-MX"><span style="">Upasaka </span></span><span class="ecxMsoHyperlink"><b><span style="color:black;"><span style="color: windowtext; text-decoration: none;" lang="ES-TRAD">Zhèng</span></span></b></span></span></b><span class="ecxMsoHyperlink"><b><span style="color:black;"><span style="color: windowtext; text-decoration: none;" lang="ES-TRAD"> góng /Alberto Tenaglia </span></span></b></span><span class="ecxMsoHyperlink"><b><span style="color:black;"><span style="color: windowtext; text-decoration: none;" lang="ES-TRAD">nos envía su aporte desde Argentina:</span></span></b></span><span style="font-weight: normal;" lang="ES-MX"></span></p> <p class="ecxMsoBodyText3"><b style=""><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt; font-weight: normal;" lang="ES-MX"> </span></span></b><span style="font-weight: normal;" lang="ES-MX"></span></p> <p class="ecxMsoBodyText3"><b style=""><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-TRAD"><span style="">Este es otro nivel del ser que ha llegado al Séptimo Mundo del Budismo Chan, y como tal se ha expuesto aquí con sus propios conceptos a la petición del contribuyente de participar, para poder distinguir entre ellos [los niveles]:</span></span></span></b></p> <p class="ecxMsoBodyText3"><b style=""><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt; font-weight: normal;" lang="ES-MX"> </span></span></b><span style="font-weight: normal;" lang="ES-MX"></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-MX"><span style="">“</span></span><span lang="ES-TRAD">El ego es el vehículo funcional del reino ordinario ( dimensiones físicas, emocionales y mentales de la humanidad), y no lo tenemos que confundir con el egoísmo que es un estado particular de contracción interior que obstaculiza la actualización del amor- ( Amor: la atracción a la unidad). </span></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-TRAD"> </span><span lang="ES-TRAD"></span></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-TRAD"><span style="">Trascender el ego no significa destruirlo sino conectarlo con algo superior, Los grandes sabios no eran menos que personas sino más que personas conectando su vehículo transitorio humano con la fuente Cósmica ( el yo Búdico, la mente del Buda, el yo real, el cristo interior etc. ).</span></span></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-TRAD"> </span><span lang="ES-TRAD"></span></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-TRAD"><span style="">El ego <b><u style=""><span style="font-weight: bold;">no es un obstáculo</span></u></b> para el espíritu sino una de sus más resplandecientes manifestaciones, todas las formas incluida la del ego no son más que vacuidad</span></span></span><span style="" lang="ES-MX"></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-MX"> </span></span><span style="" lang="ES-MX"></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><b><u style=""><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;color:red;"><span style="font-size: 12pt; color: red; font-weight: bold;" lang="ES-MX"><span style="">Nota de Yin Zhi Shakya</span></span></span></u></b><span style="" lang="ES-MX">: </span><b><span style="font-weight: bold;" lang="ES-TRAD">El mundo del ego simplemente no reconoce un mundo distinto y separado del espíritu</span></b><span lang="ES-TRAD">. En términos de geografía espiritual, la Montaña del Nirvana no se puede ver desde la Rueda del Samsara. La gente en la Rueda no saben que para llegar al Nirvana <b><span style="font-weight: bold;">es absolutamente necesario</span></b> tratar con la Ciénaga. (No hay ninguna otra manera.) Toman como una certeza que el Nirvana es simplemente un estado refinado o más elevado del Samsara. Reconocen la existencia de personas espirituales pero suponen que la espiritualidad es meramente una condición de un ego alterado, un ego que, quizás, se ha purificado a sí mismo de todos los signos observables de pecado y, como una recompensa, ha sido glorificado y elevado. <b><span style="font-weight: bold;">No pueden concebir la pérdida de su ego, una pérdida, según ellos, similar a perder su mente o al menos su humanidad</span></b>. Para ellos, las criaturas sin ego son criaturas sin identidad: vegetales, amebas, y lunáticos - grupos en los que nadie quiere incluirse voluntariamente.</span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-TRAD"> </span><span lang="ES-TRAD"></span></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-TRAD"><span style="">El <b><span style="font-weight: bold;">Sámsara</span></b> es la realidad vista a través de los ojos prejuiciosos del ego, y el <b><span style="font-weight: bold;">Nirvana</span></b> es la realidad aprehendida o entendida directamente, el espacio o la ciénaga es el lugar donde la transición desde un estado de conciencia al otro es posible... <b><span style="font-weight: bold;">no inevitable</span></b> sino simplemente posible. </span></span></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-TRAD"><span style="">Si desean más información a cerca de este asunto diríjanse al Séptimo Mundo del Budismo Chan. Gracias.</span></span></span></p> <p class="ecxMsoNormal"><span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-MX"> </span></span><span style="" lang="ES-MX"></span></p> <span style="font-family:Verdana;font-size:100%;"><span style="font-size: 12pt;" lang="ES-TRAD"> </span></span>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-5626482510640049622009-11-24T16:01:00.000-08:002009-11-24T16:02:19.985-08:00La soledad del trabajo interiorEl trabajo interior se inicia en soledad solamente con algunos recursos prácticos, como las diferentes técnicas de meditación que solo son soportes, herramientas , medios hábiles que nos ayudan a cruzar el río del samsara.<br />La interiorización es necesaria para descubrir que la budeidad no es niguna meta a alcanzar, eso es un sutil engaño del ego que siempre se está proyectado al futuro con pensamientos de progreso interior, creando una dualidad interior-exterior que es ficticia.<br /><br /><br />Cuando más penetramos en nuestro interior ya no hay soportes, ni maestros, ni libros, ni sutras, ni bliblia, ni budas, ni demonios, ni dios, solo existe un abismo insondable de realidad extrema el que flotamos y danzamos como mariposas en el aire.<br /><br />No hay nada a que aferrarse, y como dijo alguien por ahí no podés decir que es dios porque dios no es ningun que.<br />Jugando, danzando en el vacio, nos arrojamos a el con las manos libres de cadenas ilusorias que nos agobian cuando estamos fragmentados en pequeños estados de cociencia que nos atormentan con pensamientos angostos de contracción, temor,envidia, celos, pereza, lujuria ect.<br /><br />Como dijo Hui Neng - ver es el propósito de la vida- es porque todo lo que somos es todo lo que vemos.<br /><br />Y para terminar todo está bien, todo está bien.<br /><br />Un abrazo fraterno, Upazaka Alberto.upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-44629765190824042422009-11-04T16:29:00.000-08:002009-11-04T16:32:14.012-08:00<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi3R1gAYIV9rmVEqE1nEEE5-wKI5RuV6KjMzy11Vpd-UpNJMx77bBk5YYAU_omTshaz7q4AI4C0DAqZSgNU0S2VcX3_0PDVSpD7ZkSbrBR_D2z_WFrwK3lgsEgT05jlk5uB5rUDi4l14SWm/s1600-h/fotos+camara+072.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 320px; height: 240px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi3R1gAYIV9rmVEqE1nEEE5-wKI5RuV6KjMzy11Vpd-UpNJMx77bBk5YYAU_omTshaz7q4AI4C0DAqZSgNU0S2VcX3_0PDVSpD7ZkSbrBR_D2z_WFrwK3lgsEgT05jlk5uB5rUDi4l14SWm/s320/fotos+camara+072.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5400410602190195778" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-14871179147204238472009-11-03T16:53:00.000-08:002009-11-03T16:54:02.890-08:00upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-27459888696707199012009-10-07T18:04:00.001-07:002009-10-07T18:04:25.030-07:00<p align="center"><span style="font-size:180%;"><b>NOTA SOBRE KRISHNAMURTI</b></span></p> <p>Krishnamurti es una autor "a la moda" entre cierto público occidental con aspiraciones espirituales y nosotros, por sistema, desconfiamos de las modas. Tenemos comprobado que la moda es aquello que "gusta", que no "cuestiona" y que se digiere fácilmente. En occidente se ponen de moda "espiritual" aquellas personas o ideologías que nos resultan "faciles" para aceptar y Krishnamurti nos viene como anillo al dedo: nada de maestros, nada de largas horas de meditación o de oración, nada de renuncia y vida austera, nada de formas, iglesias o rituales... ¡se tira todo por la borda y los inteligentes y evolucionados occidentales llegaremos a la iluminación vía "cursillo" o vía "lectura-de-libro-comodamente-sentado"...! ¡Que más quieren oír algunos occidentales!</p> <p> </p> <p>Nadie puede negar la calidad y la altura de la experiencia interior de este autor a quien personalmente respetamos, pero con quien no compartimos las aplicaciones "exteriores" que hizo de su luz interior. Es en la aplicación de su experiencia donde resulta inoperante su posición, desde luego antitradicional, demasiado influenciada por la mentalidad moderna, demasiado impregnada de un "antiformalismo" que rozaba lo compulsivo y que, en definitiva, deslució y echó a perder su bella experiencia interna.</p> <p>Sabemos como al final de su vida, víctima quizás de un cierto desánimo y sabedor de que sus "<i>conferencias</i>" y "<i>escritos</i>" tenían muy poca eficacia práctica entre los miles de seguidores que se le acercaban, manifestó nuestro autor la intención de crear en el mundo varios "<i>centros</i>" donde las personas vivieran periodos largos de tiempo, donde pudieran estudiar y meditar su obra, y donde incluso hubiera una "<i>sala de silencio</i>" en la que encontrar el necesario estado interior para experimentar lo estudiado. En definitiva lo que Krishnamurti propuso... ¡llevaba ya miles de años inventado y se llama monasterio!; una santa y sabia institución contra la cual él lucho durante toda su vida.</p> <p>¿No hubiera sido mejor atenerse a la tradición en la cual nació y gracias a la cual él llegó a donde llegó, en vez de pretender merced a no se sabe que pretendido "<i>progreso</i>" acabar con ella y con sus instituciones? ¿No hubiera sido esto mucho más eficaz espiritualmente para las decenas de miles de seguidores que se han limitado a leer su obra y a escucharle, pero entre los cuales nadie ha alcanzado ni una milésima de su experiencia? ¿No es, en definitiva, mejor recurrir a las experimentadas e inspiradas formas y enseñanzas de la tradición, que intentar cambiar el estado interior de las personas a base de "<i>charlas</i>", "<i>libros</i>" y "<i>cursillos de fin de semana</i>" a precios de lujo?</p> <p>Insistimos en no quitarle nada de su intensa vivencia interna –que para nosotros quisiéramos– y de algunas explicaciones, aclaraciones y descripciones que pueden llegar a ser altamente inspiradoras y bellas, pero el conjunto de su "papel" en este mundo arroja demasiadas sombras como para valorarlo positivamente sin ninguna condición. Con esa manía contra toda forma, contra los maestros, contra los monasterios, las tradiciones, los símbolos, ritos, plegarias, etc... da la impresión de haber sembrado la confusión, el desasosiego, o la perdida, en muchas almas sinceras y capacitadas, en vez de haberlas ayudado eficazmente en la vida interior.</p>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-83034293811072423372009-10-07T17:46:00.001-07:002009-10-07T17:46:48.836-07:00<p align="center"><span style="color:#800000;"><span style="font-size:7;">GLOSARIO de la TRADICION</span></span></p> <p align="center"><b>______________________________________________________________________________</b></p> <p><b>El <i>Glosario</i> que presentamos no pretende en modo alguno ser exhaustivo en la selección de los términos, ni agotar su significado en todos sus matices. Conscientes de que lo que aquí se presenta puede ser afinado y completado de una manera más rigurosa, tan solo hemos tratado de ofrecer una aproximación de cómo se pueden entender dentro del ámbito y las referencias en las que se movía el Padre Henri Stéphane –es decir dentro del ámbito del «Pensamiento Tradicional»– algunos términos y conceptos que en el mundo moderno han sido desvirtuados, desfigurados o simplemente se ignoran. Queda invitado por lo tanto el lector a un posterior investigación y profundización.</b></p> <p><b>Se pretende también la clarificación de algunas palabras de origen hindú que con frecuencia eran empleadas por el Padre Stéphane y que modernamente en occidente no siempre se transmiten en su significado legítimo dando lugar a muchas confusiones y malentendidos.</b></p> <p><b>Comprendemos que a algunos Cristianos les resulta chocante e incluso molesta la alusión a doctrinas orientales o el uso de terminología no Occidental. Lamentablemente las doctrinas orientales se están mal-enseñando y mal-interpretando en Occidente; a veces por Orientales occidentalizados; a veces por Occidentales –por desgracia también desde dentro de la Iglesia– ignorantes o incluso malintencionados. </b> </p> <p><b>Simplemente diremos que determinados planteamientos orientales nos ayudan a aclarar algunos altos planteamientos Cristianos que, para nuestra desgracia, han quedado diluidos o ignorados. Nos viene bien la ayuda Oriental como catalizador para reactivar nuestra tradición y para devolverle su vitalidad y profundidad. Desde luego siempre teniendo en cuenta las diferencias que separan a ambos mundos y sin pretender en absoluto que lo Oriental añada algo a una tradición como la Cristiana a la que en si, siendo completa, nada le falta.</b></p> <p><b>Comprendemos también que algunos de los planteamientos del ámbito <i>tradicional</i> puedan resultar extraños y suscitar rechazo a nuestra mentalidad <i>moderna</i> tan acostumbrados como estamos al <i>«libre pensamiento», </i>la <i>«opinión propia», </i>al <i>«todo es relativo»</i>, al <i>«progreso», </i>la <i>«ciencia»</i>, la <i>«evolución»</i>, la <i>«igualdad»</i> etc. A los occidentales modernos nos resulta chochante cuando nos hablan de principios absolutos no discutibles y directamente captables, ausencia de individualidad, tradiciones milenarias, ausencia de progreso o de evolución, doctrinas, jerarquías, autoridad espiritual, castas, normas, etc.</b></p> <p><b>Puede ser un buen ejercicio de apertura si el lector trata de entender lo que el «Pensamiento Tradicional» expone sin hacer caso de sus <i>«prejuicios modernos» </i>(que son tantos o más que las llamadas <i>«supersticiones antiguas»</i>). Es un buen motivo de reflexión el ver como estos principios han sido la guía de millones de personas de todas las tradiciones del mundo, durante miles de años. Hay que tener esto presente antes de rechazar de plano lo que las tradiciones dicen y tachar de supersticiosos, incultos o ignorantes a miles de millones de personas que han vivido con estos principios durante miles de años. Podemos reflexionar y preguntarnos sinceramente si los ignorantes no seremos nosotros; esta pequeña parte del mundo que dura el poco tiempo que llevamos de nuestra llamada <i>«civilización moderna».</i></b></p> <p><b>Nos daríamos por satisfechos si este trabajo pudiera servir al lector de empuje para una posterior investigación seria, profunda y sin prejuicios, más allá del posible primer rechazo visceral.</b></p> <p> </p> <p align="center"><b>* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *</b></p> <p> </p> <p><b>Absoluto. </b>La Total-Realidad actualizando (con relación a nuestro mundo) en un paso de la Potencia al Acto y según la Voluntad divina, toda determinación relativa.</p> <p><i>«El mundo fenoménico es una huella que deja tras de si la actividad creadora incesante de lo Absoluto» (Toshihiko Isutzu)</i></p> <p><b>Accidente. </b>Aquello que es apto de existir en otro (la <b><i>Substancia</i></b>) como en un sujeto de inherencia (<i>cui competit esse in alio tanquam in subjecto inhaesionis</i>). Modificación transitoria perteneciente al orden contingente de las cosas y que posee el grado de realidad que es propio a su naturaleza.</p> <p><i>«El accidente no está en lo Absoluto. Aquel que sabe eso por experiencia tiene el derecho de decir en verdad que la alegría es su compañera» (J. Van Ruysbroeck)</i></p> <p><b>Acción. <i>«</i></b><i>La actuación anormal en que se desenvuelve el mundo occidental, ha transformado la subordinación natural de la acción respecto a la <b>contemplación</b>, en una verdadera autarquía de la primera respecto a la segunda, es decir, en un total trastocamiento y desjerarquización del orden que posibilitó la continuidad de sociedades edificadas en base a un esquema <b>inteligente</b>. Todas las doctrinas tradicionales han considerado relevante la superioridad natural de la contemplación, sin dejar de reconocer el lugar que le corresponde a la acción en el mundo relativo de la contingencia y de la manifestación externa. Además, hay que tener bien presente que la acción extrae su realidad de la contemplación, y que la primera sin esta última es pura agitación sin principio ni finalidad alguna.» (Vicente Alberto Biolcati, La Edad Crepuscular, ediciones Obelisco)</i></p> <p>La acción no tiene en sí misma su razón suficiente y es por lo tanto contingente y transitoria. La contemplación, en cambio, pertenece a lo inmutable y eterno. Además, la acción no puede legitimar su existencia sin un principio de anterioridad lógica y ontológica, por lo que carece de sentido separada de aquél, es decir, de quien obtiene su razón de ser. En cambio la contemplación es autosuficiente, y para entregarse a ella no hay necesidad de salir de sí mismo, ya que su finalidad es interior y real en sentido absoluto. Contemplar implica realizar la suprema actividad, la cual siempre es interior. La acción en cambio supone la pasividad por ser exterior y luego dependiente de la primera. En efecto, el nivel espiritual es aquel en el cual domina la máxima actividad, y el corporal la máxima pasividad.</p> <p><b>Acto. </b>Lo que se opone a <b><i>potencia</i></b>, lo que está completado, acabado.</p> <p><b>Actualización. </b>Paso de la <b><i>potencia</i></b> al <b><i>acto</i>.</b></p> <p><b>Advaita. </b>Ver <b><i>Shankara</i>. </b>Doctrina filosófica de la "No Dualidad" sistematizada por Shankara. Afirma la unidad de un Principio inicial, y, por tanto, la no-existencia de una dualidad que opondría un principio espiritual a otro material. Lo que pertenece al orden natural y relativo no es mas que ilusión, resultado de la ignorancia.</p> <p><b>Agapé. </b>Palabra griega correspondiente al latín <b><i>caritas</i>.</b></p> <p><b>Alegría. </b>Estado de arrebato interior, sin realidad causal ni determinación particular, que es la del alma en los "paraísos del Amor".</p> <p><i>«Que Allah te haga dichoso en la alegría del otro» ( Rumi)</i></p> <p><b>Alma. </b>En el lenguaje tradicional y en el lenguaje anterior al renacimiento, el <b><i>alma</i> </b>sería el conjunto de procesos síquicos, lo que actualmente llamaríamos la <b><i>mente</i></b> o <i>psique</i>, por eso se llega a decir que <i>«el alma es el demonio», </i>ese alma a la cual debe "odiar" todo aquel que quiere ser discípulo de Cristo y a la cual, como San Pablo nos recuerda, la Palabra de Dios como una espada de doble filo <i>«separa del espíritu», </i>un alma que San Pablo debe haber "perdido" para ser capaz de decir de verdad que <i>«vivo, pero no yo, sino Cristo en mí». </i>En el lenguaje posterior a la Edad Media se van confundiendo los términos <i>alma</i> y <b><i>espíritu</i></b> según los contextos hasta llegar a la confusión total actual en la que se considera al hombre como cuerpo y alma, en vez de la trilogía tradicional y universal de cuerpo, alma y espíritu.</p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenonspiritusanimacorpus.htm"><i>«Espiritus, Anima, Corpus»</i></a> de René Guenon.</p> <p><b>Alquimia. </b><i>«La alquimia no es entendida en un sentido "material" sino por los ignorantes, para quienes el simbolismo es letra muerta. Son aquellos que los verdaderos alquimistas de la Edad Media occidental estigmatizaron con el nombre de "sopladores" o de "quemadores de carbón", y que fueron los auténticos precursores de la química moderna, por poco halagador que tal origen sea para ésta» (R. Guénon, Sobre esoterismo Islámico y Taoismo)</i></p> <p>La Alquimia era una ciencia de orden cosmológico y de aplicación al orden humano en virtud de la analogía entre el microcosmos y el macrocosmos. Como la <b><i>astrología </i></b>y todas las demás ciencias tradicionales, tenía un profundo carácter espiritual en razón de la llamada <b><i>ley de correspondencia</i></b>.</p> <p><b>Amor. </b>La atracción a la unidad. Actualización misericordiosa de la Voluntad divina irrigando todos los soportes de la manifestación.</p> <p><i>«El amor que Dios prodiga a sus servidores, según un proceso sin fin, es en su esencia el principio mismo de su ser» (Ibn´Arabi, Tratado del Amor)</i></p> <p><i>«La experiencia cristiana siente que la fuente de poder reside en la caridad más que en el conocimiento (<b>gnosis</b>), y sospecha de la <b>metafísica</b> porque ésta parece exaltar el conocimiento por encima del amor (<b>bhakti</b>). Sin embargo, es imposible separar al conocimiento metafísico de la caridad divina; en la comprensión el conocimiento y el amor son una sola cosa, y la identidad de ambos se encuentra en el antiguo uso del verbo "conocer" al hablar del amor entre el hombre y la mujer. El conocimiento del Espíritu no es aquel pretendido conocimiento que proporciona orgullo espiritual, y que más correctamente debiera llamarse «información». Conocer la Realidad última es conocer y ser uno con la "caritas" misma. (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p><b>Analogía. </b><i>Proporción</i> entre realidades o conceptos diferentes permitiendo calificarlos los unos por los otros, o incluso por un término único que convenga a todos en razón de una cierta <i>similitud</i>.</p> <p><b>Analógico. </b>Que revela de la <b><i>analogía</i></b>. Una correspondencia analógica es la que está hecha en virtud de una analogía o de un símbolo.</p> <p><b>Anamnesis. </b>Plegaria de la liturgia eucarística en la cual se conmemoran (o se recuerdan) los misterios de la salvación: Pasión, Resurrección, Ascensión, etc.</p> <p><b>Ananda.</b> El tercer término de la triada <i>Sat-Chit-Ananda</i>, que significa la Beatitud, o Felicidad suprema. Felicidad suprema, bienaventuranza, plenitud, beatitud perfecta (asimilada a Shiva en la triada <i>Sat-Chit-Ananda</i>).</p> <p><b>Andrógino</b>. Ser que es a la vez hombre y mujer.</p> <p><b>Annamaya kosha.</b> Literalmente: <i>envoltura de alimento</i> constitutiva del cuerpo material. </p> <p><b>Antahkarana.</b> Alma. Literalmente, "órgano interno". Es el conjunto de los poderes físicos que organizan las experiencias particulares de un ser condicionado. Órgano interno o mente. Comprende la mente pensante (<i>manas</i>), la mente racional e intuitiva <i>(budhi)</i>, el sentido del yo <i>(Ahamkara)</i> y la memoria <i>(chitta).</i> Organo interno, función mental. </p> <p><b>Apariencia. </b><i>«Vestido» </i>exterior al cual no conviene apegarse; solo debe ser conocido –o por decirlo mejor asentido– el Amor que determina la «cosa» y que la vivifica.</p> <p><i>«No busques la apariencia como lo hacen los ignorantes; ve hacia la interioridad si eres capaz de ello» (Sultan Valad, La Palabra Secreta)</i></p> <p><b>Apófasis. </b>Palabra griega que significa «negación». La teología <i>apofática</i> dice de Dios lo que él no es, más que lo que él es.</p> <p><b>Apoyo. </b>Lo que sirve de base y fundamenta la veracidad de la «cosa» para aquel que no conoce en absoluto, por captación directa, al Causador Universal.</p> <p><i>«El mundo visible es el punto de apoyo para elevarse al mundo del Reino Celeste y el «recorrido de la vía Derecha» consiste en esta ascensión» (Ghazâli, El Tabernáculo de las Luces)</i></p> <p><b>Areopagita. </b>Ver <b><i>Dionisio</i>.</b></p> <p><b>Arquetipo. </b>El Bien, la Bondad, la Belleza, la Justicia etc. Palabra griega que significa «modelo». Se trata aquí de las Ideas o de los Arquetipos en el sentido dado por Platón, no en el sentido degradado que ha popularizado C.G. Jung mezclando los que son propiamente arquetipos suprahumanos emanando del Ser, con formaciones infrahumanas.</p> <p><i>«Los arquetipos no están por debajo del entendimiento sino por encima del mismo, y por eso todo lo que éste puede identificar de ellos no es más que una visión muy limitada de lo que son en realidad (...) solo cuando se llega a la unión del alma con el espíritu... se produce una manifestación de aquellas posibilidades» (Titus Burckhardt, Ciencia Moderna y Sabiduría Tradicional)</i></p> <p><b>Artes. </b>Cuando se habla de <b><i>Arte</i></b> y <b><i>Ciencia</i></b> nos referimos a las <i>Artes</i> y <i>Ciencias</i> tradicionales, cuando todavía estaban ligadas a principios metafísicos y ocupaban un lugar integrado e integrador en la vida cotidiana de las personas. No nos referimos a la degeneración actual que ha convertido el arte en un mero objeto de "lujo", "pasatiempo" o "decoración", y a la ciencia en una mera divagación dispersa, utilitarista y mercantilista, normalmente aplicada a la industria civil o militar, y sin ninguna función "religadora". Arte y Ciencia tradicionales constituían actos rituales y sacros que ligaban al artista (el <i>artifex</i> medieval) con principios espirituales.</p> <p><i>«Guénon nos hace notar acertadamente que el arte ha recorrido el mismo camino descendente que las demás expresiones del Occidente moderno, camino que parte de la concepción tradicional del mismo hasta llegar a la concepción profana contemporánea. Entre sus características visible sobresalen actualmente la hipertrofia de la fantasía individual, su sentimentalidad, la carencia absoluta de toda visión suprapersonal y el hecho de haber caído en una mera actitud estética. Ello significa reducirlo totalmente al punto de vista de la sensibilidad.</i></p> <p><i>Explica que esta desviación ya comenzó a evidenciarse con los griegos. En cambio en el antiguo Egipto, como en los pueblos orientales que obedecen a la tradición, el arte era hierático y simbólico, como lo fue también el arte medieval. Así comunicaba lo trascendente a quienes adoptaban una actitud contemplativa con él. Justamente en otro de sus libros (Iniciación y Realización espiritual) Guénon recuerda que la concepción tradicional en contraposición a la moderna señala a lo puramente <b>intelectual</b> y consecuentemente el arte encarna lo que desde el punto de vista <b>metafísico </b>se llamó "esplendor de lo verdadero". Luego con la marcha cíclica se fue trocando en un simple placer exterior, sin profundidad espiritual.</i></p> <p><i>Se inició así el arte profano, el cual obedece a tendencias subjetivas y psicológicas. Estas persiguen lo que impresiona superficialmente a los sentidos.</i></p> <p><i>En "Puntos de Vista sobre el Esoterismo Cristiano" transcribe una formula citada por M. Valli: En todo el arte medieval, en oposición al arte moderno, "se trata de la encarnación de una idea, no de la idealización de una realidad" de orden sensible.</i></p> <p><i>La cosmovisión actual del arte plástico lo lleva a brillar únicamente en museos y exposiciones como proyección de vivencias sensibles, al haber huido de él, con el ensombrecimiento de los niveles superiores, el reflejo de lo divino. (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>Varios interesantes textos y enlaces pueden encontrarse en el documento <a href="http://www.terra.es/personal/javierou/kyat.htm"><i>«Abhinavagupta y el Arte Tradicional»</i> </a>de la página<a href="http://www.terra.es/personal/javierou"> <i>Kali Yuga.</i> </a> </p> <p><b>Artificio. </b>Medio que oculta la verdad y que lleva a satisfacerse con la evidencia aparente y con la superficialidad.</p> <p><i>«La caridad nos libera de los artificios del ego, que en toda acción no persigue más que su propio reflejo» (Titus Burckhard)</i></p> <p><b>Aseidad. </b>Modalidad del Ser que existe «por si» (<i>a se) </i>y no por otro.</p> <p><b>Ashram.</b> Comunidad de discípulos reunidos alrededor de un maestro. Una combinación entre escuela, comunidad y monasterio, que no tiene equivalente en la cultura cristiana. </p> <p><b>Asrama. </b>Estado de existencia. Tradicionalmente estos estados son: el de estudiante, el de amo de casa, el de asceta, y el de renunciante.</p> <p><b>Astrología. </b><i>«La Astrología, otra ciencia cosmológica, es en realidad algo completamente distinto que el "arte adivinatorio" o la "ciencia conjetural" que únicamente quieren ver los modernos. antes que todo se relaciona con el conocimiento de las "leyes cíclicas", que juegan un papel importante en todas las ciencias tradicionales» (Rene Guénon, Cahiers du Sud 1947)</i></p> <p><i>«El caso de la Astrología es deplorable, porque a raíz de la incomprensión del significado profundo que tuvo en otra época, ha caído en un supuesto "arte-adivinatorio" sin sustentación alguna. Merece la pena recordar que en el simbolismo astrológico medieval, las esferas planetarias representaban los grados de realización iniciática. La <b>alquimia</b> era "una ciencia de orden cosmológico y de aplicación al orden humano en virtud de la analogía entre el microcosmos y el macrocosmos". Como todas las ciencias tradicionales, tenía un profundo carácter espiritual en razón de la llamada <b>ley de correspondencia</b>, al perderse el conocimiento de esa ley en razón de la degradación general que supone el avance del ciclo, ellas se convirtieron en barcos sin rumbo alguno, por decirlo de manera figurada. Habiendo dejado de recibir la luz del <b>intelecto</b>, se transformaron en investigaciones superficiales con fines exclusivamente utilitarios o subalternos.» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p><i>«Formas sensibles, armonía de la naturaleza, equilibrio de los cielos y orden de los astros reflejan un orden oculto cuyas correspondencias se encargan de estudiar ciencias tradicionales como la <b>cosmología</b> y la astrología, que son ciencias tradicionales, precisamente, porque sus saberes transmitidos se confunden con sus orígenes como el comienzo mismo del orden universal. La clave de interpretación en estos saberes no reside, pues, en criterios de prueba empíricos y externos, sino en la confianza y la autoridad de la tradición que en última instancia se identifica con la verdad misma» (F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p><i>«A pesar de la oposición consciente de la Iglesia primitiva a la astrología, una considerable porción de simbolismo astrológico ha penetrado en la iconografía cristiana. El toro, el león, el águila (símbolo que reemplaza al escorpión y al fénix) y el hombre, usados como emblemas de los cuatro evangelistas, son los cuatro signos fijos del Zodíaco: Taurus, Leo, Scorpio y Aquarius. Piscis, sin embargo, es el signo cristiano por excelencia, tanto porque está al "final" de los signos del Zodíaco y por tanto de la dominación del espíritu por las estrellas, como porque la llegada de la era cristiana coincide aproximadamente con la entrada del sol en Piscis en la procesion equinocial. Las correspondencias cosmológicas de este tipo son en realidad arbitrarias y fatuas para la mentalidad moderna. Pero el simbolismo es un sistema de asociación que no revela lógica, sino la vida espiritual del hombre, interior y desconocida.» (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p><b>Âtman y jiva</b>. <i>Atman </i>es el Ser de todo pero especialmente del ser humano en toda la tradición filosófica védica. Se traduce como ser individual en los contextos en que está relacionado el término con el ser viviente <i>jiva. </i>Pero el <i>jiva</i> incluye las envolturas vitales y mentales y el ser puro no. Sin embargo, en muchas ocasiones se emplea la misma palabra <i>atman</i>. Cuando el concepto se refiere a lo real, lo esencial en el ser humano, el ser <i>atman</i> no es distinto de <i>Brahman</i>, el Ser Absoluto. En español se ha empleado siempre la mayúscula para distinguir el Ser idéntico al absoluto del ser con las limitaciones añadidas en la condición humana. El Ser puro limitado por la mente aparece como un ser separado consciente. La entidad aparentemente unitaria se toma por «lo real» durante la existencia temporal. Esto es así hasta el descubrimiento de la identidad entre el Ser y lo Absoluto. Mientras el ser humano en evolución es el ser individual que transmigra, del que se ocupa Sankara en algunos pasajes.</p> <p><b>Âtmâ. </b>O también <i>Âtmân, </i>pronombre reflexivo del sánscrito que significa «si» (si-mismo) o el «Si» (el Si-mismo). Es <b><i>Brahman </i></b>en el ser humano.</p> <p>El "Si-mismo" (como pronombre reflexivo), el principio esencial y permanente del Ser, idéntico al <i>Brahman </i>universal. Es Shiva en nosotros. Traducirlo por Alma es equívoco ya que esta palabra, en las lenguas occidentales, designa tanto el principio eterno y transcendente, como el principio intermedio y sutil; la psique (<i>manas). </i>El Ser en el hombre. En la tradición de los <i>Upanishad</i>, la dimensión transcendente del Yo, metafísicamente idéntico al Principio. En el tantrismo equivale al principio Shivaico del Ser Entidad espiritual eterna, presente en todo ser (animales incluidos), y que se reencarna hasta la Liberación final. </p> <p>Es el equivalente Cristiano del <b><i>Espíritu</i></b>, en la división tradicional de Cuerpo, Alma y Espíritu (San Pablo). El alma sería lo que actualmente llamamos psique (<b><i>Manas</i></b> en la terminología hindú); el conjunto de características síquicas de la persona. En el lenguaje Cristiano de los últimos siglos se confunden ambos términos (alma y espíritu) dando lugar a muchas desorientaciones. En la espiritualidad medieval, cuando estos conceptos estaban más claros, se llegaba a afirmar que el Alma (la mente, el psiquismo) era el demonio.</p> <p>Mas información en "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenonspiritusanimacorpus.htm"><i>Spiritus, Anima, Corpus</i></a><i>"</i> de René Guénon.</p> <p><b>Autoridad y poder. </b><i>«Preferimos emplear para el orden de lo espiritual la palabra "autoridad" mejor que la palabra "poder", que reservamos al orden de lo temporal, al cual conviene más propiamente cuando se quiere entenderlo en estricto sentido» (René Guénon, Autoridad Espiritual y Poder Temporal).</i></p> <p><i>«Cabe decir que el poder espiritual pertenece "formalmente" a la casta sacerdotal, mientras que el poder temporal pertenece "eminentemente" a esta misma casta sacerdotal y "formalmente" a la casta real. Es así cómo, de común acuerdo con Aristóteles, las "formas" superiores contienen "eminentemente" a las "formas" inferiores» (René Guénon, Autoridad Espiritual y Poder Temporal)</i></p> <p><b>Avatâra. </b>Palabra sánscrita que significa «Descendimiento» (de lo divino en lo humano). En la doctrina hindú, los <i>avatares</i> son las manifestaciones de <i>Vishnu</i>; se suele traducir inadecuadamente por «<i>encarnaciones</i>».</p> <p>Descendimiento de Dios como mensajero divino, cuya venida tiene por objetivo restablecer el orden cósmico. </p> <p><b>Avidya.</b> No-saber, en el sentido de ignorancia, de falta de discernimiento entre lo verdadero y lo falso, entre lo real y lo irreal.</p> <p> </p> <p><b>Belleza. </b>Aquello que encanta al corazón, a los sentidos y a la razón, aniquilando por ello toda contingencia y toda relatividad.</p> <p><i>«Siempre las palabras le faltan a aquel que describe la Belleza» (Shaykh Al´Alawî)</i></p> <p><b>Bhagavad Gita.</b> "Canto del Bienaventurado"; fragmento del <i>Mahabârata</i>. Krishna, encarnación de Vishnu y conductor del carro de Arjuna, le da a este su enseñanza en el campo de batalla de Kurukshêta. Le revela en particular las diferentes formas de <i>yoga</i>: la acción desinteresada y la renuncia a la acción, el amor devocional, y el conocimiento. </p> <p><b>Bhakta.</b> Practicante de la <b><i>bhakti</i></b>. Adorador devocional. </p> <p><b>Bhakti.</b> La vía del amor devocional, quitándole a las palabras «amor» y «devoción» toda la resonancia dulzona, pasiva y sentimental que en occidente les damos. "Participación" sería el sentido primero de la palabra «<i>bhakti</i>».</p> <p><b>Bhakti yoga.</b> El camino de la unión con Dios por la devoción. Yoga de la devoción. </p> <p><b>Bien. </b>Lo justo y lo bueno según la Ley divina, y no según la voluntad de tal individualidad relativa. <i>«El bien que te espera viene de Dios pero el mal que te toca viene de ti mismo» (Corán, IV, 78-79)</i></p> <p><b>Brahmâ. </b><i>«En tanto que el Ser es "uno" solamente, el Principio supremo, designado como "Brahma" puede ser dicho "sin dualidad" ya que, estando más allá de toda determinación, incluida la del Ser que es la primera de todas, él no puede ser caracterizado por ningún atributo positivo: de este modo lo exige su infinitud, que es necesariamente la totalidad absoluta que en sí comprende a todas las posibilidades» (René Guénon, Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p>Dios creador. El productor de la manifestación del mundo. El "Ser inmenso", el aspecto organizador de lo divino (mejor que "creador" como se suele decir por facilidad, ya que la idea de creación es más hebraica que india). Gobierna el mundo del estado de vigilia. Asociado a la cualidad <i>Rajas.</i> </p> <p>O también <i>Brahman</i>, nombre neutro que designa el Principio supremo en la metafísica del <b><i>Vedanta</i>.</b></p> <p><b>Brahma-loka. </b>Mundo del <i>brahman</i> o simplemente de Brahma, el cual es una cualificación o una determinación de <i>brahman.</i> Concepto flotante según los textos. Puede tratarse del "Cielo" o del "Paraíso", en un sentido cercano al cristianismo, o bien de un estado absoluto, incondicionado, más allá de todos los paraísos posibles. </p> <p><b>Brahman.</b> El absoluto inmutable, infinito, eterno impersonal, abarcando tanto al <i>Ser </i>como al <i>No-Ser.</i> La esencia única de todo lo que es. La suprema realidad espiritual. Lo Absoluto, realidad no-dual. Palabra neutra, no confundir con Brahma. Lo Absoluto, ni existente ni no existente, pero de donde brota, por lo que se mantiene y adonde vuelve, todo lo que existe.</p> <p>La palabra <i>Brahman</i> también se aplica para designar a los miembros de la casta mas alta, la que esta dedicada y destinada al sacerdocio y a la sabiduría espiritual. El que se ha establecido en Brahma. Persona de la casta de los sacerdotes, filósofos y maestros.</p> <p><b>Brahman</b> . Se traduce por «lo Absoluto». Éste es el concepto que quizá se acerque más al significado inexpresable en la terminología siempre dual. Y se acerca porque su vacuidad no puede encerrarse en los límites pensados de lo relativo. Cualquier limitación destruiría el sentido unitotal. Por eso habrá que tener en cuenta para su comprensión que en este caso no es opuesto a «relativo», porque no entra dentro del ámbito de los opuestos. Es «Uno sin segundo». Lo relativo será entonces una manera limitada de ver lo Absoluto, que no tiene nada fuera de sí. Cuando Brahman es condicionado, con atributos (Saguna Brahman) no se traduce el término. En esos casos apunta a un cierto concepto de Dios, que se hace manifiesto en cada contexto. Tengamos en cuenta en cualquier caso que lo que la palabra evoca aquí no depende del absoluto de la filosofía idealista occidental como tampoco Brahman condicionado es idéntico a la noción del Dios personal y creador del pensamiento judeo-cristiano. </p> <p><b>Buddhi.</b> El intelecto trascendente que permite la "visión de las esencias". La <i>intuición</i> <i>intelectual</i> (diferente y opuesta a la intuición biológica instintiva) que refleja el principio espiritual. <i>Intuición</i> <i>intelectual</i> o <i>intelectiva</i>. No se debe confundir con la intuición biológica o sensitiva; error muy común en estos tiempos sobre todo en el ámbito de las <i>pseudo</i>-<i>espiritualidades</i> de la <b><i>Nueva Era</i></b>. Poder individuador, pero libre todavía de toda determinación o individuación particulares. Fuerza intelectual supraindividual o indeterminante. </p> <p> </p> <p><b>Calamo. </b>El Calamo supremo (<i>al-Qalam al-a´la</i>) corresponde al Intelecto primero (<i>al´Aql al-awwal</i>) o al Espíritu (<i>ar-Rûh</i>). Es la primera criatura de Dios, la que escribe la creación en la Tabla Guardada<b>.</b></p> <p><b>Caridad. (</b>Caritas o también <i>charitas</i>). Esta palabra viene del latín <i>carus</i>, «querido».Calor expansivo infuso en el alma oponiéndose a la «fijación» y a la «rigidez» del ego.</p> <p><i>«La caridad es una línea de amor entre Dios y el alma amorosa» (Jan Van Ruysbroeck)</i></p> <p><i>«Amar al prójimo como a si mismo», es realizar el misterium caritatis; es decir realizar en él y en mi esta transparencia del alma que permita a la Luz increada dispersar las tinieblas de la ilusión egocéntrica y altruista. Ya no hay más ni «yo» ni «tu», sino El, el Paráclito, el Consolador, el Amor increado, el Espíritu de Verdad que procede del Padre, único Principio de Unidad capaz de disolver los «nudos» del ego, y de romper los límites de la individualidad: «esta divina Persona como espirando de su espiración divina, eleva y dispone el alma de una manera muy elevada a espirar ella misma en Dios la misma espiración de amor que el Padre espira en el Hijo y el Hijo en el Padre, y que es el mismo Espíritu Santo que ellos espiran en ella en esta transformación». Es a este nivel de la Unión transformante donde se sitúa el misterium caritatis. Toda la caridad de aquí abajo no es más que la sombra de ello, o todo lo más el símbolo.» (Abbé Henri Stéphane, <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/con-henri-caridad.htm">Sobre</a></i><a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/con-henri-caridad.htm"> <i>la</i> <i>Caridad</i></a><i>)</i></p> <p><i>«El Cristianismo se sitúa fuera de las «acciones y reacciones» del orden humano; no es, pues, exotérico por definición primera. La caridad cristiana no tiene ni puede tener ningún interés en el «bienestar» por sí mismo, porque el verdadero Cristianismo, como toda religión ortodoxa, estima que la única verdadera felicidad de la que puede gozar la sociedad humana es su bienestar espiritual con, como flor de éste, la presencia del santo, meta de toda civilización normal; porque «los muchos sabios son la salud del mundo» (Sab. 6,24). Una verdad que los moralistas ignoran es la de que, cuando la obra de caridad es cumplida por amor a Dios, o en virtud del conocimiento de que «yo» soy el «prójimo» y que el «prójimo» es «yo mismo» –conocimiento que implica por otra parte este amor– la obra de caridad tendrá para el prójimo no solamente el valor de un beneficio exterior, sino también el de una bendición; por el contrario, cuando la caridad no es ejercida ni por amor a Dios ni en virtud del dicho conocimiento, sino únicamente en vista del simple «bienestar humano» considerado como un fin en sí, la bendición inherente a la verdadera caridad no acompaña el aparente beneficio, ni para quien la ejerce ni para quien la recibe» (F. Schuon, De la Unidad Trascendente de las Religiones)</i></p> <p><b>Catáfasis. </b>Palabra griega que significa «purificación» (Cataro= puro).</p> <p><b>Causa. </b>Lo que transciende los efectos (concebidos como «afirmación evolutiva de la Causa) bajo el punto de vista, evidentemente, del ser situado en el devenir y no en la simultaneidad. <i>«Los profetas y los Santos dicen que detrás del velo de las causas está el Causador; entonces ¿por qué no te vuelves buscador y no intentas levantar el velo de las causas para llegar al Causador? (Djalâl-ud-Dîn Rûmî)</i></p> <p><b>Casta. </b><i>«La casta está por encima de la <b>raza</b> porque el espíritu es superior a la forma; la raza es una forma, la casta un espíritu. Ni siquiera las castas hindúes pueden limitarse a una raza: hay brahmanes tamules, balineses y siameses» (Frithjof Schuon)</i></p> <p><i>En toda sociedad estructurada normalmente y de acuerdo a vínculos reales, vínculos que no sean simples subproductos de abstracciones individuales y cliches construidos por pensadores en boga, existe siempre entre los seres humanos un orden jerárquico basado en sus diferentes naturalezas. Por supuesto, este orden es exactamente inverso al que corresponde a las leyes de la materia. Las castas surgen de un concepto básico que consiste en el conocimiento de que un individuo no es un producto intercambiable con otro individuo al diferenciarse solo por lo exterior, materia, visible y aparente, como ocurre en el mundo moderno. La idea tradicional se basa en el hecho de que cada ser humano tiene una naturaleza mental y física distinta a la de cualquier otro, y otra función en la sociedad» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>La institución de las castas, como explica Guénon (<i>Autoridad Espiritual y Poder Temporal</i>), «<i>es la aplicación de la doctrina metafísica al orden humano" </i>según la cual en el punto más alto de la jerarquía comunitaria lógicamente debe encontrase el que posee la verdadera sabiduría, o sea la autoridad espiritual, representada en el caso de la India por la casta brahmánica. Ella tiene como función la transmisión y conservación de la Doctrina Sagrada y detenta el nivel superior que es el puramente intelectual, ámbito que supone estar más allá de las contingencias históricas. El poder temporal, en cambio, lo posee la casta de los <i>Shatriyas.</i> Durante la <b><i>Edad Media</i></b> el orden social imperante en los países que formaban la Cristiandad dependía de una estructura tradicional y era análogo al de la India actual. Así el clero tenía una función semejante a la de los brahmanes y la nobleza correspondía a la casta de los Shatriyas. Según la jerarquía hindú luego de los <i>Shatriyas</i> se encuentran los <i>Vaishyas (</i>comerciantes) y siguiendo a estos los <i>shudras</i>. A ellos correspondía el <i>"Tercer estado"</i> y los siervos respectivamente en la organización medieval europea.</p> <p><i>«El sistema de castas, como todas las instituciones sagradas, descansa en la naturaleza de las cosas, o, más precisamente, en un aspecto de ésta, en una realidad, pues que no puede dejar de manifestarse en ciertas condiciones; la misma observación vale para el aspecto opuesto, el de la igualdad de los hombres antes Dios. En suma, para justificar el sistema de castas, basta plantear la cuestión siguiente: ¿existen la diversidad de calificaciones y la herencia? Si existen, el sistema de las castas es posible y legítimo. Y lo mismo para la ausencia de castas, donde ésta se impone tradicionalmente: ¿son iguales los hombres, no tan sólo desde el punto de vista de la animalidad, que no se discute, sino del de sus fines últimos? Es seguro, pues todo hombre tiene un alma inmortal; así pues, en alguna sociedad tradicional, esta consideración puede prevalecer sobre la de la diversidad de calificaciones. (F. Schuon, Castas y Razas)</i></p> <p><i>«Si al occidental le cuesta trabajo comprender el sistema de las castas, es ante todo porque subestima la ley de la herencia, y la subestima por la sencilla razón de que se ha vuelto más o menos inoperante en un medio tan caótico como el Occidente moderno, en el que aproximadamente todo el mundo aspira a ascender la escala social –si es que eso existe todavía– y en el que casi nadie ejerce la profesión de su padre; uno dos siglos de tal régimen bastan para hacer la herencia tanto más precaria y flotante cuanto que no se la había hecho fructificar anteriormente por un sistema tan riguroso como el de las castas hindúes; pero incluso allí donde había oficios transmitidos de padre a hijo, la herencia ha sido prácticamente abolida por las máquinas. A esto hay que añadir, por una parte, la eliminación de la nobleza, y por otra, la creación de "elites" nuevas: los elementos más disparatados y "opacos" se han transmutado en "intelectuales", de modo que casi nadie "está en ya en su lugar", como diría Guénon; y por eso no hay nada de asombroso en que la "metafísica" sea considerada en lo sucesivo desde la perspectiva del "vaishya" y el "shûdra", cosa que ningún fárrago de cultura podría disimular» (F. Schuon, Castas y Razas)</i></p> <p>En estas sociedades el sacerdocio (<i>Brahmanes</i>), como foco de orientación espiritual, conserva la doctrina, la contempla y enseña. Es autoridad porque se sustenta en sí mismo. Los guerreros (<i>Ksatriyas</i>) gobiernan, es decir, ejercen la función administrativa, judicial y militar, conservando el orden interno y preservándolo de los ataques exteriores. Constituyen el poder, porque su potencia se apoya en la fuerza externa o material. Los artesanos (<i>Vaishyas</i>) manufacturan e intercambian bienes y servicios. Los agricultores (<i>Shudras</i>) trabajan la tierra y aportan a la comunidad sus frutos. Todos ellos bajo la inspiración y supervisión de la casta sapiencial. Símbolos, leyendas y sistemas de castas mantienen el recuerdo de esta organización de funciones acordes con las capacidades respectivas del ser humano. En la medida en que Occidente se conservó fiel a una doctrina tradicional mantuvo también una estructura social paralela. La Europa de la <b><i>Edad Media</i></b> consolidada felizmente como un complejo de civilización tradicional, la Cristiandad, alcanzó una organización política equivalente y <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20sanbernardo.htm"><i>San Bernardo de Claraval</i> </a>al mismo tiempo místico especulativo, caballero y fundador de órdenes monásticas constructoras de catedrales, es la síntesis humana de una semejante cultura con sólidos cimientos en la tradición.</p> <p><i>«El sistema de castas de la India, muchas veces mal entendido y ahora menospreciado, se basaba en la concepción de que la sociedad posee un orden triple que corresponde por analogía a la constitución interior del hombre (aproximadamente lo que los cristianos llaman cuerpo, alma y espíritu) y a los tres principios cosmológicos de la inercia (tamas), la actividad (rajas) y el equilibrio (sattva)» (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p><b>Certeza. </b>Evidencia de las realidades esenciales asentidas de manera total e inmediata: la Certeza alivia al corazón de la duda y confirma la fidelidad.</p> <p><i>«Avanza hasta la Verdad de la Certeza, más allá de todo lo que te enseñaron los demás y más allá mismo de tu propio pensamiento que es un obstáculo» (Ali Ibn al-Farid)</i></p> <p><b>Ciclos Cósmicos. </b>La teoría de los Ciclos Cósmicos está desarrollada en formas diversas por todas las doctrinas tradicionales, pero particularmente y con mayor claridad, por la doctrina hindú.</p> <p>En su dimensión temporal, lo manifestado tiene un ritmo cíclico que implica a todo el orden cósmico. Un ciclo de manifestación universal se cierra en sí mismo. Pueden distinguirse en él distintos períodos. Según las doctrinas tradicionales, un ciclo cósmico aplicado al orden humano y llamado <i>Manvantara</i> de acuerdo a la doctrina hindú, se compone de cuatro <i>Yugas </i>o Edades. Cada Edad implica una decadencia progresiva respecto de la precedente, debido a su alejamiento gradual del <i>«estado primordial»</i> o esencial. Esta concepción se opone a la moderna idea de <b><i>progreso</i></b>. Lo que en realidad ocurre es que el desarrollo cíclico supone un alejamiento cada vez mayor del principio espiritual de unidad originaria. </p> <p>En resumen, según las doctrinas tradicionales, el tiempo no es algo que se desarrolla como una línea recta, o sea uniformemente. La concepción real del tiempo representa a éste como cíclico. Se trata de un tiempo calificado, y no de un tiempo cuantitativo como lo pretende la simplificación extrema propia del espíritu moderno.</p> <p><i>«Todas las doctrinas tradicionales, bajo distintas formas simbólicas, con un ropaje oral o literario diferente, y de manera más o menos explícita o velada, enseñan que el desarrollo en el tiempo de la manifestación universal y con ella el de la humanidad presente se ha cumplido y se cumplirá siempre en forma cíclica y no rectilínea como pretenden algunos esquemas superficiales. A medida que se avanza en el ciclo, se va produciendo una decadencia espiritual cada vez más acelerada hasta llegar a la materialización más absoluta y la posterior disolución del mundo sensible cuando aquélla ha llegado al máximo posible. A lo largo del ciclo la sabiduría originaria o «logos primordial», de la cual todos los hombres participaban, se va cubriendo de velos que la ocultan a los ojos de la mayoría. Además se produce una verdadera atomización en el mundo sustancial y humano, con una diversificación cada vez más acentuada de su pluralidad material, alejándose ese mundo progresivamente del polo esencial o espiritual de la manifestación» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>De acuerdo con la <b><i>cosmología</i></b> la representación rectilínea del tiempo es inexacta. El tiempo es cíclico, volviéndose periódicamente al punto de partida como lo expresan todas las tradiciones conocidas. No nos referimos, por supuesto, al tiempo astronómico o medido según una convención, sino al tiempo cosmológico, que es un tiempo cualitativo o sea esencial. Los acontecimientos desarrollados en el tiempo de los relojes son reales, pero a su vez dramatizan simbólicamente un campo de conocimiento donde tanto el espacio como el tiempo devienen calificados.</p> <p><i>«El cristianismo, como todas las tradiciones, mantiene una concepción cíclica del devenir, por lo que no hay ningún progresismo intrínseco en él. Otra cosa es la desviación moderna de esta forma tradicional, que comienza en el Renacimiento y llega a su colmo en la actualidad, aceptando muchos de sus representantes la idea del <b>progreso</b> o <b>evolución</b>, en el sentido moderno de la palabra. La Reforma, especialmente, acoge y difunde esta concepción lineal y progresista de la historia. En los textos canónicos cristianos, encontramos una consideración cíclica de la historia, como se ve especialmente en el Apocalipsis, libro que cierra la Revelación cristiana, de carácter cosmológico, estrechamente ligado a la exposición de los tiempos finales que terminan, sin embargo, con un nuevo ciclo: «Vi un cielo nuevo y una nueva tierra». Igualmente, en las Epístolas de san Pablo, ser recoge esta doctrina. San Pablo dice vivir en los «tiempos finales» y la venida de Cristo significa la Plenitud de los tiempos, lo que posteriormente ha llevado a confusión, ciertamente, puesto que plenitud quiere decir culminación, lo que viene a continuación no puede ser más que decadencia, y así lo entendían los antiguos. La concepción cíclica es también evidente en la liturgia, que es de desarrollo completamente cíclico, y que se basa además en el ciclo astronómico lunar. Desde los primeros siglos, los Padres de la Iglesia, dividen la historia en seis o siete períodos que se relacionan con los días de la Creación y con los sellos del Apocalipsis. Honorio, por ejemplo, compara el proceso de la Iglesia con la vida de un individuo, definiendo los diferentes estadios desde la infancia hasta la decrepitud, que precederá al fin de este mundo. nada más alejado, pues, del progresismo. En la Edad Media, Anselmo de Havelberg, explicita toda una ciclología de la humanidad, a la que compara con el ave Fénix por sus renovaciones periódicas tras las degradaciones de rigor. Desde san Agustín, que en su Ciudad de Dios habla del saeculum senescens hasta Arnau de Vilanova es ésta la concepción cristiana, que incluso durante mucho tiempo se enseño en el catecismo.» (Revista <a href="http://www.geocities.com/revistalye/">Letra y Espíritu nº 5</a>) </i> </p> <p><i>«El plano de la manifestación en su transcurrir permanente es la resultante, sin principio ni fin, del equilibrio que conjuga la espontánea irradiación de lo Absoluto con las acciones humanas, egoístas o despojadas de deseo que obstaculizan o dejan libremente expandirse la iluminación divina. La acción, por lo tanto, es el motor de la historia, una historia que es más que humana, historia del cosmos. De la composición mutua, por lo demás, de la luz y de la tiniebla, de la vecindad o lejanía de lo Absoluto, en cuyo equilibrio la libertad del hombre desempeña la función fundamental, se va cristalizando el desarrollo orgánico de un ciclo total de la manifestación cósmica que comprende (según la tradición hindú) catorce ciclos menores, correspondientemente ordenados, y en proceso espiralado e indefinido de siete ciclos descendentes y siete ascendentes. Los cuatro <b>yugas</b> de la tradición hindú, las edades del mundo, no son más que períodos mínimos pertenecientes al ciclo menor en el que actualmente vive la humanidad, el último septenario descendente, y como período cíclico, el Kali Yuga, la edad de hierro u oscura, el último también de este ciclo» (F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p><b>Ciencias profanas. </b><i>«Al separarse las ciencias tradicionales de su base metafísica de la cual obtenían todo su significado, se formaron las llamadas ciencias profanas, verdaderas investigaciones dispersas sin dirección alguna y sin profundidad reconocible. Ellas como dice Guénon "desembocaron irremediablemente en un callejón sin salida, al apartarse del origen superior del que dependían. Así se llego a un estado característico de las investigaciones científicas actuales, que es la fuga y la atomización en el detalle. Tales análisis, afirma Guénon, "pueden seguirse hasta el infinito sin avanzar un solo paso en la vía del conocimiento verdadero" ya que este último es sintético. Recordemos a Plotino: "Cuando el alma adquiere un conocimiento científico cualquiera, ella se retira de la unidad y cesa de ser una; porque la ciencia implica la razón discursiva y la razón discursiva implica la multiplicidad.(...) Ni siquiera lo superficial interesa mayormente en la actualidad, sino las aplicaciones prácticas, y así "la ciencia se confunde con la industria". Hoy se cultivan únicamente las ciencias del mundo sensible, las que se basan en la experimentación y no en la verdad conceptual. La experiencia es inútil y carente de sentido en el campo <b>intelectual</b> puro. Tal situación tiene como fundamente algo que Guénon califica admirablemente como "superstición del hecho". En efecto, un hecho prueba solamente la existencia de ese hecho y nada más, ya que sus causas pueden ser varias, y las que le atribuimos se basan en opiniones individuales o hipótesis científicas que se desechan con la misma rapidez con que se aceptan, no cimentándose en la realidad objetiva. De ahí el absurdo de pretender verificar los principios metafísicos.</i></p> <p><i>Insiste nuestro autor en que "las ciencias modernas son, en el verdadero sentido de la palabra, nada más que residuos de las ciencias tradicionales". En efecto, a tal punto se ha llegado en el estado mental deficitario para poder entender las ciencias originarias, que se ha tomado la cáscara, por así decir, de esos antiguos conocimientos, y se los ha desarrollado únicamente en vista a propósitos utilitarios, lo cual testimonia un hito más en el retroceso cíclico. Por ejemplo las matemáticas actuales se reducen al cálculo. Han reemplazado su principio esencial, el número, por la cifra. Otras muestras de esta situación lamentable lo ofrecen la <b>astrología</b> y la <b>alquimia</b>, las cuales en su decadencia han dado lugar a la astronomía y la química moderna, ciencias que, divorciadas de los principios que fueron sus guías se estudian cada vez más en vista de sus meras aplicaciones prácticas y no como ciencias puras" (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>Ese «<i>saber ignorante</i>» que es la Ciencia moderna, es un saber relativo por faltarle lo esencial; los principios intelectuales que deberían sustentarlo. Como se trata de un conocimiento desgajado de su tronco así carecer de fundamento, desde el punto de vista absoluto es ilusorio. El tronco es la metafísica, de la cual dependen los saberes parciales. Sin ella, cualquier investigación es un itinerario en las sombras, al faltarle la luz de la verdad. Como consecuencia, la ciencia moderna constituye un dispersión superficial de conocimientos fragmentarios y efímeros; en esta forma cualquier teoría científica dura medio siglo a lo sumo. Por otra parte, es la exterioridad la que domina las preocupaciones generales, incluso en los hombres de ciencia, ello es el resultado de la manera que tienen las grandes masas de apreciar la realidad. En última instancia, todo se reduce a las inquietudes más intrascendentes y en una dirección opuesta a la interioridad del <b><i>intelecto</i></b>. Por esa razón los descubrimientos e invenciones de los últimos siglos han producido una polarización positiva del interés colectivo, al tener como finalidad únicamente el aumento del bienestar en el plano sensible, que pareciera ser la principal aspiración del hombre moderno.</p> <p>Ver "CIENCIA MODERNA Y SABIDURIA TRADICIONAL" de Titus Burckhardt en <a href="http://www.euskalnet.net/graal">TEXTOS TRADICIONALES</a></p> <p>Ver también el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20sobre%20el%20pretendido%20empirismo.htm"><i>«Sobre el pretendido empirismo de los antiguos».</i></a> </p> <p><b>Circumincesion. </b>Conjunto de las <b><i>relaciones</i></b> que unen a las Tres Personas divinas en la concepción latina de la Trinidad.</p> <p><b>Civilización tradicional. </b>Una civilización tradicional es aquella que se organiza y procede en su existencia temporal sustentada e inspirada por principios que provienen de la <b><i>tradición</i></b>.</p> <p><i>«Es una civilización que reposa sobre principios en el verdadero sentido de la palabra, es decir, allí donde el orden <b>intelectual</b> domina sobre los demás, del que todo procede directa o indirectamente y, ya se trate de ciencias o de instituciones sociales, donde todo no es, en definitiva, sino aplicaciones contingentes, secundarias y subordinadas de verdades puramente intelectuales» (René Guénon, Oriente y Occidente)</i></p> <p><i>«La civilización tradicional se basa en principios eternos, de ellos alimenta su devenir y así no va a la deriva. La pureza de su raíz se revela según que esa civilización se nutra de una doctrina metafísica o religiosa. En el primer caso, como sucede durante nuestro ciclo histórico en el Oriente (hinduismo y taoísmo) prima la <b>intuición</b> <b>intelectual</b> y a su servicio se pone todo el resto; en el segundo nivel predomina la creencia, el sentimiento contamina a la intuición pura, es lo que sucede con toda religión y, más concretamente, con el catolicismo en Occidente. El saber metafísico es <b>esotérico</b>, porque llega al fondo de la realidad a que ser refiere; la creencia religiosa, exotérica, porque se afinca en la superficie y ofrece explicaciones acordes. En el primer ejemplo el hombre puede <b>realizarse</b> totalmente, alcanzar la <b>liberación</b>; en el segundo solo provisoriamente <b>salvarse</b>» (F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p><b>Clase social. </b><i>«Las "clases" sociales, tal y como se entienden hoy en día en Occidente, no tienen nada en común con las verdaderas <b>castas</b>, y no son, a lo más, sino una especie de falsificación sin valor ni alcance, pues de ningún modo se fundamentan sobre la diferencia de posibilidades implicada en la naturaleza de los individuos» (René Guénon, Autoridad Espiritual y Poder Temporal)</i></p> <p><b>Color. </b>Modificación transitoria de la Luz inteligible según la asignación propia a cada una de las posibilidades.</p> <p><i>«El color del agua es el color de su recipiente» (Al-Junayd)</i></p> <p><b>Conformidad. </b>Adecuación inmediata del acto a la Voluntad divina que necesita, por parte de su «servidor», un reconocimiento previo –y una aceptación total– de su estatus ontológico y de su dependencia con relación de su Existenciador. <i>«La Beatitud del alma consiste en su conformidad consciente con su esencia» (Ibn Arabi)</i></p> <p><b>Conocimiento. </b>Captación intuitiva –no por el mental sino por el corazón-intelecto– del modo de actualización de la Vida divina en el espejo de nuestra propia existencia. <i>«Cuando el Sol del Conocimiento se eleva en el cielo del corazón, todo es iluminado sin que en realidad nada cambie; solo ha desaparecido la ignorancia que no tiene más que una existencia puramente negativa» (Shankara)</i></p> <p><b>Concentración. </b><i>Êkâgratâ </i>en la terminología hindú<i>. «La concentración del pensamiento llamada por los hindúes êkâgratâ es una cosa que nos es casi desconocida. Nuestros espíritus son como caleidoscopios de pensamientos en movimiento constante, y cerrar nuestros ojos mentales a toda otra cosa que no sea fijarlos sobre un pensamiento solamente ha llegado a ser casi imposible en la actualidad» (Max Muller)</i></p> <p><b>Contemplación. </b><i>«Contemplación significa la elevación de nuestro nivel de referencia desde lo empírico a lo ideal, desde la observación a la visión, desde cualquier sensación auditiva a la audición; el creador de imágenes (o el devoto, pues aquí no cabe distinguirlos) «toma una forma ideal bajo la acción de la visión, mientras sigue siendo sólo potencialmente "él mismo"»(A. K. Coomaraswamy)</i> </p> <p>Modo de percepción, que incumbe al «servidor» tanto por el ojo sensible como por la vista interior. La captación de lo verdadero concierne a la realidad total, la de lo manifestado y de lo no-manifestado.</p> <p><i>«Cuando la contemplación se debilita en ellos, los hombres pasan a la acción, que es una sombra de la contemplación. Incapaces de dedicarse a la contemplación por debilidad espiritual, no pueden alcanzar el objeto de la contemplación y llenarse de ella aun cuando la desean ver, y se lanzan a la acción para ver con los ojos lo que no pueden ver con la inteligencia. (...) ¿cómo un ser capaz de contemplar lo verdadero, preferiría lanzarse hacia la imagen de ello Lo prueban los menos capaces entre los niños, los cuales, incapaces de las matemáticas y de la contemplación, se dedican a lar artes y a los trabajos manuales.» (Plotinio, Enéada III, 6,4)</i></p> <p>Para llegar al verdadero conocimiento se precisa la contemplación (del latín <i>cum templum</i> o sea llegar al templo interior, principio real y esencial del ser manifestado); pero dicha contemplación se constituye en el conocimiento mismo, por darse en la interioridad, no pudiéndose establecer allí separación real entre el ser y el conocer en su esencia íntima. Metafísicamente hablando conocer supone llegar a la suprema realidad de Si mismo, centro que refleja el conocimiento universal y absoluto. No ocurre lo mismo con la <b><i>acción</i></b>, cuyos resultados son externos. El que accede al verdadero conocimiento o contemplación intelectual pura, llega a identificarse con él.</p> <p><i>«Buscad leyendo y hallaréis meditando; llamad orando y abríos contemplando.» (San Juan de la Cruz, Dichos de luz y amor)</i></p> <p>Ver también: <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/con-oracion.htm"><i>ORACION, MEDITACIÓN, CONTEMPLACIÓN</i></a></p> <p><b>Contratradición. </b>La negación de la sabiduría originaria, inmutable y eterna, que fue el patrimonio espiritual de la humanidad durante milenios. Se trata de un paso avanzado en el declive espiritual. Esta situación corresponde a la última fase del <i>Kali Yuga</i> o <i>Edad de Hierro</i>, en la cual, como enseñan todos los libros sagrados, se termina por realizar de manera efectiva la ruptura total con la <b><i>Tradición</i></b>, paso previo a la "disolución final". <i>«Obra constante de desviación del estado de equilibrio que constituyó la base de las civilizaciones normales, la que se fue cumpliendo gradualmente, como se observa en el paso insensible del humanismo al racionalismo, luego al mecanicismo y al materialismo más extremo» (R. Guénon)</i>. En la actualidad, aunque la subversión todavía no es total, ya hay muchos signos visibles de ella en lo que René Guénon llama <i>«situación de fraude»</i> y de <i>«parodia»; </i>se pretende sustituir lo auténticamente espiritual por «<i>simulacros y caricaturas». </i>Así, en las fases más avanzadas del desorden, éste pretende tomar las apariencias del orden y <i>«disimular la negación de todo principio con la afirmación de falsos principios» (R. Guénon). </i>Añade Guénon que todos estos <i>«simulacros y caricaturas»</i> son tan hábilmente presentados que la inmensa mayoría de los hombres se dejan engañar, y que <i>«no podemos asombrarnos al ver cómo supercherías de las más groseras se están imponiendo al vulgo, y cómo es difícil desengañarlo», </i>como ejemplo del caso extremo de la parodia, en la cual llega a lo grotesco la sustitución de lo auténticamente espiritual por productos subalternos, nuestro autor hace notar la extensión que han tomado en todas partes los <i>«pseudo rituales cívicos y laicos, y que dan a la masa un sustituto puramente humano de los verdaderos ritos religiosos». (El Reino de la Cantidad y los Signos de los Tiempos).</i></p> <p><i>«La Edad Moderna ha fortalecido las desviaciones antropocéntricas del Renacimiento y de la Reforma protestante y su mentalidad, sin estar subordinada a una base tradicional, ha generado una civilización intrínsecamente anómala, antitradicional, y en nuestro siglo que se desliza hacia su final, contratradicional, puesto que nuestra sociedad desnaturalizada no sólo se ha apartado de los principios espirituales, sino que imagina recursos y crea instituciones que imitan formalmente a lo tradicional para combatirlo (el marxismo y el psicoanálisis serían dos ejemplos correctos de lo expresado). Arribamos así a una época de completa materialización, signada por el aspecto ínfimo que la materia puede manifestar, el cuantitativo» (F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p><b>Corazón. </b>Ver <b><i>Hridaya</i></b>. Centro del ser, «lugar» de actualización de las manifestaciones incesantes de lo Absoluto; todo corazón divinizado toma la forma perfecta adecuada para reflejar fielmente la actividad de lo Real. Sede de la <i><b>Intuición Intelectiva </b>o Consciencia</i> y no sede de las emociones y sentimientos como se viene considerando actualmente al confundir lo emocional y sentimental con lo espiritual, consecuencia de confundir el <b><i>alma</i></b> con el <i><b>espíritu</b>.</i></p> <p><i>«Lo mismo que el sol da a los planetas su luz, igualmente el corazón –sede del <b>intelecto</b>– ilumina todas las facultades» (Titus Burckhardt).</i></p> <p><i>«Se sabe que en las tradiciones <b>gnosticas</b> de la India (sâmkya, <b>vedanta</b>, jñâna-yoga), el corazón (<b>hrid </b>o <b>hridaya</b>) no está asociado al sentimiento sino al conocimiento; de ninguna manera es la sede de las sensaciones, emociones o pasiones sino la sede del <b>intelecto</b>, en el sentido guenoniano del término, de esa pura <b>intuición intelectual </b>(<b>buddhi</b> o mati) que ve directamente las cosas en su luz verdadera sin pasar por la intermediación del mental (manas). Es más, según los más antiguos <b>upanishads</b>, el corazón es considerado como el centro del "alma viviente" individual (jivâtman), idéntica en su esencia al Principio supremo del universo (Paramâtman o <b>Brahman</b>). Nuestra individualidad humana es a la vez somática y síquica o, en términos hindúes, grosera y sutil. Es de todo este compuesto –y no solamente del cuerpo material– del que el corazón (la "caverna" o el "santuario") es el centro.» (Pierre Feuga)</i></p> <p><b>Cosa. </b>«Realidad» transitoriamente llevada a la existencia por la Voluntad determinativa del Ser y la Omnipotencia de su divino Mandato. <i>«En verdad, Nuestro decir a una Cosa, cuando Nosotros lo queremos, es que Nosotros le decimos: «¡Se!» de manera que ella es.» (Corán XVI.40)</i></p> <p><b>Cosmología. </b>La cosmología deriva de la metafísica, al explicitar su reflejo en el ámbito de la manifestación universal, ámbito determinado por el espacio, el tiempo y la cantidad. O sea, la cosmología es una consecuencia de los principios metafísicos aplicados al mundo formal e informal. Traduce en el espacio y en el tiempo, aspectos formales de las leyes naturales, los principios metafísicos de los que depende. Ella es, en palabras de Guenon, <i>«una aplicación al orden físico, y las verdaderas leyes naturales no son sino consecuencia, en un dominio relativo y contingente, de los principios universales y necesarios» (La Metafísica Oriental).</i></p> <p><b>Cualificación. <i>«</i></b><i>Es una cierta aptitud o disposición natural sin la que todo esfuerzo sería vano, ya que, evidentemente, el individuo no puede desarrollar sino las posibilidades que lleva en sí mismo desde su origen. Esta aptitud que hace lo que algunos llaman el "iniciable", constituye propiamente la "manifestación" requerida por todas las tradiciones iniciáticas» (René Guénon, Autoridad Espiritual y Poder Temporal)</i></p> <p><b>Chit. </b>Consciencia total, consciencia pura, consciencia consciente de si misma cuyo único objeto es <i>Ananda</i>, la Beatitud. </p> <p><b>Chitta.</b> Consciencia empírica (consciencia de algo) por oposición a <i>Chit</i>. Pensamiento formal y asociativo, por naturaleza inestable, una de las cuatro partes del <i>antahkarana</i> (el órgano mental). Cuando es empleada junto a <i>manas</i>, indica el conjunto de las tendencias en estado latente <i>(samskara)</i> que aparecerán como actos en nuestra vida presente o tendrán su fruto en nuestros ciclos de manifestación futuros. </p> <p> </p> <p><b>Darshan.</b> El hecho de contemplar a un sabio, un dios, un lugar sacro, y de recibir una bendición de él. </p> <p><b>Darshana. </b>La palabra sánscrita <i>Darshana</i> significa propiamente "vista" o "punto de vista". Los <i>Darshanas</i> son pues los puntos de vista de la doctrina, y no son, como se lo imaginan la mayoría de los occidentales "sistemas filosóficos" que se hacen competencia y se oponen unos a otros; en toda la medida en que estas "vistas" son estrictamente ortodoxas, no podrían naturalmente entrar en conflicto o en contradicción.</p> <p><b>Deidad. </b>Se aplica este termino a la trascendencia de Dios como principio supremo entificado llegando a "lo Divino" (<b><i>Gottheit</i></b>) innombrable, el silencio. El aspecto infinito y no-dual de Dios más allá del aspecto creador. En la teología ortodoxa oriental se hablaría de la <i>Esencia</i> por encima de las <i>Energías Divinas</i> increadas. En muchos de sus escritos tanto <b><i>Eckhart</i></b> como <b><i>Pseudo-Dionisio</i></b> emplean este lenguaje o expresiones análogas.</p> <p><b>Deisis</b>. Palabra griega que significa «súplica»; <b><i>icono</i></b> representando a Cristo entre la Virgen y San Juan Bautista.</p> <p><b>Dependencia. </b>Estado de necesidad de lo relativo frente a lo Absoluto, incompatible con cualquier pretensión de autonomía o de suficiencia.</p> <p><b>Dharana, Dhyâna, y Samadhi. </b>Son en la terminología hindú los tres últimos grados del ascenso a lo Absoluto. Son los equivalentes a la <i>Consideratio</i>, <i>Contemplatio</i> y <i>Raptus</i> formulados por<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20sanbernardo.htm"> San Bernardo </a>dentro de la espiritualidad cristiana.</p> <p><b>Dharma. </b><i>«Como lo muestra el sentido de la raíz verbal "dhri" de la cual deriva, esta palabra, en su significación más general, no designa sino una "manera de ser"; es, si se quiere, la naturaleza esencial de un ser, comprendiendo todo el conjunto de sus propiedades o cualidades características, y determinando, por las tendencias o disposiciones que implica, el modo como este ser se comporta, de modo total o en relación con una circunstancia particular. La misma noción puede ser aplicada no ya a un ser único, sino a una colectividad organizada, a una especie, al conjunto de seres de un ciclo cósmico o de un estado de existencia, o incluso al orden total del Universo» (René Guénon, Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20dharma.htm"><i>«Dharma»</i></a> de René Guénon.</p> <p><b>Dharma.</b> <b>1.-</b> La Ley universal, la Norma que sostiene la realidad material y moral. <b>2.-</b> La ley interna del individuo, la vocación en relación con la naturaleza profunda de cada uno. La ley sagrada. La ley universal. La ley moral. Lo que armoniza al individuo con el todo. Principio de conservación y de estabilidad de los seres manifestados; conformidad al orden del mundo (uno de los cuatro "sentidos" de la vida junto al placer sensual, la riqueza, y la liberación), ley, norma, a veces "virtud". Término que tiene sentidos diversos: Ley, verdad, naturaleza propia de un ser. </p> <p><b>Dharma. </b>La palabra <b><i>Dharma</i></b>, en su significado más general, no designa más que una "manera de ser"; es, si se quiere, la naturaleza esencial de un ser, comprendiendo todo el conjunto de sus cualidades o propiedades características, y determinando, por las tendencias o las disposiciones que ella implica, la manera de comportarse de este ser, sea en totalidad, sea con relación a cada circunstancia particular. La misma noción se puede aplicar, no ya sólo a un ser único sino a una colectividad organizada, a una especie, a todo el conjunto de los seres de un ciclo cósmico o de un estado de existencia, o hasta al orden total del universo. Dharma puede, en un sentido, oponerse a <b><i>Karma</i></b>, que no es más que la acción por la cual esta disposición se manifestará exteriormente. En estas condiciones lo que es <i>Adharma</i> no es el "pecado" en el sentido teológico, como tampoco el "mal" en el sentido moral, nociones que son totalmente extrañas al espíritu hindú; es simplemente la "no-conformidad" con la naturaleza de los seres, el desequilibrio, la ruptura de la armonía.</p> <p><b>Dhyâna.</b> Forma sánscrita original del chino <i>ch´an</i> y del japonés <i>zen</i>. Se ha cogido la costumbre de traducir <i>Dhyâna </i>por "meditación" cuando en realidad sería mas apropiado traducirla por "contemplación". En el yoga clásico, se refiere a un recogimiento profundo como consecuencia del retraimiento de los sentidos <i>(pratyahara)</i> y de la <b><i>concentración</i></b> del espíritu en un solo punto <i>(dharana)</i>. Su objetivo es el <i>samâdhi.</i> Una de las fases del yoga intelectual. Contemplación. </p> <p><b>Dialéctica. <i>«</i></b><i>Es una forma especial de razonar que significó un descenso en la comprensión de la verdad, lo cual provocó que los griegos hayan caído en interminables discursos para demostrar cualquier hipótesis, como se puede apreciar leyendo los Diálogos de Platón. En efecto, quien ha llegado al nivel del conocimiento puro sabe que cuando son necesarias las argucias dialécticas para convencerse de algo, es porque ya no se lo capta intelectualmente.» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p><b>Dionisíaco. </b>Que tiene relación con la obra de <b>San Dionisio el Areopagita.</b></p> <p><b>Dionisiano. </b>Califica la doctrina mística de <b>San Dionisio el Areopagita.</b></p> <p><b>Dionisio. </b>O Dionisio el Areopagita. Esta palabra designa a tres personajes:</p> <p>- «<i>San</i> <i>Dionisio</i> <i>el</i> <i>Areopagita»</i>, convertido de san Pablo en el Areópago (Actos XVII, 34). Fue sin duda el primer obispo de Atenas, pero no se sabe nada de él.</p> <p>- «<i>San</i> <i>Dionisio</i> <i>de</i> <i>París»</i>, el primer obispo de París hacia el 250. Según san Gregorio de Tours, fue martirizado con sus compañeros sobre el emplazamiento de la actual basílica de San Dionisio.</p> <p>- El «<i>Pseudo</i>-<i>Dionisio</i> <i>el</i> <i>Areopagita»</i>, autor desconocido de cuatro célebres tratados de teología mística: los <i>Nombres Divinos</i>, la <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/con-teologiamistica.htm"><i>Teología Mística</i></a><i>,</i> la <i>Jerarquía Celeste</i>, la <i>Jerarquía Eclesiástica.</i></p> <p>Estos tres personajes han sido confundidos en uno durante mucho tiempo, pero si los «<i>especialistas</i>» se niegan a hacer retroceder el <i>corpus dionysiacum </i>más allá del siglo V, nada nos impide admitir que la <i>tradición dionisiana </i>se liga directamente a San Pablo.</p> <p><b>Discernimiento. </b>(Viveka en el hinduismo). Capacidad metafísica de diferenciar lo verdadero de lo falso, lo real de lo irreal. Facultad que da la evidencia de las cosas por captación de su norma creadora. Esta facultad se ejerce por y en la luz imaginativa de manera que la realidad (de estas cosas) se afirma mientras que nace el asombro con relación a su Creador. </p> <p><i>«El profeta dice que el creyente es aquel que posee el discernimiento. El conoce la realidad de las cosas; él no está engañado por su apariencia» (Sultan Valad).</i></p> <p><i>«Apasionarse por la Sabiduría, es la perfección del discernimiento» (Sabiduría VI, 15)</i></p> <p><b>Discriminación. </b>Acto mental por el cual se pasa del <b><i>discernimiento</i></b> a la distinción separativa. Se trata de un grado ulterior a la pura captación intelectiva, implicando un juicio o una interpretación. </p> <p><i>«El conocimiento discriminativo viene con la aurora y pone al Poder mental en disposición de conocer perfectamente y de separar la luz de la oscuridad, la verdad del error, lo que es derecho de lo que es tortuoso» (Sri Aurobindo)</i></p> <p><b>Divergencia. </b>La tendencia al desacuerdo y a la desaprobación implica el alejamiento y la separación progresivas a partir del «eje de mantenimiento» pero esta divergencia no implica la separatividad.</p> <p><i>«El Profeta dice: aquellos que se reconocen se asocian juntos y los que no se reconocen divergen» (Djalâl-ud-Dîn Rûmî)</i></p> <p><b>Doctrina tradicional. </b>En su forma pura una doctrina tradicional está constituida exclusivamente por elementos <b><i>intelectuales</i></b> o sea <b><i>metafísicos</i></b> en el verdadero sentido del término, lo cual equivale a decir espirituales en su significado absoluto. Hay que puntualizar que <b><i>intelecto</i></b> y <b><i>espíritu</i></b> se equivalen en el campo de la metafísica. Cuando estos elementos <i>intelectuales</i> no se presentan como tales, sino mezclados con expresiones morales, sentimentales y otras, la tradición adopta una forma religiosa. Esto sucedió con el judeo-cristianismo, única tradición que tiene una exteriorización religiosa en el verdadero sentido de la palabra, aun cuando se encuentra en él un núcleo metafísico que en la religión cristiana se manifestó especialmente en la Edad Media.</p> <p>En su vertiente oriental, la <b><i>tradición</i></b> se expresó casi exclusivamente en forma metafísica, debido a la naturaleza específica de los pueblos comprendidos por ella. En cambio en Occidente la <i>tradición </i>se manifestó más bien en forma religiosa.</p> <p><b>Doctrina. </b>Termino que viene del latín «<i>docere</i>», significando «enseñar», y de su forma «<i>doctus</i>» significando sabio porque enseñado, es la expresión de aquello que es necesario comprender para alcanzar el conocimiento del Principio. Se podría decir que la doctrina está en el ámbito del ser mientras que el <b><i>dogma</i></b> está en el ámbito del hacer. Se ve como la doctrina se mantiene más en la metafísica que en el juicio de los hombres y que ella es así «autentica» como conteniendo en ella misma su propia autoridad. Se ve igualmente como el dogma está más en el ámbito de la mentalidad de una civilización dada y que pueden existir varios dogmas coherentes con una misma doctrina. La doctrina es intemporal, mientras que los dogmas pueden variar según las necesidades de los hombres y su inteligencia del momento.</p> <p><b>Dogma. </b>Es la expresión de los preceptos que se juzga necesarios para un buen acercamiento a las exigencias de la <b><i>doctrina</i></b>, o también, la expresión de las prescripciones relativas a los comportamientos coherentes con la doctrina. Se podría decir que la doctrina está en el ámbito del ser mientras que el dogma está en el ámbito del hacer. Se ve como la doctrina se mantiene más en la metafísica que en el juicio de los hombres y que ella es así «autentica» como conteniendo en ella misma su propia autoridad. Se ve igualmente como el dogma está más en el ámbito de la mentalidad de una civilización dada y que pueden existir varios dogmas coherentes con una misma doctrina. La doctrina es intemporal, mientras que los dogmas pueden variar según las necesidades de los hombres y su inteligencia del momento.</p> <p><i>«La palabra dogma se aplica apropiadamente a una doctrina religiosa. Podemos decir por el momento, sin investigar más cuáles sean las características especiales de una tal doctrina y pese a que evidentemente sea intelectual en lo que tiene de más profundo, que no es, sin embargo, de un orden puramente intelectual. Por otra parte, si así fuera, ya no sería religiosa sino metafísica» (René Guénon, Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p><b>Dualismo. </b><i>«El dualismo tiene por carácter distintivo el limitarse a una oposición entre dos términos más o menos particulares, oposición que, sin duda, es real desde un cierto punto de vista, y en ello reside la parte de verdad que encierra el dualismo; pero al declarar esta oposición como irreductible y absoluta cuando ella no es sino relativa y contingente, se prohibe el ir más allá de los dos términos que ha enfrentado el uno al otro y, de este modo, se encuentra limitado por aquello que constituye su carácter de sistema» (René Guénon, I.G.E.D.H.)</i></p> <p><b>Duda. </b>La duda se opone a la <b><i>certeza</i></b> y revela una carencia grave de Fe debida a la ignorancia del estatus particular del hombre en el seno de la creación y al desconocimiento de la Misericordia divina.</p> <p><i>«Los profetas han venido como una piedra de toque para distinguir la certeza de la duda» (Sultan Valad)</i></p> <p> </p> <p><b>Edad Media. </b>El acrecentamiento del declive espiritual que significó el fin del mundo greco-latino, quedó momentáneamente detenido con el advenimiento del cristianismo, el cual encauzó una verdadera vuelta a la tradición, que se cumplió efectivamente durante la Edad Media. Ésta, considera Guénon, se extiende desde el reinado de Carlomagno hasta principios del sigo XIV. En el transcurso de este último, agrega, se produjo la verdadera disolución de lo que se entiende por «Cristiandad» como principio superior y rector, principio espiritual que constituyo desde el comienzo de nuestra era la auténtica soberanía intelectual del mundo occidental. Este momento límite lo define como crucial y dice que fue la circunstancia básica que hizo expandir las tinieblas que ocultaron la claridad de la sabiduría tradicional. efectivamente, en esa época se integraron las nacionalidades. Éstas significaron el inicio de las formas políticas y temporales que sustituyeron a la autoridad espiritual del cristianismo. Así comenzó un retroceso que no se detendría más. Agrega que el Medioevo terminó entonces y no dos siglos más tarde como se acostumbra a enseñar, y que con el apagarse de su luz comienza el período más negro de la Edad Sombría. Sin embargo considera que la ruptura completa con la tradición coincidió con los tratados de Westfalia, los cuales en 1648 finiquitaron la guerra de los "Treinta Años".</p> <p><i>«Fue, en realidad, Felipe IV el Hermoso de Francia, quien con su encarnizada persecución de los templarios y la disolución final de la Orden, señala en pleno siglo XIV la subversión del orden establecido. Por primera vez en la historia de la Cristiandad, el poder real pone al papado a su servicio y se apoya en la burguesía para llevar a cabo sus designios. Con él nace la subversión en el marco de la jerarquía social y por su ambición se robustece la fragmentación del Sacro Imperio en unidades nacionales clausuradas. La consecuencia última de este desafuero político será la búsqueda de la fuerza por parte del poder temporal, no ya en las armas y ni siquiera en la burguesía, sino en la masa popular, llegándose a hablar del "gobierno del pueblo", como ha sucedido con el bolcheviquismo» (F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20para%20acabar%20con%20la%20edad%20media.html"><i>«Para acabar con la Edad Media»</i></a>.</p> <p><b>Eckhart. (</b>Maestro Eckhart), teólogo dominico (hacia 1260-1327) del que se poseen las obras latinas y alemanas. Veintiocho proposiciones extraídas de sus obras fueron condenadas en 1329 por la bula <i>In agro Domini</i> de Juan XXII; a pesar de esta condena que uno se explica mal hoy en día, esta obra a tenido una gran influencia sobre la escuela espiritual llamada de los <i>«especulativos renanos»</i>. Hoy en día que se conoce mejor la obra de Eckhart y que se la sitúa en su contexto, la influencia del maestro del <b><i>advaita</i></b> cristiano es mayor que nunca.</p> <p><b>Economía. </b>Plan divino concerniente a la salvación de los hombres; parte de la teología que trata de este plan.</p> <p><b>Educación. <i>«</i></b><i>Otra expresión de declive acentuado y que florece en el ambiente mental dirigido a sobrevalorar la ciencia y la técnica, es la tendencia de la educación actual; ella se refleja en las formas de instrucción, las cuales colocan la memoria y la imaginación en el lugar de la <b>inteligencia</b>. En efecto, se trata de evitar todo conocimiento profundo y real, y en cambio atesorar saberes fragmentarios, siendo la erudición la máxima aspiración acumulativa pseudo-intelectual. No interesa transmitir conceptos sino prepara individuos enserie y mediocres, por el hecho de que cuanto más mediocres e ininteligentes son, responden con mayor eficacia a los estímulos y sugestiones del medio en el que actúan. El ideal de la educación de masas parece ser sustituir el intelecto superior por meras cajas de resonancia, autómatas útiles, técnicos aptos para sostener la civilización industrial y sirvientes de los interese más inferiores se trata de hacer creer a la mayoría que actúa en su propio beneficio, cuando no hace más que sostener el aparato tecnocrático al que sirve mecánicamente.» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i> </p> <p>Los mejores elementos con alta capacidad espiritual son echados a perder en un sistema nivelante y mediocrizante en el que no interesa que esos elementos prosperen y sobresalgan, y que, aun en el remoto caso de sobresalir, no tienen más remedio que permanecer marginados.</p> <p>Así, para la mayoría de las personas el modelo más alto ya no está en el sabio (espiritual) o en el santo sino que está encarnado en el ingeniero o en el científico, cuando no –en todavía un descenso más hacia el nivel puramente físico– en el deportista de <i>"elite",</i> en el <i>pseudo</i>-<i>cantante</i> o en el <i>pseudo</i>-<i>artísta</i> famoso.</p> <p><i>«El humanitarismo filosófico subestima el alma inmortal por el propio hecho de que sobrestima el animal humano; obliga un poco a oscurecer a los santos para mejor poder blanquear a los criminales, pues lo uno parece tener que ir necesariamente acompañado de lo otro. De ello resulta la opresión de los contemplativos desde su tierna infancia: en nombre del igualitarismo humanitario, la escuela en particular y la mundanidad oficial en general, machacan vocaciones y dilapidan genios; todo elemento espiritual es desterrado de la vida profesional y pública (...) en cambio, y por compensación, la vida profesional toma aires cada vez más "religiosos", en el sentido de que reivindica al hombre por entero –tanto su tiempo como su alma–, como si la razón suficiente de la condición humana fuese determinada empresa económica, y no la inmortalidad» (F. Schuon, Castas y Razas)</i></p> <p>Todo ser humano posee unas características que le son propias y que lo distinguen esencialmente de cualquier otro, lo que lleva a que tenga unas cualidades intrínsecas y unas funciones sociales diferentes. Es así como en las sociedades tradicionales, cada hombre y mujer ocupa el lugar que le conviene normalmente en razón de su propia naturaleza. <i>«Desde el momento en que el acceso a cualquier función no está ya sometido a ninguna regla legítima, de ello resulta inevitablemente que cada uno se encontrará llevado a hacer cualquier cosa, a menudo aquello para lo que está menos cualificado» (R. Guénon, La Crisis del Mundo Moderno). </i>En nombre de una pseudo-igualdad se pretende dar a todos la misma enseñanza, <i>«como si todos fuera igualmente aptos para comprender las mismas cosas, y como si, para hacérselas comprender, convinieran a todos indistintamente los mismos métodos. Se puede por otra parte preguntar si no se trata más bien de "aprender" que de "comprender" verdaderamente, es decir, si la inteligencia no es sustituida por la memoria en la concepción verbal y "libresca" de la enseñanza actual, en la que no se contempla más que la acumulación de nociones rudimentarias y heteróclitas, y en la que la cualiddad es sacrificada enteramente a la cantidad» (R. Guénon, La Crisis del Mundo Moderno)</i></p> <p><b>Egoísmo. </b>Estado particular de contracción interior obstaculizando la actualización del Amor.</p> <p><i>«El egoísmo y el interés personal son el punto focal de lo falso» (Nisargadatta Maharâj)</i></p> <p><b>Elite. </b><i>«Las aptitudes que contemplamos cuando hablamos de elite, siendo del orden de la intelectualidad pura, no pueden ser determinadas por ningún criterio exterior, y son cosas que nada tienen que ver con la instrucción "profana": en ciertos países de Oriente hay gentes que, no sabiendo leer ni escribir, no por ello llegan menos a alcanzar un grado muy elevado en la elite intelectual»(René Guénon, Oriente y Occidente)</i></p> <p><b>Emanación. <i>«</i></b><i>La idea de "emanación" es, probablemente, la de una "salida", pero de ningún modo debe contemplarse así a la manifestación, ya que, realmente, nada puede salir del Principio: si algo pudiera hacerlo, limitado por el hecho mismo de la manifestación. La verdad es que, fuera del Principio, no hay y no puede haber sino la nada (le néant). <span lang="en-GB">(René Guénon, Etudes Traditionelles oct. 1927)</span></i></p> <p><b>Encantamiento. </b>En el contexto tradicional esta palabra no tiene nada que ver con las resonancias "mágicas" que se le da actualmente. Encantamiento es la invocación de la influencia o intervención divina por medio de la palabra o el gesto ritual legitimado tradicionalmente.</p> <p><b>Epíclesis. </b>Plegaria de la liturgia eucarística solicitando la acción del Espíritu Santo sobre las oblaciones.</p> <p><b>Epifanía. </b>De <i>epus</i>: verso, palabra; y de <i>phainein</i>: brillar. Manifestación, aparición luminosa, iluminación, es decir, irradiación o reflexión de un <i>principio</i>.</p> <p><b>Error. </b>La no-captación de lo real y de lo verídico conduciendo a aquellos que mal-creen hacia los bajos grados de la injusticia y de la insinceridad. <i>«La Verdad ha venido, el error ha desaparecido, el error seguramente era inconsistente» (Corán XVII. 18)</i></p> <p><b>Erudición.</b> <i>«No queremos hacer obra de erudición, y el punto de vista en el que entendemos colocarnos es mucho más profundo que aquél. No siendo la verdad para nosotros un hecho histórico, en el fondo nos importaría bastante poco determinar la proveniencia de tal o cual idea que, en suma, no nos interesa sino porque, habiéndola comprendido, sabemos que es verdadera» (René Guénon, Introducción al Estudio de las Doctrina Hindúes)</i></p> <p><i>«Se ha abusado de la erudición para cerrar estrechamente el horizonte de los hombres en lo intelectual, e impedir así que se vean claramente ciertas cosas; ello permite perfectamente comprender por qué los métodos que hacen de la erudición un fin en sí mismos, son rigurosamente impuestos por las autoridades universitarias» (R Guénon, el Error Espirita)</i></p> <p><b>Escatología. </b>Rama de la teología que trata del fin último individual y del retorno de Cristo (fin del mundo, juicio, etc.).</p> <p><b>Escatológico. </b>Relativo a los últimos días, al fin de los tiempos.</p> <p><b>Esclavitud. </b>Estado de quien se somete a las exigencias del mundo y se une a los deseos de este tanto como a sus tormentos.<i>«El egocentrismo es la atadura a los límites individuales del ego en la esclavitud de la pasión» (Titus Burckhardt)</i></p> <p><b>Eseidad. </b>Carácter de Eso, que designa el <b><i>Si</i> </b>(Si-mismo) y se expresa en sánscrito por el pronombre <i>tat </i>(correspondiente al ingles <i>that</i>).</p> <p><b>Esencia. </b>Lo que funda el ser de una cosa; aquello <i>por lo que </i>una cosa es lo que es (<i>id quo res est id quod est</i>)</p> <p><i>«La Esencia y la <b>Substancia</b> fueron designadas por los escolásticos «forma» y «materia» respectivamente, que equivalen a las expresiones sánscritas «<b>nâma</b></i><b>» </b><i>y «<b>rûpa</b>» cuando se trata de seres particulares o «<b>purusha» </b>y «<b>prakriti</b>» si lo es del Ser universal. Todos estos conceptos tiene mucha más universalidad que los de "espíritu" y "materia" actuales. Aquellos que Aristóteles llamaba "acto" y "potencia" también equivalen sucesivamente a la esencia y la sustancia, las cuales coinciden significativamente con el Cielo (Tien) y la Tierra (Ti) de la tradición extremo-oriental, derivados de la indistinción del principio común o Tai-Ki». (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>Sobre Nama y Rupa véase el documento «<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20Namarupa.htm"><i>Nama-Rupa</i></a><i>» </i>de René Guénon.</p> <p><b>Esotérico. </b>Palabra griega que significa «interior», «escondido», «secreto». Una enseñanza esotérica no es una enseñanza destinada a todos, sino reservada a un pequeño número y hace referencia a la vivencia intima, interior por oposición a las formas exteriores que, por otra parte, son necesarias y la complementan. En el contexto tradicional la palabra esotérico equivale a metafísico. No tiene por lo tanto este término el significado que se le da actualmente relacionado con la Magia, la Parapsicología o la <b><i>Nueva Era</i></b>, asuntos estos que, además de ser totalmente antiespirituales, no deberían en propiedad llevar el nombre de esoterismo sino de ocultismo.</p> <p>Una vez más esta palabra no designa el uso actual que se hace de ella (el mal uso diríamos mejor). <b><i>Esotérico</i></b> equivale a espiritual, y es el aspecto interno, metafísico y no formal de una tradición religiosa, complementándose con <b>Exotérico</b> que sería el conjunto de prácticas y formas externas. Aclarado esto no se pueden llamar esotéricas a las prácticas adivinatorias, parapsicológicas etc. a las que más propiamente se les debería designar como <i>Magia</i> u <i>Ocultismo</i>, pero nunca <b><i>Esoterismo</i></b>, y desde luego no se puede pretender que tales practicas sean de carácter Espiritual, siendo esta confusión entre lo parapsiquico y lo espiritual uno de los mayores errores y una de las mayores aberraciones de la confusa pseudo-espiritualidad contemporánea, especialmente dentro del los movimientos de la llamada "<b><i>Nueva Era</i></b>".</p> <p><i>«El esoterismo es esencialmente distinto de la religión, y no la parte "interior" de una religión como tal, incluso si toma su base y su punto de apoyo en ésta, como ocurre en ciertas formas tradicionales»(René Guénon, Puntos de vista sobre la Iniciación).</i></p> <p><i>«Es posible que en la Edad Media occidental, hubiera complementos a lo que era enseñado exteriormente, y que esos complementos para exclusivo uso de medios muy cerrados, nunca hubieran sido formulados en ningún texto escrito, de modo que, a este respecto, no quepa encontrar sino alusiones simbólicas, por lo demás bastante claras para quien sabe de qué se trata, pero perfectamente ininteligibles para el resto. Conocemos bien que actualmente hay, en muchos medios religiosos, una tendencia muy clara a negar todo "esoterismo". (René Guénon, Oriente y Occidente)</i></p> <p><i>«El esoterismo, con sus tres dimensiones de discernimiento metafísico, concentración mística y conformidad moral, implica en última instancia las únicas cosas que el Cielo exige de forma absoluta, pues todas las demás exigencias son relativas y por tanto más o menos condicionales. La prueba de ello es que un hombre al que ya no le quedasen más que unos instantes de vida ya no podría hacer otra cosa que, primero: mirar hacia Dios con la inteligencia; segundo: llamar a Dios con la voluntad; y tercero: amar a Dios con toda el alma, y realizar, amándolo, toda virtud posible» (F. Schuon, Aproximaciones al Fenómeno Religioso)</i></p> <p><i>«Lo que es verdaderamente esotérico es "secreto", por la única y simple razón de que el lenguaje no puede expresarlo, o porque cualquier cosa esotérica que pueda expresarse de algún modo es simplemente ininteligible para los que no están preparados para recibirla.(...) La mentalidad estrictamente religiosa (exotérica) sospecha necesariamente de las «pretensiones» metafísicas, porque parecen sugerir la existencia de un círculo exclusivo de «elegidos» esotéricos, más allá de la vida y de la disciplina normal de la Iglesia en cuestión. Los que a sí mismos se llaman "illuminati" han existido con bastante frecuencia dentro de la Iglesia y se han caracterizado sobre todo por su arrogante orgullo espiritual. Acaso el signo más notorio de ese orgullo sea la misma pretensión de estar libres de él. Pero la esencia de la comprensión metafísica es la de serle absolutamente extraña toda idea de pretender algo. Sencillamente, no se puede decir «yo he comprendido la Suprema Identidad» sin expresar una completa contradicción pues es el <b>Si</b>-<b>mismo</b> y no el ego quien comprende, y el <b>Si </b>no es propiedad de nadie. Debe repetirse de nuevo que mientras el ego existe de alguna manera, debe adorar. La razón, el sentimiento y la sensibilidad deben relacionarse siempre con el <b>Si</b> como con Dios, venerándolo como al algo diferente e infinitamente superior. Jesús, Dios encarnado, iba en soledad al templo a rendir culto, y no simplemente para dar un buen ejemplo a sus discípulos. Hasta los budistas a quienes se supone –erróneamente por otra parte– «impíos» tienen su culto, que de ningún modo se limita a las masas no iniciadas y exotéricas. La persona para quien la Suprema Identidad excluye el culto como algo innecesario e ilógico es un mero monista, pues la No-dualidad, el infinito, el <b>Si-mismo</b>, es lo que es precisamente porque puede aceptar e incluir la dualidad. » (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20exoterismo%20esoterismo.htm"><i>«Esoterismo y exoterismo»</i></a> de René Guénon.</p> <p><b>Espiritismo. </b>«Cuando un individuo muere sin haber conseguido lo que, utilizando el lenguaje religioso, se llama «salvación» su alma se descompone tal y como lo ha hecho previamente su cuerpo. Son estos residuos psíquicos los que, en ocasiones, pueden aparecer en una sesión de espiritismo, pero se trata simplemente de eso, de deshechos y no de personas. Los fenómenos que se producen en las sesiones espiritistas pueden tener diversas causas; en ocasiones son producidas por el subconsciente del <i>medium</i> o de los asistentes. Cuando hablamos de subconsciente nos referimos al aspecto sutil que, junto al grosero, conforman la individualidad, concretamente a la parte inferior de éste y que es mucho más amplio que el contemplado por la <b><i>psicología</i></b> moderna. Las posibilidades de este estado sutil son enormemente amplias y engloban fenómenos como telepatía, materializaciones, bilocaciones, etc. que tanto impresionan al hombre moderno pero que no presentan ningún interés para aquello interesados en la realización espiritual. El estado sutil también está poblado por una multitud de seres que pueden irrumpir en las sesiones, sobe todo los de naturaleza más baja. Esto nos llevaría también a hablar de otro tipos de movimientos modernos como el <i>Channeling, </i>los contactados ovni y los <i>abducidos</i> etc. En la Edad Media se les conocía como <i>íncubos</i> y <i>súcubos</i>, y conocían mejor que nosotros cuál era su verdadera naturaleza. Una característica de todas las formas tradicionales es su completo rechazo a este tipo de prácticas.» <i>(Revista <a href="http://www.geocities.com/revistalye/">Letra y Espíritu</a> nº 5)</i></p> <p>El <i>espiritismo</i> nacido a comienzos del siglo XX es fruto de una época en donde las creencias tradicionales se batían en retirada por el avance de una ciencia imperialista y triunfante, se ofrece entonces una pseudo espiritualidad para llenar las almas vacías de aquellos que todavía anhelaban algo del espíritu que ni la ciencia, ni por otra parte una cristiandad ya casi vacía de contenido espiritual, podía darles.</p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20explicacion%20fenomenos%20espiritistas.htm"><i>«Explicación de los fenómenos espiritistas».</i></a></p> <p><b>Espíritu. </b>Ver <b><i>Atman. </i></b>Ver <b><i>Intelecto. </i></b>La «<i>fina punta del alma»</i>. Aquello que está más allá del cuerpo y del alma (mente) integrándolos a ambos. Aquello que en el hombre está unido a Dios.</p> <p><i><b>«</b>Intelecto, synteresis, consciencia, Agathos Daimon. La parte mejor y más divina del hombre, en sí mismo incapaz de errar, y nuestro único medio de participación en la vida y el perfección que es Dios mismo» (A.K. Coomaraswamy).</i></p> <p>Cuando buscamos en la religión alguna luz sobre la naturaleza del Espíritu encontramos que la doctrina católica, por ejemplo, evita virtualmente la cuestión. Se considera que el hombre es una dicotomía de cuerpo y alma, definiéndose ésta como substancia intelectual, no compuesta y simple en su naturaleza, y que carece de todas las cualidades corporales como tamaño, color y forma. En la práctica se identifica al <i>alma</i> con el <i>espíritu</i> como si se tratara de la misma cosa. No sabemos que es lo que ha ocurrido con el espíritu en el desarrollo de la teología católica. Parecería que se lo ha confundido con el alma o que se lo ha dejado fuera de consideración. Todo ello a pesar de la distinción tan clara que se hace entre alma y espíritu en el Nuevo Testamento por ejemplo en Hebreos, IV, 12; en Corintios XV, 44-45; en Corintios, II, 14-15 y otros lugares. Debe considerarse este hecho dentro de la decadencia del ciclo sobre todo a partir del Renacimiento donde el concepto queda ya totalmente confuso incluso por personalidades de la talla de Santo Tomas de Aquino.</p> <p><b>Eternidad. </b>El eterno presente, más allá de toda relatividad temporal, captado en la instantaneidad de lo Real. <i>«La Eternidad es el "instante" intemporal y sin duración, el verdadero presente en el que ninguna experiencia temporal es posible» (René Guénon, Estudios sobre el Hinduismo)</i></p> <p>Eternidad es el «no-tiempo», un concepto metafísico que el Occidente actual confunde con la perpetuidad, que no es nada más que un tiempo indefinido. La mentalidad occidental, habiendo agravado su estado sub-intelectual con la desviación moderna, está dirigida casi exclusivamente al mundo sensible, y por lo tanto cae en una constante confusión entre lo que significa concebir y lo que significa imaginar. La pérdida de la verdadera intelectualidad en el mundo moderno, hace creer a la mayoría como impensable aquello que no tiene representación sensible.</p> <p><b>Evolucionismo. </b>Hipótesis, hoy en día sin demostración científica, en la que se afirma que las formas cambian sustancialmente en un proceso gradual y continuo de adaptación. Se postula que todo ser complejo, y más particularmente todo ser viviente, de la planta hasta el hombre, procede de una organización progresiva de la materia orgánica, a partir de sus componentes más simples para desembocar, con el transcurso del tiempo, en el compuesto más complicado que es el hombre.</p> <p>Uniendo la hipótesis evolucionista a la hipótesis progresista se llegará a plantear que las formas se transforman "<i>mejorando</i>" de un "<i>menos</i>" hacia un "<i>mas</i>". El <b><i>evolucionismo</i></b> <b><i>espiritual</i></b> teoría o hipótesis totalmente discutida y rechazada en todas las tradiciones afirma la aproximación gradual a lo Absoluto conforme avanzan los tiempos y se suceden las generaciones. Esta idea que podríamos considerar herética coloca solamente a los últimos hombres, los de la última generación, en presencia total del Espíritu, quedando todos los demás excluidos y siendo meros "peones" sufrientes para la <i>deificación</i> de los últimos. Como fácilmente se comprenderá este planteamiento es totalmente contrario a la Omnipresencia divina así como a su Misericordia y por ello es totalmente rechazado en todas las tradiciones.</p> <p>Se pueden ver varios documentos sobre este tema en <a href="http://www.terra.es/personal/javierou/kyms.htm"><i>«Los Tattvas del Despliegue Universal»</i> </a>de la página<a href="http://www.terra.es/personal/javierou"> <i>Kali Yuga.</i></a></p> <p><b>Evolucionismo espiritual. </b>Teoría o hipótesis planteada principalmente en Occidente por <i>Teillhard de Chardin </i>(y más modernamente por <i>Ken</i> <i>Wilber</i>) y en Oriente por <i>Sri Aurobindo</i>, en la que se plantea un acercamiento gradual hacia la divinidad en la línea del tiempo y en la sucesión de las generaciones que de esa manera irían "<i>mejorando"</i> espiritualmente generación tras generación y estando cada vez más cerca de Dios. Totalmente rechazada esta teoría tanto por la ortodoxia cristiana como por la ortodoxia hindú. Es necesario ver con claridad que las doctrinas verdaderamente tradicionales o sea metafísicas son, por su misma esencia, inmutables. Por lo tanto es un sin sentido que se nutre de una incurable ceguera mental, considerar como a veces se pretende, la posibilidad de evolución y de progreso en ellas. En efecto, surgen del absoluto y persisten fuera del tiempo.</p> <p><b>Exoterismo. </b>Enseñanza «exterior» dada a todos; se opone a «<b><i>esoterismo</i></b>».</p> <p><i>«En una doctrina cualquiera, el esoterismo es la concepción y el exoterismo la expresión, siendo interior la primera y exterior la segunda» (R. Guénon, Introducción al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p><i>«El termino exoterismo designa tres órdenes diferentes, a saber: primero, un sistema de símbolos y medios; segundo, una vía, y tercero, una mentalidad. La primera categoría engloba los dogmas, los ritos, las prescripciones legales, morales y demás, y la liturgia en el sentido más amplio; la segunda engloba las prácticas religiosas generales, las que se imponen a todos, y la tercera categoría implica el psiquismo propio de determinada atmósfera religiosa, luego todas las manifestaciones de la sentimentalidad y de la imaginación determinadas por cierta religión, cierta piedad y ciertas convenciones sociales.»(F. Schuon, Aproximaciones al Fenómeno Religioso)</i></p> <p><i>«Si en el mundo se comprueba la existencia de tradiciones esotéricas y exotéricas, esto no es el resultado del arbitrio mental, ni tampoco de un curso mecánico de la historia. El universo debe considerarse ontológicamente como el nivel de manifestación psicofísico en devenir perdurable del mundo arquetípico, el orbe inmanifiesto y siempre persistente de los principios cósmicos, y que simultáneamente es la expresión germinal del No-Ser o lo Inmanifiesto y en sí mismo Inmanifestable» (F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20exoterismo%20esoterismo.htm"><i>«Esoterismo y exoterismo»</i></a> de René Guénon.</p> <p><b>Experiencia mística. </b>La <i>Experiencia</i> <i>Mística</i>, la única conocida en Occidente que tiene analogías con la <b><i>realización metafísica</i></b>, no se traspasa el ámbito puramente religioso e individual. En cambio la <i>realización metafísica</i> tiene, por el hecho de ser una vivencia de totalidad, por así decirlo, un carácter universal e ilimitado, o sea supraindividual. La <i>experiencia</i> <i>mística</i> tiene frecuentemente características sentimentales y muchas veces no traspasa el plano de lo puramente sicológico. A este respecto recordemos que Occidente ha confundido en los tiempos modernos lo síquico y lo espiritual.</p> <p>La <i>experiencia mística</i> puede estar sujeta a ilusiones por la interferencia de los elementos sentimentales antedichos generalmente no presupone una gran preparación teórica; los místicos que tienen preparación teológica, la cual, como sabemos, conlleva conocimientos metafísicos, pueden sin embargo controlar su imaginación y sentimentalidad, cosa que ocurrió muchas veces durante la alta espiritualidad del misticismo medieval.</p> <p><i>«Mientras la religión moderna presta poca atención a la experiencia mística, perdiéndose en las analogías éticas y simbólicas de intuiciones que se vienen descuidando desde hace mucho tiempo, aún el conocimiento místico, tal como se lo entiende en Occidente, no es siempre el tipo de conocimiento inmediato y universal al que nos referimos. El conocimiento místico está muy a menudo coloreado por la afectividad; nada hay de malo en ello, si se recuerda que los sentimientos acerca de la Realidad última son tanto analogías como ideas racionales (...) Los estados de conciencia definidos como <b>éxtasis</b> corresponden con más propiedad al misticismo que a la metafísica, porque son primariamente estados de la afectividad y, como tales, excluyen otros estados de la afectividad de la misma manera que el dolor excluye la alegría. En otras palabras, el éxtasis místico es simplemente una analogía del conocimiento <b>intelectual</b> en términos de la afectividad, y de ningún modo es esencial para la comprensión metafísica. (...) ¿Es posible entonces tener un conocimiento inmediato, no analógico, de lo universal y eterno? La respuesta moderna, sea filosófica, científica o religiosa, es unánimemente «No», mientras que algunos de nuestros antecesores medievales hubieran respondido, con ciertas reservas, «Sí». Las tradiciones espirituales de India y China darían la misma respuesta afirmativa con menos reservas» (A. W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p><b>Fe. </b><i>«Hay que decir que la Fe no es una mera creencia, como se entiende habitualmente, sino la facultad puramente <b>intelectual</b> por la que podemos conocer; en un grado o en otro según nuestras capacidades, lo que corresponde al dominio espiritual; para entender esto hay que ser consciente que la razón (la facultad por la que conocemos las cosas particulares e individuales, por la que pensamos en forma discursiva y analítica, por la que separamos y distinguimos la multiplicidad) no puede abarcar lo universal, la unidad, que la supera e incluye; éste que es el ámbito ontológico, más allá del cual sólo impera la pura metafísica, no puede ser cognoscible, para la generalidad de las personas, más que por la Fe revelada por Dios mismo a través de sus «enviados» y que, por eso mismo, no puede ser más que verdadera» (Revista <a href="http://www.geocities.com/revistalye/">Letra y Espíritu</a> nº 1)</i></p> <p><i>«La Fe no es creencia, la Fe ya es una operación intelectual, un asentimiento íntimo de la Verdad que conlleva certidumbre no duda, "creer" (en el sentido actual de la palabra) es pensar que es posible, tener Fe es saber que es verdad, aunque no se acabe de comprender. Consecuencia de ello es un pensamiento de tipo analógico, que implica, por un lado, un conocimiento simbólico, es decir, una "consideración" de las cosas como manifestaciones e realidades superiores y esto especialmente en los acontecimientos de la propia vida y por otro se trata de "pensar al revés", "pensamiento inverso" lo llama el hinduismo, ver las causas que provocan los acontecimientos no sus consecuencias» (Revista <a href="http://www.geocities.com/revistalye/">Letra y Espíritu</a> nº 6)</i></p> <p><b>Filosofía. </b>La Filosofía, como la palabra lo indica, implicaba originariamente un amor a la sabiduría, una actitud requerida para llegar al verdadero conocimiento. Con el tiempo se fue olvidando esta finalidad, y quedó únicamente el instrumento preparatorio, que es el medio empleado, por otro lado contingente, o sea la estructura discursiva, racional e individual, que puede ser oral o escrita. No se comprendió más cual era la meta, o sea el verdadero saber, este último suprarracional, no discursivo y supra individual o sea <b><i>universal</i></b>. Es claro que para llegar a esta meta se requiere una formación espiritual previa, la cual supone la actitud filosófica antes nombrada y no una mera información dialéctica, teórica o erudita. Así la filosofía, especialmente en la época moderna, se fue como vaciando de su espíritu, el <i>«logos»</i> o <i>«verbo»</i>, transmisible oralmente de maestro a discípulo, y se transformó en un conjunto de sistemas racionales. Cuando se posee el conocimiento real, se llega a comprender que el puente para llegar a él se torna descartable. Le tocó al Cristianismo asumir el papel que había perdido la filosofía, al significar una nueva realización del <i>«logos» </i>en la persona de Cristo. Esta última luz también se ha perdido con el mundo moderno, el cual es la más absoluta expresión del anticristianismo.</p> <p>El plano intelectual puro, propio de la metafísica, fue negado implícitamente por la filosofía moderna, debido a su incapacidad para llegar a él. Esto ocurre debido a que el ámbito de discusión de esta última se desenvuelve en el campo de la manifestación universal, en cambio la metafísica señala la no-manifestación.</p> <p>La filosofía en el sentido originario del término, traducía el verdadero conocimiento en el plano mental, y era un estadio discursivo preparatorio para llegar a la verdadera sabiduría, o sea al nivel informal. De éste se podía pasar al estadio metafísico puro perteneciente a la no-manifestación (<b><i>realización metafísica</i></b>). En sus comienzos la filosofía constituía el requisito formal para acceder al conocimiento. Constituía simplemente una actitud individual, preparatoria a la verdadera sabiduría. Lo expresa el sentido etimológico de la palabra: inclinación, tendencia o amor, hacia el saber. Pero insensiblemente fue cayendo de su sitial hasta legarse a la situación actual, en que prácticamente la filosofía es una teoría de las ciencias.</p> <p>Dice acertadamente Guénon que <i>«multitud de problemas y pseudoproblemas en filosofía son equívocos creados ex profeso y aparecen desprovistos de importancia y significado; son nada más que confusiones con puntos de vista individuales y arbitrarios (...) a veces, precisando bien un enunciado, éste se desvanecería, pero los pensadores actuales tienen el mayor interés en conservar esa imprecisión para poder discutir indefinidamente de cosas sin mayor consistencia y ocultando dificultades verbales, ya que la filosofía vive especialmente de equívocos (...) la falta de precisión característica del pensamiento occidental moderno, tanto en la concepción como en la expresión, permite discutir indefinidamente sin discernimiento y sin resolver nada» (R.G. Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p>El <b><i>esoterismo</i></b> se fue perdiendo con la especulación filosófica y especialmente con el naufragio intelectual que oscureció progresivamente a Occidente. Recordaremos que Descartes, el pensador a quien se atribuye el inicio teórico de la modernidad en su dimensión filosófica, comienza el famoso <i>Discurso del Método</i> diciendo que <i>«el buen sentido (o sea la razón, como especifica poco después) es la cosa mejor repartida del mundo». </i>Tal opinión supone la nivelación de todas las inteligencias en base a dicha razón, o sea a los estratos inferiores del intelecto. Con tales premisas surge la filosofía moderna como puramente exotérica, y no puede tener un nivel profundo por el hecho de ser únicamente racional y discursiva. Además, el esoterismo implica preparación teórica y la existencia de una <i>elite</i> intelectual que sea fiel depositaria de la doctrina originaria; pero el punto de vista democrático y cuantitativo que prevalece en el mundo moderno, como consecuencia del decadente y fantasioso concepto de igualdad, hacen prácticamente imposible toda realización superior.</p> <p>La Filosofía ha ido limitando progresivamente su campo de visión de la realidad, ya que al concebir una metafísica, la fue reduciendo al dominio del Ser puro como primer principio de la totalidad, y así edificó una ontología y no una verdadera metafísica. Esta última, al desenvolverse en el campo del infinito, engloba al Ser y al No-Ser. A su vez el No-Ser, principio no-manifestado, contiene al Ser puro, el cual es el origen de la manifestación universal. Esta limitación de la Metafísica tiene origen en Aristóteles, quien al definir la metafísica como <i>«el conocimiento del ente en tanto que ente»</i> la identificó así con una parte del Todo.</p> <p><i>«No debe confundirse esta «Philosophia Perennis», que en verdad es una metafísica, con la "filosofía" empírica y sistemática que se enseña ahora en nuestras universidades, ni con las "filosofías" de "pensadores" individuales.» (A. K. Coomaraswamy)</i></p> <p><b>Forma. </b>Principio determinativo de un ser. La forma determina, actúa, «<i>informa</i>» a la <b><i>materia</i></b>: es el principio de inteligibilidad, ya que es por su forma que un ser es conocible.</p> <p><b>Formas exteriores. </b><i>«El papel de las formas exteriores está en relación con el doble sentido de la palabra "revelación", ya que, al mismo tiempo, manifiestan y velan la doctrina esencial. La verdad una, como, además, la palabra lo hace inevitablemente con el pensamiento que manifiesta. Y lo que a este respecto es verdad para la palabra, lo es también para cualquier otra expresión formal. (René Guénon, Puntos de vista sobre la Iniciación)</i></p> <p><b>Formas tradicionales. </b><i>«Las formas tradicionales pueden ser comparadas a caminos que conducen a un mismo fin, pero que, en su calidad de caminos , no por ello dejan de ser diferentes. Es evidente que no se pueden seguir varios caminos a la vez y que, cuando uno se ha adentrado en uno de ellos, conviene que lo siga hasta el final sin apartarse de él, ya que, en realidad, el mejor medio de no avanzar y hasta de perderse completamente, será el querer pasar de uno a otro» (René Guénon, Puntos de Vista sobre la Iniciación)</i></p> <p><b>Función de la elite. </b><i>«Es esencialmente el retorno de Occidente a una civilización tradicional, en sus principios y en todo el conjunto de sus instituciones. Este retorno deberá efectuarse por orden, yendo desde los principios hasta las consecuencias y descendiendo por grados hasta las aplicaciones más contingentes» (René Guénon, Oriente y Occidente)</i></p> <p><i>«Puede haber en una tradición completa dos aspectos complementarios y superpuestos (el metafísico y el religioso) que de ningún modo sabrán contradecirse o entrar en conflicto, ya que se refieren a dominios esencialmente distintos; por otro lado, el aspecto intelectual puro no concierne directamente sino a la elite que, forzosamente, es la única que debe ser consciente de la comunicación que establece entre ambos dominios para asegurar la unidad total de la doctrina tradicional» (René Guénon, Oriente y Occidente)</i></p> <p> </p> <p><b>Geosofía. </b>Ciencia simbólica de la locación y del espacio, que se ocupa de los aspectos cualitativos de los distintos puntos del planeta y de la asociación de los diferentes lugares terrestres con funciones tradicionales, que van desde la ubicación de los santuarios, los sitios de enterramiento y los lugares de culto, a los emplazamientos adecuados para la construcción de jardines o la plantación de árboles, como en esa especial forma de arte sagrado que es el jardín japonés y el jardín persa, o todas las variaciones que van de los jardines de España a los jardines de la India mogola. La ciencia de la geografía sagrada abarca desde las prácticas populares y a menudo folclóricas de la geomancia en China hasta la más profunda sensibilidad a la gracia de la Presencia divina que se manifiesta en ciertas formas y lugares naturales.</p> <p>Mas información en la página<a href="http://ususrios.lycos.es/geosofia"> GEOSOFIA.</a></p> <p><b>Genialidad. </b><i>Genialitas. «¿Quién es "genial" hoy en día? Un tipo prevalecientemente individualista, rico en salidas originales, antojadizo. Como un límite, se tiene al "genio" en el campo artístico. El culto fetichista tributado al mismo en la civilización humanista y burguesa es muy notorio, de modo tal que el "genio", más que el héroe, el asceta o el aristócrata, ha sido muchas veces considerado en tal civilización, como el tipo humano más alto. El término latino "genialis" alude en vez a algo muy poco individualista y "humanista". El mismo deriva de la palabra "genius", la cual originariamente designó a la fuerza formativa y generativa interna, espiritual y mística de un determinado pueblo y de una determinada sangre. No es pues azaroso afirmar que las cualidades "geniales" en el sentido antiguo tuvieron una cierta relación con las que en la acepción más alta se pueden decir respecto de la "raza". En oposición al significado moderno, el elemento "genial" se distingue del individualista y arbitrario; se vincula a una raíz profunda, obedece a una necesidad interior de una adhesión a las fuerzas suprapersonales de una sangre y de un pueblo, a aquellas fuerzas a las cuales en cada estirpe gentilicia se vinculaba, como es sabido, también una tradición sagrada.» (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Gentil. </b><i>Gentilis, gentilitas</i>. <i>«Hoy todos piensan en la persona cortés, afable, de buenos modales. El término antiguo se refería en vez al concepto de "gens", de estirpe, raza, casta o lenguaje. Era "gentil" en sentido romano quien tenía las cualidades que derivan de un linaje y de una sangre diferenciada, las cuales solo por reflejo pueden determinar eventualmente una conducta de destacada cortesía, cosa diferente de las "maneras" que también el "parvenu" (recién llegado) puede hacerse propias estudiándose libros de urbanidad, y diferente también de la vaga noción moderna de la "gentileza". Es así como hoy son muy pocos los que pueden comprender el sentido pleno y más profundo de expresiones tales como "espíritu gentil" y semejantes, que han permanecido como aisladas expresiones en escritores de otros tiempos». (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Gnosis. </b>Término de origen griego por el que es preciso entender el conocimiento interior y salvador de Dios, diferenciándose de <b><i>gnosticismo</i>. </b>Termino empleado por primera vez por San Pablo quién es también el primer denunciante del gnosticismo, es decir, de la «<i>pseudognosis</i>» (I Tim 6,20). No es San Pablo la única autoridad, aun siendo la mayor, a la que podemos invocar; San Ireneo de Lyon, en <i>Adversus haereses</i>, no denuncia la gnosis, sino, tal como lo expresa el título original de su obra, título que ha sido conservado por Eusebio de Cesarea, San Juan Damasceno y otros, <i>«la gnosis de falso nombre</i>» (<i>Elenkos kai anatropè tès pseudonymou gnôseôs</i>). También Clemente de Alejandría, por su parte, si bien combate el gnosticismo, se propone enseñarnos la <i>«gnosis verdadera»</i>, la que viene de Cristo por la tradición apostólica, y que el estudio de la Escritura y la vida sacramental actualizan en nosotros. Asimismo, el gran Orígenes nos habla de esa <i>«gnosis de Dios»</i> que pocos hombres poseen y por la cual Moisés penetro en la tiniebla divina (<i>Contra Celsum, VI, 17)</i>. Son estas razones históricas suficientes para hablar de una gnosis cristiana.</p> <p><i>«La "gnosis" de la compresión metafísica no es la "gnosis" orgullosa que en sus primeros siglos rechazó justamente la Iglesia. Desde entonces la Iglesia latina en particular ha sido hostil a todo <b>gnosticismo</b>, y según la posición tomista todo conocimiento humano es conocimiento analógico de los sentidos. No se puede objetar esta posición si la definición del ser humano se limita al ego, pero como el tomismo confunde el ego (el alma) con el Yo (el espíritu), el alma con el <b>espíritu</b>, equivale en la práctica a un rechazo de la gnosis. Esto da vierta verdad a la observación de Berdiaef de que "la teología oficial ha preferido el positivismo científico y una teoría mecanicista de la naturaleza a cualquier forma de gnosis cosmológica. Es mejor un mundo sin Dios que uno considerado divino... en nuestro días la mentalidad de la Iglesia está perdiendo cada vez más su naturaleza cósmica. Se empieza a considerar a la Iglesia como una comunidad de creyentes, como una institución; se interpretan los dogmas desde el punto de vista de la moral y se acentúa el aspecto sicológico de los sacramentos a expensas de su significación cósmica"(Freedom and the Sprit). En otras palabras, si falta la gnosis la Iglesia pierde la comprensión de que constituye una analogía de los principios universales. La <b>cosmología</b> es el reconocimiento de que el universo como cosmos, orden de involución y evolución, es la expresión finita del "logos", de la voluntad creadora del infinito, y que por consiguiente su orden básico corresponde analógicamente al orden de la religión.</i></p> <p><i>Absorbida por el historicismo y el moralismo, la religión, lo mismo que la ciencia y la filosofía modernas, rechaza el conocimiento y la certeza metafísicos. En tales circunstancias, todos los intentos de rectificar el orden social, de "aplicar" la religión a los problemas políticos y económicos del mundo, no serán a la larga más que inútiles gastos de energía. No solamente el orden social es incomprensible separado del orden cosmológico, sino que sin el conocimiento metafísico la religión es una rueda que gira sólo por inercia y que ahora marcha con una lentitud peligrosa. Para cumplir la aspiración de traer la cordura al mundo, la religión debe ordenarse no sólo con respecto a lo que está por debajo, sino también con respecto a lo que está por encima de ella. La rueda debe ser conectada con la fuente de poder. (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p><i>«El verdadero carácter del <b>esoterismo</b> cristiano es difícil de determinar. Se podría decir que una de sus características principales es la de haber sabido velarse de tal modo que, históricamente, no suele distinguirse su existencia organizada, contrariamente a lo que ocurre, por ejemplo, con el Sufismo en el Islam. De hecho en el seno de la Iglesia, al menos actualmente, ni se acepta el término esoterismo (confundido con ocultismo) ni mucho menos el de gnosis (asociado a las numerosas sectas gnósticas que surgieron en los primeros tiempos del cristianismo, es decir al gnosticismo). El menos esto último sorprende, dada la profusa utilización del término, por ejemplo en las cartas de San Pablo que lo distingue de la Fe, considerada como paso previo necesario, pero no suficiente, para alcanzar la completa realización cristiana. No obstante, sí que existen alusiones en algunos Padres de la Iglesia a una tradición secreta, no destinada a todos, y de origen apostólico (es decir no herética). Baste tan solo mencionar a Orígenes (s.III) que en su obra "Contra Celso" dice: «la crucifixión, la resurrección y la encarnación son bien conocidas, pero lo que es una particularidad del Cristianismo es que existen algunas doctrinas ocultas para la multitud, que se revelan después de que son concedidas las enseñanzas exotéricas» (Revista <a href="http://www.geocities.com/revistalye/">Letra y Espíritu</a> nº 4)</i></p> <p><b>Gnosticismo. </b>Designa la sistematización históricamente determinada del conocimiento (o <b><i>gnosis</i></b>), de modo que esta gnosis se encuentra aquí reducida a algunos elementos constituyentes. En este sentido todo gnosticismo es una herejía, puesto que la herejía consiste en <i>elegir</i> (<i>hairésis</i> = elección), en el seno de la verdad total, algunos elementos de esa verdad que se erigen a continuación en totalidad y a los que se remite todo el resto. Es la auténtica interioridad de la gnosis cristiana la que hace manifiestos el error y la falsedad del gnosticismo no cristiano. Pues el gnosticismo, en virtud de su visión parcial y mutiladora, no puede concebir una interioridad que no excluya la exterioridad, mientras que la gnosis cristiana revela su verdad, su «inteligencia», en el hecho de que Cristo no ha venido a abolir la ley sino a cumplirla, no a refutar la exterioridad y condenarla, sino a asumirla y salvarla. Por eso el gnosticismo es necesariamente dualista. Y todo dualismo constituye una «herejía metafísica» (lo mismo que todo monismo). Podríamos decir que el gnosticismo es por una parte un «angelismo anticreacionista» y por otra parte un «docetismo cristológico».</p> <p>Ver en este mismo sitio: «<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/con-gnosis.htm"><i>Gnosis y Gnosticismo</i></a><i>»</i></p> <p><b>Gottheit</b>. Palabra del vocabulario eckhartiano que hay que traducir por «<b><i>Deidad</i></b>» mejor que por «Divinidad». La <i>Gottheit </i>designa lo que está «más allá» de Dios.</p> <p><b>Guna.</b> Cualidad de la naturaleza o materia primordial. Categoría. Este término se relaciona con las tres modalidades fundamentales de la fuerza que se despliega en la manifestación. Las tres tendencias o componentes de la Naturaleza: <i><b>Satva</b>, <b>Rajas</b>, y <b>Tamas</b>. </i> </p> <p><b>Guru.</b> Adjetivo que significa "el que tiene peso", substantivado para designar un hombre de peso, (pesado de conocimiento) y al cual uno se dirige como guía espiritual. Igualmente: "aquel que hace pasar de las tinieblas a la luz". En un concepto más amplio se aplica a cualquier persona, animal, cosa o situación que sirvan de señal y guía hacia la luz. El hombre (o la mujer: <i>gurunî</i>) "de peso". Según otra etimología: "aquel o aquello que disipa las tinieblas". Maestro espiritual que tiene el poder de guiar a los hombres en el camino de la realización. Para ser auténtico, debe estar él mismo "realizado" (un jivan mukta). (mukti= realización).</p> <p> </p> <p><b>Habitus. </b>Disposición, manera de ser. Aquello por lo que un sujeto se encuentra bien o mal dispuesto con relación a su forma o a su fin.</p> <p><b>Hinduismo. </b><i>«El hecho de que algunos individualistas religiosos de Occidente hayan defendido interpretaciones erróneas de varias doctrinas orientales, pretendiendo encontrar en ellas apoyo para su propio liberalismo o modernismo, ha sido causa de muchas confusiones. Gran parte del neo-budismo y del neo-hinduismo en boga entre los aficionados occidentales no es más que racionalismo y sentimentalismo revestido con términos sánscritos mal empleados. La confusión tampoco ha sido aclarada por la mayoría de los orientalistas académicos que, al traducir los textos originales desde el punto de vista filológico, han seguido tratando de identificar las doctrinas hindúes y budistas con los conceptos puramente especulativos de la "metafísica"(moderna) occidental, con la cual tienen muy poco en común. En el mundo occidental, el cristianismo católico tradicional es el punto de contacto más próximo con una verdadera metafísica en lo que se refiere a su estructura doctrinaria y sacramental. Su política es otra cuestión.» (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p>Mas información en el documento <a href="http://www.terra.es/personal/javierou/kyhi.htm">«<i>El Hinduismo»</i></a> de la página <a href="http://www.terra.es/personal/javierou"><i>Kali Yuga</i></a></p> <p><b>Hipóstasis. </b>La <b>substancia</b> individual o la persona. En el vocabulario cristiano, designa las tres Personas de la Santísima Trinidad.</p> <p><b>Hipostático. </b>Unión hipostática: unión de las dos naturalezas, divina y humana, en la persona (<b><i>Hipóstasis</i>) </b>de Cristo.</p> <p><b>Hiranyagarbha</b>. Traducido por «la Vida». Es la dimensión cósmica del cuerpo sutil individual. Literalmente es el huevo dorado, origen de la creación de todo. Se ha hablado de ella como «el gran espíritu», como el principio potencial de todas las cosas. No es sólo la vida biológica; es la vida divina. Si <i>jiva</i> es el humano manifestado, viviente, <i>Hiranyagarbha</i> es la vida total, la manifestación sutil del ser en su totalidad. De la Vida, principio único, expresión primera de lo divino, surge la división entre el cielo y la tierra. La Vida divina es el lugar donde terminan todos los deseos, como veremos en varios textos, por su potencial total. La identidad de la vida individual con la Vida es la realización humana. Tengamos en cuenta que la realización o identificación con la Vida cósmica, no es la liberación <i>(mukti)</i>, última meta del sabio advaita. Esta identificación aparece cuando desaparece la ilusión de separatividad. No hay que confundir este término con la naturaleza, que no es la primera manifestación sino la última.</p> <p><b>Honestidad. Honesto. </b>(<i>Honestus</i>). <i>«Vinculado con la idea de "honos", este término antiguamente tuvo el significado prevaleciente de honorable, noble, de noble rango. ¿Qué es lo que se conserva de todo esto en el término moderno correspondiente? "Honesta" es la persona "de bien" de la sociedad burguesa, aquella que no cumple con malas acciones. La expresión "nacido de padres honestos" hoy tiene casi un sesgo irónico, mientras que en la Roma antigua era la designación precisa de una nobleza a la cual muchas veces le correspondía también una nobleza biológica. "Vir honesta facie" significaba en efecto un hombre de magnífico aspecto, del mismo modo que en la antigua lengua sánscrita el término "arya" comprendía sea el sentido de una persona digna de honor, como el de la nobleza de carácter interior así como en su tipo somático.» (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Historia. </b>Los hechos históricos son la expresión humana de realidades superiores y es lo que les confiere su interés, y más todavía si se trata de «historia sagrada» como en el caso de la vida de Cristo. No se trata de que de unos hechos se extraigan unas conclusiones trascendentales, sino todo lo contrario, es porque existen esas realidades trascendentales que deben ocurrir esos hechos con el fin de poder expresarse.</p> <p><b>Humildad. </b><i>Humilitas. «Con la religión que predominó en Occidente la "humildad" se ha convertido en una "virtud" en un sentido muy poco romano, glorificada en oposición a aquella postura de fuerza, de dignidad, de calma conciencia, de la cual se ha hablado antes. En Roma antigua la misma significó justamente lo opuesto de toda "virtus". Quiso decir bajeza, carácter despreciable, baja condición, abyección, vileza, deshonra; por lo cual, por ejemplo, puede decirse que antes que la "humildad" es preferible la muerte o el exilio: "humilitati vel exilium vel mortem anteponenda esse". Son frecuentes las asociaciones de ideas, como "mens humilis est prava", es decir, mente baja y malvada. La expresión "humilitas causam dicentium" se refiere a la condición de inferioridad y de culpa de quienes son llevados ante un tribunal. También aquí se encuentra una vinculación con la idea de raza o casta: "humilis parentis natus" significaba haber nacido del pueblo en sentido despreciativo, plebeyo en oposición al nacimiento gentilicio; por lo tanto con una sensible divergencia con respecto al sentido moderno de "de condición humilde", en especial considerando que hoy el criterio casi excluyente de las posiciones sociales es el económico. En todo caso, a un Romano del buen tiempo antiguo nunca se le habría ocurrido concebir la "humilitas" como una virtud, y vanagloriarse de ella y predicarla. En cuanto a cierta "moral de la humildad", se podría recordar lo resaltado por un emperador romano, en el sentido de que nada es más repudiable que el orgullo de quienes se dicen humildes. Todo esto sea dicho sin que por ello se quiera dar valor a la presunción y a la arrobancia.» (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Hridaya (<i>Hrid</i>). </b>Ver <b><i>Corazón.</i></b> El «centro del Ser». En la tradición metafísica de la India, así como en la tradición metafísica occidental anterior al Renacimiento, el <b><i>corazón</i></b> no se asocia con el sentimiento sino con el conocimiento; no es de ninguna manera la sede de las sensaciones, emociones o pasiones sino la sede del intelecto, en el sentido guenoniano del termino, es decir de esa pura intuición intelectiva (<i>buddhi)</i> que ve directamente las cosas en su luz verdadera sin pasar por la intermediación del mental (<i>manas).</i></p> <p><b>Hyperthéos. </b>Palabra griega del vocabulario <b><i>dionisiano</i>: </b>«más que Dios», «más allá de Dios».</p> <p> </p> <p><b>Icono.</b> Imagen sagrada de la Iglesia de Oriente vehiculadora de una presencia divina.</p> <p><b>Iconostasio.</b> En las iglesias rusas y griegas, tabique de madera ricamente ornamentado de <b><i>iconos</i></b> que separa la nave y el santuario, y detrás del cual se desarrolla la divina liturgia.</p> <p><b>Idolatría. </b>La idolatría busca, adora y sirve a las cosas por si mismas, en lugar de ver en ellas una imagen (icono) del Creador. El materialismo ateo es una forma moderna de idolatría.</p> <p><b>Ignorante. </b>Quienquiera que esté engañado por el modo aparente de las "cosas" y no ha realizado su verdadera naturaleza. <i>«Dios no elige como amigo a un ignorante» (Sohrawardi)</i></p> <p><b>Imaginación. </b>En el sentido de <i>Imaginatio</i> <i>vera</i> no se trata de lo que en el lenguaje corriente de nuestros días se denomina «una imaginación», sino de una <i>visión</i> a la que debemos reconocer un valor <i>noético</i> o cognitivo pleno y que da acceso a mundos perfectamente <i>reales</i> que llamaríamos <b><i>mundos</i></b> <i><b>imaginales</b> </i>mejor que mundos imaginarios dadas las connotaciones de irrealidad o inexistencia que tiene esta palabra. Modo de representación intermedia entre el mundo de los Arquetipos y el mundo de aquí abajo permitiendo la "condensación" de las realidades inteligibles y su actualización en el orden de las apariencias. La <i>imaginación activa</i> es el <i>espejo</i> por excelencia, el lugar epifánico de las imágenes del mundo arquetípico. <i>«En verdad, el Universo es imaginación y él es Dios según su realidad esencial» (Ibn Arabi, La Sabiduría de los Profetas). </i> </p> <p>Ver <b><i>Mundus Imaginalis</i></b> </p> <p><b>Infinito. </b>El infinito es lo que no tiene determinaciones ni límites. Luego podemos llegar a concebirlo pero no a distinguirlo ni definirlo, porque oscureceríamos la claridad del concepto puro y caeríamos en el dominio del Ser universal. Supone lo indefinido y lo finito, o en otros términos el caos y el cosmos. Estamos haciendo referencia, bien entendido, al infinito metafísico y no a otros infinitos, como podría ser el infinito matemático, donde ya existe determinación, en este caso la cantidad.</p> <p>El infinito es el aspecto activo de lo inexpresable. Convencionalmente lo llamamos absoluto metafísico.</p> <p>En el Occidente actual ya no se intuye, salvo muy excepcionalmente, el concepto puro, concepto que es el campo de objetivación de la metafísica. Se lo confunde generalmente con la razón, y a veces hasta con la imaginación y la memoria. Tal situación se debe a nuestra dificultad generalizada para penetrar más allá de lo espacial y temporal. Como ejemplo nos podemos remitir al concepto de infinito asimilado normalmente a un espacio, tiempo o cantidad indefinida.</p> <p><i>«Carencia de tamaño e inespacialidad más bien que amplitud indefinida. Lo eterno es intemporal más que perenne. Lo infinito corresponde al fundamento de la conciencia del hombre que, aunque no es un objeto y carece de forma y tamaño, contiene todas las formas y objetos» (A. W. Watts) </i> </p> <p><b>Ingenio. </b><i>Ingenium. «Tan sólo en parte se ha conservado el significado antiguo en la palabra moderna. "Ingenium" en la antigua lengua latina indicaba también la perspicacia, la agudeza de mente, la sagacidad, la prontitud, pero al mismo tiempo la palabra remitía al carácter, a lo que en cada uno de nosotros es orgánico, innato, verdaderamente propio. "Vana ingenia", pudo pues significar a personas sin carácter; "redire ad igenium" pudo querer decir volver a la propia naturaleza, a un modo de vida conforme con lo que verdaderamente se es. Este más importante significado se ha perdido en la palabra moderna y a tal respecto da lugar casi a una antítesis. En efecto, si el "ingenio" se lo comprende en sentido intelectualista y dialéctico, se tiene algo totalmente opuesto al segundo significado, incluso en el término antiguo, que remite al carácter, a un estilo conforme con la propia naturaleza; es así superficialidad opuesta a organicidad, es movimiento inquieto, brillante e inventivo de la mente opuesto a un riguroso estilo de pensamiento que adhiere al propio carácter.» (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Ingenuidad. </b><i>«La ingenuidad de ciertos conceptos prácticamente dogmáticos se explica por una parte por el simbolismo natural de las cosas y por otra por un sabio afán de protección; porque si la verdad, a fin de cuentas, tiene por función divinizar al hombre, no puede tener al propio tiempo por función deshumanizarlo. Por ejemplo, no puede tener por objeto el hacernos entrar en las angustias de lo infinitamente grande ni de lo infinitamente pequeño, como busca hacer la ciencia moderna; para alcanzar a Dios, tenemos derecho a ser niños, y ni siquiera tenemos elección, dados los límites de nuestra naturaleza.</i></p> <p><i>Un ejemplo clásico del dogma ingenuo es la historia bíblica de la creación, y luego la de la primera pareja humana: si somos escépticos –o sea atrofiados–, chocamos con el infantilismo de la literalidad, pero si somos intuitivos –y todo hombre debería serlo–, somos sensibles a las verdades irrefutables de las imágenes; sentimos que llevamos esas imágenes en nosotros mismos, que tienen una validez universal e intemporal. La misma observación se aplica a los mitos e incluso a los cuentos de hadas: describiendo los principios –o situaciones– que conciernen al universo, describen al propio tiempo realidades psicológicas y espirituales del alma; y en ese sentido se puede decir que los simbolismos de la religión o de la tradición popular son para nosotros de experiencia corriente, tanto en la superficie como en profundidad» (F. Schuon, Aproximaciones al Fenómeno Religioso)</i></p> <p><b>Iniciación. «</b><i>La iniciación, que debe introducir al aspirante en el camino de una realización personal, consiste esencialmente en la transmisión de una influencia espiritual. Esta "bendición" es conferida por un maestro, él ya iniciado, a un discípulo en virtud de la cadena ininterrumpida, de la filiación efectiva que relaciona al maestro iniciante con el origen de la cadena y de los tiempos. Todo rito de iniciación conlleva gestos simbólicos que son testimonio de una filiación original. Citemos como ejemplo el beso del iniciante que trasmite en esta forma al iniciado el soplo de la influencia espiritual que ha presidido la creación del mundo. El iniciante cuando realiza semejantes actos no actúa en tanto individuo, sino como un eslabón de la cadena, como transmisor de una fuerza que lo supera y de la que él sólo es un humilde portador.</i></p> <p><i>Para que llegue a ser eficaz, la iniciación exige, por parte del aspirante, tres condiciones: disposición completa, recepción regular y realización personal. Las condiciones más necesarias para recibir la iniciación pueden resumirse en cuatro puntos: pureza de cuerpo, nobleza de sentimientos, amplitud de horizonte intelectual y altura de espíritu.</i></p> <p><i>La iniciación debe ser otorgada por un maestro cualificado, al que los hindúes denominan «guru» (o anciano), los ortodoxos «geron», que tiene el mismo sentido, y los musulmanes «sheikh», y que desempeña con respecto al discípulo el papel de un padre espiritual. siendo la iniciación un segundo nacimiento. El maestro le acompañará en las dificultades surgidas de la aplicación del método. En cuanto a los conocimientos teóricos, cada organización posee un método para dar las enseñanzas.</i></p> <p><i>Una vez recibida la iniciación ésta sigue siendo virtual. Ella debe ser efectivamente valorizada por un trabajo personal, ya que cada persona lleva en sí misma su propio maestro. Esta tarea tiene por fin realizar los estados que integran la personalidad</i></p> <p><i>Desde una concepción universal, el mundo se presenta bajo tres aspectos, un estado de no manifestación que representa la Posibilidad Universal, un estado de manifestación informal o sutil que representa al Alma de] Mundo y un estado de manifestación formal o tosca que es el del mundo substancial de los cuerpos. La creación del mundo se presenta como una ordenación del caos o como la consecuencia de un "orden" divino, que la Biblia presenta como un <em>Fiat Lux</em>, ya que la luz ha acompañado siempre a las teofanías y el orden se identifica con la luz</i></p> <p><i>En la misma forma del <em>Fiat Lux</em> divino, la influencia espiritual trasmitida al postulante ilumina el caos tenebroso de sus aptitudes individuales. Esta partícula de luz intelectual se irradia en todos los sentidos desde el centro del ser, representado por su corazón, y lleva a cabo la completa expansión de sus posibilidades. Esta acción invisible se halla expresada en las diferentes tradiciones por el desarrollo de una flor, rosa o loto, sobre la superficie del agua. De esta manera el ritmo cósmico trasmitido por el rito inicial, resuena en la vida de un hombre cuya función consistirá en seguir y completar el plan divino. Sólo en el momento en que el futuro iniciado comprende este fin, llega a ser digno de recibir la iniciación. Esta se realiza en virtud del desarrollo de las posibilidades ya incluidas en su naturaleza, pues ningún misterio llega de otro lado y, siguiendo el sentido de la célebre sentencia hindú: "Lo que está aquí está más allá y lo que no está aquí no está en ningún lugar"». (Luc Benoist, El Esoterismo)</i></p> <p><i>«Iniciación significa, primeramente, comienzo, entrada en un nuevo estado de existencia. Ese nuevo estado de existencia no es el habitual, agobiado por todas las deficiencias del ciclo cósmico en que vive la humanidad, en otras palabras, el estado común o vida profana, sino el estado de claridad y realidad luminosa anterior a todo ese desgaste, cuando la humanidad, cada hombre, alentaba de acuerdo con la forma de vida de la tradición primitiva. Ese tránsito, renacimiento o regeneración del "ahora" profano, al "comienzo" resplandeciente y espiritualmente sólido, al "illud tempus" sagrado, es el pasaje que cumple todo neófito que se inicia. La meta o término del pasaje es el "fiat lux" que se realiza una vez llevadas a cabo las previas pruebas iniciáticas o purificatorias. El iniciado, pues, ha re-nacido, ha sido enclavado espiritualmente en el nacimiento del cosmos sensible y tiene la posibilidad de completar una realidad que si antes la poseía en potencia, ahora goza de ella en germen (virtualmente) y que la podrá hacer efectiva a través del proceso iniciático.(F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p><b>Inmanentismo. </b>Doctrina que sostiene que Dios es puramente «<i>inmanente»</i> (= presente) en el mundo y niega de hecho su transcendencia.</p> <p><b>Inocencia. </b><i>Innocentia</i><b>. </b><i>«También esta palabra evocaba ideas de claridad y de fuerza. En el uso prevaleciente en la antigüedad ella expresaba la pureza de ánimo, la integridad, el desinterés, la rectitud. No se agotaba en el significado negativo de no ser culpable. Era ajena a ella el tono de banaliad que hoy presenta la expresión "espíritu inocente", sinónimo casi de simplón. En otras lenguas romances, como el francés, el mismo término, "innocent" termina siendo también la designación de los idiotas, de los espíritus desfasados desde el nacimiento, débiles mentales y enajenados. (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Instante. </b>Momento sin duración de la Creación divina transcendiendo todo devenir y toda modificación.</p> <p><b>Integridad. </b>La integridad es síntesis y coherencia de todas las virtudes del alma; ella se opone a la distracción y a la división, contrarias a la unificación, en el corazón, de todas las potencias del ser. <i>«La perfección formal es el principio de la perfección corporal y síquica, forma que asegura la integridad del ser en su realidad sintética y en sus elementos constitutivos» (Ibn Arabi, Tratado del Amor)</i></p> <p><b>Intelecto. </b><i>«El intelecto designa un conocimiento simple y absoluto, de modo inmediato, en una primera y súbita captación, sin movimiento y discurso alguno» (Santo Tomas de Aquino, De Veritate (qXV, a1).</i> El conocimiento intelectual puro, por ser, inmediato, es infalible, y cuando se lo posee, toda discusión se desvanece por su carencia de sentido. Se puede discutir indefinidamente desde la parcialidad de un sistema filosófico, especialmente al enjuiciar a otro sistema, pero no desde el saber metafísico. De aquí la decadencia intelectual representada por Descartes, al colocar la razón como supremo árbitro. <i>«Entre los haberes de la inteligencia en virtud de los cuales alcanzamos la verdad, hay unos que son siempre verdaderos y otros que pueden dar en el error. El razonamiento está en este último caso; pero el intelecto es siempre conforme a la verdad, y nada hay más verdadero que el intelecto» (Aristóteles, Segundos Analíticos, II, 19, 100b)</i></p> <p><i>«Hay algo en el alma que es increado e increable... y eso es el Intelecto" (M. Eckhart)</i></p> <p>Intelecto y Espíritu se equivalen en el campo de la metafísica. Según el conocimiento tradicional, es preciso hacer una distinción esencial entre el intelecto y la razón, y no confundir ambos conceptos, tal como ha ocurrido en los tiempos modernos debido especialmente a la influencia cartesiana. La <b><i>razón</i></b> es una facultad intrínsecamente humana, es justamente el modo humano de la inteligencia. Es la inteligencia discursiva, el ámbito de lo mental. Significa la posibilidad mediata de conocer. Su objeto es lo general, que surge de lo particular e individual. El <b><i>intelecto puro</i></b>, que conlleva la llamada <b><i>«intuición intelectual»</i></b> o <b><i>«inspiración»</i></b> es, en cambio, un órgano por así llamarlo de un nivel supra-humano, <i>«puesto que es una participación directa de la inteligencia universal» (R. Guénon). </i>El reflejo de esta última produce la conciencia individual, asiento de dicho intelecto. Esta posibilita el conocimiento directo o visión inmediata de la realidad absoluta. Con él se llega, por lo tanto, al saber verdadero, o sea trascendente. Tradicionalmente se han asimilado ambas facultades, es decir la <i>razón</i> y el <i>intelecto</i>, al cerebro y al <b><i>corazón</i></b> respectivamente; simbólicamente a la luna (luz reflejada) y al sol (luz directa).</p> <p><i>«La teología coloca a la visión de Dios más allá del poder de la razón y de los sentimientos, afirmando que, como ser finito, el hombre sólo puede conocer a Dios directamente por medio de una gracia especial denominada "lumen gloriae". En el lenguaje de la <b>metafísica</b> esta "lumen gloriae" es el conocimiento de lo infinito, superior al conocimiento racional o afectivo; sin embargo, la razón y la emoción pueden lograr este conocimiento en una forma analógica adecuada a su naturaleza. (...) Pero el anhelo racional y afectivo nunca puede por sí mismo alcanzar lo infinito, de la misma manera que no lo alcanza la indefinida adicción de números. El deseo de más y más de la razón y de la emoción, el indefinido "más y más", no es sino la mejor analogía espacial y temporal de lo infinito. (...) Por consiguiente, el logro del conocimiento metafísico dependerá de la presencia en el hombre de alguna facultad más elevada que la razón o el sentimiento. Se denomina adecuadamente <b>intelecto</b> a esta facultad, aunque el significado de esta palabra ha sido menospreciado en la misma forma que la palabra <b>metafísica</b>. De la misma manera que en la filosofía moderna la metafísica es especulación y teoría de los principios últimos, sin el menor grado de conocimiento o comprensión inmediatos, así el intelecto ha llegado a ser identificado con la razón lógica y especulativa. Pero la razón es la facultad que generaliza a partir de lo particular; pertenece únicamente al orden individual, y así no tiene ningún punto de contacto con lo universal. Por otra parte, el intelecto, aunque se halle presente en el hombre; pertenece al orden de lo universal, no de lo individual» (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p>Ver el documento <i>«</i><a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20espiritu%20intelecto.htm"><i>Espiritu e Intelecto</i></a><i>» </i>de René Guénon.</p> <p><b>Intelectualidad. </b><i>«Pensamos que es casi superfluo recordar que tomamos siempre esta palabra en el sentido que se relaciona con la inteligencia pura y con el conocimiento supra-racional» (René Guénon, Autoridad Espiritual y Poder Temporal)</i></p> <p><b>Intuición. </b>Captación directa de la Luz inteligible durante su <i>descendimiento </i>al plano supra-individual, no al plano de la facultad reflexiva del ser. <i>«Deja de hacer razonamientos y comprende por la luz de la intuición» (Ibn Arabî, El Tratado de la Unidad)</i></p> <p><b>Intuición intelectual. </b><i>«Las verdades metafísicas no pueden ser concebidas sino por una facultad que no es ya del orden individual y que el carácter inmediato de su operación permite llamar intuitiva; pero, por supuesto, a condición de añadir que ella no tiene absolutamente nada que ver con lo que ciertos filósofos contemporáneos llaman intuición, facultad puramente sensitiva y vital que está propiamente por debajo de la razón y no por encima de ella. Es preciso decir, para una mayor precisión, que la facultad de la que hablamos aquí es la intuición intelectual.» (René Guénon, Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p><i>«Esta percepción directa de la verdad, esta <b>intuición intelectual</b> y suprarracional de la cual los modernos parecen haber perdido hasta la simple noción, es verdaderamente el conocimiento del <b>corazón</b>. Tal conocimiento es en sí mismo incomunicable, y es preciso haberlo realizado, por lo menos en cierta medida, para saber qué es verdaderamente (...) (todo conocimiento particular) es una participación más o menos lejana del conocimiento por excelencia, así como la luz de la luna no es sino un pálido reflejo de la del sol (...) el conocimiento del corazón es la percepción directa de la luz inteligible, esa luz del Verbo de que habla San Juan al comienzo de su Evangelio» (R. Guénon)</i></p> <p><b>Ishvara</b>. Se traduce por el Creador. Es el Dios personal de la mayoría de las religiones. Pero además de creador es preservador y destructor del universo. La <i>maya</i> del creador se identifica con la naturaleza, en ocasiones. En ese caso no es la naturaleza manifestada (<i>pradhana)</i>, sino lo inmanifestado <i>(avyakta)</i>, semilla de todas las cosas. «Comprendo que la naturaleza es ilusión y quien dirige la ilusión es Dios, que abarca el universo entero, porque todos los seres forman parte de Él» (Sv. Up. 4, 10). Prajña. Se traduce según su significado literal por «conciencia». Pero se refiere a la conciencia directa, la verdadera sustancia del ser humano (<i>atman)</i> y del Absoluto (<i>Brahman)</i>. En algunos contextos la traducción adecuada ha sido «sabiduría». La palabra <i>prajña</i> es distinta aunque su significado es análogo. Es el estado de sueño profundo. La conciencia ahí reposa en sí misma, sin objetos y se vive inconscientemente en el estado de mente habitual. El término <i>chitt</i>, es también conciencia pero cuando forma parte del órgano interno <i>antahkarana</i> o mente. Se ha evitado la forma habitual de traducir <i>prajña </i>y <i>chitt </i>como conocimiento. Prácticamente en todos los textos consultados hay gran confusión respecto al significado que los filósofos vedantas, en este caso Sankara, daban a estos términos. De hecho se encuentran con sentidos diversos. Al traducirlos hemos preferido dar una versión diferente en cada caso según la exigencia del sentido total del contexto.</p> <p><b>Ishvara.</b> O también <i>Ishvara</i>. El Principio en su estado causal; Dios (o el Señor) visto como Creador. El Señor, el Ser soberano. La Personalidad divina. Lo absoluto tomando ya una forma personal. El "Señor". Corresponde al Dios-persona. El Dios personal. El equivalente al concepto de Dios cristiano.</p> <p>El Ser puro es el principio de la manifestación universal. Es llamado <i>Ishwara</i> en el <b><i>Vedanta</i></b>, o sea la suprema realidad en cuanto a lo manifestado. Se trata de la primera determinación o afirmación o se la "Personalidad Divina". Luego el concepto occidental de Dios se puede asimilar bastante exactamente a <i>Ishwara</i> pero no a <b><i>Brahma</i></b>. </p> <p> </p> <p><b>Japa. </b>(O japa yoga). Práctica espiritual consistente en repetir continuamente un mantra. Repetición indefinida de un <i>mantra</i> que tiene como objetivo el "despertar" a una cierta divinidad o una cierta energía, de la misma manera que se sacude a una persona dormida para despertarla. El <i>japa</i> es de tres clases: audible, articulado pero inaudible, y, finalmente, mental y silencioso. Es solamente en este último grado superior en el que la divinidad se despierta plenamente y que se opera la fusión; pero incluso los dos primeros grados del <i>japa</i> tienen un valor iniciático: los dos labios del recitante se identifican con Shiva y Shakti, el movimiento de los labios expresa su unión amorosa; el sonido producido es el <i>bindu</i>, la simiente divina, el "Punto" desde el cual brota la manifestación. </p> <p><b>Jîva</b>. Palabra sánscrita que designa el alma viva o individualidad viviente.</p> <p><b>Jîvan Mukta.</b> El "liberado viviente", estado de la persona que ha realizado la meta suprema sin dejar este cuerpo humano.</p> <p><b>Jîvâtman.</b> Individualidad viva, el Ser manifestado, encarnado.</p> <p><b>Jñâna.</b> Palabra del ámbito hindú equivalente a nuestra <b><i>gnosis.</i></b> Conocimiento puro por el cual el se llega a ser aquello que conoce. Conocimiento, saber. El <i>jñana yoga</i> es el yoga que sigue el camino del conocimiento contemplativo. </p> <p><b>Jnâna yoga.</b> Yoga que, dirigiéndose a la inteligencia, se centra en el aspecto impersonal e inconcebible de la Enseñanza Unica.</p> <p><b>Juan de la Cruz: </b>1542-1591. Doctor místico de la Iglesia Católica y reformador de la orden del Carmelo, con Santa Teresa de Avila. Obras principales la <i>Subida al Monte Carmelo</i>, la <i>Noche oscura, </i>la <i>Llama de amor viva, </i>el <i>Cántico espiritual. </i> </p> <p><b>Juan Escoto Erigéna.</b> Clérigo irlandés a quién Carlos el Calvo confió la dirección de la escuela de Palacio. A él se debe una primera traducción de las obras de <b><i>San</i> <i>Dionisio</i></b>.</p> <p><b>Juego. </b>Ver también <b><i>Mâyâ</i>. </b>Incesantes metamorfosis de los estados particulares del ser debidos a la viva inestabilidad de su naturaleza (en el nivel de la existenciación). <i>«Cada parte de nuestro ser encuentra su realización en lo que está más allá de las formas actuales de su juego, y no en estas formas mismas» (Kena Upanishad)</i></p> <p> </p> <p><b>Kali Yuga. </b>"La Edad de Hierro"; la cuarta edad, la de los conflictos y de las tinieblas, en la cual nos encontramos. Edad de las sombras, edad oscura, edad de los conflictos, el último de los cuatro periodos en los cuales está dividido un <i>manvantara</i>, una <i>era de Manu</i>, es decir: la duración de manifestación de una humanidad terrestre. Nosotros nos encontramos actualmente en el final del <i>kali yuga</i> y es a nosotros, hombres de los últimos tiempos, a quienes está especialmente destinada la revelación tántrica. La "edad de sombra" es la última de las cuatro eras del ciclo actual. (Ver Linga Puranas).</p> <p><i>«De acuerdo a la tradición hindú el Kali-Yuga es la cuarta y última edad de el ciclo. En ella estamos desde hace más de seis mil años. La etapa actual del Kali-Yuga corresponde a la modernidad, cuyo producto extremo llamaremos "era de las masas" (...) en ésta se produce el oscurecimiento límite del <b>intelecto</b> o sea el naufragio total del conocimiento. Nuestro mundo moderno ha comenzado a recorrer, en su retroceso, ese camino final (...) el alejamiento de la unidad primordial ya ha llegado al máximo posible. Además, el extravío individual y colectivo en la exterioridad sensible, el exclusivismo en el mundo de la materia, la atomización y fragmentación de las investigaciones, la velocidad siempre creciente de los acontecimientos, la masificación y nivelación en el término medio (...) y la obnubilación implícita en la adoración de la técnica, parece haber llevado a la humanidad hacia los momentos finales de dicha Edad.» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>Ver el documento<a href="http://www.terra.es/personal/javierou/kylp.htm"> «<i>Kali Yuga»</i></a></p> <p><b>Karma.</b> Acción, deber, actos condicionados. Acto, acción bajo todas sus formas (en sentido técnico, acción ritual tal como está prescrita por el Veda). Ley inmanente de la cual resulta el que toda acción tenga un resultado inevitable, en ésta vida o después. Se ha abusado mucho de este termino en Occidente dándole una resonancia moral que no tiene originalmente. La "obra" y sus consecuencias: la serie de actos realizados en esta vida y en las precedentes; la continuidad de las causas y de sus efectos. Literalmente "acción". En particular es la ley inmanente que quiere que una acción dada tenga un resultado dado </p> <p>Una mala interpretación del termino <b><i>Karma</i></b>, ha hecho que en occidente se considere este concepto desde el punto de vista moral, como un "premio" o un "castigo" por las acciones cometidas. Todo este enfoque moral es totalmente ajeno a las doctrinas hindúes que no ven en el Karma más que la reacción y las consecuencias "normales y justas" a cualquier acción; sin que esto tenga nada que ver con premios y castigos.</p> <p><i>«No es sino la acción por la cual esta disposición (el <b>dharma</b>) se manifestará exteriormente, con tal de que la acción sea normal, es decir, conforme a la naturaleza de los seres y con las relaciones que se derivan. (René Guénon, Introducción al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p>Algunos comentarios de Pierre Gordon sobre el Karma en:<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20criticareencarnacionismosaura.htm"> "Criticas al Reencarnacionismo"</a></p> <p><b>Karma yoga.</b> Camino hacia la unidad por la acción. Presencia de lo Absoluto en cada acción.</p> <p><b>Kenosis. </b>Palabra griega que significa <i>«vacío»</i>, y que se relaciona con la epístola a los Filipenses (II, 7) en la que San Pablo dice que el Cristo a conocido un estado tal de humillación que se ha como vaciado de su condición de igualdad con Dios para aparecer como una criatura obediente a Dios hasta la muerte en la Cruz.</p> <p><b>Kosha.</b> Palabra sánscrita que designa las envolturas del <b><i>Si</i> (</b>Si-mismo). Las cinco "envolturas", "vainas" o "forros" de los cuales se reviste el Si-Mismo manifestado (<i>jivatman)</i>; corresponden a los tres "cuerpos" de la manera siguiente: <i>anandamaya kosha </i>(envoltura hecha de Beatitud) al cuerpo causal <i>(karana sharira)</i>; <i>vijñanamaya kosha </i>(envoltura intelectiva), <i>manomaya kosha </i>(envoltura mental) y <i>pranamaya kosha </i>(envoltura energética) al cuerpo sutil <i>(sukshma sharira)</i>; <i>annamaya kosha </i>(envoltura "de alimento") al cuerpo grosero <i>(sthula sharira). </i> </p> <p><b>Kshatriya.</b> Casta de dirigentes, protectores y guerreros. La segunda casta, la de los guerreros y los representantes del poder civil. Obligada a la nobleza y bajo la tutela de la casta sapiencial.</p> <p> </p> <p><b>Labor. </b><i>«En lo que concierne a ciertos cambios en el valor de las palabras que indican claramente una radical mutación en la concepción de la vida, el caso más característico es quizás el del término "labor". En la antigua lengua latina este término tenía prevalecientemente un significado negativo. Si en algunos casos podía designar a la actividad en general –como por ejemplo en la expresión "labor rei militaris"– sin embargo en el significado predominante expresaba la idea de una fatiga, de un afán, de un esfuerzo desagradable, y no sólo ello, sino también el de una desgracia, de una molestia, de una carga, de una pena. El término griego "pónos" tenía un significado análogo. Así entonces "laborare" podía también significar sufrir, estar angustiado, estar atormentado (...) Por todo ello jamás al Romano se le habría ocurrido hacer de la "labor" (=trabajo) una especie de virtud o de ideal social. No es que la antigua sociedad romana haya sido una civilización de vagos, de inútiles o de "ociosos". La verdad es que entonces se tenía el sentido de las distancias. Al "lavorare" (=trabajar en italiano) se contraponía el "agere", el actuar en sentido superior. La "labor" correspondía a las formas oscuras, materiales, serviles, anodinas de la actividad humana, con referencia a aquellos para los cuales la acción estaba sólo determinada por una necesidad o por una suerte infausta (la antigüedad conoció por lo demás una metafísica de la esclavitud). En contraposición a ello se encontraba el que actúa en sentido propio, que desarrolla formas de actividad libres, no el que ejercía actividades materiales, pero con un cierto carácter cualitativo y sobre la base de una verdadera y libre vocación el termino "labor" no se aplicaba; él era un "artifex" (estaba también el término "opifex") y la orientación correspondiente se ha mantenido también en tiempos sucesivos, en el clima y el estilo de las corporaciones artesanales, tradicionales.</i></p> <p><i>El cambio de significado y de valor de la palabra en cuestión es por lo tanto una señal clarísima de la plebeyización verificada en el mundo occidental, de una civilización que está perdiendo siempre más su forma en función de los estratos más bajos de toda jerarquía social completa. El moderno "culto del trabajo" es tanto más aberrante puesto que hoy como nunca el trabajo, en un régimen de industrializaciones, de mecanización y de producción anónima de masas, ha perdido necesariamente todo eventual y más alto valor. A pesar de ello se ha llegado a hablar de una "religión del trabajo", de un "humanismo del trabajo" y de un "Estado del trabajo", haciendo del trabajo una especie de insolente imperativo ético y social para cada uno, en detrimento del cual estaríamos llevados a hacer valer el dicho español de que "El hombre que trabaja pierde un tiempo precioso".</i></p> <p><i>En manera más general en otra ocasión hemos resaltado que el mundo tradicional se contrapone al moderno por el hecho de que mientras en el primero incluso el "trabajo" pudo muchas veces asumir los caracteres de una "acción", de una "obra" y de un arte, hoy a la inversa acontece que incluso la acción y el arte asumen los caracteres de un "trabajo", es decir de una actividad vinculada, opaca e interesada desarrollada en base no a una vocación sino a la necesidad y sobre todo en vista de la ganancia y el lucro. (Julius Evola, El Arco y la Clava).</i></p> <p> </p> <p><b>Lenguas sagradas. </b>Son lenguas que no cambian, inmutables, y mucho más ricas en términos y sonidos que las lenguas modernas. Estas últimas son muy poco aptas para transmitir conceptos metafísicos, por carecer de instrumentos idiomáticos adecuados. Por consiguiente no basta intentar traducir una lengua sagrada a la perfección para comprender lo que se transmite, sino que hace falta profundizar en su pensamiento original y estar preparado <b><i>intelectualmente</i></b> para poder asimilar la doctrina pura. Dicha preparación no se puede adquirir eruditamente o sea "desde fuera" sino "desde dentro", desde el desarrollo e la interioridad, identificándose con el núcleo de ese saber universal, y por medio de un maestro o <i>gurú.</i> En Occidente se ha llegado a la crítica de textos sagrados hecha con criterios científicos modernos, lo cual constituye una absoluta aberración al pretenderse suplantar el sentido metafísico profundo de la revelación, con el análisis superficial, con el literalismo y con el punto de vista histórico, perspectivas en las que subyace la absurda idea contemporánea de <i>progreso </i>y de <i><b>evolución</b>, </i>y que delata la ignorancia total de un nivel cognoscitivo que se sitúa en lo intemporal y simbólico. Es necesario ver con claridad que las doctrinas verdaderamente tradicionales o sea metafísicas son, por su misma esencia, inmutables. Por lo tanto es un sin sentido que se nutre de una incurable ceguera mental, considerar como a veces se pretende, la posibilidad de evolución y de progreso en ellas. En efecto, surgen del absoluto y persisten fuera del tiempo.</p> <p><b>Ley de correspondencia. </b>Ley metafísica fundamental en virtud de la cual los diferentes planos de la realidad simbolizan los principios superiores que los dirigen.</p> <p><i>«Cada cosa, procediendo esencialmente de un principio metafísico del cual depende en toda su realidad, traduce ese principio a su manera y según su orden de existencia, en tal forma que de un orden a oro todas las cosas se encadenan y se corresponden para concluir e la armonía universal y total, que es, en la multiplicidad de la manifestación, como un reflejo de la unidad originaria. Por ese motivo, las leyes de un dominio inferior pueden siempre ser tomadas para simbolizar las realidades de un orden superior, del cual ellas extraen su razón profunda, que es a la vez su principio y su fin» (René Guénon, El Simbolismo de la Cruz)</i></p> <p>Se aplica este principio a todos los fenómenos naturales, sociales e históricos: en efecto, las leyes que los rigen traducen analógicamente en su respectivo nivel, los principios metafísicos de los que ellos dependen. Involucra también los hechos referentes a la historia humana. Ellos reflejan en su ámbito y en su orden de realidad, los principios metafísicos de los cuales surgen y de los que extraen su existencia. Sin tal fundamento originario todo fenómeno sería una simple ilusión.</p> <p>Cualquier expresión natural es, por lo tanto, una corporización contingente de su principio. Como dijo Platón, el mundo sensible no es más que un reflejo del mundo inteligible. Para llegar a este último, se necesita poder interpretar adecuadamente el símbolo correspondiente.</p> <p><i>«Si comprendemos que cada fenómeno natural, social o histórico traduce simbólicamente, y en su estrato concreto, aquello que está en el origen y del que depende, es posible que vislumbremos la verdadera realidad, ya que nos habremos colocado en el comienzo del devenir universal, pero un comienzo fuera del tiempo. Llegaremos a "ver", en sentido de totalidad, lo que está más allá de la expresión refleja y apariencial. Así no permaneceremos más en la periferia de la "rueda de las cosas" como dicen los libros sagrados del extremo Oriente, sino en su centro».(V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular).</i></p> <p><b>Liberación. </b>Concepto extraído de la doctrina hindú. Se trata de un estado incondicional, es decir, más allá de toda limitación. La doctrina hindú lo llama <i>Moksha </i>y el esoterismo islámico <i>«Suprema Identidad».</i></p> <p>Se contemplan en la doctrina hindú tres modos de acceder a la liberación:</p> <p style="margin-left: 2.54cm;"><b><i>Jivan-Mukti</i></b>, que es la liberación en esta vida, en este mundo; algo más bien excepcional en estos tiempos finales del Kali-Yuga, y mucho más para los occidentales.</p> <p style="margin-left: 2.54cm;"><b><i>Videha-Mukti</i></b>, es la liberación obtenida de una manera inmediata en el momento de la muerte, por una persona espiritualmente orientada y preparada durante toda su vida.</p> <p style="margin-left: 2.54cm;"><b><i>Krama-Mukti</i></b>, es la liberación obtenida de forma diferida y gradual en los sucesivos estados post-mortem.</p> <p>Estas dos últimas formas de liberación son lo que en el Cristianismo se conoce como <b><i>Salvación</i></b>. El Cristianismo siendo una religión formulada para occidentales y para los últimos tiempos, no contempla, al menos de una manera clara y explícita, la primera forma de liberación o <i>Jivan-Mukti</i>. Unicamente en la teología Ortodoxa Oriental se habla de la <i>Deificación</i> para referirse a esta primera posibilidad o <i>Jivan-Mukti.</i> Por lo tanto cuando en el diálogo ecuménico se habla de <i>Liberación</i> o <i>Salvación</i> se debe poner atención y se debe comprender que se trata de cosas diferentes.</p> <p>El documento "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20salvacion%20y%20liberacion.htm"><i>Salvación y Liberación</i></a><i>"</i> de René Guénon da más información sobre el tema.</p> <p><b>Libertad. </b>Renuncia total y segura al dominio de las realidades de <i>aquí</i> <i>abajo </i>y que lleva a la pacificación del alma y a la serenidad interior. <i>«Es libre aquel que solo tiene un Objetivo y una única voluntad para alcanzarlo» (Hermano Juan, El Jardín de la Virgen).</i></p> <p><b>Libros sagrados. <i>«</i></b><i>En todo texto sagrado hay varios niveles posible de comprensión, los cuales corresponden a campos de transmisión superpuestos de distinta profundidad. Estos niveles son: el literal, el filosófico-teológico, el político-social y el iniciático-metafísico. Según su capacidad intelectual, el estudioso llegará al plano que corresponde a sus posibilidades. Tanto en la transmisión oral como en la escrita, a medida que se avanza en la doctrina, se accede a niveles de más difícil comprensión. Universalmente el inferior es el literario o histórico, luego le sigue el social, y sucesivamente el teológico, el cosmológico, hasta llegar al metafísico que es el superior y último. En muchos textos tradicionales, el sentido exterior y aparente, sea literario, social o histórico, permitió que éstos se mantuvieran inalterables, ocultando así la dimensión profunda a la visión incompetente. Al tratar este tema Guénon recuerda los caracteres ideográficos chinos. Ellos tienen tres sentidos principales, o sea revelan tres grados de conocimiento que son: el sensible, el racional y el intelectual puro o metafísico. Ejemplifica el uso del mismo signo para designar el sol (plano sensible), la luz (plano racional) y la verdad (plano metafísico)». (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p><b>Lîlâ.</b> "Juego"; danza cósmica de la energía divina a través de las apariencias fenoménicas. Lo absoluto crea y destruye los mundos por puro gozo, por puro juego. </p> <p><b>Logos. </b>Palabra griega que designa, en el Evangelio de San Juan, a la segunda Persona de la Trinidad, el Hijo de Dios.</p> <p><b>Lujo. </b><i>«Según los Shâstras, el lujo propiamente dicho –el que no apunta más que al bienestar físico y le añade necesidades nuevas– es un "robo para con la naturaleza"; su contrario, la sencillez, no es, evidentemente, una privación de lo necesario, sino un rechazo a lo superfluo, siempre en lo que concierne a la comodidad física, no a la propiedad como tal; cierto es que ese grado de sencillez es superado, en la propia India, desde hace muchos siglos. Sea lo que fuere, en nuestros días, se engloba demasiado fácilmente la sencillez ancestral de la ida y la simple falta de víveres, bajo un común denominador –el de "miseria"–, confusión que en absoluto es desinteresada; la noción de "país subdesarrollado", en su cándida perfidia, es bien significativa a este respecto.. se ha inventado un "nivel de vida" maquinista y cientificista que se querría imponer a todos los pueblos, y a fortiori a los clasificados como "atrasados", ya se trate de hindúes o de hotentotes; para los progresistas, la felicidad se identifica a una masa de complicaciones ruidosas y pesadas, propias para aplastar muchos elementos de belleza y, por lo tanto, de bienestar; queriendo abolir determinados "fanatismos" y determinados "horrores", se olvida que hay atrocidades en el plano espiritual, y que la civilización supuestamente humanitarista de los modernos está saturada de ellas» (F. Schuon, Castas y Razas)</i></p> <p> </p> <p><b>Macrocosmos. </b>El «gran mundo» es decir el Universo creado.</p> <p><b>Manas.</b> El órgano mental y su actividad, el pensamiento sensitivo y razonante. Facultad de pensamiento, una de las partes del órgano interno o mente. </p> <p><b>Mandala.</b> Diseño no figurativo, generalmente circular y simbólico, utilizado como soporte de contemplación. </p> <p><b>Mantra. </b>Formula sagrada extraída de las escrituras hindúes y que se repite con un rosario. Palabra de poder espiritual, nombre secreto de una cosa o de un ser que permite obtener su esencia. Fórmula sagrada, unión de sílabas sánscritas, de palabras, condensando en forma sonora una divinidad que es así invocada. </p> <p><b>Más allá. </b>Sede de la realidad primordial y de la plenitud de todas las posibilidades del ser. <i>«El más allá no es una aniquilación sino una transfiguración de todo lo que nosotros somos aquí en nuestro mundo de formas» (Kena Upanishad)</i></p> <p><b>Materia. </b>Elemento determinable del cual una cosa está hecha; este elemento está determinado por la <b><i>forma</i>.</b></p> <p><b>Mâyâ</b>. Se traduce por «la ilusión» cuando es individual y por «la gran ilusión» cuando es cósmica. La ilusión individual es ignorancia, <i>avidya</i>. No se puede captar, conocer, es un sueño. No es conciencia, es falta de conciencia. Por eso no es real, es ilusión de realidades. Y es siempre un poder oscurecedor que oculta lo Absoluto, delimitando su infinitud. Es también la energía divina, la <i>shakti</i>, creadora de realidades hechas de pensamiento y materia, de nombres y formas. Por la ilusión individual el Ser absoluto aparece como <i>jiva</i>, el ser humano viviente. Por la ilusión cósmica lo Absoluto aparece como <i>Ishvara</i>, el creador del universo.</p> <p><b>Mâyâ.</b> El arte mágico que despliega el universo. La potencia divina creadora de los fenómenos; y en consecuencia la ilusión cósmica. La <i>shakti</i> o potencia de <i>brahman. </i>La noción de <i>Maya</i> es compleja; se traduce a menudo por "ilusión cósmica", pero ese no es mas que uno de los aspectos de <i>Maya</i>, que es también el "Juego divino" y la "Posibilidad universal". </p> <p>La <b><i>shakti</i></b> o potencia de <b><i>Brahman</i></b>. La noción de Mâyâ es muy compleja; se traduce a menudo por «ilusión cósmica», pero ese no es más que uno de los aspectos de Mâyâ, que es también el «juego divino», la «posibilidad universal» o el «arte divino» por el que Dios crea.</p> <p><i>«Lo que más se parece en el hombre a una acción sin esfuerzo y sin propósito es el "juego", y por esta causa la tradición hindú se refiere a menudo al <b>maya</b> del universo finito como el <b>lila</b> o juego de <b>Brahma</b>. La misma idea se halla en se siguiente pasaje de los Proverbios: "Junto a El estaba yo como artífice, y era cada día sus delicias, jugando ante El en todo momento, jugando en su orbe terrestre, y teniendo mis delicias en los hijos de los hombres (Prov. VIII, 30-31)"» (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20maya.htm"><i>«Maya»</i></a> de René Guénon.</p> <p><b>Metacosmos</b>. Lo que está más allá del cosmos, Dios, el mundo divino.</p> <p><b>Metafísica</b>. Esta palabra designa en la obra de Aristóteles la parte de la reflexión teórica que viene <i>después</i> de los tratados de física. El empleo de la palabra se ha generalizado para designar la parte superior del saber, la que remonta a las <i>causas primeras</i> y a los <i>principios primeros</i> de los seres. En el contexto tradicional Metafísico equivale a espiritual. Para acceder a la metafísica se necesita <b><i>concentración</i></b> mental profunda y verdadero conocimiento teórico. </p> <p><i>«Física significa "ta physiká", el conjunto de lo físico o natural, vale decir, la totalidad del mundo sensible o material. De lo corporal, pero asimismo, de los principios que otorgan vida e individualidad a ese conjunto corpóreo, a lo somático. Lo natural es, en realidad, totalidad sicosomática, por lo tanto. Y Guénon, con estilo y terminología extraída del hinduismo, suele hablar de cuerpo grosero y de cuerpo sutil. La materia sensible, los cinco elementos, los organismos con los sentidos y los órganos de conocimiento y de acción, el razonamiento, la conciencia de la propia individualidad, constituyen este reino. En fin, los elementos individuales tanto sean burdos como sutiles.</i></p> <p><i>Hasta ahora, por consiguiente, no hemos hablado todavía de la esfera estrictamente metafísica o sobrenatural. Esta se considera incluso por encima del nivel intermedio, el "anima mundi" heretista, el "mahat" del Sâmkhya, el alma universal de los neoplatónicos, el Hiranyagarbha de la tradición <b>vedantina</b> o el paraíso de las tradiciones judeocristianas. En este plano, lo universal se intersecta con lo individual. Es todavía el dominio de la manifestación. Se cumple la conjunción perfecta de los sexos, ya que se trata del momento hiper cósmico anterior a la caída, de la individualidad perfecta en comunidad, superior al cielo, la primera manifestación sensible, pero todavía ligada a la individualidad, de ahí la posibilidad de la caída en un cuerpo sensible.</i></p> <p><i>Pero por sobe el alma del universo se desenvuelven las instancias propiamente metafísicas, el "topos noetos", en la lengua de Platón, el lugar de los paradigmas, modelos arquetipos ideales. Los ejemplares paradigmáticos y productores últimos del mundo del cambio. El universo de la verdadera ciencia, eternamente ordenado según número, orden, clasificación e idea, mundo en el que esencia y nombre son inescindibles y origen de todo orden. "Namarupa avyakrita" o "<b>Ishavara</b>" según <b>Shankara</b>, el Logos eterno del hermetismo, el "Kosmos o topos noetós" de Platón y los neoplatónicos. En fin, el mundo <b>arquetípico</b> y eterno.(...) Suele Guénon designar, en síntesis, estos estados cosmológicos y metafísicos como lo "manifestado", o sea, la "natura naturans" que exige la "naturata"; lo "no manifestado" pero "manifestable", el <b>Ser</b> o los paradigmas en los seres cambiantes y lo "no Manifestado ni Manifestable", el <b>No</b>-<b>Ser</b>, fundamento permanente al que oculta el orbe de los arquetipos, no obstante su perfección, la fuerza generatriz del alma del mundo y, con mucha mayor razón, el cosmos de la mudanza por ésta generado.</i></p> <p><i>Pero, no obstante lo descripto, lo más importante para Guénon reside, no en diseñar la ontología y estados metafísicos que la tradición va transfiriendo sucesivamente en exégesis adecuada, sino el poder verificar esos estados, en comprobarlos y para ello no existe otro expediente que la vía <b>iniciática</b>» (F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p><i>«Hemos de seguir a Guénon en el uso de la palabra "metafísica" a pesar de que en la filosofía moderna, así como en ciertos cultos religiosos de nuestros días, significa algo completamente diferente. Se supone que Aristóteles dio el título de Metafísica a uno de sus tratados simplemente porque fue escrito después de la Física, pero sería más razonable pensar que la palabra se refiere adecuadamente al conocimiento de lo que está más allá del orden natural, es decir, lo universal infinito y eterno, diferente y más allá de lo individual, finito y temporal. Es importante distinguir lo universal de lo general para salvarnos de confusiones sin fin, ya que ambos términos se usan indistintamente en el lenguaje moderno. Por "universal" no entendemos la suma o colección de las cosas particulares, así como no nos acercamos a lo infinito por una indefinida suma de lo finito ni a la eternidad por la extensión indefinida del tiempo. Decir que la Realidad última es lo universal no es aceptar la proposición panteísta de que es el universo, pues el universo es, hablando con propiedad, la suma de todas las cosas finitas e individuales. (...) Tampoco debe imaginarse que haya oposición o incompatibilidad entre lo universal y lo individual, lo infinito y lo finito. Por el momento será suficiente recordar que los dos son "diferentes" sin ser "opuestos", como la forma es diferente del color, pero no incompatible con él, aunque esto no es de ningún modo una analogía perfecta. En verdad, lo universal e infinito no tiene opuestos porque o incluye todo de una manera absoluta» (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20caracteres%20de%20la%20metafisica.htm"><i>«Caracteres esenciales de la metafísica»</i></a> de René Guénon.</p> <p><b>Macrocosmico. </b>Punto de vista del macrocosmos.</p> <p><b>Microcósmico. </b>Punto de vista del microcosmos.</p> <p><b>Microcosmos. </b>El hombre considerado como un «pequeño universo».</p> <p><b>Mistagogia. </b>Iniciación a los «misterios» en la Grecia antigua; esta palabra a sido retomada por los Padres griegos, especialmente por San Dionisio el Areopagita, y aplicada a los misterios y a los sacramentos cristianos.</p> <p><b>Misterios. </b><i>«El misterio es aquello de lo que no se debe hablar, sobre lo que conviene guardar silencio o aquello que está prohibido dar a conocer al exterior (...) En un segundo sentido designa lo que debe ser recibido en silencio, aquello sobre lo que no conviene discutir: desde este punto de vista todas las doctrinas tradicionales, comprendidos los dogmas religiosos que constituyen un caso particular, pueden ser llamados misterios. (René Guénon, Puntos de Vista sobre la Iniciación).</i></p> <p><i>«Los "pequeños misterios" conciernen únicamente a las posibilidades del estado humano, mientras que los "grandes misterios" conciernen a los estados supra-humanos: por medio de la realización de aquellas posibilidades y de aquellos estados, ellos conducen respectivamente al "Paraíso terrestre" y al "Paraíso celeste", tal como lo dice Dante en su texto "De Monarchis".( René Guénon, Autoridad Espiritual y Poder Temporal).</i></p> <p><i>«Distinción de dos órdenes que se pueden, de una manera general, designar como el de los principios y el de las aplicaciones, o bien, como el orden "metafísico" y el orden "físico", de lo que se deriva la distinción de lo que se llamaba los "grandes misterios" y los "pequeños misterios", éstos comportando esencialmente el conocimiento de la naturaleza y aquéllos el conocimiento de lo que está más allá de la naturaleza. Esta misma distinción corresponde, precisamente, a la de la "iniciación sacerdotal" y la "iniciación real") (René Guénon, Autoridad Espiritual y Poder Temporal)</i></p> <p><b>Modernidad. </b><i>«Para entender la esencia de la modernidad, tenemos que volver a remontarnos hasta los comienzos de los tiempos históricos. Recordemos que el "clasicismo", aun significando una relativa caída <b>intelectual </b>respecto de los períodos anteriores, mantuvo una sabiduría verdadera, la que se transmitió exteriormente a través del mito y en su dimensión profunda en las escuelas de "misterios". Cuando se desmembro el mundo antiguo surgieron, el estoicismo y el epicureísmo entre otras tendencias anti-intelectuales, y así la filosofía cayó en una simple actitud moral, sin ningún principio superior. Luego sucedieron las invasiones bárbaras, las cuales produjeron la desaparición casi completa de las antiguas organizaciones iniciáticas. Guénon compara, con las debidas reservas, la decadencia del mundo greco-latino a la de nuestros días, y encuentra ciertas analogías entre algunas tendencias religiosas de esa época y la actitud mesiánica tan común actualmente. Pero recuerda con referencia a tales inquietudes que el advenimiento del Cristianismo significó durante varios siglos el detenimiento del derrumbe ya iniciado, y que en cambio la postura actual es falsa y consecuente con simples intereses superficiales, alejados totalmente del mínimo resto de espiritualidad. Estamos totalmente de acuerdo con la opinión guenoniana, al observar que generalmente estas actitudes no conforman más que un simple proselitismo con fines inconfesables, teñidos de una moralina inconsistente y de un sentimentalismo vulgar y simulado. Se desconoce que el cristianismo significó un hito de detenimiento en la "caída" cíclica, una etapa de claridad en el <b>Kali Yuga</b> y una vuelta momentánea a la normalidad, y que la modernidad representa un declive mucho más acentuado que el producido durante la disolución del Imperio Romano. Se trata realmente de la "Noche de la historia" que precede al fin del tiempo de la humanidad contemporánea.» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>«Tengamos en cuenta que con el <b><i>Renacimiento </i></b>y la época de los "descubrimientos" posteriores comenzó un período que constituyó el inicio real de la <i>modernidad</i> tal cual la concebimos en la actualidad, o sea el desarrollo hipertrofiado y anárquico de la ciencia y de la técnica, el estudio de las ciencias físicas hasta la atomización en el detalle, el maquinismo en todos los niveles, el cerramiento de la inteligencia en la cosmovisión utilitaria aun en lo meramente humano, la practicidad, la complacencia en los estratos más inferiores y la impotencia intelectual.</p> <p>La <i>modernidad</i>, como esencia de nuestro mundo contemporáneo, implica el alejamiento extremo respecto al centro originario del Ser universal o intelecto puro. </p> <p>Sin embargo se equivocan los que desesperan, ya que el desorden es previsible en esta última etapa del tiempo humano, siendo a su vez el orden final la suma de todos los desordenes parciales y aparentes, tal como lo enseñan los libros sagrados.</p> <p>El que ve únicamente el aspecto negativo de la <i>modernidad</i> no se da cuenta que dentro del Todo absoluto, cada situación momentánea tiene siempre un sentido como cualquier otra. Así, luego del fin de este ciclo, otro nuevo comenzará para establecer un nuevo equilibrio con el producto resultante de los supuestos sin sentido anteriores. </p> <p>A pesar de que esta vasta confusión se está convirtiendo cada vez más acentuadamente en "la abominación de la desolación" como lo profetiza el Evangelio, los que aún son capaces de reflexión deben comprender que nada en la realidad del devenir supone una gratuidad arbitraria, sino que representa una profunda sabiduría que abarca regiones más amplias en el espacio y en el tiempo.» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</p> <p><b>Monismo. </b><i>«Podemos decir que el monismo se caracteriza esencialmente por esto que, no admitiendo que haya una irreductibilidad absoluta y queriendo sobrepasar la oposición aparente, quiere conseguirlo reduciendo uno de dos términos al otro. Si, en particular, se trata de la de la oposición del espíritu y de la materia tendremos, de una parte, el monismo espiritualista que pretendía reducir la materia al espíritu y, por otra, el monismo material esta que pretende, al contrario, reducir el espíritu a la materia. (René Guénon, Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p><b>Muerte. </b>Extinción total y definitiva del ser relativo frente a la Presencia de lo Verdadero y a la Permanencia de la Total-Realidad. </p> <p><b>Mundus Imaginalis. </b>Mundo hacia el que está orientada la función cognitiva de la <b><i>Imaginación</i>, </b>cuyo nivel ontológico está por encima del mundo de los sentidos y por debajo del mundo inteligible puro; es más inmaterial que el primero, pero menos que el segundo. Mundo de los «cuerpos sutiles» donde se <i>densifican</i> las esencias y se <i>esencializan</i> los cuerpos.</p> <p><i>«Es éste el ámbito de los estados sutiles de la manifestación, en que se encuentran las prolongaciones extra-corporales de los individuos, las energías de las entidades no humanas, las influencias de los "genios elementarios" o elementales de Paracelso, que las tradiciones llaman gnomos ondinas, silfos, salamandras, djinns, demonios. Las fuerzas, abandonadas por los cultos desaparecidos se mezclan allí a energías auténticamente angélicas y a influencias errantes, como dicen los chinos, para formar un mundo fascinante, extraño y peligroso.</i></p> <p><i>Por otra parte, si este mundo es el de los combates y los cambios, existe también como el de las ilusiones y la belleza. Es en realidad el dominio de las imágenes de la mâyâ india. Ahí, las ideas toman forma, las lenguas se organizan, las influencias se trasmiten, las almas realizan alianzas. Este mundo en perpetuo cambio es ilusorio, como el de los sueños, y esto en ambos sentidos, tanto desde el punto de vista del Principio, del que no es sino un reflejo móvil y dual, como desde el punto de vista del mundo terrestre que lo sueña de forma temporaria, correspondiente a un equilibrio provisorio hasta su próxima transformación. Para nosotros este mundo es inevitable, necesario, aunque de una importancia muy variable según los seres que en él se manifiestan y, por ello, lo manifiestan, ya que es el lugar del encuentro de la creación humana y de la inspiración divina.</i></p> <p><i>La imaginación humana que toma sus poderes de la energía sutil de este mundo mediador, no es la dudosa facultad que nos abruma con sus fantasmas, sino una función psíquica autónoma, un instrumento de relación y un órgano de percepción. Se polariza de un lado en un órgano de comunicación con el mundo intermediario y por el otro en un órgano de acción preparatoria aplicado al mundo sensible. Presenta al hombre y especialmente al artista el modelo de la "cosa a realizar". Su creatividad es una puesta en relación gracias a la energía del impulso espiritual, de la intención y de la concentración del corazón.» (Luc Benoist, El esoterismo)</i></p> <p>(Ver también «<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20imaginal-%20mundus%201.htm"><i>Mundus</i> <i>Imaginalis</i> I</a>»<i>,«<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20imaginal-%20mundus%202.htm">Mundus</a></i><a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20imaginal-%20mundus%202.htm"> <i>Imaginalis</i> II</a><i>» y «<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20imaginal-%20ambito%20de%20la%20revelacion.htm">Ambito</a></i><a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20imaginal-%20ambito%20de%20la%20revelacion.htm"> <i>de</i> <i>la</i> <i>Revelación</i></a><i>» )</i></p> <p> </p> <p><b>Música. </b><i>«La Música es una de las siete artes liberales, que formaba junto con la aritmética, la geometría y la astronomía, el quadrivium, conjunto de las artes físicas, relacionadas con la forma o aspecto cualitativo de las cosas, todas las cosas las has hecho con peso, número y medida, dice la Biblia. Podríamos decir que la música es la expresión aritmética del sonido, los números expresando en todas las tradiciones las "razones eternas" de los seres y las cosas, y el sonido relacionándose con el éter, el elemento primordial del que surgen los cuatro elementos que forman el mundo corpóreo.</i></p> <p><i>El alma es una sinfonía, decía Santa Hildegarda de Bingen, y es así que podríamos trasladar a música una expresión humana concreta o un aspecto divino, como de hecho hace siempre la música tradicional. es decir, la música es una estructura simbólica de un carácter más primordial que cualquier otra, como dice San Isidoro de Sevilla: «ninguna disciplina puede ser perfecta sin la música; sin ella nada existe. Se afirma que el mundo mismo fue compuesto de acuerdo con una cierta armonía de sonidos, y que incluso el cielo gira bajo la influencia modular de la armonía». </i> </p> <p><i>En la sociedad tradicional, el tiempo como el espacio tienen un aspecto cualitativo, que expresan cada uno en su orden las realidades de lo alto, toda civilización tradicional intenta reflejar el cielo en la tierra. La música tradicional, porque es cualitativa, considera el momento, el lugar y la acción que se desarrolla en ellos, expresando simbólicamente su realidad esencial. Cada acontecimiento tiene su música. Esta expresión musical, definida por el acontecimiento que acompaña, liga estrechamente en el canto la letra, la música y el modo; esto ocurre en todas las formas musicales tradicionales, desde el raga hindú hasta el canto gregoriano, pasando por las canciones populares como, por ejemplo, los palos del flamenco.</i></p> <p><i>La música tradicional distingue entre sus diferentes aplicaciones, podemos hablar entonces de una música sagrada, otra religiosa, y otra prosaica (mejor que profana ya que en las culturas tradicionales incluso las fiestas, entretenimientos etc. tienen un carácter y un simbolismo esencialmente sagrado).</i></p> <p><i>La música sagrada es aquella que es capaz de remitir al individuo al Sí-mismo. La música religiosa, en cambio, pretende unir, no ya al individuo con su esencia, sino a los diferentes individuos de una comunidad en el culto o la alabanza divinas. La música prosaica se atiene a lo material, incluso a lo corpóreo.</i></p> <p><i>Estos aspectos cualitativos y simbólicos de la música están por completo ausentes en la música moderna. Ninguna relación se percibe hoy en día entre la música y el tiempo, el lugar y el acontecimiento en los que se ejecuta. El canto gregoriano se canta en recitales profanos, y a la inversa en la iglesia se interpretan melodías profanas. La música se ha convertido en un objeto de consumo, válido por sí mismo como un simple pasatiempo, efímero e insignificante.»(Revista <a href="http://www.geocities.com/revistalye/">Letra y Espíritu</a> nº 6)</i> </p> <p>La degradación musical de la que hablamos procede del Renacimiento, momento en el que los compositores pretenden "liberarse" de las estructuras modales para dar libre curso a sus fantasías (ellos lo llaman creatividad). Incluso el oído no entrenado de hoy en día puede apreciar como la música del renacimiento se <i>sentimentaliza</i> creando ambientes de melancolía y tristeza, desde luego no exentos de una cierta belleza, pero que bajan un punto en la perfecta luminosidad y la gracia espiritual de las primeras polifonías medievales (ver <a href="http://usuarios.lycos.es/materdei">MATER DEI </a>)o de la serenidad simple y contemplativa del canto y la <b><i>salmodia </i></b>gregorianos (ver <a href="http://usuarios.lycos.es/cantate">CANTATE </a>y también<a href="http://usuarios.lycos.es/sacrum"> SACRUM </a>). Esa progresiva sentimentalización y profanación de la música va ganando terreno con la decoración superflua del barroco, el drama, la tragedia y los ambientes sombríos que a partir del clasicismo desembocan en los paroxismos sentimentales y emocionales románticos, para finalmente terminar por degradarse en la desasosegante, vacua y fría atonalidad contemporánea unida además al caótico mundo musical comercial. Ningún rasgo sagrado veremos en tales músicas, todo lo más algunas obras pueden calificarse de <i>religiosas </i>pero solo por el tema que tratan. Y todo lo más alguna obra puede reflejar esa transparencia metafísica, más por casualidad que por intención, y más como excepción que como norma.</p> <p><i>«La música ha recorrido un camino análogo al de las demás manifestaciones artísticas. En efecto, la música tradicional, la cual aún vive en muchos lugares de Oriente, como la India actual, usa el sonido para evidenciar el silencio o sea la suprema realidad. El autor musical trata de diagramar en la duración sonora una sucesión de instantes de silencio, y el oyente percibe esos momentos como el sustrato real que perdura detrás de las apariencias sensibles del ser universal, concretizadas en el tiempo sonoro. Con ello se busca trasponer las limitaciones inherentes a las determinantes vitales para sumergirse en lo absoluto no-manifestado. Es decir, la verdadera música surge de las relaciones entre esos intervalos de silencio.</i></p> <p><i>El Occidente de nuestros días, en cambio, generalmente pretende con la música disimular la realidad bajo la antedicha duración sonora. Desea el placer estético como en las demás expresiones artísticas, y mediante la distracción que supone la producción de la belleza y armonía musical, olvida y niega que su concreción es nada más que un punto de apoyo para la trascendencia y lo auténticamente espiritual en las civilizaciones normales» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p><i>«Daría toda mi obra por haber escrito el Prefacio de la misa gregoriana» (W. A. Mozart)</i></p> <p><b>Naturaleza. </b>Lo que es una cosa; la <b><i>substancia</i></b> en tanto que principio de operación (<i>substantia dicitur natura prout est principium operationum).</i></p> <p><b>Necesidad. </b>Desnudamiento del alma en su sometimiento a lo Absoluto y según su actualización necesaria.<i>«Cada hombre de entre los hombres tiene múltiples necesidades, pero en realidad, todos ellos no tienen necesidad más que de una única cosa, a saber, acordarse de Dios verdaderamente: si ellos han adquirido esto, ninguna cosa no les faltará, que ellos la posean o que no la posean. (Shaykh al´Arabî ad-Darqâwî)</i></p> <p><b>Nirvâna.</b> "Extinción"; estado supremo de absorción del Ser en <i>Brahman.</i> El termino <i>Nirvana</i> significa literalmente "extinción del soplo o de la agitación", es decir el estado de un ser que no está sometido ya a ningún cambio ni a ninguna modificación, que está definitivamente liberado de las formas, así como del resto de los accidentes o ataduras de la existencia manifestada.</p> <p><b>No-ser. </b>El Ser puro es la unidad o principio de la manifestación, más allá de la cual está la no-manifestación, cuya referencia se da como No-Ser. Pero este No-Ser no es la nada, esta última significando la pura imposibilidad; al contrario es la plena realidad, ya que la manifestación es contingente, y su origen, o sea el Ser, está contenido en el No-Ser. Luego el No-Ser equivale al absoluto incondicionado o totalidad. A él únicamente podemos acceder con el uso de términos negativos, ya que con cualquier afirmación nos encontraríamos en el dominio del Ser.</p> <p>Expresión de René Guénon, utilizada para designar lo que está «más allá del Ser». Esta expresión está calcada de la terminología extremo-oriental (<i>wu-wei</i>, no-acción); no hay que confundir el No-Ser guenoniano con la nada (o no ser): para evitar esta confusión, F. Schuon utiliza con preferencia el término «Sobre-Ser».</p> <p><b>No-dualidad. </b>También no-dualismo o <i><b>Advaita. </b>«Sin admitir más irreductibilidad absoluta que el monismo, el "no-dualismo" difiere profundamente de éste, pues no pretende de modo alguno que uno de dos términos sea pues, y simplemente, reducible a otro: los contempla a uno y a otro simultáneamente en la unidad de un principio común de orden más universal y en el cual ambos están igualmente contenidos, no ya como opuestos, sino como complementarios, por una especie de polarización que no afecta en nada a la unidad esencial de ese principio común» (René Guénon, Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes»)</i></p> <p><b>Nueva Era. </b>Impostura de gran extensión hoy en día en la que se mezclan de manera caótica y comercial todas las desviaciones y herejías mantenidas a raya durante siglos. Encontramos aquí un neo-paganismo, neo-panteismo, culto a los espíritus (espiritismo), adivinación, sicologismos de toda índole, pseudo-orientalismos, mancias, y todo tipo de <i>talleres </i>de astrología, biorritmos, dinámica mental, trabajo corporal, hipnosis, sanación etc. etc. No encontraremos nada espiritual en todo este inventario. No lo hay.</p> <p>En la base de todo este embrollo está la confusión entre lo síquico, para-psiquico, emocional o simplemente sensorial con lo espiritual. </p> <p>El fenómeno, en realidad, no es nuevo. Lo que es nuevo es la popularización creciente y masiva de ciertas heterodoxias que hasta el momento se habían mantenido limitadas. El gran error que comete el movimiento Nueva Era es el de confundir los ámbitos psíquicos con los espirituales. En palabras de René Guénon: <i>«Es una consecuencia natural del hecho que los occidentales, desde hace ya largo tiempo no saben distinguir más el "alma" del "espíritu" (y el dualismo cartesiano tiene seguramente mucho que ver con ello, pues confunde en una sola y misma cosa todo lo que no es el cuerpo, y esta cosa vaga y mal definida se designa indiferentemente con uno u otro nombre».</i> Esta confusión puede darse de dos formas inversas: <i>«en la primera lo espiritual es reducido a lo psíquico (se pretenden dar explicaciones psicológicas a las verdades espirituales); en la segunda el psiquismo es por el contrario tomado por lo espiritual» </i>y es precisamente este caso el que se da en la «Nueva Era».</p> <p>Enseñan las doctrinas tradicionales que el hombre está constituido de cuerpo, alma y espíritu (<i>soma</i>, <i>psiqué</i> y <i>nous</i> en la tradición greco latina); que refleja la constitución misma del universo como imagen de Dios. Así como la integralidad del hombre es triple, siguiendo la <b><i>ley de correspondencias</i></b>, también lo es el alma; esta triple constitución del alma la denominaban los filósofos escolásticos con los nombres de alma racional, alma irascible y alma concupiscible, lo que se podría traducir hoy por mente, emociones y sentidos. En todas estas divisiones siempre se establece de forma natural una jerarquía entre los diferentes estado o facultades del ser humano, como del universo todo. Así, en el hombre, el espíritu debe imperar sobre todo el conjunto, acto seguido vendría la razón, la emotividad y, por último, los sentidos, estrechamente ligados ya al cuerpo.</p> <p>En los diferentes grupos Nueva Era vemos, por el contrario, imperar no ya el Espíritu, ni siquiera la razón, sino la emotividad pura, cuando no los sentidos mismos, por esta auténtica manía de experimentarlo todo, como si la pura experiencia sin doctrina alguna pudiese provocar el más mínimo conocimiento o realización verdadera.</p> <p>Así en este tipo de movimientos nueva-era, el hombre, dominado por la naturaleza más baja de su ser, queda sujeto a los contínuos vaivenes de la emocionalidad que le impiden obtener la estabilidad necesaria para levar a cabo su crecimiento normal.</p> <p>La pretensión de una realización espiritual en el ámbito mental propia del movimiento nueva-era es una imagen prácticamente invertida de la Tradición, tomando el aspecto de una grotesca parodia, marca que revela su naturaleza pues como es bien sabido; «Satán es el mono de Dios»</p> <p> </p> <p><b>Ocio. </b><i>(Otium). «Con esta palabra ha sucedido lo opuesto que con "<b>Labor</b>": la misma hoy ha asumido casi sin excepción un significado negativo. Es ocioso, según la acepción moderna, aquel que es inútil para consigo mismo y los demás. Se ocioso y ser indolente, vago, inactivo, desganado, inclinado al "dolce far niente" de la Italia de las mandolinas para el gusto de los turistas de hoy, representa más o menos la misma cosa. En vez latinamente "otium" significaba un tiempo libre, correspondiente esencialmente a un estado de recogimiento, de calma, de transparente contemplación. El ocio en sentido malo –sentido conocido también en la antigüedad– aparecía tan sólo como aquello a lo cual el mismo puede conducir cuando es usado mal: únicamente en estos casos se puede decir, por ejemplo, "habescere otio" u "otio fiffluere", es decir, atontarse o deshacerse a causa del ocio. Pero éste no es el significado prevaleciente. (...) El "otium" es vinculado estrechamente con la tranquilidad de ánimo del sabio, con aquella calma interior que permite alcanzar los ápices de la contemplación: y la contemplación, se es comprendida en sentido justo, tradicional, no significa evasión del mundo y divagación, sino profundización interior y elevación hasta la percepción de aquel orden metafísico que todo hombre verdadero no debe cesar de tener en vista en su vida y lucha en un Estado terrenal.</i></p> <p><i>Por lo demás en el mismo Catolicismo (cuando aun no se había resuelto honrar al Cristo trabajador a quien se homenajea ahora un Primero de Mayo y no se había aun operado la "apertura hacia la izquierda") ha figurado la expresión</i> <i>"sacrum otium", "ocio sagrado", con referencia justamente a una actividad contemplativa. Pero en una civilización en la cual cada acción ha terminado asumiendo los caracteres grises, físicos, mecanicistas y mercenarios de un trabajo incluso cuando es desarrollado por la mente (...) el significado positivo y tradicional de la misma contemplación tenía que perderse. Y es así que, en lo relativo a la moderna, es el caso de hablar no tanto de una "civilización activa", cuando de una civilización de agitados y neuropáticos. Como compensación al "trabajo" y como reacción ante el desgaste de una vida embrutecida en un vano actuar y producir, el hombre moderno no conoce en efecto el "otium" clásico, el recogimiento, el silencio, el estado de calma y de pausa en el que se vuelve hacia sí mismo y se reencuentra a sí mismo. No: él conoce sólo la "distracción" (en el sentido literal, pues distracción significa dispersión): busca sensaciones, busca nuevas tensiones, busca nuevos excitantes, casi en un marco de estupefacientes psíquicos. Todo esto con tal de escaparse de si mismo, con tal de no hallarse solo consigo mismo, aislados del ruido externo y de la promiscuidad con el propio "prójimo". De allí la radio, la televisión, el cine, los cruceros, el frenesí por "meetings" deportivos o políticos en un régimen de masas, necesidad de oír, de cazar el hecho nuevo o sensacional, "fanatismos" de todo tipo, y así sucesivamente. Todo expediente parece haber sido puesto diabólicamente en obra para que cualquier vida verdaderamente interior sea destruida, para que toda defensa interior de la personalidad sea impedida anticipadamente, para que, casi como un ser artificialmente galvanizado, el individuo se deje llevar por la corriente colectiva la cual, naturalmente, según el denominado "sentido de la historia" va hacia delante en un ilimitado progreso». (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Ontología. </b>Ciencia del Ser.</p> <p><b>Ontológico. </b>Que tiene relación con el Ser.</p> <p><b>Originalidad. </b><i>«La pretendida originalidad intelectual que contribuye, por una buena parte, al nacimiento de los sistemas filosóficos es, incluso para los occidentales, algo completamente moderno que la Edad Media todavía ignoraba: las ideas puras y las doctrinas tradicionales nunca han constituido la propiedad de tal o cual individuo, y las particularidades biográficas de aquellos que los han expuesto e interpretado, son de mínima importancia. (René Guénon, Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p><b>Ortodoxia. </b>Una doctrina es ortodoxa cuando está de acuerdo con los principios universales, que constituyen propiamente el ámbito de la <b><i>metafísica</i></b>. El conocimiento de estos principios se realiza a través de un "<i>órgano</i>" que recibe diferentes nombres como <i>«ojo de la budhi», «<b>intuición</b> <b>intelectual</b>», «operación del espíritu» etc. </i>Como es lógico el buscador no posee al comienzo de su búsqueda esta <i>intuición intelectual </i>que le permitiría discernir entre lo verdadero y lo falso o entre lo ortodoxo y lo herético por lo que debe recurrir a otros medios para saberlo. Ante todo hay que saber que toda Tradición es de origen no humano y por ello toda doctrina debida al esfuerzo mental de una persona no puede ser considerada una doctrina tradicional sino simplemente un sistema filosófico. Por otra parte al ser los Principios los mismos para todos los que han tenido conocimiento de ellos, sus doctrinas deben forzosamente coincidir en sus niveles más altos para posteriormente adaptarse a la mentalidad de la gente a la que sean dirigidas y esa es la causa de que encontremos diferencias entre las diversas formas tradicionales, pero todas deben de coincidir en sus escritos metafísicos. El estudio de la metafísica de las tradiciones reconocidas como el Cristianismo, el Islam, el Hinduismo, etc. dará un conocimiento de los principios suficiente para ejercitar el discernimiento. Por otra parte la <i>heterodoxia</i> es sinónimo de falsedad y encierra siempre contradicciones y por ello tras un examen siempre se descubre algún absurdo. Una vez situados dentro de una forma tradicional, para ver si algo es o no ortodoxo debe confrontarse con las escrituras sagradas de esa forma tradicional y ver si no se excluyen.</p> <p> </p> <p><b>Paciencia. </b><i>Patientia. «El significado moderno con respecto al antiguo acusa nuevamente un embotamiento y una desvalorización. Hoy es denominado paciente al que no se enoja, no se irrita, al que tolera. En la lengua latina la "patientia" designaba a una de las "virtudes" primarias del hombre romano: comprendía la idea de una fuerza interior, de una indestructibilidad, aludía a la capacidad de mantenerse firme, de tener el ánimo no turbado ante cualquier revés y cualquier adversidad. Por tal causa se dijo que era propio de la raza de Roma el poder cumplir grandes cosas, sea de "padecer" acontecimientos adversos de no menor entidad (véase el conocido dicho de Livio: "et facere et pati fortia romanum est = es del romano hacer como padecer cosas fuertes). El significado moderno resulta en vez, con respecto al otro, totalmente deformado. Como ejemplo de una naturaleza típicamente "paciente" hoy es indicado el asno. (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Panteísmo. </b>Doctrina que sostiene que el universo es Dios, por continuidad substancial.</p> <p><b>Pantocrator</b>. Palabra griega que significa «todo poderoso» (<i>omnipotens</i>).</p> <p><b>Parusia. </b>Venida gloriosa de Cristo al final de los tiempos.</p> <p><b>Piedad. </b><i>Pietas. «No es ni siquiera necesario decir qué significa hoy una "persona piadosa". Se piensa en una actitud sentimental en gran medida humanitaria, sensiblera, y "piadoso" es casi sinónimo de compasivo. En la antigua lengua latina la "pietas" pertenecía en vez al dominio de lo sagrado, designaba la especial relación en la cual el hombre romano se encontraba con las divinidades en primer lugar, luego con otras realidades vinculadas al mundo de la Tradición, comprendido el mismo Estado. Frente a los dioses, se trataba de una actitud de calma, de digna veneración: sentimiento de pertenencia y al mismo tiempo de respeto, de memoriosa referencia, también de deber y de adhesión, como valoración del mismo sentimiento sus citado por la figura severa del "pater familiae" (de allí la "pietas filialis"). Tal como se ha mencionado, la "pietas" podía manifestarse también en el campo político: "pietas in patriam" significaba fidelidad y deber respecto del Estado y la patria. En algunos casos la palabra en cuestión admite también el injusto, casi el impío, es aquel que desconoce el lugar que le es propio y que debe mantener en un orden superior, divino y humano al mismo tiempo. (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Pleroma</b>. Palabra griega que significa «plenitud» y cuya interpretación resulta difícil. En la epístola a los Colosienses (I, 19 y II, 9) , designa la reunión de todo el universo en el Cristo resucitado.</p> <p><b>Potencia. </b>La potencia no puede definirse más que con relación al <b><i>acto</i></b>. El acto es el principio de perfección de un ser; la potencia es el de la medida en la cual él participa en esa perfección, es decir sobre el modo particular según el cual él la posee y sobre los límites en los cuales él la recibe.</p> <p><b>Pradhana</b>. Traducido por «naturaleza». Es la materia primordial. Tiene aquí el sentido literal de naturaleza no evolucionada. Significa lo mismo que <i>prakriti</i>, el opuesto de <i>purusha</i>, el espíritu en la filosofía sankhya. Para Sankara diríamos que se refiere al punto más lejano en la manifestación. Y es inconsciente, pura pasividad por lo que coincide con la materia del platonismo: la máxima rarificación de lo Uno. El Espíritu en su máxima alineación, como diría Hegel, se llama materia. En el contexto de la metafísica sankariana es una creación de la ilusión cósmica.</p> <p><b>Prakriti.</b> La sustancia universal indiferenciada, la Naturaleza Creadora, que forma junto a <b><i>Purusha</i></b> un par indisociable. Principio <i>femenino</i> de la manifestación universal. <i>Prakriti</i> es a veces traducida por «naturaleza» o «substancia», pero no es la <b><i>materia</i></b> en el sentido moderno de la palabra. <i>Prakriti</i> produce la manifestación bajo la influencia de <b><i>Purusha</i>, </b>el principio masculino.</p> <p><b>Pralaya.</b> Disolución cósmica al fin de un ciclo de manifestación. </p> <p><b>Procesión. </b>Acción por la cual, en la Trinidad, una Persona divina da origen a otra Persona.</p> <p><b>Progreso. </b><i>«Los creyentes en esa fantasía moderna llamada "progreso" suponen que la "edad dorada" está situada en el provenir y no, como lo expresan todas las tradiciones, en el pasado, pero un pasado en el que domina lo intemporal, antes de la "caída" en la exterioridad. La superstición del "progreso" es una ilusión peligrosa en todos los aspectos porque significa ceguera espiritual, falta de visión para la realidad inmediata y el tiempo presente, y un desconocimiento del proceso epocal, con las consecuencias a la vista» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular).</i></p> <p><i>«Refiere Guénon el caso de un hindú, el cual tenía verdadero conocimiento del Occidente moderno; al preguntársele la opinión que merecía la ciencia occidental a los orientales que habían tenido acceso a ella, manifestó lo siguiente: "se trata de un saber ignorante". Manifiesta también que en el Oriente en general no se experimenta ninguna dificultad para penetrar los saberes especializados del Occidente, por estar acostumbrado el primero a especulaciones mucho más profundas. Por todas estas razones, a los orientales les resulta ridícula la noción moderna de "progreso" existente en Occidente, ya que además de carecer ella de sentido lógico como anteriormente dijimos, este supuesto progreso lleva a una necesidad compulsiva de movimiento, renovación y cambio en todas las dimensiones de la realidad sensible, movimiento sin finalidad alguna si no es la ilusoria que domina el mundo material. Esta agitación incesante y maníaca constituye para el mundo oriental una muestra típica del deterioro progresivo en los niveles superiores del ser humano (...) el "progreso" material se produce invariablemente a expensas del <b>intelecto</b>» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>Tanto el nombre de <i>civilización</i> como el de <i>progreso</i> a él vinculado, en el sentido que le damos a ambos actualmente, son el producto de ideas y tendencias recientes y fueron inventados hace dos siglos, precisamente en la segunda mitad del siglo XVIII. La concepción de <i>progreso indefinido</i> aparece en a segunda mitad del siglo XVIII, e hizo convencer a la especie humana que había entrado en una nueva era. Los términos <i>civilización </i>y <i>progreso</i> como muchos otros parecidos y en boga en la actualidad, tomándolos en su significado absoluto no corresponden a ninguna realidad, carecen de sentido y pueden únicamente tener una razón instrumental de fuerte efecto <i>«en ciertas frases vacías y declamatorias, muy apropiadas para impresionar a la multitud y en las cuales la palabra sirve menos para expresar el pensamiento que para suplir su ausencia» (R. Guénon, Oriente y Occidente)</i></p> <p>Esta fantasía de progreso, y especialmente de progreso indefinido, es una de las grandes supersticiones de la época actual y obedece a un optimismo creado <i>ex profeso</i>. Nadie puede negar la existencia del progreso material en Occidente, pero el error consiste en tomar esa palabra <i>progreso</i> en sentido absoluto y no relativo. En el primer caso, este supuesto <i>progreso</i> es en realidad decadencia, por haberse alejado el hombre de su centro originario. En el segundo obedece a la ilusión del mundo fenoménico. Tal evidencia hizo decir con mucho tino a representantes de civilizaciones tradicionales, que lo que los occidentales llaman su "civilización", es en rigor de verdad, lisa y llanamente, barbarie, al faltarle a esa supuesta <i>civilización</i> lo único esencial: el conocimiento intelectual superior, sin el cual todo lo demás es un mero vagar en las sombras.</p> <p><i>«La tesis del progreso indefinido, por lo demás, topa con la contradicción siguiente: si el hombre ha podido vivir durante milenios bajo el dominio de errores y necedades –suponiendo que las tradiciones no sean sino eso, y entonces el error y la necedad serían casi inconmensurables–, la inmensidad del engaño sería incompatible con la inteligencia que se atribuye al hombre como tal y que obligadamente se le ha de atribuir; dicho de otro modo, si el hombre es lo bastante inteligente para llegar al "progreso" que nuestra época encarna -suponiendo que sea una realidad–, a priori es demasiado inteligente para haberse dejado engañar, durante milenios, por errores tan ridículos como los que el progresismo le atribuye; pero si, por el contrario, el hombre es lo bastante tonto para haber creído en ellos durante tanto tiempo, también es demasiado tonto para salir de ellos» (F. Schuon, Castas y Razas) </i> </p> <p><i>«Se hace cada vez más evidente que la supuesta superioridad de la sociedad occidental "progresista" sobre las sociedades "estancadas" de Oriente es bastante dudosa. Nuestro progreso ha sido casi exclusivamente técnico, lo que significa que podemos manejar el mundo físico con más sensacionalismo para ganar velocidad, espacio y posibilidades de la existencia material, sin tener ninguna idea clara de lo que hemos de hacer con el tiempo que ganamos y las capacidades que adquirimos. Tenemos que poner en duda el que hayamos producido una persona más espiritual que Cristo, o más sabia, en el sentido cualitativo, que Platón o santo Tomás. Hemos multiplicado los libros y extendido las informaciones en una medida inigualada en la historia; pero la mera información, el mero conocimiento de hechos, es infinitamente divisible y puede aumentarse por análisis sin que haya ningún aumento importante en calidad ni en extensión real» (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p><b>Psicología. </b><i>Pseudo</i>-<i>conocimiento</i> basado en la concepción dual del hombre como un cuerpo físico que contiene y produce una mente. Se pretende entonces comprender la mente desde su propio nivel –lo cual es absurdo– o peor todavía desde el nivel inferior biológico. Al margen de algunos éxitos y alivios puntuales en su nivel, que no de desdeñan y que en un momento dado pueden ser perfectamente legítimos como un mal menor, esta <i>pseudo-ciencia</i> deforma totalmente la mentalidad y por tanto la captación del mundo de sus inadvertidos seguidores. Según la moderna psicología el motor de todas las actuaciones humanas es el subconsciente, que domina al hombre por entero; así todo lo que es superior en el hombre, lo espiritual, se explica por lo inferior, lo pasional. En Freud todo lo humano se reduce a impulso sexual (perversión sexual diríamos mejor a juzgar por sus "<i>teorías</i>") y miedo a la muerte.</p> <p>En la concepción ternaria tradicional y cristiana del hombre, <b><i>espíritu, alma y cuerpo</i></b> están no solamente en planos jerárquicos decrecientes sino, igualmente, en proporciones que hacen del alma una minúscula parte y del cuerpo, una traza ínfima, en este conjunto. Esta realidad jerárquica es la que permite comprender, integrar y equilibrar los planos <i>de los superior, el espíritu, hacia lo inferior; alma (psique, mente) y cuerpo.</i></p> <p>El error básico de la sicología moderna consiste en ignorar que existe un ámbito superior a la psique: el <b><i>intelecto</i></b>. Este <i>intelecto</i> o <i>espíritu</i> es el único que puede iluminar el mundo incierto y fluctuante de la psique, sólo él puede ofrecer una perspectiva objetiva que los sicólogos profanos se muestran incapaces de encontrar; ya que «la psique es el objeto de la psicología y desgraciadamente es al mismo tiempo su sujeto»<i>.</i> Si podemos percibir esta subjetividad propia y definitoria del alma humana es, precisamente, porque existe algo en nosotros que escapa a ella: el espíritu.</p> <p>Por último, la cura del alma únicamente es posible en el seno de la tradición, que ofrece los recursos apropiados. <i>«La psique no se deja curar por medios psíquicos... sólo puede ser curada por algo que se encuentre "fuera" o "por encima" de ella» (T. Burckhardt) </i> </p> <p>Mas información sobre las imposturas sicologistas en:</p> <p style="margin-left: 1cm; margin-right: 1cm;"><a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20psi-%20psicologia%20moderna%20y%20sabiduria%20tradicional.html"><b>PSICOLOGÍA MODERNA Y SABIDURÍA TRADICIONAL</b></a><br />Titus Burckhardt, tomado de <i>"Ciencia moderna y sabiduría tradicional".</i> Denso análisis de la psicología, particularmente en relación con algunas concepciones de C.G. Jung y también de Sigmund Freud. </p> <p style="margin-left: 1cm; margin-right: 1cm;"><a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20psi-%20tradicion%20e%20inconsciente.html"><b>TRADICIÓN E INCONSCIENTE</b></a><br />René Guénon, tomado de <i>"Símbolos fundamentales de la ciencia sagrada".</i> Comentario a las ideas de “<i>inconsciente colectivo”</i> y “<i>subconsciente”</i>. </p> <p style="margin-left: 1cm; margin-right: 1cm;"><a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20psi-%20la%20impostura%20del%20sicologismo.html"><b>LA IMPOSTURA DEL PSICOLOGISMO</b></a><br />F. Schuon, tomado de <i>"Résumé de Metaphysique Integrale".</i> Crítica general hacia el mundo de la psicología. </p> <p style="margin-left: 1cm; margin-right: 1cm;"><a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20psi-%20decadencia%20y%20ruina%20del%20imperio%20freudiano.html"><span style="text-decoration: none;"><b>DECADENCIA Y RUINA DEL IMPERIO FREUDIANO: La impostura del psicoanálisis</b></span></a><br />El derrumbe de uno de los grandes mitos de la modernidad<i>.<br />”La doctrina de Freud aparece hoy como desprovista de carácter científico; el psicoanálisis es plenamente aceptado por los profanos mientras que es rechazado por los que en ese dominio poseen conocimientos serios. Hoy, ya pueden los sabios o los epistemólogos señalar que las doctrinas de Freud carecen de fundamento, porque como el hombre de la calle no lea las publicaciones científicas o las revistas de filosofía, el avance en el campo de la psiquiatría no surtirá efecto alguno”.<br /></i><span lang="en-GB">Hans J. Eysenk. </span> </p> <p><b>Purusarthas. </b>Los valores o deberes de la vida, que son: el placer sensual (<i>kama</i>), la riqueza o el poder (<i>artha</i>), la virtud (<i>dharma</i>), y finalmente la liberación (<i>moksa</i>). Si <i>kama</i> y <i>artha</i> aseguran un cierto bienestar en este mundo y si el <i>dharma</i> es el garante del gozo celeste, en un ciclo que no es aún el estado final y absoluto del hombre, el <i>moksa</i> como <i>nihsreyasa </i>(lo que está allende el bienestar) trasciende los tres anteriores.</p> <p><b>Purusha.</b> Principio espiritual que designa a <b><i>Brahman</i></b>, el Ser, el Si-Mismo, que forma con <b><i>Prakriti</i></b> una pareja indisoluble. Principio masculino de la manifestación universal; traducido a veces por "espíritu".</p> <p> </p> <p><b>Quididad. </b>Lo que en un ser responde a la pregunta: ¿Qué es esto? (<i>quid sit?)</i>. en el orden del Ser, la respuesta es la <b><i>esencia</i></b>; en el orden de la operación, es la <b><i>naturaleza.</i></b></p> <p> </p> <p><b>Racionalismo. </b><i>«Es la creencia en la supremacía de la razón, en forma de un verdadero dogma, negando lo supraindividual, o sea la intuición intelectual pura, lo cual significa la exclusión de todo verdadero conocimiento metafísico» (R. Guénon, El Reino de la Cantidad y los Signos de los Tiempos)</i></p> <p><i>«A través de las etapas de decadencia atravesadas por Occidente, la desviación y la anulación de lo intelectual fue llegando progresivamente a muy bajos niveles. Por ejemplo, en la filosofía moderna Descartes pretendió limitar la inteligencia a la razón. En efecto, con el racionalismo se identificaron ambas cosas, logrando la razón nada más que "claridad y distinción". A su vez con el empirismo no pudo ir el pensamiento más allá del dominio de la materia y de los fines prácticos. El racionalismo, sin embargo, no pudiendo elevarse a la verdadera intelectualidad, por lo menos llegó a una verdad relativa. En cambio el intuicionismo contemporáneo va más allá, rebajando la intelectualidad a tal punto que las facultades más elevadas no serían más que representaciones de la realidad sensible. Por fin, para el pragmatismo ya no queda ningún lugar para los niveles superiores, al asimilar la verdad a la utilidad, con lo cual se suprime totalmente el intelecto humano. Para esta última orientación del pensamiento ya no importa la verdad en un mundo donde no hay posibilidades de conocimiento real, sino únicamente aspiraciones a lo exterior y a la pura mecanicidad.» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>En el Occidente de nuestro días, cuando se habla de inteligencia, existe una referencia implícita a su dominio inferior, es decir, a la razón. Guénon señala muy acertadamente como <i>error racionalista</i> el hecho de limitarlas facultades intelectuales a no sobrepasar el orden racional. Añade al respecto que se han autotitulado <i>racionalistas</i> en el curso de la Edad Moderna, quienes eran meros negadores de todo aquello que pudiese sobrepasar la realidad sensible y además adoradores de la diosa <i>razón</i>. Por lo demás, considera que no estaban capacitados para ver que más allá de lo racional, facultad meramente individual y limitada, está lo <i>suprarracional</i>, es decir, lo <b><i>intelectual</i></b> puro, lo que supera el ámbito del individuo para entrar en lo universal. Este último es, metafísicamente hablando, el campo de lo intelectual en el verdadero sentido de la palabra.</p> <p>La negación del intelecto puro rebaja la inteligencia a lo meramente racional y discursivo, marco estrecho que pretende encerrar lo verdadero en lo expresable y puerta abierta a todas las confusiones inconscientes y también intencionales propias del pensamiento moderno. Por causa de tales imprecisiones, muchas veces se toma por profundidad intelectual lo que es simple nebulosidad y oscuridad expositiva deliberada, y donde muchos desarrollos interminables son simplemente problemas <i>ex profeso</i> mal planteados. Es común que algunos pensadores contemporáneos efectúen largos desarrollos para demostrar hipótesis sin mayor trascendencia.</p> <p>No se puede reprochar a nadie no poder llegar más lejos de allí donde sus facultades se lo permiten, pero la tendencia tan común en los medios pseudo-intelectuales modernos de querer negar a otros la posesión de aquello que a uno le falta, revela una verdadera limitación mental propia de estos tiempos. Hay que reconocer lo que vale la razón, la cual tiene incontestablemente su ámbito, pero no caer en la aberración racionalista que consiste en negar lo superior, o sea invalidar la metafísica.</p> <p><i>«En la crítica racionalista de los dogmatismos, no todo es rechazable de entrada, pues los contrasentidos –reales aunque extrínsecos– que se encuentran en las imaginerías religiosas provocan forzosamente dudas y protestas, en ausencia de un esoterismo sapiencial que pueda colmar las fisuras y reducir las disonancias accidentales a la armonía de la substancia. No carece de relación con la fatal limitación de los dogmatismos, por otra parte, su desdén por la <b>inteligencia</b> –que buscan reducir a la "razón"– en función de su llamamiento al creer tan solo. Siendo esto así, ni que decir tiene que no se puede hacer un reproche a todos aquellos que no pueden evitar constatar los perjuicios de una piadosa ininteligencia de la que el campo fideísta ofrece muchos ejemplos; el que algunos saquen de estas constataciones las conclusiones más falsas y se complazcan en las generalizaciones más abusivas es una cuestión completamente distinta. Sea como fuere, el que las reacciones del increyente y las del esoterista puedan coincidir es un hecho que no excusa los errores del incrédulo, como tampoco invalida las tesis del metafísico.</i></p> <p><i>El hombre que rechaza la religión porque la literalidad de ésta a veces parece absurda –a causa de un desglose y una dosificación que exigen la cristalización formal y la adaptación a una mentalidad colectiva intelectualmente mínima–, ese hombre ignora algo esencial, pese a la legitimidad lógica de su reacción: a saber, que la imaginería a primera vista contradictoria vehicula datos que en última instancia son perfectamente coherentes e incluso de una evidencia deslumbrante para todo aquel que sea capaz de presentirlos o captarlos» (F. Schuon, Aproximaciones al Fenómeno Religioso)</i></p> <p><b>Râga.</b> Término de la <b><i>música</i></b> hindú. Modo melódico compuesto de cinco a siete notas distribuidas en la escala diatónica según un orden particular. Cada <i>raga</i> tiene su dominante ligada al tema que la define. Modo musical, fórmula melódica que corresponde a un momento o a un estado del alma específico. </p> <p><b>Rajas.</b> Una de las cualidades <i>(gunas)</i> de la naturaleza, caracterizada por el movimiento y la pasión. Una de las tres <i>gunas</i>, tendencia dinámica, expansiva, apasionada. </p> <p><b>Rasa.</b> "Perfume" o "Sabor" de una obra poética o musical. La emoción provocada en el auditor por los sentimientos expresados artísticamente.</p> <p>Ver el documento<a href="http://www.terra.es/personal/javierou/kyat.htm"> <i>«Abhinavagupta y el Arte Tradicional»</i> </a>de la página<a href="http://www.terra.es/personal/javierou"> <i>«Kali Yuga»</i></a></p> <p><b>Raza. </b><i>«La <b>casta</b> está por encima de la raza porque el espíritu es superior a la forma; la raza es una forma, la casta un espíritu. Ni siquiera las castas hindúes pueden limitarse a una raza: hay brahmanes tamules, balineses y siameses. Sin embargo, es imposible admitir que las razas no signifiquen nada fuera de sus características físicas, pues, si bien es cierto que los constreñimientos formales no tienen nada de absoluto, no por ello pueden las formas carecer de razón suficiente; si bien las razas no son castas, deben corresponder, sin embargo, a diferencias humanas de otro orden, un poco como diferencias de estilo pueden expresar equivalencias espirituales, a la vez que indican divergencias de modo» (F. Schuon)</i></p> <p><i>«Para comprender el sentido de las razas, es importante ver ante todo que derivan de aspectos fundamentales del género humano y no de alguna causa fortuita de la naturaleza. Si bien hay que rechazar todo racismo, también hay que rechazar un antirracismo que peca en sentido contrario al atribuir las diferencias raciales a casualidades y al querer reducir a nada esas diferencias mediante consideraciones sobre los grupos sanguíneos interraciales, etc., es decir, confundiendo planos distintos. Las mezclas raciales son buenas o perjudiciales según los casos: pueden "airear" un medio étnico que se ha vuelto demasiado "compacto", al igual que pueden bastardear un grupo homogéneo dotado de cualidades precisas y preciosas» (F. Schuon)</i></p> <p>Lo que los racistas nunca han comprendido es que la herencia psíquica es cualitativamente más diferente de una casta natural a otra –aunque la raza fuera la misma– que entre individuos de igual casta y razas distintas; las tendencias innatas y personales son más importantes que los modos raciales; de esa manera tienen más en común dos <i>metafísicos</i> de diferentes razas que un contemplativo y un <i>shudra</i> de la misma.</p> <p> </p> <p><b>Realización metafísica. <i>Liberación </i></b>o <i>Moksha<b>. </b>Deificación,</i> en el lenguaje del Cristianismo Ortodoxo Oriental. Consiste en la realización total e incondicional. Supone para el ser humano la liberación de las determinaciones propias de su particular estado de manifestación. Este concepto es muy difícil de entender en la actualidad en su realidad profunda, ya que no existen los términos correspondientes para comunicarlo correctamente. Ocurre que las <b><i>lenguas modernas</i></b> son muy poco metafísicas. En efecto, ellas evidencian una notable pobreza en términos y sonidos en comparación a las tradicionales. Además nuestras categorías mentales están distorsionadas por una educación de tipo acumulativo y nos resulta casi imposible comprender que en la realización metafísica se trata, no de adquirir conocimientos en la multiplicidad manifestada, sino de eliminar lo que impide llegar a la última realidad, o sea disipar las tinieblas que oscurecen la luz de la verdad. Con palabras convencionales y tomando analógicamente la <b><i>experiencia mística</i></b>, hay que llegar a la «<i>clara luz del vacío</i>». Así, llegándose a la superación total de la mente racional, penetra la visión intelectual, que es la verdad absoluta de lo suprarracional, o intuición inmediata del Todo.</p> <p>La finalidad de la realización metafísica es la liberación, lo que significa romper los límites de la individualidad. En efecto, <i>«el verdadero conocimiento disipa la ignorancia como la luz disipa las tinieblas»</i> y <i>«como la ignorancia es limitación y nace de ilusorias apetencias mundanas, cuando desaparece la ignorancia desaparece esa limitación que caracteriza la individualidad». </i>Al anularse esa frontera se produce la liberación (<i>Moksha </i>en sánscrito) por haberse trascendido lo individual, entrando en la Totalidad o sabiduría de <b><i>Brahma</i></b>, quien según el <b><i>Vedanta</i></b> es «<i>la Verdad, el Conocimiento y el Infinito».</i></p> <p><b>Reencarnación. </b>Tantas son las fantasías y despropósitos que se están difundiendo actualmente en occidente en torno a este concepto, que sería necesario todo un tratado específico para aclararlo. Baste de momento con señalar un comentario de René Guenon en su "Introducción general al estudio de las doctrinas hindúes": "<i>Todos los orientales (salvo quizás algunos ignorantes más o menos occidentalizados cuya opinión es sin ningún valor) se oponen unánimemente a la reencarnación. Además, su carácter metafísicamente absurdo es demostrable muy fácilmente, ya que admitir que un ser pueda pasar varias veces por el mismo estado, equivale a suponer una limitación de la Posibilidad Universal, es decir, a negar lo Infinito, y esta negación es, en ella misma, contradictoria en supremo grado".</i></p> <p>La reencarnación sería el paso por sucesivos estados del ser en los que el alma va liberándose progresivamente del apego a las formas; formas físicas en este mundo físico que conocemos y por el cual no se vuelve a pasar, formas sutiles en los mundos sutiles o intermedios. Salvando las distancias y simplificando, el equivalente cristiano sería el purgatorio.</p> <p>Lo que sí es posible, y esto es lo que confunde y despista a algunos, es que algunos restos síquicos, algunas tendencias "pasen" de unos seres a otros según determinadas leyes de semejanza; sería algo así como un traje que, una vez que una persona muere, es heredado por otra persona de las mismas características físicas (incluso cada parte del traje por una persona diferente), pero la verdadera identidad ya no está dentro de ese traje, aunque a una mirada lejana y no avisada pudiera parecérselo.</p> <p>Un excelente trabajo sobre los estados Post-Mortem es "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20muerte%20esoterismo%20y%20reencarnacion.htm"><i>Muerte, Esoterismo y Reencarnación</i></a><i>"</i> de J. Alexander.</p> <p>En esa misma página se encuentran asimismo otros interesantes documentos sobre el tema: "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenonreencarnacion.htm"><i>Sobre la Reencarnación</i></a><i>"</i> de René Guénon; el documento "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20y%20la%20reencarnacion.htm"><i>René Guénon y la Reencarnación</i></a><i>"</i> y también <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20postmortemshankara.htm">"<i>Post Mortem y Liberación según Shankaracharya"</i></a> de Gian Giuseppe Filippi.</p> <p>Sobre los estados post mortem puede consultarse también: "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/con-resurrexit.htm">Resurrección y Maternidad Virginal</a>" en esta misma página.</p> <p>También:<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20criticareencarnacionismosaura.htm"> <i>"La Critica al Reencarnacionismo de Algunos Autores Contemporaneos" </i></a>de Emilio Saura</p> <p><b>Relación. </b>Relación de una cosa con otra cosa (<i>esse ad aliud</i>), una de las diez categorías de Aristóteles. En la teología trinitaria esta palabra designa las relaciones que ligan a las Tres Personas divinas.</p> <p><b>Religión. </b>Para que una doctrina tradicional se manifieste según una expresión religiosa, debe poseer necesariamente tres elementos: un dogma, una moral y un culto. El primero es el elemento intelectual, común a la forma religiosa y metafísica de las tradición, el segundo es el costado social, y el tercero tiene facetas de los dos primeros. Especialmente en su aspecto mora, la religión, a diferencia de la metafísica, trasunta características sentimentales que a veces oscurecen la luz pura del Absoluto. El sentimiento participa del mundo de los sentidos, el cual es superado por la metafísica. Esta última se desenvuelve en el campo meta empírico del concepto puro. En el campo religioso se habla de creencia y no certidumbre. La certeza es una consecuencia de la pura intelectualidad. Ella es esencialmente metafísica. La creencia, en cambio, es una manifestación de la fe religiosa. En el Occidente moderno se ha hiper-desarrollado la cobertura sentimental de la tradición, debido al materialismo en boga. Los aspectos exteriores han impuesto hasta hacer de la religión una verdadera superstición en sentido estricto. En efecto, como surge de la palabra, una superstición es algo que sobrevive, como únicamente sobrevive, como únicamente sobrevive en la actualidad la letra y el ritual religioso. De éste, la inmensa mayoría desconoce su profundo significado espiritual.</p> <p>En el mundo moderno, y debido al olvido del conocimiento profundo, el cristianismo ofrece el aspecto <b><i>exotérico</i></b> (externo) de la tradición originaria, siendo por lo tanto una religión en el verdadero sentido de la palabra. Ello no ocurrió en sus comienzos cuando tuvo, al realizar su dimensión metafísica, un carácter esotérico y por lo tanto iniciático. En ese tiempo no se transmitía a todos indistintamente el misterio real de la doctrina cristiana. Recordemos lo que dice el Evangelio: <i>«A vosotros se os concede el conocer los secretos del Reino de Dios; pero a los otros sólo en parábolas, par que viendo, no vean, y oyendo, no entiendan» (Luc. VIII, 9-10). </i>A partir de la conversión de Constantino y del Concilio de Nicea, la verdadera doctrina primitiva se fue encerrando en organizaciones cada vez menos abiertas, para dar paso a una religión dirigida al aspecto externo y social de la tradición. Las formulaciones dogmáticas significaron sancionar una adaptación a las circunstancias históricas hasta haberse llegado en la actualidad, a olvidar totalmente el significado espiritual de la doctrina originaria.</p> <p><i>«Los principios transcendentes que son percibidos directamente merced a la intuición intelectual pueden captarse y recibirse no directamente, sino eclipsados o modificados, a través de sentimientos e intereses síquicos. Tal es el caso de las realidades metafísicas cambiadas en creencias religiosas. Ahora no se trata del momento de la intuición intelectual, sino de la fe, y tampoco nos encontramos en el campo de la metafísica, sino en el de la religión. Este conocimiento indirecto o prejuicioso de los hechos metafísicos les arrebata su profundidad connatural y por eso se trata de un fenómeno exotérico o de una comprensión, no de la médula, sino de la cáscara de esencias más hondas (...) Las civilizaciones metafísicas y las religiosas son, fuera de toda duda, tradicionales, pero en diferentes grado, porque los principios se conservan con diferente limpidez. Razonablemente, la prenda de subsistencia tradicional de las comunidades religiosas o exotéricas radica en el hecho de que en su cauce sobrevivan grupos esotéricos que las preservan de su intrínseca inclinación hacia la exterioridad» (F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p><i>«Puesto que el mundo occidental de nuestros días la religión es lo que más se aproxima a la <b>metafísica</b>, será necesario, al descubrir las doctrinas metafísicas, transponerlas a sus equivalentes religiosos. Esto es de la mayor importancia debido al supuesto conflicto entre una metafísica como la del <b>Vedanta</b> y una religión como el catolicismo, conflicto que en verdad es tan absurdo e imposible como el que pudiera pensarse entre la música y la danza. En realidad, es muy común que el occidental medio piense que todas las doctrinas acerca de la Realidad última y del fin verdadero de la vida humana son religiosas en el mismo sentido que las propias. Pero este supuesto es falso, y es causa de mucha controversia y animosidad innecesarias. Digamos aquí, pues, que por necesario que sea el punto de vista metafísico en el mundo occidental, no existe el menor conflicto entre él y la ortodoxia católica más tradicional y completa. Si existe alguna objeción a esta ortodoxia, tiene que presentarse sobre fundamentos religiosos y no metafísicos. Por consiguiente no hay absolutamente nada dentro de la metafísica que impida que uno acepte sin reservas o correcciones las doctrinas cristianas tradicionales. La razón de que no haya conflicto es que, como ya se indicó, el conocimiento religioso es mediato, objetivo y analógico, y no pretende ser nada más. Por el contrario, el conocimiento metafísico es inmediato, y tiene lugar en la esfera del <b>intelecto</b> (o del Yo), mientras que la religión es el conocimiento de lo infinito en los términos de la razón, el sentimiento y la sensibilidad. En la religión, la Realidad última, que carece de forma y de representación, es trasladada a imágenes finitas, algo así como cuando se marcan con limaduras de hierro las líneas de fuerza magnética con el propósito de realizar una observación experimental» (Alan W. Watts, La Suprema Identidad)</i></p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20tradicion%20y%20religion.htm"><i>«Tradición y Religión»</i></a> de René Guénon.</p> <p><b>Renacimiento. </b>Con mucha ingenuidad se llama <i>Renacimiento –</i>dando la idea de renovación y ascenso– a lo que no fue más que el comienzo del declive de la alta civilización espiritual que se desarrollo en esa otra época anterior mal llamada <i>«edad oscura» </i>o <b><i>Edad</i> <i>Media</i></b>. El fin de la Cristiandad produjo resultados muy graves, entre ellos el <i>Renacimiento</i> y la <i>Reforma</i>. El <i>Renacimiento</i> fue un renacer cultural de la Antigüedad greco-latina, pero no de su dimensión valiosa y profunda, sino de su nivel superficial, nivel que ya había sido rechazado por la verdadera intelectualidad del Mundo Antiguo. Este fenómeno se produjo especialmente en el terreno de las ciencias y las <b><i>artes</i></b>. O sea, la desviación occidental se acentúa con el Renacimiento, el cual representó una verdadera sombra que se expandió sobre la intelectualidad occidental, al nutrirse con lo menos valioso del clasicismo greco-latino. La <i>Reforma</i> acentuó esta divergencia. En efecto, el libre examen y el individualismo significaron el alejamiento extremo de la auténtica doctrina cristiana. Así la <i>Reforma</i> fue el golpe de gracia a la <b><i>Tradición</i></b> en su expresión religiosa, siendo el protestantismo una expresión típica del espíritu moderno, el cual compele al cambio incesante y a la manía reformista hasta en el aspecto sagrado. Esta situación ha provocado que por ignorancia se haya pretendido eliminar de una doctrina lo más profundo.</p> <p>Debemos tener presente que el <i>Renacimiento</i> estuvo relacionado con el <i>Humanismo</i>, tendencia cultural cuyo ideal se proyecta en el hombre y todo lo que no sobrepasa el nivel simplemente humano en su aspecto sensible. En esa época ya se había olvidado lo suprarracional y auténticamente <b><i>intelectual</i></b>.</p> <p><b>Rishi. </b>Palabra hindú que se podría traducir por «vidente». La palabra vidente, en este contexto, no se refiere a lo que actualmente se designa, desafortunadamente, con éste término. Vidente es aquel que "ve" directamente las realidades divinas (clarividencia=visión beatífica); aquel que tiene el conocimiento, la gnosis. En este contexto no tiene nada que ver con magos, adivinos, brujos, alucinados etc. que tanto proliferan en estos tiempos....</p> <p> </p> <p><b>Salmodia. </b>La recitación entonada de los salmos en cada una de las horas del Oficio Divino: <i>Maitines, Laudes, Tercia, Sexta, Nona, Vísperas y Completas</i>. En la entonación tradicional gregoriana a cada salmo le corresponde una <i>antífona</i> según el tiempo o la festividad, en un <i>modo</i> musical específico, que le da el carácter. De esa manera hay diversas entonaciones o <i>cantinelas</i> para el recitado según el carácter del salmo, de la hora, de la festividad, etc. Por otra parte esta manera de recitar un texto sagrado no es exclusiva del cristianismo, pudiendo encontrar formas semejantes en todas las tradiciones ortodoxas. El recitado entonado de los salmos con la entonación gregoriana se mantuvo hasta el Concilio Vaticano II, después del cual se derrumbo esta práctica degradándose lo poco que queda de ella actualmente a un caos de cancioncillas y entonaciones empalagosas o simples recitados a voz natural, con la consiguiente pérdida del carácter contemplativo de esta práctica. Todo esto en el mejor de los casos, porque la mayoría de los cristianos han abandonado esta practica o la siguen de una manera superficial o como una incomoda obligación en el caso de las personas consagradas. Unicamente en algunos monasterios Benedictinos, y no en todos, se conserva y mantiene viva esta maravillosa práctica contemplativa legada por la tradición.</p> <p><i>«La salmodia ha logrado descifrar el secreto consistente en la apertura de las palabras sin menoscabo alguno del espíritu; en concretar los sonidos sin, por ello, herir el silencio; en el recogimiento interior del alma que ora con la más personal de las plegarias, mas uniendo aquella con el alma del prójimo en una plegaria pública; en ofrecer al hombre la más emocionante y expresiva fórmula de sus necesidades, pero con súplica que se eleva por encima del objeto de éstas y en la que los gemidos del Espíritu concluyen en alabanza.</i></p> <p><i>Nada que sea tan humilde y tan sencillo a la vez, tan sublime y tan gratuito, tan dinámico y tan contemplativo. Nada, que se halle tan exento de sobresalto, de exaltación, de la más mínima tentativa efectista, de la más mínima mirada sobre uno mismo. Por ende, el cuerpo toma parte en esta obra de alabanza. Y esta participación del cuerpo coadyuda a elevarlo sin exaltarlo, a ocuparlo sin disiparlo, a serenarlo sin ablandarlo. La aparente monotonía del recitado no es sino poderoso impulso de la interioridad del acento, de la reserva suprema de la Fe y del pudor divino del Amor.</i></p> <p><i>En el sentido más alto de la palabra, la Salmodia es música espiritual, interior; y a la par, divina y humana, contemplativa y mística. En el fondo, constituye además una acción inseparable de la Eucaristía, un sacramento por el que se consuma la oración de Cristo en la Iglesia, por la gloria del Padre y la salvación del Mundo.» (Mauricio Zundel)</i></p> <p><i>«La salmodia es siempre una fuente de salud; su melodía calma las pasiones; lo que es la hoz contra los matorrales, el salmo lo es contra la tristeza. Ya que el salmo, cuando es cantado, suprime la depresión del alma, destruye el dolor desde la raíz, atenúa las pasiones, etc.» (Proclus, patriarca de Constantinopla, siglo V)</i></p> <p><b>Samâdhi.</b> Desprendimiento de la Conciencia de los niveles de la manifestación reabsorbidos en ella. Nivel de Realización espiritual. Identificación del sujeto y del objeto, recogimiento perfecto, "enstasis". En el yoga clásico, es el resultado supremo de la ascesis. Pero cada escuela lo ha definido a su manera distinguiendo en él diversos grados. La iluminación. El estado de "enstasis". El último grado de conocimiento asimilado a lo Divino. Equivalente a <i>satori</i> en el ámbito budista. </p> <p><b>Sâmkhya.</b> Uno de los seis grandes "puntos de vista" <i>(darshana)</i> de la ortodoxia hindú, que describe 25 principios constitutivos de la manifestación cósmica. Base teórica del yoga clásico, e incluso tántrico. Más cosmológico que puramente metafísico, no es, sin embargo, ni materialista ni ateo como lo han pretendido muchos orientalistas. </p> <p><b>Samsâra.</b> "Hecho de recorrer una extensión, de pasar de un estado a otro", flujo moviente de los fenómenos, ciclo de la transmigración. La "reencarnación", a la cual los Occidentales están hoy en día tan aficionados, no es mas que un reflejo disminuido de esta doctrina. Designación general de la experiencia del mundo como algo cambiante, contingente e inestable. Es la existencia condicionada El transcurrir de las existencias, el devenir universal, sin comienzo ni fin. </p> <p><b>Samskara.</b> Las raíces profundas de la estructura y las disposiciones de un ser dado, de carácter innato, y también herencias de formas anteriores de la existencia. Tendencias innatas, virtualidades síquicas susceptibles de actualizarse, latencias sicológicas. </p> <p><b>Sanatâna Dharma.</b> "Ley" espiritual que debe perdurar para toda una humanidad, durante sus cuatro edades <i>(yuga)</i>. Mas específicamente la Tradición Hindú, primordial con relación a todas las otras tradiciones conocidas, y "perpetua" <i>(Sanatana). </i> </p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20sanatana%20dharma.htm"><i>«Sanatâna Dharma»</i></a> de René Guenon.</p> <p><b>Sat. </b>El Ser (asimilado a Brahma en la triada <i>Sat-Chit-Ananda</i>). Lo real, lo real absoluto, la existencia.</p> <p><b><span lang="en-GB">Sat-Chit-Ananda.</span></b> Palabra sánscrita que significa Ser-Consciencia-Beatitud, las tres cualidades de la Realidad absoluta (<b><i>Brahman</i></b>).</p> <p>Es el concepto hindú equivalente a la <b><i>Santísima</i> <i>Trinidad</i></b> cristiana, en la cual el Padre (Sat; Ser, Consciencia) engendra perpetuamente al Hijo (Chit; existencia) en un flujo permanente de Amor (El Espíritu Santo; Ananda, la Beatitud). Una explicación más extensa es la del Abbé Henri Stéphane en el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/con-henri-metaftrinid.htm"><i>«Interpretación Metafísica de la Trinidad»</i></a><i>.</i></p> <p><b>Sattva.</b> Una de las tres <i>gunas</i> o cualidades de la naturaleza. La que confiere armonía. Tendencia ascendente, luminosa, consciente.</p> <p><b>Shakti.</b> De <i>shak</i> poder, "<i>ser capaz de</i>". La palabra <i>Shakti </i>designa toda capacidad, toda habilidad, todo poder: poder de una palabra, poder poético, poder real, poder de un arma o el arma misma (lanza, arpón, espada). En el ámbito tántrico es la Energía Cósmica, la Potencia activa personificada como una diosa. La Energía no está nunca separada de la Consciencia (Shiva) que la posee. Incluso cuando la Energía parece separarse de la Consciencia (y es solamente entonces que se le puede calificar de "peligrosa"), no es mas que una ilusión. La energía cósmica, simbolizada por la esposa de Dios en tanto que principio animador de este. La potencia de manifestación de <b><i>Brahman</i></b>, la Omnipotencia u Omniposibilidad divina. Ver <b><i>Mâyâ</i>.</b></p> <p>El concepto hindú de <i>Shakti</i> es exactamente equivalente al concepto cristiano de <b><i>Sabiduría</i> </b>(<i>Sophia</i> o <i>Sapientia</i>) arquetipo existente desde antes de la creación y manifestado después en la Virgen María. Quizás es el único concepto hindú que tiene una equivalencia absolutamente exacta con un concepto cristiano.</p> <p><b>Shankara.</b> Comentador de los <i>Brahma Sutra</i>, del <i>Bhagavad Guita</i>, de algunos <i>Upanishads</i>, autor de numerosos himnos y tratados. El representante más ilustre del <b><i>Vedanta</i></b> no-dualista. Sus himnos devocionales tántricos, menos conocidos, son también admirables. </p> <p>El más célebre instructor de la doctrina <b><i>vedantica</i></b>, de la no-dualidad (<b><i>advaita</i></b>); vivió en la India en los siglos VIII y IX de nuestra era.</p> <p>Algunas obras de Shankara en <a href="http://www.euskalnet.net/graal">TEXTOS TRADICIONALES</a></p> <p><b>Shekhinah. </b>En la tradición judía, presencia o <i>«habitación» </i>de Dios entre su pueblo.</p> <p><b>Shiva.</b> El Bienaventurado, el Propicio. En la Trinidad hindú, aspecto destructor y transformador de lo divino. También el aspecto Consciencia con relación a la Energía, o el aspecto Absoluto sin distinción alguna. Divinidad hindú que, en la metafísica <i>tántrica</i>, designa el aspecto masculino, inmutable y luminoso del principio, por oposición a aquel, «<i>femenino</i>», dinámico y generador, de la pura <b><i>Shakti</i></b>. </p> <p><b>Shrûti.</b> "Lo que ha sido oído" en lo más profundo de sí mismos por ciertos sabios antiguos llamados <i>rishi</i>. No se trata de textos "revelados" en el sentido religioso occidental sino más bien "inspirados" directamente, obteniendo su autoridad de sí mismos. Escrituras reveladas.</p> <p><b>Ser. </b>El Ser es la primera afirmación y determinación en el Todo universal o infinito, objeto de estudio de la metafísica. En el ámbito del infinito podemos decir del Ser que es, pero nada podemos especificar más allá de éste.</p> <p>El Ser puro es la unidad o principio de la manifestación, más allá de la cual está la no-manifestación, cuya referencia se da como No-Ser. Pero este No-Ser no es la nada, esta última significando la pura imposibilidad; al contrario es la plena realidad, ya que la manifestación es contingente, y su origen, o sea el Ser, está contenido en el No-Ser. Luego el No-Ser equivale al absoluto incondicionado o totalidad.</p> <p><b>Si. </b><i>Si-mismo</i>, <i>Atman, Consciencia, Intelecto, Espíritu</i>, es el Principio transcendente y permanente del cual el ser manifestado, el ser humano por ejemplo, no es más que una modificación transitoria y contingente que no afecta de ninguna manera al Principio. Es la definición que da R. Guénon en el capitulo II de <i>El Hombre y su devenir según el Vedanta.</i></p> <p>Es el Si-mismo que queremos significar cuando decimos a un hombre que está comportándose mal: <i>«sé tú mismo» (en sautov genou, </i>Sófocles, <i>Filoctetes 950) </i>pues <i>«todo es intolerable cuando un hombre olvida su propio Si mismo, para hacer cuanto no le conviene" (idem 902-903).</i></p> <p><b>Silencio. </b><i>«La sabiduría entra por el amor, silencio y mortificación. Grande sabiduría es saber callar y no mirar dichos ni hechos ni vidas ajenas» (San Juan de la Cruz, Dichos de luz y amor)</i></p> <p><i>«Una palabra habló el Padre que fue su Hijo y ésta habla siempre en eterno silencio, y en silencio ha de ser oída del alma» (San Juan de la Cruz, Dichos de luz y amor)</i></p> <p><i>«Es más fácil callar siempre que no propasarse con las palabras... En el silencio y la quietud, aprovecha el alma devota y aprende los secretos de las Escrituras» (Kempis, La Imitación de Cristo)</i></p> <p><i>«En el Deuteronomio XXVII, 9 Moisés dice a su pueblo: "Guarda silencio y escucha, Israel" tal es la vocación del monje cartujo: callarse para escuchar la divina palabra pronunciada en el secreto de la interioridad... Así el silencio que constituye el austero adorno del cartujo, se transforma con su crecimiento espiritual en lo que es el oxígeno para todo ser vivo... favorece la contemplación, despoja al ser de toda influencia del ego y lo proyecta en un ir más allá de sí mismo en el sentido del texto de Las Lamentaciones, citado por el prior Guigues II: "Se sentará solitario, se callará y se elevará por encima de sí mismo". Es en el silencio de la celda que se opera la "metanoia", esta incesante conversión del psiquismo y del corazón. Esta perpetua conversión del hombre tiene como consecuencia deshacer los nudos que lo encadenan a las pasiones... Esta conversión está animada y mantenida por la oración que prolonga en el corazón la liturgia exterior» (Marie Madeleine Davy)</i></p> <p><i>«Un día San Francisco hizo un involuntario homenaje al silencio ya que subió al púlpito para decir: «No tengo nada que deciros». Después se santiguó y bajó del púlpito. Hablar por hablar, hablar por deber, hablar para no decir nada, es derrochar algo sagrado» (John Richardson, La Tradición Unánime)</i></p> <p><b>Símbolo. </b><i>«La palabra "símbolo", en su acepción más general, puede aplicarse a toda expresión formal, verbal o figurada, de una doctrina: no puede tener ninguna otra función o razón de ser que lo que simboliza a la idea, es decir, da una representación sensible de la idea en la medida de lo posible que, por otro lado, será puramente analógica. (René Guénon, Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes).</i></p> <p><i>«Lo inferior puede simbolizar lo superior, pero a la inversa es imposible. Además, si el símbolo está más alejado del orden de lo sensible que aquello a lo que representa (en lugar de estar más cercano) ¿cómo podría cumplir con la función a la que está destinado, que es la de hacer a la verdad más accesible para el hombre, suministrando un "soporte" para su concepción? (René Guénon, Introducción General al Estudio de las Doctrinas Hindúes)</i></p> <p><i>«La realidad está estructurada en diversos planos o aspectos, y que hay que partir de los niveles sensibles para llegar a los inteligibles, más allá de la forma y aun de la manifestación informal. Los niveles inferiores traducen la realidad de aquellos superiores en forma de analogías. Esta es la esencia de todo simbolismo, ya que el ser humano, por su naturaleza, necesita una apoyatura contingente para llegar a los planos no fenoménicos» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular)</i></p> <p>Cada expresión aparente es símbolo de ámbitos ontológicos superiores. A ellos únicamente se puede acceder por vía <b><i>intelectual</i></b>. Agregaremos que la naturaleza en su totalidad es una <b><i>teofanía</i></b> y un reflejo de la trascendencia divina, evidencia que fue bien conocida en la Edad Media, especialmente en la escuela de San Francisco de Asís.</p> <p>El símbolo transmite en el plano corporal otras realidades cuyas vías de acceso se dan a través de él, y transitables por quienes son capaces de la <b><i>concentración</i></b> y profundización intelectuales para llegar a ellas.</p> <p>El mito es un símbolo, en este caso verbal o escrito, pero su sentido real, especialmente en esta época de tinieblas, pasa inadvertido para la mayoría, que lo transformó progresivamente en simple mitología incomprendida.</p> <p>La escritura fue universalmente ideográfica en su origen, lo cual quiere decir que era un conjunto de símbolos. En el Extremo Oriente conserva en parte aún esas características.</p> <p>El símbolo sugiere, es sintético y no discursivo como el lenguaje común. No expresa como éste, pero tiene más posibilidades que las palabras de transmitir conceptos por la penetración <b><i>intelectual</i></b> que exige.</p> <p>Respecto a los símbolos figurativos, recordemos que tanto Cristo como <i>Budha</i> fueron representados por mucho tiempo simbólicamente, y que en razón del debilitamiento intelectual posterior sus imágenes se hicieron antropomórficas, al necesitarse un soporte contemplativo más eficaz. De cualquier manera, tengamos en cuenta que los seres humanos difícilmente pueden concebir los aspectos no reflejados de lo Divino.</p> <p>El verdadero lenguaje de la metafísica es el símbolo. Este sirve como punto de sostén sensible para dar a entender lo inexpresable. El símbolo es el apoyo indispensable para poder elevarse a lo espiritual, y esto es lógico a no ser el hombre, en su condición de tal, <b><i>intelecto</i></b> puro. Por ello necesita la base manifestada para llegar a lo inteligible.</p> <p>El símbolo constituye la lengua metafísica por excelencia, siendo todo pensamiento formal, sea oral o escrito, el reflejo individual y en la esfera mental, es decir humana, del intelecto puro o idea informal e incluso más allá de ésta. Tengamos en cuenta que la <b><i>filosofía</i></b>, en el sentido originario del término, traducía el verdadero conocimiento en el plano mental, y era un estadio discursivo preparatorio para llegar a la verdadera sabiduría, o sea al nivel informal. De éste se podía pasar al estadio metafísico puro perteneciente a la no-manifestación (<b><i>realización metafísica</i></b>).</p> <p>Los hechos geográficos mismos y además los hechos históricos tienen, como todos los otros hechos, un valor simbólico, lo cual no significa negarles su propia realidad en cuanto tales, pero que les confiere, además de esta realidad inmediata, un significado superior; los hechos históricos corresponden a un simbolismo temporal y los hechos geográficos a un simbolismo espacial.</p> <p><i>«El Símbolo (como toda manifestación) revela la Idea (el arquetipo) al hacerla asequible a los sentidos a través del arte (el divino o el humano que lo imita); y al mismo tiempo la oculta, vela y disfraza al recubrirla de una forma, lo cual es inevitable para su expresión humana» (M. Plana)</i></p> <p><b>Sinaxis. </b>Palabra griega que significa «asamblea»</p> <p><b>Sincretismo. </b>Mezcla de varias doctrinas sin principio director; sincretismo se opone a <b><i>síntesis</i></b>. Mezcla de elementos dispares de diferente orden y sin un origen y un fin de un nivel superior rector.</p> <p><b>Síntesis. </b>La síntesis consiste en acercar elementos diferentes pero de un mismo orden, serios y controlados, con el fin de revelar los caracteres comunes a ellos y que les vienen de un nivel superior. El <b><i>análisis</i></b> que no es, contrariamente a la creencia común, lo inverso de la síntesis, consiste en imaginar aspectos diferentes, pero de un mismo orden, de una cosa que no los muestra por si misma. El <b><i>sincretismo</i></b> por el contrario consiste en acercar elementos dispares, ni serios ni controlados, con vistas a justificar una hipótesis inverificable.</p> <p><i>«La síntesis parte, por definición, de los principios, es decir, de aquello que es lo más interior. Ya podríamos decir, desde el centro hasta la circunferencia, mientras que el sincretismo se limita a la circunferencia misma en pura multiplicidad» (René Guénon, Puntos de Vista sobre la Iniciación)</i></p> <p><b>Smriti.</b> "Memoria", tradición humana fundada en la <i>Shruti</i> y obteniendo toda su validez de esta última. El conjunto de la tradición humana comprendiendo, entre otras, las "Ciencias anexas", las <i>Leyes de Manu</i>, las epopeyas, los <i>Puntos de vista (Darsanas), </i>y completando a los <i>Veda </i>que constituyen la <i>Shruti.</i> Escrituras tradicionales.</p> <p><b>Soledad. </b><i>«Aquel que no sea capaz de enfrentarse con la verdad, quien no sienta la fuerza necesaria para penetrar en la "gran soledad", siguiendo con la tradición consagrada por la tradición extremo-oriental (y de la que la India también tiene equivalente), ése no podrá ir demasiado lejos en el trabajo metafísico del que hemos hablado y del que todo el resto depende estrictamente. (René Guénon, Oriente y Occidente)</i></p> <p><i>«No es huyendo del mundo exterior, ni de las cosas, buscando la soledad como el hombre puede adquirir una conciencia de ello. Debe aprender la soledad interior, en la que sea cual fuere la compañía debe procurar ver más allá de las cosas aparentes encontrando su Dios dentro de las cosas y así volverse capaz de representárselo efectivamente en su interior como si fuera una determinación de su propio ser» (Eckhart)</i></p> <p><i>«Esta soledad (del cartujo) es su mejor maestro espiritual ya que lo arranca de la exterioridad y lo sumerge en sí mismo... Todos los que tienen una experiencia aunque sea parcial de la soledad saben que transporta a otra dimensión y que conviene abandonarse a ella con confianza para saborear sus dones. Aunque es siempre una penetración en lo desconocido y por ello nos atemoriza y enloquece nuestros sentidos, el mental y el corazón...» <span lang="en-GB">(M. Madeleine Davy)</span></i></p> <p><i>«Lo que la soledad y el silencio del desierto aportan de utilidad y divino gozo a los que les aman, solamente lo saben los que han conocido esta experiencia...» (San Bruno)</i></p> <p><i>«Las condiciones del pájaro solitario son cinco: la primera, que se va a lo más alto; la segunda, que no sufre compañía aunque sea de su naturaleza; la tercera, que pone el pico al aire; la cuarta, que no tiene determinado color; la quinta, que canta suavemente. Las cuales ha de tener el alma contemplativa: que se ha de subir sobre las cosas transitorias no haciendo más caso de ella que si no fuesen y ha de ser tan amiga de la soledad y silencio, que no sufra compañía de otra criatura; ha de poner el pico al aire del Espíritu Santo, correspondiendo a sus inspiraciones, para que, haciéndolo así, se haga más digna de su compañía; no ha de tener determinado color no teniendo determinación en ninguna cosa, sino en lo que es voluntad de Dios; ha de cantar suavemente en la contemplación y amor de su esposo» (San Juan de la Cruz, Dichos de luz y amor)</i></p> <p><b>Subsistancia. </b>(O subsistencia). Modo substancial que termina la esencia individual y la vuelve incomunicable. Según santo Tomas y sus principales comentadores, la subsistencia es realmente distinta de la esencia y de la existencia.</p> <p><b>Subsistente. </b>Que existe de una manera autónoma, sin depender de otra causa.</p> <p><b>Substancia. </b>Lo que es fundamental y permanece cuando los <b><i>accidentes</i></b> cambian; lo que es apto para existir en si y no en otro, <i>Id cujus quidditati competit esse non in alio (Santo Tomas). </i> </p> <p>Es la <i>esencia que existe en sí misma,</i> de manera que el ser sustancial excluye la inherencia en otro ente como en su sujeto. Considerada etimológicamente la sustancia, que viene de la palabra latina <i>substare,</i> significa el ente en cuanto es capaz de servir de base y sujeto de los accidentes: <i>id quod substat accidentibus.</i> </p> <p> </p> <p><b>Tamas.</b> Inercia, ignorancia, torpeza. Una de las tres <i>gunas</i> de la naturaleza Inercia, obscuridad, desintegración. Shiva, el Gran Destructor, es la personificación transcendente de <i>tamas</i>. </p> <p><b>Teofanía. </b>Palabra griega que significa «manifestación o visión de Dios».</p> <p><b>Teologal</b>. Se dice de las virtudes que tienen relación directa con Dios: la fe, la esperanza y la caridad.</p> <p><b>Teología. </b>La teología es la parte más intelectual del dogma religioso, aunque participa de la metafísica, se desenvuelve con elementos racionales y por lo tanto filosóficos, o sea, no <b><i>intelectuales</i></b> en el sentido puro. Dogmas religiosos hay muchos, pero el intelecto puro es uno. El nivel teológico es una modalización adaptada a las circunstancias de la metafísica pura. De cualquier manera siempre hubo quienes, tras haber llegado a la verdadera <b><i>realización metafísica</i></b>, se adaptaron posteriormente, de acuerdo a razones de tiempo y lugar, a determinada doctrina religiosa.</p> <p><i>«Es verdad que las teologías tienen derecho a emplear estratagemas simplificadoras y moralizadoras que se imponen en su radio de acción, pero la inteligencia humana –en la medida en que es capaz de alcanzar su propia substancia– no deja por ello de tener derecho a conocer la simple naturaleza de las cosas, más allá de los intereses morales y de otro tipo, y ello incluso en el Orden divino. Es inevitable que el punto de vista teológico atribuya prácticamente al Dios personal, que sin embargo está comprendido en Mâyâ, las características de la Divinidad impersonal, que es la única que se encuentra por encima de Mâyâ o de la relatividad; pero el puro Intelecto –luego en principio el hombre– puede ir más allá de Maya puesto que es esencialmente capaz de concebir el puro Absoluto, que está más allá de Maya, de la Relatividad, del Ser» (F. Schuon, Aproximaciones al Fenómeno Religioso)</i></p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20metafisica%20y%20teologia.htm"><i>«Metafísica y Teología»</i></a> de René Guénon.</p> <p><b>Teoría. </b><i>(Theoría). «Por asociación de ideas, podemos resaltar aquí la caída de significado padecida por la palabra griega "theoría". Hoy decir "teorías" significa aproximadamente lo mismo que decir "abstracciones", cosas alejadas de la realidad, asuntos "intelectuales", y es incluso de un gran poeta el dicho que "gris es toda teoría, verde es en vez el árbol eterno de la vida". Nuevamente se tiene una alteración y una desvalorización de los significados. En sentido antiguo, "theoría" no quería decir intelectualidad abstracta, sino más bien visión realizadora, algo de particularmente activo, el acto de aquello que hay de más elevado en el ser humano, del "noús", o del intelecto olímpico» (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p><b>Theotokos. </b>Madre de Dios, «la que da a luz a Dios»; titulo dado a María en el 431 por el concilio de Efeso.</p> <p><b>Tiempo. </b>El tiempo es una determinación de la eternidad y se aplica a todo lo relacionado con la existencia humana. Es una forma de duración, concepto más amplio, el cual abarca también la sucesión. Depende del no-tiempo, que es justamente la eternidad en el ámbito de lo no-manifestado.</p> <p><b>Tradición.</b> La Verdad Universal y Perenne transmitida desde los tiempos primordiales a la humanidad y que toma forma de diferentes doctrinas o tradiciones.</p> <p><i><b>«</b>Etimológicamente tradición significa lo que se transmite, en este caso el conocimiento universal, y esa transmisión se efectúa siempre en la forma que las circunstancias posibilitan. La tradición en su forma originaria se manifestó casi exclusivamente en forma oral, por se la más efectiva.» (V. A. Biolcati, La Edad Crepuscular).</i></p> <p><i>«La Tradición universal y unánime es una sabiduría que no ha sido hecha sino que es ahora lo que ha sido y será siempre. Lo que se llama hoy en día religión cristiana existía en los antiguos y no a cesado nunca de existir desde el origen del género humano hasta que, habiendo venido el Cristo mismo, se le ha comenzado a llamar cristiana a la verdadera religión que existía ya antes» (San Agustín)</i></p> <p><i>«La tradición no es el "pasadismo", la vuelta a un formalismo anticuado, sino la permanencia de el origen en la duración» (Frederic Tristan)</i></p> <p><i>«La tradición no significa cristalizarse en una fórmula sin vida, en una mascarada grotesca del pasado sino por el contrario liberar, traducir, entregar al presente –para que el presente haga de ello un uso inteligente– las lecciones del pasado: movimiento y no inmovilidad» (Landry Vaillant)</i></p> <p><i>«Conviene comprender lo que significa este concepto de tradición generalmente negado, desnaturalizado o desconocido. No se trata del color local, de las costumbres populares, ni de los usos curiosos conservados por los folkloristas, sino del origen mismo de las cosas. La tradición es la transmisión de un conjunto de medios consagrados que facilitan la toma de conciencia de los principios inmanentes al orden universal, ya que el hombre no se ha dado a sí mismo la razón de ser de su existir. La idea más cercana, la más dotada para evocar lo que la palabra significa, sería la de una filiación espiritual de maestro a discípulo, la de una influencia conformadora análoga a la vocación a la inspiración, tan consustancial al espíritu como la herencia al cuerpo. Se trata de un conocimiento interior, coexistente a la vida, de una coexistencia, y al mismo tiempo de una conciencia superior reconocida como tal, de una co-ciencia, en ese punto inseparable de la persona que nace con ella y constituye su razón de ser. Desde este punto de vista, el ser es completamente lo que trasmite, él no existe sino porque trasmite y en la medida en que trasmite. Independencia e individualidad aparecen como realidades relativas que testimonian un alejamiento progresivo y una caída continua a partir de un estado extensivo de sabiduría original, perfectamente compatible con una economía arcaica.</i></p> <p><i>Este estado original puede ser representado por el concepto de centro primordial del que el paraíso terrestre de la tradición hebrea constituye uno de los símbolos, comprendiéndose que este estado, tradición y centro, constituyen tres expresiones de la misma realidad. Gracias a esta tradición anterior a la historia, el conocimiento de los principios ha sido, desde el origen, un bien común a la humanidad que posteriormente se ha extendido en las formas más altas y perfectas de las teologías del período histórico. Pero una caída natural, generadora de especialización y obscuridad, ha abierto un hiato creciente entre el mensaje, los que lo trasmiten y aquellos que lo reciben. La explicación se hace cada vez más necesaria, pues la polaridad ha aparecido entre el aspecto exterior, ritual y literal y el sentido original, vuelto interno, es decir, oscuro e incomprensible. En Occidente este aspecto exterior ha tomado, en general, la forma religiosa. Destinada a la muchedumbre de los fieles, la doctrina se ha escindido en tres elementos, un dogma para la inteligencia, una moral para el alma y unos ritos para el cuerpo. Durante este tiempo, por el contrario, el sentido profundo transformado en esotérico se ha reabsorbido cada vez más en formas tan oscuras que ha sido necesario recurrir a ejemplos paralelos de la espiritualidad oriental para reconocer su coherencia y validez.</i></p> <p><i>El oscurecimiento progresivo de la idea de tradición nos ha impedido desde hace tiempo comprender la verdadera fisonomía de las civilizaciones antiguas, y al mismo tiempo, nos ha impedido el retorno a una concepción sintética, que era la de ellas. Sólo la perspectiva de los principios permite comprenderlo todo sin suprimir nada, hacer la economía de un nuevo vocabulario, ayudar a la memoria y facilitar la invención, establecer relaciones entre las disciplinas en apariencia más alejadas, al reservar al que se coloca en este centro privilegiado la inagotable riqueza de sus posibilidades, y esto gracias a los símbolos.» (Luc Benoist, El Esoterismo)</i></p> <p><i>«En la enseñanza guenoniana la noción de tradición ofrece un significado excelso que sólo la incomprensión podría rebajar el sentido vulgar de tratarse de un sinónimo de culto del pasado por el pasado, exaltación de una ideología reaccionaria o despecho ante el curso decadente de la historia. Mucho más allá de lo dicho va la intuición certera de Guenon. El autor francés vislumbra que entre los símbolos, los mitos, las conductas rituales y el lenguaje doctrinal que los acompaña, por siempre y en el orge todo, existen analogías recónditas, equivalencias estructurales, que denuncian un fondo común, un fundamento eterno que escapa a todas eses cristalizaciones temporales. Más aún. Advierte que la totalidad del universo con sus componentes cósmicos articulados, con sus figuras, con sus formas, con sus movimientos, manifiesta igualmente aquel mismo principio inmutable. Y observa del mismo modo que el hombre en su constitución personal, en su organización social y cultural y en su desenvolvimiento histórico es también expresión de ese principio no-manifestado. Existe un fundamento, una arché, un centro firma al que todo lo que se mueve, cambia, se transforma, nace y desfallece, se relaciona. Este centro no es humano, sobrepuja al hombre, está más allá del cosmos y es ajeno a la civilización, aunque todos hunden en él sus raíces. Tradición es lo que se transmite. Fidelidad en la entrega del legado primordial. Luego, dar lo recibido. Esta cesión o transferencia exige respeto y lealtad. Respeto por el patrimonio tradicional, lealtad a la doctrina. Cuando el principio se obnubila, la fidelidad se malogra, el hombre se aparta del origen y su enseñanza es infiel. Una civilización no tradicional es la que, extraña a la transmisión, ni se funda en principios absolutos ni los observa, se entrega a su propia inmanencia pasajera.(F. García Bazán, René Guénon y el Ocaso de la Metafísica)</i></p> <p>Ver el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20guenon%20que%20hay%20que%20entender%20por%20tradicion.htm"><i>«¿Qué hay que entender por Tradición?»</i></a>.</p> <p>Ver también <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20la%20idea%20de%20tradicion.html"><i>«La Idea de Tradición»</i></a>.</p> <p><b>Tradicionalismo. </b>Equivalente a Integrismo. Tendencia religiosa en la cual el conjunto de doctrinas, normas, formas y ritos antiguos, que estaban ligados a la Tradición, son tomados en su forma exterior sin el conocimiento del fondo metafísico del cual emanan y al cual apuntan, dando como resultado una rigidez que por su propia naturaleza ignorante resulta casi siempre fanática y con frecuencia violenta.</p> <p><b>Transubstanciación. </b>Doctrina relativa a la Eucaristía; la <b><i>substancia</i></b> del pan es transformada en la del Cuerpo de Cristo, la substancia del vino en la de la Sangre de Cristo, mientras que los <b><i>accidentes</i></b>, es decir, las apariencias permanecen.</p> <p><b>Trisagion</b>. Palabra griega que significa «tres veces santo»: <i>sanctus, sanctus, sanctus.</i></p> <p><b>Turiya.</b> El "<i>cuarto</i>" estado, la insondable Realidad que, a la vez, trasciende los tres estados de consciencia (despierto, dormido con sueños, sueño profundo) y constituye su substrato común. El cuarto estado de conciencia. Conciencia no-dual, realidad absoluta. </p> <p> </p> <p><b>Upadhis</b>. Son las capas que se añaden al Ser cuando la conciencia lo objetiva. Pero el añadir no aumenta aquí, disminuye la infinitud del Ser, la delimita, por eso se ha traducido por limitación añadida. Las distintas capas <i>kosha</i> o cuerpos añadidos forman el ser humano. En el budismo corresponden con los <i>vijñana</i> porque en su filosofía se destaca el carácter de objetos de conciencia. Por la limitación de la mente <i>vigñana-maya-kosha</i> el alma viviente es un ser consciente. Y por el agregado vital que envuelve ese ser como <i>prana-maya-kosha</i>, es además un ser activo. Y la voluntad que se expresa en la acción tiene la envoltura mental <i>mano-maya-kosha</i>. Estos tres <i>upadhis</i> hacen del ser individual, del ser viviente, una entidad con capacidad cognosciente y poder de voluntad. En conjunto constituyen el cuerpo sutil individual.</p> <p><b>Upanishad. </b>Se les ha designado a los <i>Upanishad</i> como los "Himalayas del alma", ya que constituyen la cumbre de la espiritualidad hindú y universal. Nunca se ha afinado tanto en la percepción y descripción de la vida espiritual. Algunos autores consideran, no sin razón, que el equivalente Cristiano de los Upanishads sería todo el desarrollo de la Patrística. </p> <p>Texto en prosa o en verso unido al <b><i>Veda</i></b>; es la parte más <b><i>metafísica</i></b> de la doctrina hindú, se le designa también con el nombre de <b><i>Vedanta</i></b>.</p> <p>Textos anónimos en verso o en prosa que forman la última parte del <i>Veda</i> y, por consiguiente, pertenecen a la <i><b>Shruti</b>.</i> En este sentido estricto no existen mas que una quincena, de una enorme elevación metafísica, rechazando el culto estereotipado y prescribiendo la meditación sobre <i>brahman.</i> Sin embargo, el termino <i>Upanishad</i> se ha extendido a un número importante de tratados (al menos doscientos), de redacción mucho mas reciente y a menudo de inspiración <i>shivaita</i> o <i>tántrica</i>. Textos sagrados de no mucha extensión, y que son el corazón de la filosofía hindú. </p> <p>Una excelente "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20upanishads%20mascaro.htm"><i>Introducción a los Upanishad</i></a><i>"</i> es la de Juan Mascaró.</p> <p>Los principales Upanishad en <a href="http://www.euskalnet.net/graal">TEXTOS TRADICIONALES</a></p> <p><b>Veda.</b> "Aquello que ha sido visto" por los sabios de antaño (los <i>rishi)</i>.</p> <p><b>Vedânta. </b>Final y finalidad del Veda. Etimológicamente "fin de los <i>Vedas</i>", es uno de los seis <i>darsanas</i> (puntos de vista) de la espiritualidad hindú y se basa en la enseñanza contenida en los <i>Upanisads</i>, que son parte integrante de los mismos <i>Vedas</i>. La expresión "fin de los <i>Vedas</i>" hay que entenderla en el doble significado de "conclusión", siendo los <i>Upanisads </i>la última parte de los textos védicos, y de "finalidad" porque lo que en ellas se enseña es la finalidad última de todo el Conocimiento tradicional. El <i>Vedanta</i> es una Doctrina puramente metafísica y su temática fundamental es la búsqueda de lo Absoluto-<i>Brahma</i>. El <i>Vedanta Advaita</i> es metafísica en el sentido tradicional y como tal se interesa de lo que está "más allá de la física", de la "Naturaleza", de las formas toscas y sutiles, de lo substancial, del mismo Uno <i>principial</i>, del Dios-persona; más allá de toda posible polaridad. Esto implica que el <i>Vedanta Advaita</i> lleva a lo Absoluto sin calificaciones, a lo Constante, a lo Infinito, al No-Ser en cuanto único y puro Ser, a lo Incondicionado, al Uno-sin-segundo. De todo esto se puede deducir que esta doctrina implica la exclusión de toda forma de panteísmo, de inmanentismo y psicologismo</p> <p>Se designa por este término a los <i>Upanishads </i>y a los <i>Brahma Sutra</i>, pero también se designa a una de las seis grandes <i>darshanas </i>(puntos de vista) de la ortodoxia hindú, la más metafísica de todas, que está apoyada especialmente en los textos citados antes. Se distinguen cinco escuelas vedánticas. La más celebre es la <i>Advaita Vedanta</i>, el <i>vedanta</i> no-dualista, representada eminentemente por Gaudapada, <b><i>Shankara</i></b> y el autor, difícilmente identificable, del <i>Yoga Vasistha.</i> </p> <p>Literalmente <i>«fin del Veda»</i>; designa a los <b><i>Upanishads</i></b> que se añadían al final de una recitación solemne del <b><i>Veda</i></b>; designa también el <i>punto de vista</i> (<i>Darsana</i>), más elevado de la doctrina hindú, es decir aquel que alcanza la metafísica pura. <b><i>Shankara</i></b> es su doctor eminente.</p> <p>Siendo el <b><i>Vedanta</i></b> el fin del Veda tanto en su sentido físico como en cuanto a finalidad última existencial, resulta ser el "punto de vista" de más alta pureza, inteligencia y transparencia.</p> <p>Existen dos excelentes estudios sobre la Metafísica Vedanta a cargo de Consuelo Martín y Ernesto Ballesteros en las "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20actas%20encuentro%20de%20indologia.html"><i>Actas del Primer Encuentro Español de Indología</i></a><i>".</i></p> <p>Ver también el documento <a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20el%20vedanta%20y%20la%20tradicion%20occcidental.htm"><i>«El Vedanta y la tradición occidental»</i></a> de Ananda Coomaraswamy.</p> <p>Siendo el <b>Vedanta</b> el fin del Veda tanto en su sentido físico como en cuanto a finalidad última existencial, resulta ser el "punto de vista" de más alta pureza, inteligencia y transparencia.</p> <p>Con todo es necesario aclarar que el <b>Vedanta</b> es un camino destinado a las más altas élites ascéticas brahamánicas y esto es algo que se olvida en lo que actualmente llamaríamos Neo-Vedanta, en el que se pretende hacer accesible esta alta doctrina a todo el mundo sin distinción. Esto con frecuencia no conduce más que al fracaso espiritual al no estar la inmensa mayoría de los occidentales (ni de los orientales) preparados para tales alturas y sobre todo al presentar el Vedanta un acceso diríamos «<i>directo</i>», «<i>sin</i> <i>apoyo</i>», que resulta imposible para la mayoría de las personas en estos tiempos de <i>densificación</i>. Con frecuencia en estos ámbitos lo único que se consigue es que las personas se queden «<i>ni a un lado ni al otro</i>»; por una parte se rechazan las formas, con lo cual se quita la base humana, y por otra no se llega a las alturas de la realización espiritual con un resultado que nos atreveríamos a calificar de nefasto. No olvidemos también que el Vedanta tradicional de la India, además de estar destinado a una élite ascética y espiritual, no rechaza de ninguna manera las formas, y ejemplo de ello lo tenemos en los Himnos que compuso Shankara, en las peregrinaciones que hacía a los lugares santos, en los monasterios que fundó, así como en la instauración del culto a la Shakti (equivalente al culto cristiano a la Virgen María) en sus monasterios.</p> <p>A este respecto se pueden consultar:</p> <p>- un<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20ved-%20documento%20sobre%20Krishnamurti.htm"> documento sobre Krishnamurti </a>de Julius Evola</p> <p>- algunos capítulos de “<b>El Mandril de Madame Blavatsky</b>” en <a href="http://www.euskalnet.net/graal">TEXTOS TRADICIONALES</a></p> <p>- también una "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20ved-%20nota%20sobre%20Krishnamurti.htm">Nota sobre Krishnamurti</a>"</p> <p>- el documento "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20ved-%20neovedantismo.html">NEOVEDANTISMO</a>"</p> <p>- "<a href="http://usuarios.lycos.es/contemplatio/A-%20rama%20la%20desacralizacion%20del%20hinduismo.doc">La Desacralización del Hinduismo para el Consumo Occidental"</a> de <b>R. P. Coomaraswamy.</b></p> <p>Puede ver también la introducción al <a href="http://www.terra.es/personal/javierou/kyst.htm">STAVACINTÂMANI </a>de la página <a href="http://www.terra.es/personal/javierou">KALI YUGA.</a></p> <p><b>Vedas.</b> Santas escrituras, las más antiguas de la India. El Veda original está dividido en cuatro partes: Rig, Yayur, Sama y Atharva. Otro nombre para las escrituras védicas tomadas en su conjunto, comprendiendo los ciento ocho Upanishads, los Puranas, el Mahabarata, del que forma parte el Bhagavad Gita.</p> <p><b>Vijñana</b>. Aunque literalmente es «conocer», se ha traducido en ocasiones por «conocimiento verdadero». Para poner de manifiesto el significado que la tradición vedanta da a este término es necesario entenderlo como conocimiento de la verdad. No es cualquier conocimiento porque es una misma cosa con lo conocido. A lo largo de la obra, el término hace referencia casi siempre al conocimiento del Absoluto que no es una simple información. El conocimiento verdadero del Absoluto es una vivencia y no una simple representación intelectual. El no tener esto en cuenta lleva a muchos equívocos en las traducciones a los idiomas modernos que dificultan la comprensión de la metafísica advaita. En algún contexto hemos traducido <i>vijñana</i> por «toma de conciencia» porque era evidente que lo que evocaba la expresión lingüística era mucho más que el simple conocer. Y no hay diferencia entre el conocimiento verdadero del Ser y la Conciencia pura. La conciencia en sí misma no es representativa, es la realidad en sí. Por eso también es «meditación» y así lo traducimos cuando el término hace referencia al camino práctico para esa toma de conciencia del Absoluto. En las pocas ocasiones que aparece la palabra sánscrita <i>vijñana</i> con su significado usual en nuestro idioma, se ha traducido por «inteligencia» o «conocimiento particular». Tendría entonces el sentido de «conciencia de algo» y no de «conciencia en sí». </p> <p><b>Virtud. </b><i>«Las virtudes, que por una parte ennoblecen a los individuos y por otra parte hacen posible la vida colectiva, resultan fundamentalmente, tanto si se es consciente de ello como si no, de la convicción de un Absoluto transcendente y de la inmortalidad del alma; estas dos convicciones, en la medida en que son sinceras y concretas, producen necesariamente las cualidades morales esenciales del hombre, y si estas convicciones llegan a faltar, desaparecen ipso facto las cualidades, tal vez lentamente, pero de forma inexorable» (F. Schuon, Aproximaciones al Fenómeno Religioso)</i></p> <p><b>Virtud. </b>(Virtus). <i>«La "virtud" en sentido moderno no tiene casi nada que ver con la antigua "virtus". Virtus significaba fuerza de ánimo, coraje, valor, firmeza viril. Se vinculaba a "vir", término que designaba al hombre como verdaderamente tal, no como hombre en sentido genérico y naturalista. La misma palabra en la lengua moderna ha asumido en vez un sentido esencialmente moralista, muchísimas veces asociado a prejuicios sexuales, de modo tal que, refiriéndose a ello, Vilfredo Pareto ha acuñado el término "virtuísmo" para designar la moral puritana y sexófoba de carácter burgués. Hoy en día cuando se dice "persona virtuosa" se piensa en algo muy distinto de lo que podían significar, por ejemplo, expresiones como ésta: "vir virtute praeditus" (= hombre dotado de virtud). Y la diferencia no pocas veces puede transformarse casi en una antítesis. En efecto, un ánimo firme, fiero, intrépido, heroico es lo contrario de lo que significa una persona "virtuosa" en el sentido moralista y conformista moderno. El sentido de "virtus" como fuerza eficiente se ha mantenido sólo en ciertas locuciones particulares modernas: la "virtud" de una planta o de un medicamento, "en virtud" de ésta o aquella cosa.» (Julius Evola, El Arco y la Clava)</i></p> <p> </p> <p><b>YHVH</b>. Tetragrama sagrado del Nombre inefable de Dios. Los judios dicen <i>«Adonai»</i> (mi Señor) cuando leen la Biblia. La vocalización <i>Jehovah</i> es antigua, pero la de las Biblias modernas (<i>Yaweh </i>o <i>Yahvé</i>) no tiene ningún sentido.</p> <p><b>Yoga. </b><i>«La unión efectiva del ser humano con lo Universal. Aplicado a un "darshana" cuya formulación en "sutras" fue atribuido a Patanjali, indica que ese darshana tiene por finalidad la realización de esta unión, comportando los medios para alcanzarla. » (René Guénon, Introducción General.....)</i></p> <p>Etapa suprema de la <b><i>realización metafísica</i></b>. Yoga es la unión con el Absoluto no entificado, y de ninguna manera un simple ejercicio preparatorio, basado en medios corporales y síquicos contingentes, totalmente inútiles para dicha realización si el espíritu está ausente.</p> <p>«<i>De hecho, el yoga no es ni una terapia sicológica ni una terapia corporal, y sus procedimientos no son de ninguna manera ni en ningún grado un tratamiento para enfermos o desequilibrados del tipo que sean; bien lejos de ello se dirigen, por el contrario y exclusivamente, a seres que, para poder realizar el desarrollo espiritual que es su única razón de ser, deben ser ya, por el hecho de sus únicas disposiciones naturales, tan perfectamente equilibrados como sea posible; hay ahí condiciones que, como es fácil de comprender, permanecen estrictamente en la cuestión de las cualificaciones iniciáticas» (René Guénon, El Reino de la Cantidad... cap. XXXIV)</i></p> <p><b>Yugas. </b>Según las doctrinas tradicionales, un ciclo cósmico aplicado al orden humano y llamado <i>Manvantara</i> de acuerdo a la doctrina hindú, se compone de cuatro <b><i>Yugas</i></b> o "Edades". Cada "edad" implica una decadencia progresiva respecto de la precedente, debido a su alejamiento gradual del "estado primordial" o esencial. Las cuatro edades son: <b><i>Krita</i>-<i>Yuga</i></b> o <b><i>Satya</i>-<i>Yuga</i></b>, <b><i>Treta</i>-<i>Yuga</i></b>, <b><i>Dwapara</i>-<i>Yuga</i></b> y finalmente <b><i>Kali</i>-<i>Yuga</i></b>.</p> <p>Según los signos anunciadores del tiempo presente expresados en los libros sagrados hindúes, como así también, aunque en forma menos explícita en otras tradiciones, estamos actualmente atravesando la última etapa del <b><i>Kali</i>-<i>Yuga</i></b> o "Edad Sombría", caracterizada, entre otras cosas, por el alejamiento total del espíritu, la inversión de los valores, la densificación y materialización en todos los ámbitos, la subversión, el desorden, la agitación, la aceleración del tiempo, las falsas espiritualidades, el dominio y el poder de la mediocridad y de los mediocres, el triunfo de la cantidad, el triunfo (aparente y temporal) del mal, etc. características estas que desembocan, según la tradición, en un cataclismo (el Apocalipsis cristiano) después del cual se establece una nueva Edad de Oro. Esta concepción cíclica es la mantenida unánimemente por todas las tradiciones ortodoxas reveladas, incluido el Cristianismo (ver <b><i>ciclos cósmicos</i></b>), y como fácilmente se ve, es totalmente opuesta a las modernas pretensiones <b><i>evolucionistas</i> </b>o de <b><i>progreso indefinido.</i></b></p> <p> </p>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-28777635634805538022009-09-29T17:39:00.000-07:002009-09-29T17:40:12.548-07:00<h3 class="post-title" id="delpost-title">Bankei: La Dualidad, la No-Lucha, el Nonato y la Mente Budha</h3> <div class="post-body"> <p> </p><a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="http://photos1.blogger.com/blogger/6854/1524/1600/Reflexion_serena%202.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer;" src="http://photos1.blogger.com/blogger/6854/1524/200/Reflexion_serena%202.jpg" alt="" border="0" /></a>Para Bankei la mente posee un dinamismo inherente. Es un vibrante espejo del mundo, que refleja en sí mismo todo lo que contempla y registra todo lo que refleja. Y al registrar, también puede evocar lo que ya ha contemplado. Las cambiantes circunstancias, que en sí mismas no son ni buenas ni malas, originan entonces incesantes permutaciones y combinaciones de reflejos, registros y recuerdos que en sí mismos resultan en la aparentemente incesante cadena de pensamientos y sentimientos que aparecen y se desvanecen para reaparecer nuevamente. Esta es, en sí misma, la actividad natural de la mente.<span class="fullpost"><br /><br />Sin embargo, el ser humano que no se atiene al Nonato, es impulsivo y hasta compulsivo, pues sufre del apego y dada la dinámica naturaleza de la mente, el apego viene a ser una condición antinatural y enfermiza, que le esclaviza a sus propias respuestas. Al querer aferrarse a ciertas impresiones pasajeras y evadirse de otras, queda entonces atrapado, fascinado en las redes del engaño que impiden el natural funcionamiento de la mente. Esta queda entones dividida contra sí misma y uno sucumbe ante la mecánica del placer y el dolor creando la dualidad, los pares de opuestos causantes de la ilusión y el sufrimiento.<br /><br />Si uno en cambio dejara pasar todas las impresiones, estas no obstruirían ni perturbarían la conciencia de lo Nonato. De la misma manera que alguien que, concentrado en un discurso, sin embargo registra los sonidos y la actividad de los alrededores sin dejarse perturbar por ellos, aquel que deja pasar las impresiones se mantiene centrado en el Nonato, sin distraerse por el constante flujo. Para Bankei, dejar pasar las impresiones significa liberarse del <span style="font-style: italic;">mi no hiiki</span> y del <span style="font-style: italic;">kiguse</span>, esto es, el egocentrismo, la importancia personal y sus consecuencias, los malos hábitos, que en su conjunto constituyen la ilusión.<br /><br />Este egocentrismo da lugar a un yo ilusorio, fabricado, que no es sino un tipo de reflejo. Su peligro radica en su capacidad de hacer que uno vea todas las cosas desde una perspectiva personal y en justificar esa óptica tan estrecha considerándola como “fundamental”, “razonable” y hasta “necesaria”, cuando en realidad es arbitraria y engañosa.<br /><br />Esta perspectiva egoísta y caprichosa se alimenta y se sostiene de los hábitos negativos que se van adoptando conforme uno crece. Rodeados de seres imperfectos, uno imita las cualidades que se le muestran, hasta que alcanzamos la anómala condición de confundir estos hábitos por nuestra verdadera naturaleza. Con esto, la Nonata Mente Buda es obstaculizada y ensombrecida.<br /><br />Siendo que el egocentrismo y los hábitos no son innatos, la identificación con ellos no es ni natural ni espontánea y por consiguiente se puede superar. Pero esto no es posible a través de la lucha o la represión pues esta es parte del complejo proceso que inicialmente nos atrapa. Más bien será necesario simplemente regresar a lo que realmente es, el Nonato.<br /><br />El estado natural de la mente es solo uno, la Mente Buda. No son dos. Por ello cuando uno trata de detener la ira, el enojo, los pensamientos, la mente queda dividida entre lo que hay y lo que se quisiera que fuera, el pensamiento que surge y el pensamiento que dice que debe detener aquello que surge. Es como si persiguiéramos a alguien que se nos escapa, excepto que nosotros somos el perseguidor y el perseguido a la vez. Por ello la idea de detener el pensamiento es equivocada. Cuando no nos ocupamos más de esos pensamientos, cuando dejamos de hacer algo o no hacer algo al respecto, entonces surge la Mente Buda, el Nonato, la conciencia.<br /><br />Basado en sus enseñanzas, Bankei rehusó imponer reglas, prácticas y rituales específicos que según él, fácilmente se convertían en hábitos y producían dependencia. También consideraba que en la práctica del koan, era en la espontaneidad del encuentro entre maestro y discípulo donde radicaba el Nonato, más que en su contenido. Y de la misma manera rechazó todo intento de formalizar el <span style="font-style: italic;">zazen </span>[<span style="font-style: italic;">za</span> sentarse y <span style="font-style: italic;">zen</span> meditación] como una práctica específica de meditación pues entendía que ésta solamente era posible en la Mente Buda y que solamente cuando se experimentaba la Mente Buda se podía practicar el zazen.<br /><br />Quizás por estas razones sus enseñanzas, más allá de producir una línea particular, fueron absorbidas por otras escuelas y su nombre no dejó una huella personal en la historia japonesa. Para Bankei, el nombre y la fama, el ritual y la formalidad, todos constituían apegos y dependencias que inevitablemente resultarían tarde o temprano en ilusión y sufrimiento. Para él, la única solución residía en la experiencia del Nonato, la Conciencia de Todos los Días.</span> </div> <em></em>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-67061886102348022442009-09-19T05:09:00.000-07:002009-09-19T05:12:58.132-07:00Mi Maestra Rev. Yin Zhi Shakya, OHY<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6CQlgN6Da0VynS8WhqzCNicmybBYKjxLpSa5e6v0tlXJmQm3DtBSguPDtzyJc0SwN43Tzsnrm2gbZV6i8JUuaUw2bn71WEmGiK3ly35bB1TYCFYXdZgnfE8zXZRNHfMRLRYamw33qUP4q/s1600-h/Rev.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 100px; height: 135px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6CQlgN6Da0VynS8WhqzCNicmybBYKjxLpSa5e6v0tlXJmQm3DtBSguPDtzyJc0SwN43Tzsnrm2gbZV6i8JUuaUw2bn71WEmGiK3ly35bB1TYCFYXdZgnfE8zXZRNHfMRLRYamw33qUP4q/s320/Rev.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5383149722744369570" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-55781402800491794902009-09-16T15:09:00.001-07:002009-09-16T15:09:57.313-07:00http://www.acharia.org/artes_visuales_zen/indice.htmupasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-69285018861140523952009-09-16T15:03:00.000-07:002009-09-16T15:04:42.874-07:00Maestro, Hsu Yun<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrhDWme0L5hHXy6pun7kDCzm3Vti372aW-AUWQkivNyQ7XAW7q3SIFpmCxUiBT0VUIaVaesfngpdAlOrh5fAPZ4G4rONmi3EVPucHd4zU_TOV_AgsdNYvMLm0jL2t4zfggZhv2rShWbRsd/s1600-h/hsu+yun.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 193px; height: 320px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrhDWme0L5hHXy6pun7kDCzm3Vti372aW-AUWQkivNyQ7XAW7q3SIFpmCxUiBT0VUIaVaesfngpdAlOrh5fAPZ4G4rONmi3EVPucHd4zU_TOV_AgsdNYvMLm0jL2t4zfggZhv2rShWbRsd/s320/hsu+yun.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5382189475210612546" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-47063282291477485082009-09-16T15:00:00.000-07:002009-09-16T15:01:03.694-07:00<blockquote> <div align="left"> <dt><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><b>Las Enseñanzas de Xu Yun – Nube Vacía </b></span><b><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082294"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">*</span></a> </b></dt></div></blockquote> <blockquote><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><dl><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><b>Recordando al Gran Maestro Chino del Budismo Zen, Xu Yun </b></dt></span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082295"><span style="font-size:130%;"><b>*</b></span></a></dl><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 1 – Introducción </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082296">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 2 - Entrenamiento Chan </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082297">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 3 - Alcanzando la Iluminación </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082298">*</a> <b><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#La"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:85%;">Con los Preceptos</span></a><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:85%;color:#ff0000;"> y </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#El%20sexto%20paso"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:85%;">El Correcto Esfuerzo</span></a></b></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 4 - El Sermón de la Flor del Buda </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082299">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 5 - Estados de Desarrollo </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082300">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 6 – Dificultades </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082301">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 7 - Respiración y postura </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082302">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 8 - Perseverancia e Iniciativa </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082303">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 9 - Transmisión Sin Palabras </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082304">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 10 - Pang el Seglar </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082305">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 11 - El Dao Inmortal </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082306">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 12 - Mo Shan </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082307">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Capítulo 13 - Conclusión </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082308">*</a></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Final de ‘Las Enseñanzas de Xu Yun o Nube Vacía’ </span><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#_Toc24082309">*</a></p> <p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Voto de Lealtad a Uno Mismo y a la Verdad <b><a href="http://www.acharia.org/xuyun/libro_completo.htm#Por"><span style="color:#ff0000;">*</span></a></b></span></p></blockquote><b><u><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:130%;"> <p align="center"> </p> <p align="center"><a name="_Toc24082294">Las Enseñanzas de Xu Yun – Nube Vacía</a></p></span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <p align="center"> </p></span></u></b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><em> </em><p align="center"><em>Como fueron recopiladas de las notas</em> <em>y recuerdos de </em>Jy Din Shakya</p><em> </em><p align="center"><em>y relatadas a</em> la Rev. Ming Zhen Shakya, OHY (llamada anteriormente Chuan Yuan Shakya)</p><em> </em><p align="center"><em>y a</em> Upasaka Richard Cheung</p> <p align="center"> </p></span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span><dl><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span><div align="center"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span><center> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> <dt><b>Traducido al Español</b> </dt></span></center></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span><div align="center"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span><center> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> <dt><b>por Shi Chuan Fa</b> </dt></span></center></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span><div align="center"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span><center> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> <dt><b>Edición española revisada por Yin Zhi Shakya, OHY</b> </dt></span></center></div></dl><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><b> <p><a name="_Toc24082295">Recordando al Gran Maestro Chino del Budismo Zen, Xu Yun</a></p></b> </span><p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El nombre del Maestro, Xu Yun, en español significa "Nube Vacía", una traducción que a menudo confunde a la gente. Todos sabemos lo qué es una nube, pero nos preguntamos qué significado le añade el calificativo "vacía".</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En la literatura Chan ó Zen, el término "vacío" aparece con bastante frecuencia y con sentidos muy diferentes, así que comenzaré por intentar aclarar su significado.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Estar vacío significa estar vacío del ego, no tener ningún pensamiento del ‘yo’. No en el sentido que se actúe como un vegetal o un animal salvaje – cosas vivientes que simplemente procesan agua, comida y luz solar para poder crecer y reproducirse – sino en el sentido de que ‘se deja de juzgar’ las acciones, las personas, los lugares, y el entorno en términos de "yo", de "mí" o de lo "mío". Una persona que está "vacía del yo" rara vez tiene ocasión de emplear estos pronombres.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Permítanme que sea más específico. Todos hemos oído hablar de un pariente, o de un amigo, que dice ser totalmente altruista en su amor hacia otro. Un marido diría, "No guardo nada para mí. Se lo doy todo a mi mujer." Este hombre no está vacío. Se ha limitado a proyectar una parte de su identidad en otra persona.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Una persona que está verdaderamente vacía no posee nada, ni siquiera conciencia del yo o de sí mismo. Sus intereses no dependen de sus propias necesidades y deseos, pues en efecto no toma en cuenta estas consideraciones, sino que se preocupa por los demás. No juzga a la gente por ser simpática o antipática, digna o indigna, útil o inútil, etc. No aprecia ni desprecia a nadie. Comprende simplemente que el Buda Amitaba, el Buda de la Luz Infinita y la Bondad, vive en todos los seres humanos y todo lo invierte solamente en la empresa de ese Yo Búdico.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Alcanzar este vacío nunca resulta fácil. Una vieja historia Chan lo ilustra:</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Una vez un Maestro Chan emprendió la formación de un novicio que tenía grandes dificultades para separarse de las personas de su anterior vida secular. "No puedes servir al Dharma hasta que cortes estos lazos – le dijo el Maestro — ¡Debes destruir estas relaciones posesivas! ¡Mátalas! ¡Míralas como si ya no existieran!"</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">- ¿Pero también debo matar a mis padres? – preguntó el novicio.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">- ¿Quiénes son ellos para ser perdonados? – respondió el Maestro.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">- Y a usted, Maestro -dijo el novicio – ¿también debo matarlo?</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El Maestro sonrió y dijo, "No te preocupes, no queda lo suficiente de mí como para que me pongas las manos encima."</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Así era Xu Yun, no había suficiente de él para que alguien lo agarrase. En 1940 las Fuerzas Aéreas del Imperio Japonés bombardearon el Monasterio de Nan Hua donde estaba meditando; pero no le pudieron poner las manos encima. En 1951, cuando era un anciano de noventa y tres años, batallones de desalmados comunistas le golpearon repetidamente, y aunque le rompieron los huesos y consiguieron matar a sacerdotes más jóvenes y fuertes, tampoco pudieron ponerle las manos encima. No había suficiente de él para que alguien lo cogiese. ¿Cómo puede asesinarse el Yo Búdico? Xu Yun no moriría hasta que estuviese listo para morir, hasta que hubiese terminado las tareas que se había impuesto.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Les hablaré de este hombre extraordinario, esta Nube Vacía cuya presencia influyó tanto en mi vida. Les contaré cosas que recuerdo y haré lo posible por transmitirles sus enseñanzas del Dharma. Quizás si aprenden de él puedan experimentar parte de la alegría que sentí al conocerle.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Estar en presencia de Xu Yun era encontrarse en medio de la mañana de un día soleado, o en una de esas nubes que se estancan en lo alto de la montaña. Una persona puede alargar la mano e intentar atrapar la niebla, pero sin importar cuánto se esfuerce por cogerla, su mano siempre seguirá vacía. A pesar de todo, sin importar lo seco que esté su espíritu, la Nube Vacía lo envolverá con una humedad dadora de vida; sin importar cómo arda su espíritu lleno de ira o desilusión, una tranquilizadora frescura se posará sobre él, como rocío ligero.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Esta es la Nube Vacía de Xu Yun que permanece con nosotros. Ni el tiempo ni el Sol pueden destruirla, puesto que es Sol en sí misma; salvo que además es eterna.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Ahora les contaré algo sobre la historia que ambos compartimos.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Durante la década de 1920, cuando yo aún era un niño, Xu Yun no había llegado todavía al Monasterio de Nan Hua, el monasterio que Hui Neng, el Sexto Patriarca Chan, había fundado cerca del pueblo de Shao Guan, donde yo vivía. Shao Guan está situado aproximadamente a ciento sesenta kilómetros al norte de Guang Zhou (Cantón) en la Provincia de Guang Dong, que está al sur de China.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Desde que se fundó en el año 675 d.C., el Monasterio de Nan Hua ha atravesado ciclos de decadencia y esplendor; pero cuando yo era niño, sin lugar a dudas estaba atravesando una de sus fases de decadencia. Como claramente puedo recordar, se parecía mucho más a un patio de recreo que al lugar sagrado que es hoy en día.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En aquellos días Shao Guan era un soporífero y pequeño pueblo ribereño, un lugar en que los chicos no podían hacer muchas cosas para divertirse. Ir al Monasterio de Nan Hua era nuestro equivalente a una excursión a Disneylandia.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Lo que hacía aún más excitante la visita a este monasterio-patio de recreo es que nadie parecía estar al cargo. Vivían allí cerca de cien monjes y unas pocas monjas, pero la mayoría estaban ocupados en discusiones: monjas contra monjas, monjes contra monjes, monjas contra monjes. Y los edificios de este gran centro religioso eran simplemente el lugar donde acaecían estas disputas. No parecía importar que la madera se estuviese pudriendo, que la cantería se estuviera derrumbando o que el herraje de la vieja pagoda roja y blanca se estuviese oxidando. La decadencia simplemente seguía el ritmo del decaimiento en la disciplina monástica. Budistas devotos, como mis padres, iban de visita y echaban dinero en las cajas de donación; y si los niños revoltosos que llevaban con ellos, como mi hermano mayor y yo, se subían a las viejas estructuras, jugaban al escondite detrás del santuario sagrado, o corrían por los vestíbulos santos, nadie protestaba. Haber impedido que nos divirtiéramos podría haber hecho que disminuyeran las donaciones. Supongo que los monjes se preguntaban si ya que tenían que sufrir con edificios desmoronados, por qué deberían correr el riesgo de agravar sus problemas con escasez económica.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Así que nos lo pasábamos bien siempre que íbamos a Nan Hua. Solíamos cruzar el puente del río Caoxi (Ts'ao Xi) y subir a una de las montañas cercanas en la que había un nicho natural de piedra. Se decía que el Sexto Patriarca había meditado en este nicho. Solíamos sentarnos en él y reír imitando su postura piadosa.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">No es de extrañar que el Sexto Patriarca se le apareciera a Xu Yun en una visión, y le pidiera que fuese al Monasterio de Nan Hua para poner en orden toda la confusión en que se había convertido.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">No me encontré con Xu Yun hasta 1934 cuando yo tenía diecisiete años y él estaba en los sesenta. El se encontraba entonces como en la fotografía que he reproducido al comienzo del texto. Les hablaré de este encuentro. Pero para poder apreciarlo, necesitan conocer un poco más sobre mi historia previa.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Mi apellido es Feng. Originalmente mi familia viene de la Provincia de FuJian, pero mi padre se trasladó a Shao Guan y allí es donde nacimos y crecimos mi hermano mayor y yo. Según los criterios locales mi familia era considerada rica. Mi padre tenía dos negocios: un negocio de materiales de construcción y suministros, y una tienda en la que vendía comida desecada como champiñones, cebolletas y otras variedades de vegetales.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Supongo que mis padres esperaban en un principio que un día mi hermano se encargara de un negocio y yo del otro. Pero los talentos de mi hermano no estaban en las ocupaciones académicas, y pronto se empezaron a preocupar por su capacidad. Cuando yo tenía cuatro años comencé a estudiar con los tutores que habían llamado para educarle. Entonces mi hermano me sacaba dos años. Sin embargo, yo aprendía rápidamente y comencé a "saltar" cursos hasta que le aventajé. Así que al terminar el Sexto Año de la Escuela Primaria, a pesar de ser dos años menor que mi hermano, me gradué con dos de ventaja.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Después entré en la Escuela Secundaria o Intermedia. La escuela a la que asistía se llamaba Li Qun que significa una escuela que "alienta a la gente". Era una escuela de la iglesia Católica Romana y todos los profesores eran sacerdotes y monjas católicos. Estaba considerada como la mejor escuela de la zona. Pero el estudio del Cristianismo era más o menos opcional; y en mi caso decidí no estudiarlo. Todo lo que me interesaba en realidad era jugar a la pelota. Si algo se podía lanzar, patear, botar o golpear, me interesaba. En la Escuela Intermedia esto era lo que más me "animaba" a hacer.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">A pesar de ello atendía suficientemente mis estudios como para ser admitido en una Escuela Superior de tres años. No me sentía muy atraído por la venta de vegetales desecados así que pensé en hacerme profesor.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Y allí estaba yo en 1934, un muchacho engreído de diecisiete años... un listillo, dirán, que como era normal, se fue unas vacaciones al Monasterio de Nan Hua con el resto de chicos y chicas para divertirse un rato. Nunca había oído hablar de Xu Yun y ciertamente no esperaba descubrir que un hombre santo acababa de llegar a Nan Hua. Y allí estaba él...</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Algo me sucedió cuando le miré la cara. De repente bajé las rodillas y apoyé mi frente en el suelo, postrándome. Mis amigos estaban atónitos, yo nunca me había arrodillado ante nadie en mi vida... y allí estaba yo, inexplicablemente, sin que nadie me sugiriera hacerlo, humillando mi cuerpo ante él. Lleno de temor reverencial y de sorpresa, me postré tres veces seguidas ante Xu Yun. El Gran Maestro me sonrió y me preguntó, "¿Quién eres y de dónde vienes?" Yo apenas susurré, "Soy Feng Go Hua, y vengo de Shao Guan." Xu Yun sonrió de nuevo y dijo, "Diviértete aquí en el Templo de Nan Hua." Él estaba rodeado por muchos otros monjes que lo miraban en silencio. Supongo que no se lo explicaban, tampoco yo.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Al irme ya estaba impaciente por volver a Nan Hua... pero no para divertirme... quería ver a Xu Yun de nuevo.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">La segunda vez que le vi me preguntó si quería tomar los Preceptos Budistas, que es como se dice formalmente hacerse budista. Dije, "Sí, claro." Y así recibí los Preceptos de Xu Yun. Él me dio el nombre de Kuan Xiu, que significa " práctica grande y profunda".</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">No más fútbol, baloncesto, ni ping pong. Ahora, durante mis vacaciones de verano, viajaba unos treinta y dos kilómetros hasta el Monasterio de Nan Hua dos veces por semana. Solía coger el tren hasta la Montaña Ma Ba, una formación rocosa prominente, y luego solía caminar seis kilómetros hasta el monasterio. Xu Yun me daba libros de Budismo para que los estudiara; y así es como pasé mis vacaciones. Por primera vez en mi vida, sentí la religión en el corazón. Quería hacerme sacerdote.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Pero mi repentina conversión religiosa causó confusión en mi casa. Las cosas no eran tan simples. En primer lugar, cuando nací, mis padres me llevaron a un famoso astrólogo para que hiciera mi horóscopo natal. Este astrólogo vio claramente en las estrellas que me convertiría en un oficial militar de alto rango y que moriría a la edad de treinta años. Tener un héroe muerto en la familia era un honor al que no renunciarían tan rápidamente. Sin embargo, estaban felices de que me fuera tan bien en la escuela. Esto significaba que los negocios familiares estarían seguros en mis manos, especialmente cuando se estaba haciendo cada vez más evidente el hecho de que los negocios no irían tan bien en las manos de mi hermano. Cuando mis padres se enteraron finalmente de mi deseo de hacerme sacerdote, como budistas que eran, recibieron felizmente la noticia; pero como gentes de negocios, estaban muy inquietos. ¡El hijo equivocado quería hacerse sacerdote!</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Aunque en realidad, antes de sentirme llamado por el sacerdocio, tenía otras intenciones para mi futuro. Nunca le di ningún crédito a las predicciones del astrólogo, pero, estando un poco cansado con el panorama de convertirme en maestro de escuela, decidí que tras finalizar la Escuela Superior, seguiría adelante y entraría en la Escuela Militar de Chiang Kai Shek (Academia Whampao) en Cantón. Chiang era comandante de Whampao en aquellos días.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Debido a mi ambición, mi hermano se vio obligado a prepararse lo mejor que pudo para hacerse cargo de los negocios familiares. Afortunada, o desafortunadamente, nunca tuvo que demostrar su valía en el mundo comercial. Después de la invasión japonesa llegó la revolución comunista y no hubo negocios de los que hacerse cargo.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Pero en 1934, cuando tenía diecisiete años, y cursaba mi primer año en la Escuela Superior, la guerra con Japón aún no había comenzado. Xu Yun, con la previsión del verdadero sabio, desalentó inmediatamente mis ambiciones militares. En realidad, abandoné esta idea el día que le conocí. Quería hacerme sacerdote pero no le comuniqué mi deseo porque pensaba que sonaría vano y frívolo. Me parecía menos presumido decir que quería hacerme general a que quería hacerme sacerdote. Pero más tarde, en una de mis muchas charlas privadas con Xu Yun, le confesé mi esperanza de hacerme sacerdote algún día. Simplemente me dijo que quería que siguiese en la Escuela Superior y terminara mi formación. Después hablaríamos del sacerdocio.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En 1937 me gradué en la Escuela Superior. Ese otoño, en el Festival de Mitad del Otoño a mediados de septiembre, o el Octavo Mes de Luna Llena según el calendario chino, me afeité la cabeza. Me trasladé inmediatamente al Monasterio de Nan Hua como novicio residente, y esperé la Ceremonia de Ordenación que tendría lugar en el plazo de tres meses. Y efectivamente, doscientos monjes más y yo fuimos ordenados, a mediados de diciembre de 1937, en la Ceremonia de Ordenación.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Fue en esta ocasión cuando el Maestro Xu Yun me dio el nombre de Jy Din que significa "comprender y alcanzar la paz". También me dio muchas de sus viejas prendas que me sentía muy privilegiado de poder llevar.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Poco después de hacerme monje, los japoneses invadieron China y comencé a sospechar que Xu Yun había tenido una premonición – que él me había desalentado deliberadamente de entrar en la Escuela Militar, porque temía que si me convertía en oficial del ejercito podría convertirme también en su víctima. Él tenía otro trabajo que encomendarme, y Xu Yun era un hombre para el que la palabra "fracaso" no existía. Él tenía metas; y yo era para él uno de los instrumentos que usaría para lograrlas.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">La vida en el Monasterio de Nan Hua era dura. Los monjes y las monjas producían sus propios vegetales, cocinaban, limpiaban, e incluso cosían sus propias ropas. Dormían sobre planchas de madera que cubrían solamente con una fina esterilla de paja. El dinero se obtenía de donaciones caritativas, y de las rentas recibidas de los agricultores que arrendaban tierras del monasterio.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Cuando Xu Yun llegó a Nan Hua en 1934, sabía que no podía haber felicidad hasta que la disciplina fuera reestablecida. Por lo tanto estableció unas normas y regulaciones estrictas. La primer vez que alguien rompiera una regla, él o ella sería castigado. La segunda vez que alguien rompiera una regla sería expulsado.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Xu Yun distribuyó en departamentos los distintos trabajos y deberes y estableció una jerarquía, un orden ascendente de responsabilidad, para vigilar cada departamento. Todo el mundo tenía que hacer su trabajo, y Xu Yun no toleraba la negligencia. Tenía un fuerte bastón que llevaba con él dondequiera que fuese, y no temía utilizarlo. Milagrosamente, cesaron todas las discusiones y las malas conductas. La ley y el orden trajeron la paz.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Esto, sin embargo, no era suficiente para restablecer la disciplina monástica. Xu Yun también sabía que los edificios del monasterio debían ser reconstruidos. Aunque mi padre no suministró ninguno de los materiales de construcción y otra compañía fue la que recibió el contrato, donó dinero para apoyar el proyecto. Afortunadamente, los edificios dormitorios fueron los primeros en ser reconstruidos y todos en Nan Hua pudieron apreciar la mejoría de las habitaciones.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En 1938, el Maestro Xu Yun fue invitado a acudir a Hong Kong, donde se habla cantonés, para dar una serie de servicios y charlas instructivas. Dado que el maestro hablaba 'hunan', un dialecto del norte, y yo hablaba tanto cantonés como hunan, fue necesario que le acompañara para actuar como intérprete.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Mientras estábamos allí los japoneses atacaron a Shanghai, al norte y a Nanjing, al sur. El número de victimas en Shanghai fue asombroso, y por lo que a Nanjing respecta, los ataques fueron tan terribles que el día del ataque es conocido como la infame Violación de Nanjing, pues muchos civiles inocentes fueron sacrificados deliberadamente.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Como había muy pocas carreteras hasta Nanjing, y todas ellas eran peligrosas, muchos refugiados intentaron escapar de los invasores japoneses tomando rutas fluviales. Naturalmente, y dado que el pueblo de Shao Guan está situado en la confluencia de dos ríos, muchas barcas de refugiados arribaron allí.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Cuando Xu Yun se enteró de los ataques de Shanghai y Nanjing, anticipó esta crisis de refugiados y terminó inmediatamente sus charlas en Hong Kong. Ambos regresamos a Nan Hua y pusimos en marcha un programa de ayuda para los refugiados.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Xu Yun decretó que los monjes de Nan Hua adoptaran la vieja costumbre budista, todavía practicada por las órdenes theravadas, de tomar solo dos comidas al día, desayuno y almuerzo. Ningún alimento de ninguna clase podía ser tomado después del mediodía. La comida que se ahorró se donó a los refugiados y cuando fue necesario a los soldados chinos. Debido a la gran angustia de la gente, Xu Yun celebró muchos servicios religiosos adicionales para los muertos y los heridos. Estos servicios ayudaron a llevar esperanza y consuelo a muchas almas angustiadas.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Pero para Xu Yun una meta era una meta, y ni tan siquiera la invasión japonesa le detendría de restablecer el Monasterio de Nan Hua. Por lo tanto, el programa de reconstrucción continuó.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En 1939 se construyeron las famosas estatuas del Rey Direccional y el templo para su alojamiento. La ceremonia de instalación oficial se celebró en 1940. El esfuerzo empleado en la reconstrucción tenía un efecto saludable en la moral de cada uno. Proporcionaba un sentimiento de propósito y de porvenir.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Ahora les hablaré del bombardeo al monasterio de Nan Hua al que anteriormente hice referencia:</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Después de que los japoneses atacaran Nanjing y Shanghai, los gobernadores de las cuarenta provincias (estados) chinas celebraron una serie de encuentros en el Monasterio de Nan Hua, en un intento por desarrollar una política de defensa coordinada y una estrategia para hacer frente a los invasores japoneses. Se suponía que estas reuniones eran de alto secreto; pero los japoneses, que habían establecido una base aérea en Guang Zhou (la capital de Cantón), rápidamente se enteraron de ellas.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Por supuesto, aunque más tarde todo el mundo intentó culpar del fallo de seguridad a espías dentro del equipo de uno u otro gobernador, el hecho es que, en el camino que los políticos tomaban normalmente, nadie se preocupó en esconder las reuniones. Los gobernadores y sus séquitos llegaban espléndidamente... en limosinas. Había bastante cromo brillando en el aparcamiento de Nan Hua como para llamar la atención de alguien en Marte. Los japoneses de Guang Zhou no tuvieron, desde luego, ningún problema para localizar el emplazamiento de este secreto encuentro político.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Por lo tanto, en un esfuerzo por destruir a tantos líderes civiles de un solo golpe, los japoneses enviaron al norte tres cazabombarderos para atacar el Monasterio de Nan Hua.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Cuando los aviones comenzaron a bombardear y a destrozar a tiros el complejo del monasterio, Xu Yun ordenó inmediatamente a todos que se pusieran a cubierto y guardaran la calma. Envió a los gobernadores al Templo de los Seis Patriarcas y a los monjes al más grande Templo de Ming. El se fue tranquilamente al objetivo más obvio, la Sala de Meditación, para rezar por la seguridad de todos.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En la primera pasada, uno de los dos hombres que estaban encargados de vigilar los coches de los gobernadores, fue asesinado. Había abandonado su puesto y se puso a cubierto en un gran tubo de cloaca que iba a ser utilizado en el proyecto de reconstrucción, y una de las bombas cayó sobre el tubo, matándole. Irónicamente, el otro guarda que permaneció en su puesto, en el visible cuartel de guardia, solamente salió herido.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Otra bomba cayó silbando y se estrelló justo afuera de los muros del monasterio, destruyendo un gran cedro de Joshu y haciendo un agujero en el suelo que aún sigue allí hoy en día, lleno de agua, como un pequeño estanque.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Pero entonces, después de que Xu Yun entrara en la Sala de Meditación y comenzara a rezar, ocurrió un milagro. Dos de los tres bombarderos chocaron entre ellos y cayeron sobre la Montaña Ma Ba. El avión restante regresó inmediatamente a su base de Guang Zhou.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Naturalmente, el accidente aéreo fue acreditado al poder espiritual de Xu Yun. Todos lo chinos que lo conocían no dudaban acerca de esto; pero lo que es más importante, los japoneses por lo visto también comenzaron a creer. Con gobernadores o sin ellos, nunca más se intentó bombardear Nan Hua.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Los japoneses intensificaron la guerra en el interior, y a finales de 1944 consiguieron finalmente tomar la ciudad de Shao Guan. Pero incluso entonces, a pesar de estar tan cerca de Nan Hua, no lo atacaron. Creíamos que temían al poder espiritual de Xu Yun. A pesar de la ocupación, nunca permitieron a sus soldados de ocupación perturbar la santidad del monasterio.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Pero para regresar a mi historia - en 1940, Wei Yin, el hombre que un día sucedería a Xu Yun como abad del monasterio de Nan Hua, se hizo monje. Fue un honor para mí afeitarle la cabeza y darle su nombre de Wei Yin que significa, ‘el Sello del Dharma de la Causa y Efecto’. Su nombre secundario fue Zhi Gua que significa ‘conocer el resultado’. En otras palabras, determina la causa de una acción y su efecto y obtendrás los resultados esperados. Wei Yin permaneció en el Monasterio de Nan Hua para asistir a Xu Yun con las tareas adicionales de ayudar a las víctimas de la guerra. En ese mismo año, sabiendo del mal estado y desorden en el que había caído el una vez gran Monasterio de Yun Men, Xu Yun me envió allí para ayudar a restablecer el orden y supervisar la reconstrucción. Para esta tarea Xu Yun me elevó al rango de Maestro.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Era necesario pasar por delante de muchos soldados japoneses durante mi caminata de dos días hasta el Monasterio de Yu Men. Pero de nuevo, la influencia de Xu Yun fue tan grande que se extendía incluso hasta mí, y ningún soldado osó interferir en mi viaje. Habiendo llegado sin incidentes, tomé residencia en Yun Men.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En Da Xia Shan, el tercer gran monasterio de la zona de Shao Guan, no había problemas con los japoneses. La situación de este remoto monasterio desalentaba la actividad militar, y el Maestro Ben Wen podía mantener una paz y disciplina monástica.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Permanecí en el Monasterio de Yun Men hasta 1944, cuando Xu Yun decidió establecer una Escuela Budista en Nan Hua, con el fin de enseñar el antiguo Código Monástico Vinaya a todos aquellos que se convertirían en monjes y monjas. Ahora podía comprender la meta de Xu Yun y su consejo de que permaneciera en la escuela. Mi grado de estudios me calificaba para supervisar la organización de esta nueva Escuela Vinaya y también para convertirme en uno de sus profesores.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Ya que Xu Yun sentía la necesidad de proporcionar una buena educación a los niños, decidió crear también una escuela primaria en Nan Hua. Quería que esta escuela fuese una institución de primera clase y, en poco tiempo, estudiantes de muchas partes de China vinieron a Nan Hua para ser educados. Naturalmente, los padres ricos donaban dinero por la matrícula de sus hijos, los libros, el material escolar, y también por la habitación y la pensión. Pero Xu Yun creía que todos los niños, ricos o pobres, tenían derecho a la educación y por eso se permitía acceder a los niños pobres a esta escuela de primera, sin costo de ninguna clase. Xu Yun les proporcionaba libros, material escolar, y cualquier alimento o alojamiento que necesitaran. Yo observaba mis responsabilidades en la escuela como sagradas, y puse lo mejor de mí para cumplir mis obligaciones con gran devoción y esmero. Todo el que estaba asociado con la escuela sentía lo mismo que yo, y por todos nuestros incansables esfuerzos, la escuela ganó rápidamente su reputación de excelencia.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Mientras el Maestro Wei Yin y yo residimos en Nan Hua, Xu Yun se fue a vivir al Templo de Yun Men para continuar la supervisión de su reconstrucción.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Entonces la dirección de mi camino en el Dharma dio otro giro.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Muchos chinos se trasladaron a Hawai, especialmente durante los años de guerra. Y aunque había muchos budistas chinos viviendo en Hawai, que por entonces solo era un territorio americano, no había templo budista ni tan siquiera sacerdotes que enseñaran y condujeran servicios. Estos chinos hawaianos mandaban repetidas delegaciones a Hong Kong pidiendo que se enviaran sacerdotes a Hawai para servir a la gente, y también para supervisar la construcción de un templo, pero Xu Yun estaba dedicado a la restauración del monasterio de Yun Men así que decidió enviarme a mí en su lugar.</span></p> <p align="justify"><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En 1949 completé la primera etapa de esta misión cuando llegué a Hong Kong e inicié los necesarios trámites de inmigración. No llegaría a Honolulu hasta 1956, Hawai se convirtió en estado en 1959; y nuestro templo, al que llamé Templo de Hsu Yun (Xu Yun), fue el primer templo budista de Hawai.</span></p> <dl><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>No mucho después de haber llegado a Hong Kong en 1949, terminó la guerra civil china, y los comunistas tomaron el control del gobierno. Escuadrones de desalmados comunistas, suponiendo que las iglesias y templos eran almacenes de oro escondido y otros valores, marcharon contra los indefensos edificios religiosos y pidieron que el clero les devolviera estos inexistentes tesoros. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>En 1951, mientras yo estaba en Hong Kong, un escuadrón de estos crueles e inhumanos, fue al Monasterio de Yun Men y le pidieron a Xu Yun que les entregara el oro y valores del templo. Xu Yun intentó explicar que no había tales valores en el Monasterio de Yun Men. Pero no le quisieron creer y uno por uno, golpearon a los monjes en un esfuerzo por provocar la revelación del escondite del tesoro. De hecho, un monje fue golpeado hasta la muerte; varios monjes desaparecieron y sus cuerpos nunca fueron encontrados. Muchos sufrieron serias lesiones como brazos y costillas rotas. Durante los tres meses que estos desalmados ocuparon el monasterio, interrogaron y golpearon a Xu Yun con frecuencia, y más tarde lo tiraron en un pequeño cuarto oscuro durante días, negándole comida y agua. Fue golpeado muchas veces hasta perder el conocimiento y casi hasta la muerte. Pero a pesar de las numerosas lesiones internas y huesos rotos, este hombre que estaba en los noventa y tres años aguantaba, ejercitaba su enorme fuerza de voluntad y se negaba a abandonar la vida hasta que terminara su misión. Sabía que su presencia viva, aunque solo en un pequeño grado, estaba sirviendo para contener a los atacantes. También sabía que tanto tiempo como siguiera vivo, podía inspirar a sus seguidores; y en estos tiempos difíciles necesitaban toda la inspiración que pudieran obtener. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Resolviendo que su voluntad por sobrevivir debía ser más fuerte que la voluntad de sus atacantes por destruirlo, Xu Yun, aunque frágil físicamente, fue indomable; y se recuperó a pesar de las torturas a las que había sido sometido. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Aunque estos desalmados habían intentado mantener en secreto el trato que le estaban dando al hombre santo, pronto se extendieron noticias de su tortura por todo el mundo, y chinos de todo el globo se quejaron enérgicamente al gobierno de Pekín (Beijing). Era inconcebible que los invasores japoneses hubieran respetado al sacerdocio y a los monasterios, y sin embargo los militares chinos los violaran. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Las autoridades de Pekín mandaron inmediatamente una delegación a Yun Men, pero como Xu Yun temía represalias rehusó cubrir ninguna querella formal. Tan pronto como hubo recuperado su fuerza hizo, sin embargo, un dificultoso viaje hasta Pekín y le pidió personalmente al gobierno que contuviera a esos escuadrones. Insistió en que ordenaran que todas las órdenes religiosas fuesen respetadas, que el clero dejara de ser molestado, y que al pueblo chino se le permitiera practicar libremente la religión. Las autoridades, temiendo tal vez el poder de su entonces reputación legendaria, cedieron; y durante un tiempo, al menos durante los años que le restaban de vida a Xu Yun, la política del gobierno se volvió más tolerante hacia la religión. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El gobierno no podía, sin embargo, tolerar más críticas de ninguna clase de fuentes exteriores, y por eso fueron cortadas todas las líneas de comunicación. En Hong Kong yo intenté desesperadamente obtener noticias acerca del destino de Xu Yun, pero fue imposible saber nada. Escribí numerosas cartas, pero ninguna recibió respuesta. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Sin embargo, como es costumbre, continué enviándole a Xu Yun copias de todos los ensayos y artículos que había escrito sobre Budismo. En días más felices, de acuerdo a la tradición, hubiera recibido sus comentarios. Pero en estos días tristes, ninguno de mis envíos recibiría el agradecimiento. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Entonces, en 1952 escribí una disertación sobre el Sutra del Corazón que fue particularmente bien recibida. El gobierno de Pekín decidió permitir su publicación. Inmediatamente escribí al editor en Pekín expresando mi gran deseo de conocer la respuesta de mi maestro sobre la disertación. Milagrosamente, uno de los empleados de la oficina del editor decidió llevar personalmente la carta y la disertación a Xu Yun, y esperar su respuesta. Xu Yun leyó ambas, y luego le dijo al empleado que aprobaba la disertación y que me enviaba su bendición. Sus palabras me fueron retransmitidas; y esta comunicación indirecta fue la última que tuve con mi querido maestro. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El 13 de octubre de 1959, a la edad de 101 años, el Maestro Xu Yun entró en el Nirvana final. Las noticias de su muerte me entristecieron más allá de lo que puede ser expresado. Públicamente, celebré servicios memoriales especiales y le escribí un epitafio; pero en privado, estaba abrumado por el dolor. Lloré durante días y no pude comer ni dormir. Sabía cuanto le debía. Sabía que en su sabiduría había prevenido la amenaza al Dharma de nuestro Budismo Chino, el Dharma de Hui Neng, Lin Ji y Han Shan. Él quería transplantar este Dharma a los Estados Unidos donde estaría seguro, y me dio el honor de hacerlo. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Incluso, la forma en que murió Xu Yun también me hizo apreciar aún más, el poder de su gran corazón. Entendí claramente que él era capaz de trascender la existencia física y posponer su entrada al Nirvana final hasta que estuviera listo para hacer este último viaje... hasta que hubiera cumplido totalmente su sagrada obligación de utilizar su influencia para proteger a todos los sacerdotes de China. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Otro sacerdote budista y yo, junto con muchos clérigos de muchas religiosas distintas, debemos nuestra vida a la devoción de Xu Yun por el Buda Amitaba, y a su inquebrantable convicción que esta Presencia Gloriosa vive en los corazones de todos los seres humanos. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>¡Shanti. Shanti. Shanti. Amitofo! (Amitaba) </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Enero de 1996 </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Maestro Jy Din Shakya </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Abad del Templo Hsu Yun </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Honolulú, Hawai </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><b> </b></span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><b> <dt><br /></dt></b></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><a name="_Toc24082296">Capítulo 1 – Introducción</a> </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Queridos amigos, déjenme que les cuente una pequeña historia que un hombre sabio me contó. Él dijo: "Una vez me encontraba en un país desconocido para mí, caminando por una calle extraña. Miré alrededor intentando orientarme; y vi dos hombres que estaban de pie cerca de mí. Me acerqué a ellos, y les pregunté, '¿Dónde estoy?' '¿Quiénes sois?' </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El primer hombre me respondió, 'Este es el mundo del Samsara, ¡y en este mundo da la casualidad de que soy el enano más alto!' Y el otro contestó, 'Sí, ¡y yo por casualidad soy el gigante más pequeño!'. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Este encuentro me dejó muy confundido, porque ambos hombres medían exactamente lo mismo." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>He incluido esta pequeña historia, a modo de prólogo en mis notas, porque quiero enfatizar desde el comienzo lo importante que es considerar la percepción de las cosas. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Hui Neng, el Sexto y último Patriarca de nuestro Camino Chan, se encontró una vez con dos monjes que discutían sobre una bandera que ondeaba al viento. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El primer monje dijo, "Es la bandera la que se mueve." Y el otro, "¡No! Es el viento quien la mueve." El Sexto Patriarca les reprendió a los dos. "Bueno señores – les dijo-. Es su mente quien realiza todo el movimiento." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>En el mundo del Samsara, el Hombre es la mezcla de todas las cosas. Todo es relativo. Todo cambia. Solo en el mundo real, el mundo del Nirvana, hay constancia. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>En Chan nuestra tarea es discriminar - no entre lo falso y lo falso, sino entre lo falso y lo real. Las diferencias en la apariencia externa no tienen ninguna importancia. El mundo real está en nuestro interior. Para ser más exactos, dentro de nuestra mente. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Ahora estoy encantado con mi tarea de ayudarles a entrar en el mundo real, el mundo donde no hay enanos ni gigantes ni argumentos sin sentido. En el mundo real solo hay paz, alegría, verdad, y libertad del continuo deseo de ilusiones moletas. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Queridos amigos, cada ser humano posee dos naturalezas – del yo: una aparente y la otra real. La aparente es nuestro pequeño yo, o ego, que siempre es diferente de los demás pequeños 'yoes'; la real es nuestro Gran ‘Yo Búdico’ que es en todas partes el mismo. Nuestro pequeño yo existe en el mundo aparente, el mundo del Samsara. Nuestro Yo Búdico existe en el mundo real, el mundo del Nirvana. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Los dos mundos se encuentran en el mismo lugar. En el Sutra del Corazón leemos, "La forma no es diferente del vacío y el vacío no es diferente de la forma." Todo el mundo se pregunta, "¿Cómo Samsara y Nirvana pueden ser lo mismo? ¿Cómo puede ser la ilusión lo mismo que la realidad? ¿Cómo puedo ser yo y Buda a la vez?" Son buenas preguntas. Todo budista necesita conocer su respuesta. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>La respuesta se encuentra en la forma en que percibimos la realidad. Si percibimos la realidad directamente, la vemos en su pureza Nirvánica. Si la percibimos indirectamente – a través de la conciencia de nuestro ego- vemos su distorsión samsárica. ¿Por qué nuestra visión de la realidad es defectuosa? </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El Samsara es el mundo que nuestro pequeño ‘yo’ piensa que ve y percibe con los sentidos. A veces cometemos errores. Si un hombre está caminando por el bosque, se encuentra con un rollo de cuerda y piensa que la cuerda es una serpiente, huirá rápidamente. Para él esta cuerda era una serpiente y actuó de acuerdo a ello. Cuando llegue a casa probablemente le hablaría a todo el mundo sobre la peligrosa serpiente que casi le muerde en el bosque. Su miedo era legítimo. La razón por la que estaba asustado, no. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El pequeño yo egoísta también percibe erróneamente la realidad siempre que impone una estética arbitraria, o juicios morales sobre algo. Si una mujer ve a otra que viste un sombrero verde y dice, "Veo una mujer que lleva un sombrero verde", no hay problema. Pero si dice, "Veo una mujer que lleva un sombrero verde y feo ", está cometiendo un juicio samsárico. Alguien podría encontrar bello a ese sombrero. Pero en realidad, no es bello ni feo, simplemente es. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Asimismo, cuando una zorra mata a una coneja, esto, para los conejitos que se morirán de hambre porque han matado a su mamá, es un acto muy malo. Pero para los hambrientos cachorros de zorro que comen la coneja que su madre les ha traído, esta misma acción es indiscutiblemente buena. En realidad, la acción no es buena ni mala. Simplemente es. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>La realidad también es malinterpretada ya que tanto el observador como lo que está siendo observado se encuentran en continuo cambio. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>No hay un momento preciso en que un capullo se convierta en flor, o una flor en fruto, o un fruto en semilla, o una semilla en un árbol en ciernes. Todos estos cambios son sutiles y continuos. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>No podemos pisar el mismo río dos veces porque el agua está continuamente en movimiento. Tampoco nosotros somos la misma persona de un minuto para otro. Constantemente adquirimos nueva información y nuevas experiencias, y simultáneamente olvidamos la vieja información y las viejas experiencias. Ayer podíamos recordar lo que cenamos la noche pasada. Mañana, no tendremos el privilegio de recordar ese menú, a no ser, quizás, que fuera un suntuoso banquete... o si siempre comemos lo mismo y podemos decir con seguridad, "Fue arroz y tofú." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>La ilusión de la vida es la opuesta a la ilusión del cine. En el cine una serie de imágenes individuales son pasadas juntas para formar una ilusión de movimiento continuo. En la vida, cortamos un movimiento continuo, aislando y congelando una imagen, y entonces la nombramos y etiquetamos como si fuera una acción u objeto independiente. No siempre etiquetamos el momento en el acto. ¿Qué es una mujer joven? Si un hombre tiene noventa años, muchas mujeres serán mujeres jóvenes. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Bien, ahora podemos tener una idea más clara de porqué nuestro pequeño yo interpreta erróneamente la realidad, pero seguimos preguntándonos por qué tenemos dos 'yoes' en el primer lugar. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>La respuesta es simplemente porque somos seres humanos. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El pequeño yo nos hace conscientes del sentido de identidad continua que nos permite saber a cada uno de nosotros, "Soy hoy lo que fui ayer y lo que seré mañana." Sin él, no podríamos organizar los datos sensoriales que nos asaltan. Sin él, no tendríamos sentido de pertenencia o de estar conectados a otros. No tendríamos padres o familia a la que llamar nuestra, ni esposa ni hijos, ni profesores ni amigos para guiarnos y alentarnos. Nuestro pequeño yo nos da nuestra naturaleza humana. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>A medida que crecemos, descubrimos que el hilo de nuestra alma no es una larga hebra ensartada con cada acción por separada, como por ejemplo, las cuentas de un rosario. No. El hilo se entreteje en sí mismo para formar una red, una matriz interdependiente de nudos. No podemos deshacer un simple nudo sin afectar a los demás. No podemos sacar una simple línea de nuestra historia sin, quizás, alterar su curso entero. Esta red de información y experiencia, de acondicionamiento y asociación, de memoria y malentendidos, se convierte pronto en un laberinto complicado y desconcertante; y nos vemos confundidos sobre el lugar que ocupamos en el esquema de las cosas. Cuando somos jóvenes, nos vemos como el centro del universo, pero cuando nos hacemos mayores, ya no tenemos certeza de nuestra posición o de nuestra identidad. Pensamos, "No soy la persona que era cuando tenía diez años, pero tampoco soy alguien diferente." Pronto nos preguntamos, "¿Quién soy?" Nuestro yo egoísta nos ha conducido a esta confusión. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>La confusión conduce a la calamidad, y entonces la vida, como el Buda apuntó en su Primera Noble Verdad, se hace amarga y dolorosa. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>¿Qué hacemos para disipar esta confusión? Cambiamos nuestra consciencia. Rechazamos el mundo exterior de la complejidad en favor de nuestro mundo interior de la simplicidad. En vez de intentar ganar poder y gloria para nuestro pequeño yo ego egoísta, volvemos nuestra consciencia hacia el interior para descubrir la gloria de nuestro Yo Búdico. En vez de hacernos desdichados queriendo ser un maestro para los demás, encontramos alegría y contento en ser Uno con nuestro Yo Búdico y siendo útiles para los demás. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Queridos amigos, el propósito del entrenamiento Chan es aclarar nuestra visión para así poder adquirir una nueva percepción de nuestras identidades verdaderas. El Chan nos permite trascender nuestra naturaleza humana y realizar nuestra naturaleza búdica. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Hace siglos, nuestra Orden de Meditación Chan fue fundada por dos grandes hombres: el Primer Patriarca, Bodhidharma, que vino a China desde el Oeste; y Hui Neng, el Sexto Patriarca que era chino de nacimiento. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Debido a estos dos hombres, el Chan floreció, expandiéndose a través de China y de muchas tierras distantes. Ahora bien, ¿cuáles fueron las enseñanzas más importantes de Bodhidharma y Hui Neng? "¡Liberen a la mente del egoísmo! ¡Libérenla de los pensamientos sucios!" </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Si no se siguen estas directrices, no puede haber éxito en la práctica del Chan. ¡El Camino Chan está ante ustedes! ¡Síganlo! Les proporcionará paz, alegría, verdad y libertad. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><b> </b></span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><b> <dt><br /></dt></b></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><a name="_Toc24082297">Capítulo 2 - Entrenamiento Chan</a> </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Mucha gente comienza el entrenamiento Chan con el pensamiento, "Bien, ya que todo es Maya o ilusión samsárica, no importa lo qué haga o cómo lo haga. La única cosa importante es alcanzar el Nirvana. Así que como las cosas no son ni buenas ni malas, haré lo que quiera." Importa lo que hacemos. El Chan es una rama de la religión budista y como budistas debemos observar unos preceptos éticos. Samsara o no Samsara, debemos respetar los Preceptos. Y en adición a esto, también debemos seguir unas normas estrictas de disciplina que gobiernan nuestro entrenamiento. Vamos a comenzar con las normas de entrenamiento: </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>A pesar de que hay muchos métodos que pueden seguirse, antes de comenzar cualquiera de ellos, un practicante debe cumplir estos cuatro requerimientos básicos: </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El o ella debe: </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>1. Comprender la Ley de la Causalidad. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>2. Aceptar las normas de disciplina. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>3. Mantener una fe inquebrantable en la existencia del Yo Búdico. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>4. Estar determinado a tener éxito en cualquier método que escoja. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Explicaré cada uno de estos cuatro prerrequisitos: </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Primero, la Ley de la Causalidad explica simplemente que el mal produce mal y el bien produce bien. Un árbol venenoso da un fruto venenoso, mientras que un árbol sano da uno bueno. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Conceptualmente esto parece simple; pero en realidad es bastante complejo. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Los malos actos son una horrible inversión. Garantizan una ganancia en dolor, amargura, ansiedad y remordimiento. No hay ganancia para las acciones que nacen de la codicia, la lujuria, la cólera, el orgullo, la pereza o la envidia. Todas estas motivaciones sirven simplemente a las ambiciones del ego. Los actos o acciones malas nunca pueden desarrollar la realización espiritual. Solo garantizan penuria espiritual. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Por otra parte están los actos buenos, siempre que no sean realizados condicionalmente – como una inversión que dará una futura recompensa – traerán al que los haga paz y realización espiritual. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Un buen acto libre de ego es muy diferente de un buen acto artificial. En apariencia, el efecto puede parecer el mismo; es prestada la ayuda o atención necesarias. Pero la persona que ayuda a otra con la esperanza secreta de recibir algún beneficio futuro, por regla general hace el mal, no el bien. Permítanme que ilustre este punto: </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Hubo una vez en China un príncipe al que le gustaban mucho los pájaros. Siempre que encontraba un pájaro herido, lo alimentaba y lo cuidaba hasta que recobraba la salud; y entonces, cuando el pájaro había recobrado su fuerza, lo dejaba en libertad con mucho regocijo. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Naturalmente, el príncipe se hizo bastante famoso debido a su capacidad de sanador amoroso de los pájaros heridos. Siempre que alguien se encontraba un pájaro herido, en cualquier lugar del reino, rápidamente se le llevaba, y él expresaba su gratitud a la persona considerada que se había ocupado de eso. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Pero entonces, para tratar de conseguir el favor del príncipe, la gente comenzó a atrapar pájaros y a lesionarlos deliberadamente para así poderlos llevar al palacio. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Fueron asesinados tantos pájaros en el curso de la captura y su posterior mutilación, que el reino se convirtió en un infierno para los pájaros. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Cuando el príncipe vio el daño que estaba causando su bondad, decretó que nunca más se ayudara a ningún pájaro herido. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Cuando la gente vio que ya no obtenía beneficio por ayudar a los pájaros, dejaron de dañarlos. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>A veces sucede que nuestras experiencias son como las de este príncipe. A veces, cuando pensamos que estamos haciendo lo más adecuado, nos damos cuenta para nuestro disgusto que en realidad estamos causando el mayor perjuicio. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>¡Realicen un buen acto en silencio y en el anonimato! Olviden el regocijo. Un buen acto debería tener una vida muy corta, y una vez muerto, debería ser rápidamente enterrado. No intenten resucitarlo. Demasiado a menudo intentamos convertir un buen acto en un fantasma que ronda a la gente, que recuerda constantemente nuestro maravilloso servicio - solo en caso de que comenzaran a olvidarlo. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>¿Pero qué sucede cuando somos receptores de la bondad de otra persona? Bueno, entonces debemos permitir que el buen acto alcance la inmortalidad. Dejar vivir el buen acto de otra persona es mucho más difícil que permitir que nuestro buen acto muera. Permítanme también que ilustre esto. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Hubo una vez un tendero, un hombre bondadoso y decente que apreciaba a todos sus clientes. Cuidaba y quería que todos estuviesen sanos y bien alimentados. Mantenía sus precios tan bajos que no ganaba mucho dinero, ni tan siquiera para contratar a alguien que lo ayudara en su pequeña tienda. Trabajaba muy duro en su honesta pobreza, pero era feliz. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Un día vino una clienta y le contó una historia. Su marido se había lesionado y no podría trabajar en varios meses. No tenía dinero para comprar comida ni para él ni para sus niños. "Sin comida – lloró – todos morirán." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El tendero se compadeció de ella y acordó extenderle un crédito. "Cada semana te proporcionaré arroz para siete días y vegetales para cuatro, y esto con seguridad será suficiente para mantener la salud de tu familia; después, cuando tu marido vuelva a trabajar, podrás mantener el mismo menú mientras liquidas tu deuda. Y antes de que te des cuenta, ya estarás comiendo vegetales siete días a la semana." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>La mujer se lo agradeció mucho. Cada semana recibía arroz para siete días y vegetales para cuatro. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Pero cuando su marido volvió a trabajar tuvo que decidir entre liquidar su vieja deuda, mientras continuaba comiendo vegetales cuatro días a la semana, o comprar a otro tendero y comer vegetales siete días a la semana. Escogió lo último y justificó su falta de pago diciendo a la gente que su anterior tendero le había vendido vegetales podridos. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>¿Con cuánta frecuencia, cuando queremos algo con muchas ganas, prometemos que si se cumplen nuestros deseos dedicaremos nuestras vidas a demostrar nuestra gratitud? Pero entonces, una vez recibido lo que tan ardientemente buscábamos, nuestra promesa se debilita y muere casi automáticamente. La enterramos rápidamente, sin ceremonia. Este no es el camino Chan. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Y así, como un granjero que siembra fríjoles de soja no espera cosechar melones, no debemos esperar, cuando cometemos acciones egoístas, inmorales o perjudiciales, cosechar pureza espiritual. Ni podemos esperar escondernos de nuestras fechorías mudándonos del lugar en que las hemos cometido, o asumir que el tiempo borre su recuerdo. Nunca podemos suponer que si ignoramos nuestras fechorías durante el tiempo suficiente, la gente a quien hemos perjudicado morirá oportunamente, llevándose a la tumba nuestra necesidad de expiar el daño que hemos causado. Son nuestros buenos actos los que debemos enterrar... no nuestras víctimas o promesas rotas. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>No podemos pensar que debido a la falta de testigos no tendremos que responder de nuestras fechorías. Muchas viejas historias budistas ilustran este principio. Déjenme que les cuente algunas de mis favoritas: </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Durante la generación que precedió a la vida del Buda Shakyamuni en la tierra, muchos de los miembros de su clan, Shakya, fueron brutalmente masacrados por el malvado Rey Virudhaka, también llamado "Rey Cristal". </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>¿Qué hizo que sucediera esta terrible acción? </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Bueno, también sucedió que cerca de Kapila, la ciudad de los Shakya donde nació el Buda, había un gran estanque, y en la orilla de este estanque una pequeña aldea. Nadie recuerda su nombre. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Un año hubo una gran sequía. Los cultivos se secaron y a los aldeanos no se les ocurrió nada mejor que matar y comer los peces que había en el estanque. Los atraparon a todos menos a uno. Este último pez fue atrapado por un niño que jugaba con la pobre criatura tirándola sobre su cabeza. Esto es lo que estaba haciendo cuando los aldeanos se lo quitaron y lo mataron. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Entonces volvieron las lluvias y la normalidad a todo el reino. La gente se casaba y tenía hijos. Uno de estos niños fue Siddharta, el Buda, que nació en la ciudad de Kapila, cerca de la aldea y del estanque. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Siddharta creció y predicó el Dharma, teniendo muchos seguidores. Entre los seguidores estaba el rey de Shravasti, el Rey Prasenajit. Este rey se casó con una chica del clan de los Shakya y tuvieron un hijo: el príncipe Vurudhaka – el anteriormente nombrado "Rey Cristal". La pareja real decidió criar al príncipe en Kapila, la ciudad del Buda. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Al principio todo iba bien. Virudhaka era un niño sano y poco tiempo después se hizo un chico guapo y fuerte. Pero antes de estar listo para entrar en la escuela ocurrió un hecho trascendental. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Ocurrió que un día, durante una ausencia del Buda de Kapila, el joven príncipe subió a la Honorable Silla del Buda y empezó a jugar allí. El no pretendía estropearla - solo era un juego de niños. Pero ¡Oh! - cuando los miembros del clan del Buda vieron al príncipe jugando en este lugar sagrado se enfadaron mucho, le reprendieron, y le hicieron bajar de la silla, humillándole y maltratándole. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>¿Cómo puede un niño comprender la imbecilidad de los fanáticos? Los adultos no se lo pueden explicar. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Verdaderamente es bastante misterioso. Su cruel trato solo sirvió para envenenar al príncipe y hacer que odiara a todos los miembros del clan del Buda. Fue su trato cruel el que lo inició en su carrera de crueldad y venganza. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Finalmente, se dice que el príncipe mató a su propio padre para poder ascender al trono de Shravasti. Entonces, como Rey Virudhaka, el Rey Cristal, finalmente pudo tomar venganza contra el clan Shakya. Conduciendo a sus propios soldados, comenzó a atacar la ciudad de Kapila. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Cuando los miembros del clan del Buda fueron a contarle la inminente masacre, le encontraron con un terrible dolor de cabeza. Le suplicaron que interviniera y rescatara a la gente de Kapila del brutal ataque del Rey Cristal, pero el Buda, gimiendo de dolor, se negó a ayudar, diciendo, "Un karma establecido no puede ser cambiado". </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Entonces los miembros del clan fueron a Maudgalayayana, uno de los más poderosos discípulos del Buda, y le suplicaron su ayuda. Les escuchó y se compadeció, y movido por la compasión decidió ayudar a los sitiados ciudadanos de Kapila. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Utilizando sus habilidades sobrenaturales, Maudgalyayana alargó su cuenco maravilloso a los amenazados Shakya y permitió a quinientos de ellos que subieran al mismo. Entonces levantó el cuenco en el aire, pensando que los alzaba a la seguridad. Pero cuando lo bajó, los quinientos hombres se habían convertido en un charco de sangre. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El terrible signo alarmó tanto a todos que el Buda decidió revelar la historia de sus antepasados, aquellos aldeanos que habían matado a todos los peces durante la sequía. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>"Este ejército de soldados intrusos que ahora está atacando Kapila eran aquellos peces – explicó-. La gente de Kapila que ahora está siendo masacrada fue la gente que asesinó a aquellos peces. El mismo Rey Cristal, fue ese último gran pez. Y ¿quién pensáis -preguntó el Buda manteniendo un paño frío contra su frente- que era ese chico que tiraba el pez sobre su cabeza?" </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Así que, por matar a los peces, la gente padeció la muerte. Y por herir esa cabeza de pez, el Buda estaba importunado con un tremendo dolor de cabeza. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Y ¿qué paso con Virudhaka, el Rey Cristal? Naturalmente, renació en el infierno. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Con este ejemplo podemos ver que no hay final a la causa y al efecto. Una causa produce un efecto que se convierte en sí mismo en la causa de otro efecto. Acción y reacción. Tributo y retribución. Esta es la Ley de la Causalidad. Más tarde o más temprano nuestros malos actos nos alcanzarán. La única forma de prevenir el efecto es prevenir la causa. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Debemos aprender a perdonar, a dejar pasar el daño y el insulto, a no buscar nunca venganza y ni siquiera albergar ningún rencor. Nunca nos debemos volver fanáticos santurrones y estar orgullosos de nuestras vanas nociones de piedad y deber, y sobre todo, debemos ser siempre benévolos, especialmente con los niños. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Déjenme que les cuente otra historia de causa y efecto. Esta concierne al Maestro Chan Bai Zhang quien en efecto pudo liberar un salvaje espíritu-zorro. ¡Muy pocas personas son capaces de hacer esto! </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Parece ser que una noche, después de que una reunión Chan hubiera terminado y todos sus discípulos se hubieran retirado, el Maestro Bai Zhang se dio cuenta de que un anciano permanecía fuera de la Sala de Meditación. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Bai Zhang se acercó al hombre y le preguntó, "Dígame, señor, ¿a quién o qué está buscando?" </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El anciano respondió, "No, no 'señor'. No soy en absoluto un ser humano. Soy un zorro salvaje que simplemente habita el cuerpo de un hombre." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Bai Zhang naturalmente se quedó sorprendido y curioso. "¿Cómo adquiriste esta condición?", preguntó. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El anciano hombre-zorro explicó, "Hace quinientos años, era el monje prior de este monasterio. Un día, un joven monje se acercó y me preguntó, '¿Cuando un hombre consigue la iluminación sigue sujeto a Ley de la Causalidad?' y atrevidamente le contesté, 'No, está exento de la Ley.' Mi castigo por esta falsa y arrogante respuesta fue que mi espíritu se cambió por el espíritu de un zorro salvaje, y por eso corrí a las montañas. Como hombre-zorro no puedo morir, y mientras persista mi ignorancia debo continuar viviendo en esta desdichada condición. Durante quinientos años he estado paseando por el bosque en busca del conocimiento liberador. Maestro, le suplico que se apiade de mí y me ilumine a la verdad." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El Maestro Bai Zhang le habló amablemente al hombre-zorro. "Hazme la pregunta que el joven monje te hizo, y obtendrás la respuesta correcta." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El hombre-zorro obedeció. "Maestro, deseo preguntarle esto: ¿Cuándo un hombre alcanza la iluminación está sujeto a la Ley de la Causalidad?" </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Bai Zhang respondió, "Sí. Nunca está exento de la Ley. Nunca podrá cerrar sus ojos a las posibilidades de la causa y el efecto. Debe seguir atento a todas sus acciones pasadas y futuras." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>De repente el anciano hombre-zorro obtuvo la iluminación y quedó libre. Se postró ante el maestro y le agradeció profusamente, "¡Al fin – dijo- estoy liberado!" Entonces, cuando se estaba marchando, se volvió y le preguntó a Bai Zhang, "Maestro, ya que soy un monje, ¿podría concederme amablemente los ritos funerarios usuales para un monje? Vivo cerca, en una guarida en la montaña que hay detrás del monasterio, ahora iré allí para morir." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Bai Zhang aceptó, y al día siguiente fue a la montaña y encontró la guarida. Pero en vez de encontrar allí un viejo monje, Bai Zhang solo vio un bulto en el barroso suelo de la guarida. Tanteó el bulto con su bastón y descubrió ¡un zorro muerto! </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Bueno, ¡una promesa es una promesa! El Maestro Bai Zhang condujo los ritos funerarios acostumbrados para un monje sobre el cuerpo del zorro. Todo el mundo pensó que Bai Zhang estaba loco, especialmente cuando condujo una solemne procesión funeral... con un ¡zorro muerto en el féretro! </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>De ese modo pueden ver, queridos amigos, que incluso haber alcanzado la Budeidad no libra a uno de la Ley de la Causalidad. Si incluso el Buda pudo sufrir un dolor de cabeza por haber sido cruel con un pez, qué gran necesidad tenemos de seguir atentos al principio de que un acto nocivo, más tarde o más temprano, nos traerá una retribución nociva. ¡Sean cuidadosos en lo que dicen y hacen! ¡No se arriesguen a convertirse en el espíritu de un zorro! </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Para el segundo requerimiento, la estricta observación de las normas de conducta, les diré sinceramente que no puede haber progreso espiritual sin moralidad y el cumplimiento del deber religioso. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>La disciplina es el fundamento sobre el que descansa la iluminación. La disciplina regula nuestro comportamiento y lo hace estable. La constancia se hace firmeza y esta es la que produce la sabiduría. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El sutra Surangana nos enseña claramente que un simple éxito en meditación no borrará nuestras impurezas. Incluso si podemos demostrar una gran habilidad en meditación, permanecer sin adherirnos a la disciplina nos hará caer fácilmente en los dominios de Mara de demonios y herejes. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Un hombre o una mujer que es diligente en la observación de la disciplina moral y el deber religioso, es protegido y alentado por dragones celestes y ángeles, así como evitado y temido por los demonios del infierno y los herejes de todas partes. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Sucedió una vez que en el estado de Kashmir, un horrible dragón terrestre vivía en una cueva cercana a un monasterio de quinientos arhats theravadinos. Este dragón aterrorizaba a la región y hacía miserable la vida de mucha gente. Todos los días los arhats se reunían, y juntos intentaban utilizar el poder de su meditación colectiva para ahuyentar al dragón. Pero siempre fracasaban. El dragón simplemente no se marchaba. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Entonces, un día sucedió que un monje Chan mahayano se detuvo en el monasterio. Los arhats le informaron al monje sobre el terrible dragón y le pidieron que se uniera a la meditación, para añadir el poder de su meditación a la de ellos. "¡Debemos forzar a esta bestia para que se vaya!" se quejaron. El monje Chan simplemente les sonrió y fue directamente a la cueva del horrible dragón. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Quedándose en la entrada de la cueva, el monje llamó al dragón, "Sabio y virtuoso señor, ¿sería tan amable de abandonar su guarida y buscar refugio en un lugar más lejano?" </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>"Bueno – dijo el dragón – ya que me lo ha pedido tan cortésmente, accederé a su petición y me marcharé en el acto." El dragón, como pueden ver, tenía un fino sentido de la etiqueta. ¡Y de este modo se fue! </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Desde su monasterio, los arhats observaban todo esto con absoluto asombro. ¡Sin lugar a dudas este monje poseía milagrosos poderes de samadhi! </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Tan pronto como el monje regresó, los arhats se reunieron a su alrededor y le suplicaron que les hablara de esos maravillosos poderes. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>"No he utilizado ninguna meditación o samadhi especial – dijo el monje – Simplemente mantuve las normas de disciplina y estas normas estipulan que debo observar los requerimientos menores de cortesía tan cuidadosamente como los requerimientos mayores de moralidad." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>De este modo podemos ver que el poder de la meditación-samadhi colectiva de quinientos arhats a veces no iguala a la de un simple monje que se adhiere a las reglas de disciplina. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Si preguntan, "¿Por qué sería necesario mantener una estricta atención a la disciplina si la mente ha alcanzado un estado que no es crítico? ¿Por qué debería un hombre honesto y honrado continuar la práctica del Chan?" </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Yo le respondería a tal hombre, "¿Está su mente tan segura de que si la hermosa diosa de la Luna bajara hasta usted, y le abrazara con su cuerpo desnudo, seguiría su corazón palpitando tranquilamente?" </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Y ustedes... ¿Si alguien sin tener motivo les insultara y les golpeara, no sentirían cólera y resentimiento? ¿Tienen la certeza de que siempre resistirían a compararse con otros, o que siempre se abstendrían de ser críticos? ¿Pueden estar seguros de que siempre distinguirían lo correcto de lo erróneo? </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Ahora, si tienen la certeza absoluta de que nunca se rendirían a la tentación, de que nunca se equivocarían en nada, entonces, ¡Abran su boca y hablen alto y claro! De otra manera, no digan mentiras. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>En cuanto al tercer requerimiento de tener una firme creencia en nuestro Yo Búdico, por favor sepan que la fe es la madre, la fuente nutritiva de nuestra determinación a someterse, a entrenar y a desarrollar nuestros deberes religiosos. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Si buscamos la liberación de los dolores de este mundo, debemos tener una fe firme en la promesa del Buda de que cada ser viviente sobre la tierra posee la sabiduría Tathagata y, por lo tanto, tiene el potencial de alcanzar la Budeidad. ¿Qué nos impide realizar esta sabiduría y alcanzar esta Budeidad? La respuesta es simplemente que no tenemos fe en su promesa. Preferimos seguir en la ignorancia en vez de en la verdad, aceptar lo falso como genuino, y dedicar nuestras vidas a satisfacer nuestros tontos deseos. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>La ignorancia de la verdad es una enfermedad. Ahora, como el Buda enseñó, el Dharma es como un hospital que tiene muchas puertas. Podemos abrir una de ellas y entrar en un lugar de curación. Pero debemos tener fe en nuestros médicos y en la eficacia del tratamiento. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Siempre que quiso ilustrar los problemas sobre la duda y falta de fe, el Buda relataba la parábola del médico. Preguntaba, "Suponte que te han herido con una flecha envenenada y un amigo trae un médico para ayudarte. ¿Le dirías a tu amigo, '¡No! ¡No! ¡No! ¡No voy a dejar que este compañero me toque hasta que encuentre al que me disparó! Quiero conocer el nombre, la dirección y demás datos del delincuente. Esto es importante, ¿no? Y quiero saber más sobre esta flecha. ¿Es la pica de piedra o de hierro, de hueso o de asta? ¿Y qué hay del palo de madera? ¿Es de roble, de olmo o de pino? ¿Qué clase de fibra ha utilizado para unir la pica y el palo? ¿Es la fibra de un buey, de un mono, o de un ciervo? ¿Y qué clase de plumas hay en la fibra? ¿Son de una garza o de un halcón? ¿Y qué hay del veneno que ha sido utilizado? Quiero saber de qué clase es. Y por cierto, ¿quién es este compañero? ¿Estás seguro de que es un doctor cualificado? Después de todo, no quiero que me trate un medicucho. Creo que tengo derecho a saber estas cosas, ¿tú no? Así que por favor, responde a mis preguntas o no dejaré que el hombre me toque.' Bueno - dijo el Buda - antes de que para tu satisfacción sean contestadas las preguntas, estarías muerto." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Así que, queridos amigos, cuando se encuentren sufriendo los males del mundo, confíen en El Gran Médico. Ha curado a millones. ¿Qué creyente ha fallecido nunca a su cuidado? ¿Qué creyente no ha recuperado la vida eterna y la felicidad siguiendo su régimen? Ninguno. Todos se han beneficiado. Y así lo harán ustedes si tienen fe en sus métodos. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>La fe es un tipo de destreza que pueden desarrollar. Si, por ejemplo, desean hacer tofú, comienzan hirviendo y moliendo los fríjoles de soja y después le añaden una solución de polvo de yeso o zumo de limón a los fríjoles hervidos. Saben que pueden quedarse ahí, si lo desean, y ver formarse el tofú. Tienen fe en su método porque siempre funciona. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>De esta manera obtienen un sentimiento de seguridad. Por supuesto, la primera vez que han hecho tofú, asumiendo que no estaban familiarizados con su producción, podían haber tenido falta de fe en el método. Podrían haber dudado que el yeso o el agua del limón hiciera que los fríjoles hervidos se transformaran en tofú. Pero una vez que han tenido éxito y ven con sus propios ojos que la receta era correcta, y que el procedimiento funciona, aceptan sin reversa el método prescrito. Se estableció su fe en el método. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Por lo tanto, todos debemos tener fe en que poseemos la Naturaleza búdica y que podemos encontrar esta Naturaleza búdica si seguimos diligentemente un camino adecuado del Dharma. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Si dudásemos, recuerden las palabras del Maestro Yong Jia recogidas en su Canción de la Iluminación: </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>"En el Mundo Real del Tathagata no existen egos, ni reglas, ni infiernos. No se puede encontrar allí ningún mal samsárico. Si miento, podéis sacarme la lengua fuera, y llenar mi boca de arena, y dejarla así por toda la eternidad." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Nadie sacó la lengua del Maestro Yong Jia. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>En cuanto al cuarto prerrequisito, estar anclados en nuestra determinación por tener éxito en cualquier camino que escojamos, déjenme por favor que les advierta de lo estúpido de ir saltando de un camino a otro. Piensen en el Dharma como en una montaña que hay que escalar. Hay muchos caminos que conducen a la cumbre. ¡Escojan uno y sigan en él! ¡Les conducirá allí! Pero nunca llegarán a la cima si corren alrededor de la montaña probando un camino y luego rechazándolo en favor de otro que parece más fácil. Rodearán la montaña muchas veces, pero nunca la subirán. Permanezcan en el método que han escogido. Tengan una fe absoluta en él. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>En Chan siempre contamos historias sobre diablos comprados. Una en particular es muy adecuada aquí: </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Un día un hombre estaba paseando por el mercado cuando se acercó a un puesto que decía, "Se vende: Demonios de Primera Clase." Por supuesto, el hombre estaba intrigado. ¿Lo estarían ustedes? Yo sí. "Déjeme ver uno de esos demonios -le dijo al comerciante-". </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El demonio era una pequeña y extraña criatura... bastante parecida a un mono. "Es bastante inteligente -dijo el comerciante-. Y todo lo que tiene que hacer es decirle cada mañana lo que quiere que haga ese día, y lo hará." "¿Cualquier cosa?" preguntó el hombre. "Sí -dijo el comerciante-, cualquier cosa. Todos sus quehaceres domésticos estarán terminados cuando llegue a casa después del trabajo." El hombre se encontraba soltero así que el demonio le pareció una muy buena inversión. "Me lo quedo" dijo. Y pagó al comerciante. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>"Una pequeña cosa -dijo el comerciante (siempre hay una pequeña cosa, ¿no?)- debe ser fiel en decirle lo que debe hacer cada día. ¡Nunca se olvide! Dele las instrucciones cada mañana y todo irá bien. ¡Recuerde mantener esta rutina!" </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>El hombre aceptó y llevó su diablo a casa. Cada mañana le decía que fregara los platos, que hiciera la colada, que limpiara la casa y que preparara la cena; y cuando volvía a casa, todo estaba hecho de la manera más maravillosa. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Pero entonces llegó el cumpleaños del hombre y sus compañeros de trabajo decidieron darle una fiesta. Bebió mucho y se quedo a pasar la noche en la ciudad, en casa de un amigo, y a la mañana siguiente fue directamente al trabajo. No volvió a casa para decirle a su diablo lo que tenía que hacer. Y cuando regresó aquella noche descubrió que el diablo había quemado la casa y estaba bailando sobre las ruinas humeantes. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>¿Y no es esto lo que sucede siempre? Cuando comenzamos un entrenamiento juramos con nuestra sangre que nos mantendremos fieles a él. Pero después de dejarlo y descuidarlo por primera vez, le conducimos al fracaso. Es como si nunca lo hubiéramos hecho. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Así que, sin importar que hayan escogido el camino del Mantra, o del Yantra, o de la Cuenta de la Respiración, o de un Hua T’ou, o de repetir el nombre del Buda, ¡sigan con su método! Si no funciona hoy, prueben mañana. Díganse a ustedes mismos que están tan decididos que si necesitan continuar su práctica durante la próxima vida, lo harán a fin de tener éxito. El viejo Maestro Wei Shan solía decir, "Permaneced en la práctica que hayáis escogido. Tal vez varias reencarnaciones os hagan falta para alcanzar la Budeidad." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><br /></dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Sé que es fácil desalentarnos cuando pensamos que no estamos haciendo progresos. Lo intentamos una y otra vez pero cuando no viene la iluminación queremos abandonar la lucha. La perseverancia es en sí misma un logro. </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Sean constantes y pacientes. No están solos en su lucha. De acuerdo a un viejo proverbio, "Nos entrenamos durante aburridos eones, para alcanzar la iluminación que ocurre en un instante." </dt></span></div><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><b> <div align="justify"> <dt><br /></dt></div></b> </span><div align="justify"> <span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt><a name="_Toc24082298">Capítulo 3 - Alcanzando la Iluminación</a> </dt></span></div><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:85%;color:#ff0000;"><b>(Conteniendo los Preceptos)</b></span></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><span style="font-size:+1;">E</span>l Chan tuvo dos famosos maestros llamados Ha Shan: un ermitaño del siglo 9 cuyo nombre significa Montaña Fría y un profesor del siglo 16 cuyo nombre significa Montaña Tonta. Montaña Fría es el más grande poeta de Budismo Chan. Montaña Tonta también fue muy bueno. Es probablemente el segundo mejor poeta Chan. Montaña Fría apelaba a la naturaleza para que le condujera a la paz y al entendimiento. Encontrando belleza en el mundo natural encontraba belleza en sí mismo. Así es como actúan los ermitaños. Miran; reflexionan; convierten el aislamiento en soledad. Montaña Tonta se trascendía a sí mismo trabajando para los demás. Se esforzaba en ayudar a la gente corriente a alcanzar la iluminación. Eso es un poco más duro que sobrevivir congelado y hambriento. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Ha Shan, Montaña Fría, dijo: </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¡Arriba en la cima de la montaña / Infinidad en todas direcciones! La luna solitaria mira hacia abajo / Desde su desván de medianoche / Admira su reflejo en el estanque helado. Tiritando, le doy una serenata. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">No hay Chan en el verso. Abunda en la melodía. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Ha Shan, Montaña Tonta, intentó poner en palabras que todo el mundo entendiera lo que no puede ser dicho: </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Poned un pez sobre la tierra y recordará el océano hasta su muerte. Poned un pájaro en una jaula, y no olvidará el cielo. Cada uno siente nostalgia de su verdadero hogar, el lugar en que su naturaleza ha decretado que deberían estar. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El hombre nace en el estado de inocencia. Su naturaleza original es amor, gracia y pureza. A pesar de todo emigra sin darle importancia, sin siquiera un pensamiento de su antiguo hogar. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿No es esto más triste que los peces y los pájaros? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">A todos nos gustaría reflejar la Luna de la Iluminación. A todos nos gustaría llegar al hogar de la Inocencia. ¿Qué hacemos para conseguirlo? Seguimos el Dharma. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El Buda vio lo ignorante de la vida no iluminada como una condición enferma. Sus Cuatro Nobles Verdades tienen una connotación médica: </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Uno, la vida en el Samsara es amarga y dolorosa. Dos, el deseo es la causa de la amargura y del dolor. Tres, hay una cura para esta enfermedad. Cuatro, la cura es seguir el Óctuplo Camino. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Primero, necesitamos reconocer que estamos enfermos. Segundo, necesitamos un diagnóstico. Tercero, necesitamos tener confianza en que lo que marcha mal responderá al tratamiento. Cuarto, necesitamos un régimen terapéutico. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El Samsara es el mundo visto a través del ego. Es un mundo accidentado y enfermo debido al incesante deseo del ego. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Intentar satisfacer las demandas del ego es como intentar nombrar el número más alto. No importa lo grande que sea el número en que pensemos, siempre podremos sumarle uno y obtener un número más grande todavía. No hay forma de llegar al último. Queridos amigos, ¿no es verdad que sin importar el dinero que una persona tenga, siempre piensa que necesita un poco más, que sin importar lo cómoda que sea la casa de una persona, siempre quiere un lugar que sea un poco más palaciego, que sin importar cuántos admiradores tenga, necesita siempre escuchar unos pocos aplausos más? Los esfuerzos constantes dan lugar a una lucha constante. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Y bien, ¿qué tenemos que hacer? Primero debemos comprender que los problemas que el ego crea no pueden solucionarse en el mundo de ilusiones siempre cambiantes del Samsara. ¿Por qué? Porque el ego es en sí mismo cambiante, un ser ficticio que actúa y reacciona en respuesta a las fluctuantes condiciones de la vida - condiciones que nunca pueden ser lo bastante comprendidas. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Es como intentar jugar al fútbol cuando la longitud del campo está en constante cambio; y en vez de un balón en juego, hay veinte; y los jugadores están o bien hablando y dejando de lado el juego o bien durmiendo sobre el césped. Nadie está realmente seguro del juego que se está jugando y todos juegan con reglas diferentes. Entonces, nadie que esperase ser tanto jugador como árbitro podría encontrar placer en semejante juego. Encontraría su vida sobre el campo como un ejercicio sin fin de miedo, confusión, frustración y agotamiento. El Óctuplo Camino guía, delimita, y establece unas normas que son claras. Todo el mundo puede seguirlas. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El primer paso es Correcto Entendimiento. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El Entendimiento requiere tanto el estudio como la consulta con un Maestro. La información que se obtiene solamente a través de la lectura nunca es suficiente. ¿Es el libro preciso? Si lo es, ¿realmente comprendemos lo que leemos? No nos podemos evaluar a nosotros mismos. Piensen en lo que sucedería si los estudiantes idearan sus propios exámenes y también les pusieran la nota. ¡Todo el mundo tendría un sobresaliente! ¿Pero cuántos conocerían realmente la materia? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Muchos estudiantes de Chan leen un libro y entonces, pensando en poner a prueba su comprensión, abordan a sus amigos con argumentos pretenciosos o les agasajan con declaraciones arrogantes. Los profesores dicen de estas discusiones, "En el país de los ciegos el tuerto es el rey." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Un buen profesor es indispensable. Un buen profesor se ocupa de nosotros y determina si comprendemos lo que hemos estudiado. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Si no estamos seguros de un pasaje del libro, no podemos preguntarle al libro. Si no estamos de acuerdo con ciertas opiniones de un profesor, no podemos pasar por alto su enseñanza de la forma en que podemos pasar por alto los párrafos fastidiosos. A menudo es necesario consultar con un buen profesor. No hay substituto para los regulares encuentros cara a cara. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Había una vez un marinero que, estando de permiso, se encontró con la chica de sus sueños. Cayó locamente enamorado de ella. Desdichadamente tenía que regresar a su barco para finalizar los dos años del alistamiento. Así que pensó, "No dejaré que me olvide. Le escribiré todos los días. Aunque mi escritura no sirva para otra cosa, me querrá por mi fidelidad." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Todos los días, dondequiera que estuviese, le escribía; y cuando regresó dos años después, se enteró que aproximadamente a las doscientas cartas, ¡se casó con el cartero! Queridos amigos, no sean como este pobre marinero que confiaba en las palabras escritas para lograr un entendimiento. Encuentren un maestro que se reúna regularmente con ustedes. Ábranle su corazón. Cuanto mejor les conozca, mejor podrá asesorarles e instruirles. El segundo paso es Correcto Pensamiento. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El Correcto Pensamiento requiere que se den cuenta de sus motivaciones. Debemos preguntarnos siempre por qué queremos tener algo o por qué queremos hacer algo, y debemos ser implacables en nuestra pesquisa. Si un amigo quiere comprar algo que no se puede permitir, o hacer algo que sería malo para él, deberíamos darle un buen consejo, advirtiéndole, ayudándole a ver las posibles consecuencias de sus estúpidos deseos. ¿No podemos ser este tipo de amigo con nosotros mismos? ¿No podemos aplicar el sentido común a nuestros propios deseos? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Una investigación cuidadosa iluminará nuestra situación: Al Señor de la Guerra T'ien Chi y al Rey de Ch'i les divertían las carreras de caballos. Regularmente se reunían para ir a montar sus caballos y hacer carreras. Ahora bien, cada uno tenía tres clases de caballos. La tercera clase era el caballo de tiro. Estos son los caballos que tiraban de los carros. Son grandes y fuertes, pero muy lentos. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">La segunda clase era el caballo de caballería, estos son los caballos que montan los lanceros, los arqueros y los espadachines. Estos caballos son fuertes y razonablemente rápidos; pero son viejos porque necesitan años de entrenamiento. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">La primera clase era el joven pura sangre que montaban los nobles y los altos oficiales. Este tipo de caballo era ligero y muy rápido. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Siempre que el Rey y el Señor de la guerra mantenían una carrera, primero corrían con sus caballos de tercera clase, después con los de segunda, y por último con sus caballos de pura sangre de primera clase. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Ahora bien, el rey que era rico tenía caballos mucho mejores que los del señor de la guerra. Así que naturalmente ganaba todas las carreras. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En su frustración, el señor de la guerra T'ien Chi apeló a Sung Ping, un sabio descendiente de Sun Tzu - Sun Tzu escribió el famoso libro "Arte de la guerra". T'ien Chi le preguntó a Sung Ping, "Aconséjeme por favor. ¿Cómo puedo ganarle al rey?" </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El sabio pensó durante un momento. Y entonces dijo, "Señor, le sugiero que cuando el rey saque a competir sus caballos de tercera clase, saque usted los de segunda clase a correr contra ellos. Cuando el rey saque sus caballos de segunda clase, saque usted sus caballos de primera clase; y cuando el rey saque sus caballos de primera clase, saque usted los de tercera clase. Ganará dos de las tres carreras." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">La respuesta fue simple, pero ¿por qué no pudo el señor de la guerra figurársela por el mismo? Porque su ego le tenía demasiado involucrado emocionalmente en la carrera. No se distanciaba de la situación y no la miraba objetivamente. No aplicaba el Correcto Pensamiento. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El tercer paso es Correcto Habla. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Con cuánta frecuencia ponemos las palabras al servicio del ego? Para sacar algún provecho contamos chismes, o exageramos, o nos olvidamos de contar la historia completa, o insinuamos la posible culpabilidad de otros mientras afirmamos nuestra propia inocencia incuestionable. A veces, solo para ser el centro de atención, muchos de nosotros contamos sórdidas historias o chistes verdes. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Pensamos que las palabras no son acciones, que tienen poco poder y una vida corta, que de algún modo las palabras se evaporan con el aliento de quien las pronuncia. Pero las palabras tienen poder y pueden vivir para siempre; y, además, pueden curar tanto como herir. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Solo el Hablar Correcto nos desalienta de proferir mentiras, insultos, acusaciones, o de fanfarronear sobre nuestros propios logros, y también nos alienta a decir palabras de consuelo, o proferir palabras de perdón, expresar agradecimiento y reconocimiento para los logros de los demás. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Nunca infravaloren el poder de las palabras. Déjenme que les cuente una vieja historia que ilustra su poder: </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Era un precioso día de primavera y mucha gente había venido al parque para ver las plantas, la hierba verde, los árboles en flor. Entre la gente que vino había dos mendigos ciegos. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El primer mendigo tenía un cartel que decía, "Soy ciego." La mayoría de la gente pasaba por delante de él y seguía admirando la vista. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El segundo mendigo lo hizo mucho mejor. Casi todos los que pasaban delante de él echaban una moneda en su taza. Algunos, que habían pasado por delante de él sin echarle nada, actualmente regresaron para darle una moneda. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Su cartel decía, "Es mayo, ¡y yo estoy ciego!" </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Queridos amigos, cuando estemos decidiendo entre hablar o no hablar, ¡piensen en el ciego que vio la diferencia que puede provocar una frase! </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El cuarto paso es Correcta Acción. </span> </p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:85%;color:#ff0000;"><b><a name="La">La</a> Correcta Acción contiene los Preceptos:</b></span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><span style="color:#ff0000;"><b>1</b></span>. El voto budista de no ser violento. Esto no significa que no puedan defender su vida o la de aquellas personas que estén a su cuidado, sino que no pueden comenzar acciones hostiles contra otros. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Y qué diríamos si es en contra de nosotros mismos? Nosotros también somos una persona contra la que no se puede cometer acciones hostiles. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">La paz no es simplemente la ausencia de la guerra. La ansiedad no es un estado agresivo, pero tampoco es pacífico. Alguien que está en coma no está en guerra, pero tampoco en paz. La paz es un estado que es alcanzado y sostenido deliberadamente. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">No es suficiente con limitarse a no ser violentos; debemos actuar para fomentar la armonía, el bienestar, y la buena salud. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Fumar, por ejemplo, es perjudicial no solo para la salud del fumador sino para la salud de todos los que le rodean. En ambos casos, por tanto, el fumar está prohibido por el precepto contra la violencia. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Cuando sea posible, un budista debería abstenerse de comer carne. Digo 'cuando sea posible' porque esta norma no es absoluta. Mucha gente, por ejemplo, vive en las regiones árticas donde no tienen elección y deben comer pescado y otras criaturas marinas. No pueden cultivar jardines en la tundra; y no podemos negar el Dharma a los seres humanos porque su entorno no sea adecuado a las dietas vegetarianas. Pero donde los vegetales son abundantes, no hay razón para comer carne. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En el lado positivo, una dieta vegetariana estimula una buena salud y también por esta razón debe ser seguida. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El ejercicio, particularmente el Tai Ji Quan ó Qi Gong, libera agresividad e ira y también tiene efectos saludables sobre el cuerpo. El Yoga también es muy beneficioso. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><span style="color:#ff0000;"><b>2</b></span>. El voto budista de ser veraz, no solo en la vida social, sino también en la vida de negocios. Todas las formas de fraude y embustes están incluidas en este Precepto. Siempre que sacrificamos la verdad para conseguir algún supuesto beneficio, entramos en un mundo serpentino y complicado:</span></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Había en Tokio dos comerciantes que, tras años de una competitividad llena de engaños y trampas, desconfiaban por completo el uno del otro. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Un día se encontraron en una estación de tren. El primer comerciante preguntó, "¿Adónde vas?" El segundo comerciante pensó durante un momento y respondió, "A Kobe." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El primer comerciante gritó, "¡Mientes! Me has dicho que vas a Kobe porque querías que pensara que ibas a Osaka; pero he hecho averiguaciones y ¡sé que vas a Kobe!" Queridos amigos, este es el final del más pequeño engaño. Nuestra reputación es como la etiqueta de un paquete. Una vez que se nos conoce como mentirosos y tramposos, enviamos nuestras intenciones, sin importar lo inocentes que sean, al lugar de la duda y la desconfianza. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><b><span style="color:#ff0000;">3</span></b>. El voto budista de no apropiarse de la propiedad ajena. Este es el Precepto contra el robo. Hay quienes piensan que este Precepto implica solo a rateros y carteristas. Puesto que ellos no "rompen las puertas para entrar" o arrancan la cartera de un tirón, piensan que no necesitan preocuparse de este Precepto. Y por esta razón, no les remuerde la conciencia por actos de hurtos insignificantes u otras estafas de la propiedad. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Pero qué es una deuda que no se paga? ¿No es esto robar? ¿Qué es tomar prestado algo y no devolverlo? ¿Tampoco esto es robar? ¿Qué es utilizar la propiedad de otras personas y dañarla sin recompensar por el daño? ¿No es esto robar? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">A veces actuamos como si tuviéramos derecho de apropiarnos de las pertenencias de una persona porque otra persona se ha apropiado de las nuestras. La Regla de Oro dice que debemos hacer a los demás lo que nos gustaría que nos hicieran a nosotros. No dice que podemos hacerle a los demás, lo que ellos nos han hecho. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Porque disculpamos y disimulamos nuestros propios hurtos, es por lo que no sentimos la necesidad de arrepentirnos de ellos. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Según un viejo proverbio, "El ladrón se arrepiente de ser capturado, no de ser ladrón." Si antes de cometer ningún acto examinamos su moralidad y sus posibles resultados, nunca necesitaremos preocuparnos por la horca. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><span style="color:#ff0000;"><b>4</b></span>. El voto budista de ser sexualmente moral, modesto y responsable. En este Precepto podemos ver lo fácil que es romper todas los demás. Por causa de la lujuria, el hombre robará. Por causa de la lujuria, emborrachará a la mujer que ama y la engañará con falsas promesas. Y cuando él abusa del cuerpo de ella en cualquier forma, ¿no la está dañando? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Y así como condenemos la inmoralidad, estaremos elogiando la moralidad. Mucho honor comporta la persona virtuosa, la persona que es casta en su vida de soltero o fiel a su sagrado voto de matrimonio. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Es por el incumplimiento de la observancia del Precepto de la moralidad por lo que encontramos las mayores hipocresías. ¿Con cuánta frecuencia nos encontramos con un hombre que protege ferozmente a su propia hija, mientras es muy dado a seducir a las hijas de los demás? ¿O aquel que vigila estrictamente a su esposa, mientras seduce a la mujer de otro hombre? Si él asesinara a un hombre que ultraja a su propia mujer e hijas, esperaría que el Tribunal lo viera como una victima y lo absolviera de culpa. Con todo, a pesar de ser el quien corrompió y sedujo, se considera un héroe. ¿No es esta una triste y terrible verdad? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">No es fácil para un hombre sobreponerse a la lujuria. Las tentaciones se encuentran en todas partes y en infinidad de variedades. Con todo, si un hombre desviara alguna de las energías que derrocha en sus conquistas sexuales hacia la conquista de su propia lujuria, haría verdaderos progresos espirituales. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Todos los hombres honorables convienen en la intensidad de la lucha. Incluso el Buda dijo, "Si me hubiera encontrado con otro obstáculo tan difícil de superar como el de mi sexualidad, nunca lo hubiera conseguido." El buen humor del Buda y su franqueza auto despreciativa deben darnos aliento. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><span style="color:#ff0000;"><b>5</b></span>. El voto budista de abstenerse de consumir alcohol u otros intoxicantes. Hay quienes dicen, "Un trago de vez en cuando no hace daño a nadie." Pero un bebedor ocasional sigue siendo un bebedor. Es bastante parecido al hecho de estar "un poco embarazada." O hay embarazo o no lo hay. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">La descripción "ocasional" es una puerta abierta por la cual un ladrón puede entrar. La puerta de la sobriedad está cerrada o no lo está. La experiencia nos dice que el mejor camino para solventar el problema es evitarlo. La abstención completa es el mejor camino de observar y guardar este Precepto. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El bebedor ocasional puede mantenerse sobrio cuando no le asaltan los problemas; pero tan pronto como se ve sometido a un serio estrés, puede sucumbir fácilmente al callejón sin salida del alcohol. Una vez que uno es atrapado por la bebida, descubre que una copa es demasiado y cien no son suficientes. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El alcohol mitiga nuestras inhibiciones y de este modo podemos satisfacer nuestros egos. Nos permite dejar a un lado las normas del decoro y la decencia, y después echarle la culpa de nuestra falta de conducta a la bebida - pero deberíamos echarnos la culpa a nosotros mismos por haber bebido. Nos decimos, por supuesto, que tomamos esa copa para divertirnos; pero cuando bebemos y se embotan nuestros sentidos, ¿cómo podemos sentir placer? Incluso aunque pudiéramos, ¿qué valor hay en experimentar un placer que no podemos recordar o saborear más tarde? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">A menudo encontramos que un hombre intoxicado que comete una acción inmoral se observará más tarde, cuando esté sobrio, con disgusto; pero entonces este mismo hombre usará ese auto-disgusto como una excusa para volver a beber. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Déjenle en cambio que tome conciencia de su verdadera naturaleza, su Glorioso Yo Búdico. Déjenle que aprenda, en lugar de eso, que en sí mismo encontrará la verdad, la paz, la diversión y la libertad. Asegúrenle que si fuera posible cultivar estas cosas en una parra y ponerlas después en una botella, seríamos todos vinateros y borrachines. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Queridos amigos, hay un dicho que dice, "In Vino Veritas" que significa "En el vino hay verdad" siempre que bebamos lo suficiente. Pero la única verdad que siempre encontramos cuando somos demasiado indulgentes con el vino, es que la vida en el Samsara es amarga y dolorosa. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El quinto paso es Correcto Modo de Vida. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Obviamente, si no podemos participar en actividades ilegales para divertirnos, desde luego no podemos participar en ellas para obtener beneficio. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En la India, por ejemplo, tradicionalmente ha existido siempre un sistema de castas. Hay una clase sacerdotal, una clase guerrera, una clase comerciante, y una clase de trabajadores, y, muy por debajo, una casta de intocables o marginados de la sociedad. Una persona se queda en la casta que nace (no tiene derecho a la promoción). No puede ir de trabajo en trabajo avanzando. Sin importar el talento y de lo inteligente que sea, si ha nacido en una familia de granjeros, este es el único trabajo que se le permite hacer. Incluso no se le permite alternar con gente de otra casta. Hoy en día el sistema no es tan rígido, pero en el tiempo del Buda las reglas eran inviolables. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">A pesar de esto, el Buda rechazó participar en un sistema tan injusto. El no seguía para nada las reglas. A la gente le gustaba eso de él. Fue un príncipe, pero no discriminaba a los que habían nacido en una casta más baja. Y en efecto, la mayoría de personas con quien se encontró habían nacido en una escala social mucho más baja que él. Cuando eres un príncipe no tienes demasiados superiores en la escala social. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Así que al Buda no le influyó en absoluto la ocupación o posición social de las personas. El Buda, como pueden ver, poseía el "Ojo del Discernimiento". Ninguna trampa piadosa pudo engañarle. Solo tenía que mirar a una persona para ver cómo era de santa. No mucha gente tiene este talento. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Ocurrió que cerca de Shravasti había un marginado llamado Sunita, un hombre tan bajo en la escala social, que no se le permitía trabajar para ganarse la vida. Era un intocable, y nadie se atrevía a romper las reglas de casta para contratarlo. Así que Sunita se ganaba el dinero para comer recogiendo flores en el basurero. Iba cada día al basurero del pueblo y hurgaba entre los ramos de flores secas, buscando una flor ocasional que inexplicablemente lograba seguir fresca mientras todas las demás estaban marchitas. Sunita disponía todas las flores frescas que encontraba en un ramo y lo vendía a la gente que pasaba por el camino. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Había mucha otra gente en Shravasti que era tan pobre como Sunita, pero realmente no había nadie que lo fuera más. Incluso a pesar de su pobreza, Sunita alcanzó la iluminación. Era un hombre amable y cariñoso. No hace falta decir que había escuchado predicar al Buda y fue un creyente devoto. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Un día, en una procesión, el Buda pasó por el camino cercano al basurero donde Sunita estaba buscando entre la basura. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Tan pronto como Sunita vio acercarse a la procesión, se agazapó rápidamente detrás de una piedra. Pero el Buda ya había visto a Sunita, y con su Ojo del Discernimiento lo reconoció como un ser iluminado. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">"¡Hola! - le dijo al hombre agazapado - Por favor, levántate y déjame que te vea." Avergonzado, Sunita se puso en pie lentamente, haciendo una reverencia con la cabeza y sus manos juntas en señal de oración ante su cara. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">"¿Por qué te has agazapado detrás de la roca? - preguntó el Buda." "Bendito - dijo Sunita - no quería que mi vista ofendiera a sus ojos. Soy indigno de su mirada." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Muchas de las personas que acompañaban al Buda estuvieron de acuerdo. Tiraron de su manga, intentado que se alejara del marginado. "Está sucio - dijeron - ¡Solo es un recogedor de basuras, un intocable!" </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">"¿Lo es? - dijo el Buda mientras avanzaba a través de un poco de basura para poner el brazo alrededor del hombro de Sunita - ¡Mirad! Lo he tocado, y sigue vivo." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Entonces el Buda le preguntó a Sunita, "Buen Señor, si no tiene demasiado cariño a esta labor, ¿le puedo persuadir de que venga conmigo para ayudarme en mi ministerio? Puedo utilizar un buen trabajador como usted." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Con lágrimas corriendo por su cara, Sunita aceptó. Y se dice que durante el resto de su vida, de acuerdo con los deseos del Buda, Sunita siempre permaneció muy pegado a él, donde el Buda pudiera alargar la mano y tocarlo. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><span style="color:#ff0000;"><b><a name="El sexto paso">El sexto paso</a> es Correcto Esfuerzo.</b></span> </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Sabemos que la destreza viene con la práctica, pero para practicar las lecciones espirituales que hemos aprendido, no necesitamos encontrar oportunidades. En Chan debemos darnos cuenta de que cada respiración que hacemos nos proporciona una oportunidad para practicar. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">La gente piensa que el mundo le molesta. No comprenden que son los porteros de sus propias mentes, que pueden fácilmente cerrar y bloquear las puertas de sus mentes. Si la gente les molesta, es porque el portero ha dejado la puerta abierta. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Hay gente que no pudiendo controlar su propia mente se esfuerza sin embargo en controlar la mente de los demás. Encuentran menos desalentador intentar dirigir los pensamientos de cientos de personas que dirigir los suyos propios. Esta situación es la que el Buda tenía en mente cuando dijo que el hombre que conquista a diez mil hombres en batalla, no es un héroe tan grande como aquel que se conquista a sí mismo. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Todos los días, en todas nuestras acciones, debemos actuar para avanzar en nuestra meta de iluminación y conocimiento personal. Si tenemos conocidos cuya compañía nos puede conducir fácilmente al error, deberíamos evitar relacionarnos con estos conocidos. Si no tenemos suficiente tiempo para meditar porque estamos muy ocupados en clubes, entretenimientos y deportes, deberíamos suprimir estas actividades. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Hace falta esfuerzo consciente para obtener la tranquilidad Chan. La calma espiritual se logra mediante la práctica. Un hombre muy sabio apuntó una vez que la mente del verdadero Hombre del Chan no puede ser apenada o intimidada porque, ya sea en los buenos o en los malos tiempos, simplemente continua en su propia paz constante, como un reloj haciendo tictac en una tormenta. Me gusta eso. Todos deberíamos intentar ser como relojes que incluso en una tormenta siguen haciendo tictac. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El séptimo paso es Correcta Atención. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Además de mantener nuestras mentes enfocadas en nuestro mantra, siempre que nos hallamos comprometido a seguir este método, y observar los pensamientos disciplinados necesarios para discriminar lo real de lo falso si hubiéramos escogido este método, también debemos seguir siendo conscientes de las causas y de los efectos de todas nuestras acciones. Queridos amigos, no debemos permitir nunca que pase un día sin cuestionar nuestra conducta. ¿Hemos hecho todo lo que hemos podido para ser amables y serviciales con los demás, y lograr que se sientan cómodos? ¿Hemos actuado de forma contraria al Buda Dharma? ¿Hemos sido mezquinos o tacaños? ¿Orgullosos o perezosos? ¿Glotones o codiciosos? ¿Envidiosos o irascibles? ¿Nos hemos manchado a nosotros mismos o a los demás con pensamientos, palabras o acciones lascivas? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">No es fácil ver nuestras propias faltas. A veces tenemos que esforzarnos en detectarlas si no podemos ver ninguna. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Por la noche, si nos encontramos en una habitación brillantemente iluminada e intentamos mirar por la ventana el oscuro paisaje, todo lo que veremos será nuestro reflejo en el espejo. No veremos nada que no conociéramos antes - nuestra imagen y la de ese pequeño espacio en el que estamos encerrados. Si queremos ver más allá de nosotros mismos, tenemos que apagar las luces. Tenemos que reducir la intensidad de nuestros egos o cortarlos por completo. Solo entonces podremos ver a través del cristal. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El octavo paso es Correcta Meditación. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">1. El Hua Tou<br />Si un hombre desea ser feliz durante una hora, que tome una buena comida;<br />Si desea ser feliz durante un año, que se case;<br />Si desea ser feliz durante una vida, que cultive un jardín;<br />Si desea ser feliz por la eternidad, que examine un Hua Tou. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Qué es entonces un Hua Tou? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Hua Tou significa "palabra de cabeza", y podemos contrastar Hua Tou con Hua Wai que significa "palabra de cola". Si un perro caminara por delante de nosotros, antes de ver el cuerpo del perro veríamos su cabeza; y después de ver el cuerpo veríamos su cola. Hasta aquí, todo bien. De este modo, la palabra de cabeza o Hua Tou es el punto en el que se origina nuestro pensamiento - el punto antes de que entre en el "cuerpo" de la ego-conciencia. La cola es el pensamiento subsecuente. Nos detendremos en la palabra de cola más tarde. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En la antigüedad se consideraba suficiente el apuntar a la mente calma para realizar la Naturaleza búdica. Bodhidharma habló de "calmar la mente" y el Sexto Patriarca sobre "darse cuenta de la Naturaleza del Yo". Ambos defendían un simple reconocimiento del verdadero estado inmaculado de pureza de la mente. Pero apuntar no era tan sencillo como sonaba. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">A medida que pasaron los años y el Chan se hizo popular, personas con distintos grados de habilidad se vieron atraídos por él. Muchos practicantes proclamaron haber encontrado caminos fáciles para alcanzar exaltados estados de iluminación. Alardeaban de poseer las preciosas joyas del Dharma, pero las joyas que describían simplemente las habían visto en posesión de otros. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Los verdaderos maestros Chan podían, por supuesto, ver correctamente estas falsas proclamas; pero los principiantes no siempre podían distinguir una verdad de una mentira. Los maestros, preocupados por los efectos desconcertantes que esta incorrecta información estaba teniendo sobre los nuevos practicantes, decidieron idear métodos para autentificar y estandarizar logros. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Uno de los métodos que idearon fue el Hua Tou. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Así que, ¿qué es un Hua Tou? Es una pregunta diseñada para concentrar nuestros pensamientos en un único punto, un punto que existe en la "cabeza" de la Mente Original, un punto inmediatamente anterior a que el pensamiento entre en nuestro ego conciencia. Es un pensamiento "fuente". </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Vamos a examinar el Hua Tou, "¿Quién es lo que ahora repite el nombre de Buda?" De todas las preguntas Hua Tou, esta es la más poderosa. Ahora bien, este Hua Tou puede explicarse de muchas formas distintas, pero todas ellas apuntan a una cuestión básica, "¿Quién soy yo?" Sin importar cómo sea planteada la pregunta, la respuesta debe encontrarse en el mismo lugar en que se origina: en la fuente, el Yo Búdico. El ego no puede responderla. Obviamente, las respuestas rápidas y fáciles no valen para nada. Cuando preguntamos, "¿Quién es lo que ahora repite el nombre de Buda?" no podemos replicar, "¡Es yo, el Yo Búdico!" y que la respuesta quede así. Por esto debemos preguntar entonces, "¿Quién es este yo?" Continuamos nuestras interrogaciones y nuestras confrontaciones. Una guerra civil tiene lugar en nuestra mente. El ego combate al ego. A veces el ego gana y a veces el ego pierde. Combatimos sin parar. ¿Qué es lo hace a mi mente consciente de ser yo? Por cierto, ¿qué es mi mente? ¿Qué es la consciencia? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Nuestras preguntas se hacen más y más sutiles y pronto comienzan a obsesionarnos. ¿Quién soy yo? ¿Cómo sé quién soy? Estas preguntas dan vueltas y vueltas en nuestras cabezas como boxeadores cansados y hambrientos. A veces, podemos querer dejar de pensar en el Hua Tou, pero nos damos cuenta de que no podemos quitárnoslo de la cabeza. No sonará la campana y nos dejará descansar. Si no os gustan las metáforas pugilísticas podéis decir que el Hau Tou comienza a atraparnos como una melodía que no podemos dejar de canturrear. Así que ahí estamos - siempre luchando, siempre practicando. No hace falta decir que, un Hua Tou nunca debería degenerar en una expresión vacía. Mucha gente cree que puede hacer sombra con su Hua Tou e incluso experimentar el movimiento del combate. Mientras sus mentes están en otro lugar, sus labios dicen, "¿Quién está repitiendo el nombre de Buda? ¿Quién está repitiendo el nombre de Buda? ¿Quién está repitiendo el nombre de Buda?" Esta es la forma de los loros pendencieros, no de los practicantes Chan. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El Hua Tou tiene un significado. Es una pregunta que tiene una respuesta y debemos estar decididos a encontrarla. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Me doy cuenta de que "¿Quién soy yo?" suena como una pregunta simple, uno podría responder la pregunta sin dificultad. Pero no es una pregunta fácil de responder. Con frecuencia es extremadamente enigmática. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">De hecho, mucha gente llega a un punto en la vida en que, a parte de cualquier técnica Chan, se comienza a preguntar quién es en realidad. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Vamos a considerar, por ejemplo, a una mujer de mediana edad que ha alcanzado el punto donde ya no está segura de quién es. Tiene lo que los psicólogos modernos llaman "una crisis de identidad". Quizás sus hijos han crecido y se han mudado de casa, y su marido ya no la encuentra atractiva. Está deprimida y confusa. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">De repente se da cuenta de que toda su vida se ha identificado a sí misma en términos de su relación con otras personas. Ella ha sido siempre la hija, la hermana, la empleada, la amiga, la mujer, o la madre de alguien. Esta mujer comienza ahora a querer saber, ¿Quién soy yo cuando no soy la hija, la esposa, la madre, etc. de alguien? ¿Quién soy yo realmente? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Quizás repase su vida y vea que cuando prestaba atención a las necesidades de una persona, no estaba disponible para satisfacer las necesidades de los demás. Y que aquellos que se sentían desatendidos por ella, la criticaban, mientras que los que recibían su ayuda, simplemente la aceptaban como si de algún modo tuviesen derecho a ella. Ser criticada por una parte, y no apreciada como era debido por la otra, le causó mucho sufrimiento. Y aún peor, se puede dar que satisfaciendo las demandas de estas relaciones sociales externas, descuidó las necesidades de su vida espiritual interior. Ahora se siente vacía espiritualmente y quiere saber por qué dio tanto de sí misma a los demás, por qué no dejó nada para su Yo Búdico. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Pero un lazo mantiene las dos partes juntas. No es una ligadura sin retorno. ¿No es porque deseamos ser queridos o respetados, temidos o admirados, por lo que permitimos o fomentamos estas ataduras? ¿No son nuestros deseos de personas, lugares, y cosas de la existencia samsárica los que a la larga nos causan amargura y dolor? Claro que sí. Había una vez un hombre que trabajaba en una tienda de comestibles. Todos los días solía robar comida y llevarla a casa para su familia. Su mujer e hijos crecieron fuertes y sanos, y utilizaba el dinero que habría que tenido que gastar en comida en comprar ropa y otros objetos. Le dijeron que era el mejor marido y padre que nadie podía tener. Pronto, el hermano del hombre, viendo esta prosperidad, le pidió que robara comida también para él; y el hombre accedió. Su hermano le adoraba. "Eres el mejor hermano que un hombre puede tener - decía." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Luego, un amable vecino que estaba atravesando problemas económicos le rogó que le ayudara; y el hombre robó más comida aún. Su vecino estaba muy agradecido, "Eres el mejor amigo que un hombre puede tener -decía." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El hombre se sentía importante y apreciado. En su deseo de ser querido y respetado, no se dio cuenta de que se había convertido en un vulgar ladrón. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Poco tiempo después fue atrapado, culpado, y condenado por sus robos. Fue sentenciado a pasar años en la cárcel. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Cuántas de las personas a las que había ayudado se ofrecieron a ocupar su lugar en la cárcel aunque solo fuera por una noche de su condena? Ninguna. ¿Cuántos se ofrecieron a restituir al menos la mitad de lo que les había proporcionado? Ninguno. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Tristemente el hombre se dio cuenta de que su familia se sentía molesta de admitir que había tenido relación con un ladrón. Tristemente el hombre se dio cuenta de que sus amigos expresaban lo aliviado que estaba el vecindario con un tipo tan vil entre rejas. Y de este modo, cuando nos preguntamos realmente quiénes somos, debemos reflexionar sobre los estúpidos deseos de nuestro ego y los patéticos caminos en que se humillará por afecto. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Cuando preguntamos, "¿Quién soy yo?", debemos preguntarnos también si nos identificamos a nosotros mismos en términos de nuestra riqueza o posición social. ¿Qué sucedería si perdiésemos nuestro dinero o fuéramos expulsados de la sociedad debido a un defecto en nuestro pedigrí? ¿Somos nuestras cuentas bancarias, nuestro círculo social o nuestro linaje? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Qué hay acerca de nuestros trabajos? ¿Somos nuestras ocupaciones? Si un músico se lesiona la mano y ya no puede seguir tocando su instrumento, ¿deja de existir? ¿Se ve privado de su humanidad por el hecho de verse privado de su identidad como músico? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Nos identificamos a nosotros mismos en términos de nuestras nacionalidades, nuestras ciudades, nuestros vecindarios, el lenguaje que hablamos o los deportes que practicamos? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Perdemos parte de nosotros mismos si nos trasladamos a una nueva localidad? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Somos nuestros cuerpos? Si un hombre tiene cabeza, tronco, y cuatro extremidades, ¿qué ocurriría si perdiera dos extremidades? ¿Solo es las dos terceras partes de un hombre? Pensad en lo estúpido que sería si él y su hermano tuvieran que repartir equitativamente una herencia, y su hermano dice que como le falta un brazo y una pierna, ¡solo tiene derecho a las dos terceras partes de su herencia! </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Podemos definirnos como nuestros egos, nuestro sentido consciente de "yo", "mí" ó "mío"? ¿Qué sucede cuando dormimos? ¿Dejamos de existir? ¿Qué sucede cuando nuestra atención está completamente centrada en un problema, o un drama, o en alguna música maravillosa? ¿Que sucede cuando meditamos y perdemos completamente nuestro sentido de la yo-idad? ¿Los santos que alcanzan un estado de no-yo dejan de existir? Y Shakyamuni Buda, que estaba tan desprovisto de la personalidad de Siddharta que sólo podía llamarse "Tathagata" - la Realidad como Tal o la Talidad de la Realidad, Sí Mismo - ¿dejó de existir ya que no tenía naturaleza egótica? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Al intentar responder al Hua Tou, "¿Quién soy yo?" o "¿Quién repite el nombre de Buda?", debemos examinar nuestras identidades ilusorias, nuestras cambiantes y condicionales identidades samsáricas. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Queridos amigos, ¡rompan las viejas ataduras! ¡Disuelvan las auto-imágenes llenas de orgullo y las relaciones especiales, y creen en su lugar humildes y genéricas variedades! No pidan amigos. Intenten simplemente ser alguien amable, alguien que respeta a toda la gente y la trata con toda bondad y consideración. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">No se limiten solo a un cariño filial hacia sus padres, sean solícitos hacia todas las personas mayores, etc. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Una vez que nos desapegamos de las relaciones emotivas específicas y nos extendemos hacia toda la humanidad, comienza a emerger una nueva fuerza del carácter. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El Hua Tou, "¿Quién soy yo?" es una Espada Vajra que, cuando es empuñada adecuadamente, cortará el molesto ego. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Un Hua Wei, o palabra de cola, sigue la pista de un pensamiento hasta su origen. Esto también puede ser muy útil. Por ejemplo, un niño en compañía de sus amigos le hace a su padre una pregunta, dice, "¿Podemos ir a la playa este fin de semana?" y su padre contesta de modo áspero, "¡No me molestes!" y aparta al niño de un empujón haciéndole sentir pena y dolor por el rechazo. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Esa respuesta puede ser un Hua Wei. El hombre debe preguntarse, ¿por qué he respondido a mi hijo de esta manera? ¿Por qué me trastorné de repente? Sabe que antes de que su hijo se le acercara, estaba de buen humor. ¿Qué había en la pregunta que le trastornó? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Comienza a seguirle la pista a cada una de las palabras. ¿Fue la expresión 'fin de semana'? ¿Qué asocia con esta palabra? Si no puede encontrar nada, prueba con la palabra "playa". Comienza a recordar sus experiencias en la playa. Piensa en muchos acontecimientos y de repente recordará lo que le perturba. No quiere pensar en ello, pero la disciplina Hua Wei requiere que examine este hecho. ¿Por qué le perturba el recuerdo? ¿Qué hay tan desagradable en él? Continua investigando este suceso hasta que llega a la causa raíz de su dolor. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Queridos amigos, esa causa raíz seguramente le causará daño a su orgullo y a su auto-estima. Y de este modo el hombre recuerda y, de alguna forma, revive la experiencia, solo ahora puede verla desde una perspectiva diferente, más natural. Quizás esa amarga experiencia implique en realidad malos tratos que recibió ¡de su propio padre! De todas formas, seguramente verá que ha transferido el dolor de su experiencia infantil en la playa a su inocente hijo. Debido a esto, intentará compensar su cruel desaire, y de esta forma, su carácter crecerá. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Sucede ocasionalmente que si el hombre se concentra lo suficiente en el Hua Wei, el perro podría morder su propia cola; y puede en realidad ir de la cola a la cabeza de un trago. A veces un Hua Tou funciona como una instrucción, una clase de guía que nos ayuda a enfrentarnos con los problemas de la vida. Ya que un Hua Tou nos sostiene y nos dirige cuando viajamos por la difícil carretera hacia la iluminación. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Saben? Hace tiempo el Maestro Chan Hui Jue de la Montaña Lang Ye tenía una discípula que vino a él por instrucción. El maestro le dio el Hua Tou, "Déjalo ser". Le dijo que si utilizaba fielmente este Hua Tou como si fuera una guadaña, podría cortar las ilusiones y cosechar la iluminación. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">La mujer tuvo fe en su maestro y, estando anclada en su determinación de obtener éxito, afiló y mantuvo este Hua Tou, Déjalo ser. ¿Dejar ser el qué? ¿Quién lo deja ser? ¿Qué es ser? Afilaba la hoja sin parar. Su casa se quemó y cuando la gente vino corriendo a decírselo, se encontraba tranquilamente con los ojos cerrados y susurrando, "Déjalo ser." Su hijo se ahogó y cuando la gente vino corriendo a decírselo, se encontraba tranquilamente con los ojos cerrados y susurrando, "Déjalo ser." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Un día comenzó a preparar buñuelos para cenar. Tenía lista la pastaba y el aceite estaba caliente. Entonces, cuando echó un poco de pasta en el aceite caliente, crepitó. Y este pequeño chisporroteo reverberó en su mente, y ¡alcanzó la iluminación! Al momento tiró la sartén con el aceite caliente al suelo y comenzó a brincar dando palmadas y riendo sin parar. Su marido naturalmente pensó que se había vuelto loca. "¡Que desastre! - gritó - ¿Qué haré?" Y su mujer se volvió hacia él y le dijo, "Déjalo ser. Tan solo déjalo ser." Entonces fue al Maestro Hui Jue y comprobó que en efecto había cosechado la Fruta Santa. Mantengan la mente en su Hua Tou siempre que estén haciendo cualquier cosa que no requiera toda su atención. Naturalmente, si están pilotando un avión no se pondrán a pensar en su Hua Tou. Descubrir si un perro tiene o no la Naturaleza búdica no les será de mucha utilidad si estrellan su avión. Conducir un automóvil también es algo que requiere toda su atención. No pueden cometer el riesgo de matar los pequeños 'yoes' de otra gente solamente porque estén intentando despachar el suyo propio. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Pero hay muchas ocasiones durante el día en las que pueden trabajar con seguridad en su Hua Tou. Normalmente intentamos llenar ese tiempo con actividades frívolas. Practicamos juegos tontos, hacemos puzzles, escuchamos la radio o vemos algún evento deportivo. Estas son las ocasiones en que deberíamos volcar nuestra mente en nuestro Hua Tou. Uno nunca puede decir cuando llegará el momento mágico. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En China llamamos a un trozo de carne "carne pura". No está mezclada con otros ingredientes como, por ejemplo, lo está una salchicha. A veces "carne pura" significa el mejor trozo de carne. La gente siempre le dice al carnicero que eso es lo que quiere. Carne pura o selecta. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Hubo una vez un hombre que estaba teniendo en cuenta el Hua Tou, "¿Quién tiene Naturaleza búdica?" Todos los días pasaba por delante de una carnicería en su camino al trabajo. Siempre escuchaba a la gente pidiendo a voces "carne pura" pero nunca prestó mucha atención. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Un día una mujer estaba comprando carne y, de acuerdo a la costumbre, insistió en que el carnicero solo le diera carne pura. Esto es lo que gritó. "Deme solo carne pura." Su incisiva insistencia irritó al carnicero y gritó, "¿Qué pieza no es pura?" El hombre escuchó este grito de enfado y realizó de repente que toda la carne es carne pura, eso es decir, todo el mundo contiene la pura Naturaleza búdica. ¿Quién tiene Naturaleza búdica? ¡Ah! ¿Quién no tiene Naturaleza búdica? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¡El hombre alcanzó la iluminación en ese instante! Se excitó tanto que botó, saltó y siguió diciendo, "¿Qué pieza no es pura? ¡Ah, ah! ¿Qué pieza no es pura?", una y otra vez. "¿Qué pieza no es pura?" A esta locura la llamamos Enfermedad Chan. No dura mucho tiempo, puede que solo unos pocos días antes de que la víctima se calme; pero es una maravillosa enfermedad. Afortunadamente, no hay medicina que la cure. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Un monje le preguntó una vez al Maestro Zhao Zhou, "¿Qué sucede cuando finalmente una persona alcanza el estado no sensorial?". El Maestro Zhao Zhou respondió, "Lo asienta." El monje no comprendió. Así que este dilema se convirtió en su Hua Tou. "¿Cómo puede uno asentar la ausencia de algo?" Trabajó sobre esto una y otra vez y siguió sin poder comprenderlo. Así que regresó al Maestro Zhao Zhou y preguntó, "¿Cómo puede uno asentar la ausencia de algo?" El Maestro Zhao Zhou respondió simplemente, "Lo que no puedas asentar, llévatelo." Inmediatamente el monje obtuvo la iluminación. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Como pueden ver, el Maestro Zhao Zhou sabía que la única cosa que no podemos asentar es nuestro Yo Búdico. Esto, y solo esto, es todo lo que verdaderamente podemos llevar con nosotros. Nadie puede decir, "Estoy iluminado" porque la experiencia de la iluminación es precisamente una experiencia de no-ego. El ego se extingue y el puro Yo Búdico es experimentado. No hay "yo" en aquel que puede proclamar que está iluminado. Esta es la experiencia más tónica y saludable. Alguien que sufra de una enfermedad del ego debería intentar administrase una dosis de iluminación. La cura es permanente. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">2. Meditación en el sonido </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Antes de comenzar esta instrucción, creo que es importante comprender la diferencia entre Huésped e Invitado. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En el Sutra Surangama, Arya Ajnatakaundinya pregunta, "¿Cuál es la diferencia entre permanente y transitorio?" Responde poniendo de ejemplo al viajero que se detiene en una posada. El viajero cena, duerme, y después continua su camino. No se queda en la posada, paga su cuenta y se marcha, continuando su camino. Pero, ¿qué pasa con el posadero? El no va a ninguna parte. Sigue residiendo en la posada porque es ahí donde vive. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">"Por lo tanto digo que, lo transitorio es el invitado y el posadero es el huésped", dijo Arya Ajnatakaundinya. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Y de ese modo identificamos a la miríada de pensamientos del ego que se levantan y caen en el flujo de conciencia como transitorios, viajeros que vienen y van, y que no deberían ser retenidos con investigaciones discursivas. Nuestro Yo Búdico es el huésped que permite a los viajeros pasar sin estorbar. Un buen huésped no detiene a sus invitados con charla ociosa cuando están listos para partir. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Por lo tanto, así como el huésped no lía el petate y se va con sus invitados, nosotros no deberíamos seguir nuestros pensamientos transitorios. Deberíamos simplemente dejarlos pasar, sin obstáculos. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Mucha gente se esfuerza en vaciar su mente de todo pensamiento. Esta es su práctica de meditación. Intentan no pensar. Piensan una y otra vez, "No pensaré." Esta es una técnica muy difícil y no es recomendada para principiantes. Realimente, el estado de "no-mente" que buscan es un estado espiritual avanzado. Hay muchos estados espirituales que deben precederle. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El progreso en Chan es bastante parecido a intentar escalar una montaña alta. Comenzamos abajo del todo. ¿Cuál es nuestro destino? No es la cima sino simplemente nuestro campo base, Campo 1, o la primera parada. Después de haber descansado allí, continuaremos nuestro ascenso. Pero, otra vez, nuestro destino no es la cima, sino sencillamente el Campo 2 o la segunda parada. Solamente alcanzamos la cima desde nuestro Campo final o nuestra parada final. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Desde luego nadie sueña con intentar escalar el Monte Everest en un ascenso rápido. ¡Y la cima del Chan es más alta que la del Everest! A pesar de todo, en el Chan todo el mundo quiere empezar por el final. Nadie quiere empezar en el comienzo. Si los principiantes pudieran tomar un avión hasta la cumbre querrían hacerlo, pero esto no sería ser escalador, ¿no es cierto? El entusiasmo por el logro es lo que le hace a la gente intentar tomar atajos. Pero el viaje es el verdadero logro. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Un método mejor que intentar deliberadamente poner la mente en blanco mediante la prevención del surgimiento del pensamiento, es meditar en el sonido. En este método nos sentamos en calma y cuando escuchamos un sonido le dejamos, por así decirlo, entrar por una oreja y salir por la otra. Somos como buenos posaderos que no retienen a los invitados-pensamientos con charlas discursivas. Si escuchamos el claxon de un coche, sencillamente guardamos el ruido sin decirnos, "¡Este claxon parece el del Bentley del Sr. Wang! ¡Supongo que se va!" O si escuchamos afuera el grito de un niño, simplemente dejamos que el grito pase por nuestra mente sin decir, "¡Oh, este niño ruidoso! Desearía que su madre le enseñara mejores modales." </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Saben?, en algunos estilos de Chan, es tradición golpear a alguien con un palo si comienza a mostrar signos de somnolencia. De un lado a otro de los pasillos hay alguien que patrulla con un palo. A nadie se le permite moverse o hacer ruidos al respirar o, ¡no lo quiera dios!, hacer gestos de somnolencia. ¡El compañero del palo le golpeará! Esto es estúpido y, en verdad, viola el Quinto Precepto de no-violencia. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Qué debemos hacer con una monja o sacerdote ancianos que comienzan a dormirse en la Sala de Meditación? ¿Deberíamos golpearles con un palo? ¿Estamos confundiendo pereza con somnolencia? Quizás la persona somnolienta se ha pasado la noche atendiendo a los enfermos. ¿Deberíamos castigarle si, en su agotamiento, comienza a dejarse llevar por el sueño? No. Deberíamos ofrecerle un té fuerte. Si quiere reanimarse, se toma el té. Pero si se toma un pequeño sueño deberíamos dejarle descansar. Quizás el ruido en la respiración de una persona, o el desasosiego, sean en realidad el síntoma de una enfermedad. ¿Deberíamos castigar a una persona enferma y aumentar su malestar? No. Este no es el camino Chan. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">¿Qué deberíamos hacer una vez, por supuesto, que estemos seguros de que su ruido no viene de la fatiga o la enfermedad? Deberíamos utilizar el sonido de su respiración o sus movimientos como utilizamos el sonido del claxon de un coche o el grito de un niño. Deberíamos registrar el ruido sin pensar para nada en él. No deberíamos permitir que nuestro ego se implique en el ruido. Dejarlo pasar a través de nuestras mentes libres, como un invitado en una posada. Un invitado entra y se marcha. No hurgamos en las pertenencias del invitado. No le detenemos con chismes o con una charla insustancial. El Buda le pidió una vez a Manjushri que escogiera entre los distintos métodos de alcanzar la iluminación. "¿Cuál es el mejor?" preguntó. Manjushri escogió sin dudar el método del Bodhisattva Avalokiteshvara de utilizar la facultad de respirar como el mejor. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Recuerden siempre que cuando se medita sobre el sonido es esencial eliminar el ego del proceso de escuchar, y dejar al no-crítico Yo Búdico registrar el sonido que entra por nuestras orejas. Allá donde lo hagamos, hacemos de ese un lugar un Bodhimandala, un lugar sagrado en el que se puede conseguir la iluminación. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">No necesitamos estar en una sala de meditación para practicar esta técnica. Todos los días, en nuestras actividades ordinarias, dondequiera que estemos, podemos practicarla. No deberíamos intentar limitar nuestra práctica del Chan a aquellas ocasiones en que estemos en una Sala de Meditación Chan. De hecho, la función de una sala de meditación es simplemente la de proporcionar un lugar de distracción mínima para la gente que tienen dificultad en mantener su atención centrada en lo que está haciendo. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">A veces a la gente le gusta ir a las salas de meditación porque necesitan ser forzados a meditar. No les gusta practicar en sus casas solos. ¿Por qué debería una persona estar obligada a tener una experiencia bonita? ¡Qué estupidez! </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">A veces la gente va a las salas de meditación porque quieren encontrarse allí con los amigos. Es un mal uso del Chan. Es convertir al Chan de un Camino a la Iluminación a solo otro camino samsárico sin salida; ¿y no es eso una lástima? </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">3. Meditación sobre un objeto específico </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">A veces un invitado no es transitorio. A veces un invitado viene a la posada con la intención de quedarse por un tiempo. Bueno, entonces el posadero debe brindarle una atención especial. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">El posadero no investiga al invitado-objeto antes de dejarle que firme el registro. Es otra manera de decir que antes de sentarse a meditar no vamos y estudiamos el objeto sobre el que meditaremos. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Supongan que escogemos como objeto una rosa. Este es un objeto particularmente agradable para la meditación Chan ya que, después de todo, las rosas son uno de los regalos de China al mundo de la horticultura. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Una rosa puede abordar a nuestros sentidos de muchas formas. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Después de haber logrado calma y de haber regulado nuestra respiración, comenzamos por cerrar nuestros ojos suavemente e intentamos construir una rosa en nuestra mente. No nos permitimos divagar en recuerdos personales sobre rosas. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Vemos un tallo - cómo es de largo, de grueso, de verde, y demás. Vemos espinas, sus formas, sus puntas, su disposición en el tallo. De nuevo, no divagamos pensando en ocasiones específicas en que nos pinchamos con espinas. Quizás cautelosamente sentimos la espina, pero solo en nuestra mente. Después vamos a las diversas partes de la flor. Dependiendo de nuestro conocimiento de botánica ensamblamos la flor... pistilo, estambre, pétalos y demás. Los pétalos son tan suaves. ¿De qué color son? El polen es tan amarillo y polvoriento. Vemos el polvo amarillo cerca de los pétalos. Una rosa tiene fragancia. ¿Cuál es el perfume específico de nuestra rosa? Incluso comenzamos a olerla. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Así es cómo se medita sobre una rosa o sobre cualquier otro objeto. Recuerden, nunca nos permitimos divagar sobre "Las rosas que he conocido..." o situaciones del pasado cuando dimos o recibimos rosas. ¡No pensad en nada! Solo nos hacemos conscientes de una rosa en todas sus partes y sensaciones. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Pronto la rosa brillará en nuestra mente. La rosa será de una belleza tan exquisita que sabremos que hemos visto la propia Rosa Ideal del Cielo. Después, podemos chillar con placer. No se le permite a mucha gente ver uno de los tesoros del Cielo. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">4. Meditación sobre el nombre del Buda </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">En el Budismo Mahayama, el Buda Amitabha, el Buda del Oeste, es muy importante. Los chinos pronuncian Amitabha como Amitoforo. Y de ese modo, repetir el nombre Amitoforo es una práctica excelente. </span></p><p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;">Primero, ponemos nuestra mente en una imagen del Buda Amitabha. Debemos confesarle nuestra gran deuda. ¿No brotó el Bodhisattva Avalokitesvara-Guan Yin de su frente? ¿Dónde estaría la meditación Mahayana sin nuestro querido Guan Yin? Así que mantenemos al Buda en nuestra mente cuando repetimos su nombre sagrado. ¿Cuál es la forma errónea de repetir el nombre del Buda? Es fácil de describir. Pensad en una persona enferma a la que se le da un frasco de pastillas de penicilina. Pensad en él sentado y sosteniendo el frasco cerrado repitiendo "penicilina, penicilina, penicilina". ¿Lo curará? No. Debe tomar la penicilina. La debe tragar y asimilar. Simplemente repitiendo el nombre de la medicina no le curará.</span></p><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"><b> <dt> </dt></b></span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt> <br /></dt><dt><a name="_Toc24082299">Capítulo 4 - El Sermón de la Flor del Buda</a> </dt><dt> </dt><dt> </dt><dt>Un buen profesor es mejor que los libros más sagrados. Los libros contienen palabras, y el Chan no se puede transmitir únicamente con palabras. Supongo que estarán pensando, "Bueno, si este anciano dice que las palabras no tienen utilidad, ¿por qué habla tanto?" La religión tiene muchos misterios, y el porqué los profesores dicen que las palabras nunca pueden ser suficientes, y después hablan una y otra vez hasta que las orejas de sus estudiantes se petrifican, es quizás el mayor misterio de todos. </dt><dt> </dt><dt>El Buda se encontraba junto a un lago en el Monte Grdhakuta, y estaba preparado para dar un sermón a los discípulos que allí se reunieron para oírlo hablar. </dt><dt> </dt><dt>Mientras el Santo esperaba a que sus estudiantes se acomodaran, se fijó en un floreciente loto dorado en las fangosas aguas cercanas. Sacó del agua la planta – la flor, el largo tallo y la raíz. Entonces la sostuvo en alto para que sus estudiantes pudieran verla. Durante un tiempo se quedo ahí, sin decir nada, sosteniendo en alto el loto y mirando a las palidecidas caras de su audiencia. </dt><dt> </dt><dt>De repente, su discípulo Mahakashyapa sonrió. ¡Había comprendido! </dt><dt> </dt><dt>¿Qué comprendió Mahakashyapa? Todo el mundo quiere saberlo. Durante siglos todo el mundo se pregunta, "¿Qué mensaje le dio el Buda a Mahakashyapa?" </dt><dt>Algunos dicen que la raíz, el tallo y la flor representaban los Tres Mundos: el infierno, la tierra y el cielo, y que el Buda estaba diciendo que podía sostener a toda la existencia en la palma de su mano. Puede ser. </dt><dt> </dt><dt>Algunos dicen que estaba invirtiendo el Gran Mantra, "Mani Padme Hum" La Joya está en el Loto. Cuando el Buda sostenía la flor en su mano, el Loto estaba en la Joya. Hummm. </dt><dt> </dt><dt>Algunos dicen que la raíz, el tallo y la flor representaban la base, la espina y la corona de lotos de mil pétalos del sistema Chakra Yoga, y que levantando la planta estaba defendiendo esa disciplina. Otros dicen que podía estar sencillamente indicando un resultado de esa disciplina, el cumplimiento Trinitario: puesto que el Buda fue Padre y Madre, también fue Hijo - el Loto Nacido y el Loto Sostenido por Maitreya, el Buda Futuro, el Julai. ¡Eso es ciertamente algo sobre lo que pensar! </dt><dt> </dt><dt>En Chan no estamos seguros de demasiadas cosas. Realmente solo sabemos una: ¡La Iluminación no puede encontrarse en un diccionario! El puente al Nirvana no está construido de frases. Como el viejo Maestro Lao Zi escribió, "El Dao del que puede hablarse no es el Dao que queremos." </dt><dt> </dt><dt>Así que Buda habló en silencio, pero ¿qué dijo? </dt><dt> </dt><dt>Quizás estaba diciendo – Fuera de las inmundicias del Samsara el Loto crece puro e inmaculado. ¡Trasciendan la ego-conciencia! ¡Sean Uno con la flor! </dt><dt> </dt><dt>¡Allí mismo! El Buda dio una conferencia y nadie tuvo que tomar notas. <b> </b></dt><dt><b> </b> </dt><dt><a name="_Toc24082300">Capítulo 5 - Estados de Desarrollo</a> </dt><dt> </dt><dt>¿Por qué estados debemos pasar en nuestro progreso hacia la iluminación? </dt><dt> </dt><dt>Primero, debido a nuestra meditación podemos experimentar un momento de completa pureza y ligereza. Podemos incluso sentir que nuestro cuerpo está empezando a levitar, o que nuestra mente se levanta de nuestro cuerpo y que podemos mirar hacia abajo y vernos a nosotros mismos sentados debajo. Es muy difícil aprender de estas experiencias, y más difícil aún de experimentarlas. Lo que es más extraño de todo es que mucha gente las ha experimentado. </dt><dt> </dt><dt>Segundo, podemos experimentar un estado de pureza libre de ego en el que somos meros espectadores de los objetos y de los eventos de nuestro entorno, sin ser afectados de ninguna manera por ellos. Los datos sensoriales no nos alcanzan. Permanecemos sin afectarnos por los eventos que nos rodean como una piedra apoyada en el agua. Siempre que alcanzamos este estado deberíamos esforzarnos en seguir vigilantes, alertas, y conscientes de la experiencia. </dt><dt> </dt><dt>Tercero, podemos oír un trueno que nadie más puede oír, incluso podemos jurar que está haciendo temblar la casa entera. O el sonido que sólo nosotros oímos puede ser como el zumbido de una abeja o la nota de una trompeta lejana. Estas experiencias auditorias son muy poco frecuentes para una persona normal, pero para aquellas personas que practican Chan, son bastantes ordinarias. </dt><dt> </dt><dt>Siempre que tengamos una extraña e inexplicable experiencia – una visión, quizás deberíamos discutirla con un maestro y no con otros que puedan sacar conclusiones erróneas provenientes de la ignorancia o la malicia. Demasiado a menudo un practicante Chan que no ha podido avanzar en su propio programa denigrará la experiencia de otro. </dt><dt> </dt><dt>¿Qué deberíamos hacer cuando no podemos meditar de ninguna manera, cuando nos sentamos y solo experimentamos inquietud? Deberíamos acercarnos a nosotros mismos como si fuésemos niños. Si un niño estuviera aprendiendo a tocar un instrumento musical, no le se enseñaría a la vez teoría musical, notación, las particularidades de su instrumento y composición. No, a un niño se le enseñaría gradualmente, con pequeñas sesiones de instrucción y pequeñas sesiones de práctica. Esta es la mejor forma. Un músico consumado puede fácilmente practicar ocho horas al día, pero no un principiante. Un principiante necesita alcanzar una serie continua de pequeños éxitos. De esta forma cultiva la paciencia, la confianza y el entusiasmo. Una larga serie de pequeños éxitos es mejor que una pequeña serie de fracasos. Deberíamos establecernos pequeñas metas; y no embarcarnos en largas metas hasta que hayamos dominado todas las pequeñas. </dt><dt> </dt><dt>Más allá de la práctica de la meditación, está la actitud. Un principiante debe aprender a cultivar la llamada "serenidad de un moribundo". ¿Qué es esta serenidad? Es la serenidad de conocer qué es importante y qué no lo es, de aceptar y perdonar. Alguien que haya estado junto a la cama de un moribundo comprenderá esta serenidad. ¿Qué haría el moribundo si alguien lo insultara? Nada. Cuando yace allí, ¿hará planes para hacerse famoso o rico? No. ¿Si alguien que antaño le hubiera ofendido le pidiera su perdón no se lo daría? Por supuesto que sí. Un moribundo conoce la falta de sentido de la enemistad. El odio es siempre un sentimiento lamentable. ¿Quién desea morir sintiendo odio en su corazón? Nadie. El moribundo busca amor y paz. </dt><dt> </dt><dt>Hubo un tiempo en que el moribundo se permitía el lujo de albergar sentimientos de orgullo, codicia, lujuria y cólera, pero ahora tales sentimientos se han ido. Hubo un tiempo en que era condescendiente con sus malos hábitos, pero ahora se ha librado de ellos. No lleva nada. Ha dejado a un lado sus cargas. Está en paz. </dt><dt> </dt><dt>Queridos amigos, cuando hayamos respirado por última vez, este cuerpo físico nuestro se convertirá en un cadáver. Si nos esforzamos en considerar este cuerpo físico como un cadáver, pronto nos llegará la paz. </dt><dt> </dt><dt>Si considerásemos cada día de nuestra vida como si fuera el último, no desperdiciaríamos ni un precioso minuto en ocupaciones frívolas, con resentimiento o cólera nociva. No nos olvidaríamos de mostrar amor y gratitud a aquellos que han sido amables con nosotros. No negaríamos nuestro perdón para ninguna ofensa, grande o pequeña. Y si nos hubiéramos equivocado, ¿no pediríamos perdón incluso con nuestra última respiración? </dt><dt> </dt><dt>Bueno, si esta es la gran dificultad para un principiante, ¿qué obstáculos se encontrará un practicante intermedio? ¡Los resultados! Después de que ha cultivado la disciplina del Buda Dharma, debe seguir cuidando su jardín ya que espera ¡la maduración de Fruta Santa! Sin embargo, su espera debe ser una espera pasiva. No puede esperar o fijar la hora para la estación de la cosecha. En agricultura, es posible estimar cuánto tardaran en madurar las habas o las manzanas. Pero la Iluminación llegará cuando llegue. </dt><dt> </dt><dt>Cuando venga, el meditador experimentará su Verdadera Naturaleza de repente. También comprenderá que su ego es en realidad una criatura de ficción, una ilusión dañina. Ahora, eliminada la confusión, se hará imperturbable. Desarrollará una mente unidireccional, una identidad que brillará en la pureza y estará completamente tranquila. Naturalmente, cuando alcance este estado, debe actuar para preservar este Ojo Diamantino de Sabiduría. Debe estar vigilante para no permitir reafirmase a su ego, ya que hacerlo sería un estúpido intento de injertar una segunda cabeza carente de utilidad sobre su cuello. </dt><dt> </dt><dt>Siempre que alcanzamos el estado de perfecto conocimiento de no-ego, nos damos cuenta que es imposible describirlo. La situación es bastante parecida a un observador que mira a alguien beber un vaso de agua. ¿El agua estaba caliente o fría? El observador no puede decirlo, sino el que se está bebiendo el vaso de agua. Si el observador no está de acuerdo, ¿pueden discutir sobre ello? No. Tal discusión sería fútil. El Maestro Chan Lin Ji solía decir, "Esgrimir con maestros de esgrima. Discutir poesía con poetas." Una persona que ha alcanzado el estado de no-ego puede comunicar su experiencia solamente a alguien que la haya alcanzado. </dt><dt> </dt><dt>Pero, ¿qué pasa después de la Iluminación? </dt><dt> </dt><dt>Después de la Iluminación, experimentamos la aventura del Gran Bodhisattva. En nuestras meditaciones entramos en el domino de Guan Yin. Este es el mundo más maravilloso de todos. </dt><dt> </dt><dt>Pero después de esto, el practicante consumado debe separarse del Chan, obtener el título, por así decirlo, y ser lo que haya planeado convertirse: una persona que parece ser bastante común, solo otra cara entre la multitud. ¿Quién adivinaría que su rostro es un Rostro Original? ¿Quién adivinaría que esa persona ha sido una persona, dos personas y tres personas, y ahora es de nuevo una persona, una persona que vive la vida del Yo Búdico? Nadie lo puede adivinar con solo mirar. </dt><dt> </dt><dt>Y así, el problema final con el que el practicante se enfrenta, es el de penetrar realmente en el Vacío sobre el que tanto gusta teorizar a los principiantes. Debe lograr la "no-mente". En vez de proceder en una única dirección, tiene que expandirse en todas las direcciones, o como Han Shan (Montaña Fría) diría "hasta el infinito". En Chan también llamamos a esto "dejarse caer del poste de cien pies". </dt><dt> </dt><dt>El Chan es un resbaladizo poste de cien pies. Es difícil de subir. Pero una vez que un practicante se encuentra sentado en lo alto, ¿qué es lo próximo que debe hacer? Dejarse caer. No puede aferrarse al Chan. Ha descubierto lo que significa estar sin ego, pero ahora debe vivir los resultados de ese descubrimiento. Sus acciones no pueden ser premeditadas y artificiales. Y de este modo alcanza la espontaneidad y se hace uno con la realidad. No necesita luchar por más tiempo. </dt><dt> </dt><dt>De este modo, alcanzar el Chan es la difícil tarea de cuando empezamos; y dejar ir al Chan es la difícil tarea de cuando terminamos. </dt><dt> </dt><dt>La mujer u hombre de Chan no se sientan en lo alto del poste de cien pies y se quedan mirando su diploma de Iluminación. Lee el diploma, grita "¡Kwatz!", y agita el diploma a los cuatro vientos. Después salta del poste hacia el infinito. </dt><dt> </dt><dt>Queridos amigos, aunque muy variadas puertas del Dharma conducen a la iluminación, el Buda, los Seis Patriarcas, y todos los Antepasados Chan, están de acuerdo en que la más maravillosa de las puertas es la Puerta del Chan. <b> </b></dt><dt><b> </b> </dt><dt><a name="_Toc24082301">Capítulo 6 – Dificultades</a> </dt><dt> </dt><dt> </dt><dt>A veces la enseñanza del Chan puede ser tan frustrante como su aprendizaje. </dt><dt> </dt><dt>Hubo una vez un Maestro Chan que se encargó de la instrucción de tres novicios. Les explicó la necesidad de la disciplina espiritual y les ordenó que, empezando en ese mismo momento, observaran la regla del silencio absoluto. Después, sosteniendo su dedo en sus labios, les ordenó que fueran a sus habitaciones. </dt><dt> </dt><dt>El primer novicio dijo, "¡Oh, Maestro, déjeme decirle lo agradecido que estoy por recibir su instrucción!" </dt><dt> </dt><dt>Tras lo cual el segundo novicio dijo, "¡Tonto! ¿No te das cuenta de que hablando has roto la ley del silencio?" </dt><dt> </dt><dt>Y el tercer novicio levantó las manos, en un gesto de desesperación, y se lamentó, "¡Señor! ¿Soy aquí la única persona capaz de seguir órdenes?" </dt><dt> </dt><dt>A veces miramos alrededor y suponemos que nadie evalúa nuestros valores morales. Somos como esos tres novicios. A menudo, como ese primer novicio, decimos que queremos aprender pero verdaderamente no ponemos atención en lo que nuestros libros o maestros nos dicen. O como el segundo novicio, comprendemos las reglas pero pensamos que solo se refieren a los demás. O como el tercer novicio, clamamos alabanzas toda vez que hacemos lo que suponemos debemos hacer. </dt><dt> </dt><dt>A veces compartimos las frustraciones de ese Maestro Chan. </dt><dt> </dt><dt>Quizás veamos desatención, holgazanería, frivolidad o satisfacción intelectual. Peor aún, podemos ver personas que son hipócritas consumadas - gente que finge que sus intereses son puramente espirituales mientras que en realidad son una amalgama al noventa y nueve por ciento de orgullo, codicia y lujuria. </dt><dt> </dt><dt>Ante esta situación levantamos nuestras manos consternados y concluimos que la Edad de Oro del Chan se ha terminado. Hemos llegado demasiado tarde. No hay esperanza para el Chan. Llegamos justo a tiempo para el funeral. Cada época piensa que por poco no ha sido incluida en la Edad Dorada de la Iluminación. </dt><dt> </dt><dt>El Maestro Yong Jia, que estudió bajo el Sexto Patriarca Hui Neng, estaba preocupado por el futuro del Chan. Se desesperó por la abundancia de hombres mundanos y la escasez de seguidores sinceros del Buda Dharma. "¡Ay! - gritó en su Canción de la Iluminación - En este tiempo de decadencia y diablos mundanos, nadie quiere someterse a la disciplina. El Periodo Santo ha terminado y ha comenzado la Era de la Perversión." </dt><dt> </dt><dt>Entonces, el Maestro Yong Jia, por todas sus preocupaciones sobre estar en una era de oscuridad, se las arregló para alcanzar la iluminación en muy poco tiempo. Tuvo lo que llamarían una "Sensación Nocturna". De hecho así es como Hui Neng se refirió a él. "¡El Iluminado Nocturno!" La lámpara del Maestro Yong Jia ardió durante largo tiempo en lo que se suponía era un periodo de oscuridad. </dt><dt> </dt><dt>El Maestro Wei Shan que nació en 771 y murió en 863, vio el final de su vida terrenal justo cuando finalizaba la Edad de Oro de la Dinastía Tang. El Maestro Wei Shan se lamentaba con frecuencia, "¿No es lamentable que hallamos nacido al final del Periodo de la Iluminación?" Se desesperaba por la abundancia de hombres mundanos y la escasez de seguidores sinceros del Buda Dharma. ¡Cuánto deseaba haber nacido antes! Verdaderamente tenía miedo que no hubiera nadie para ocupar su lugar. </dt><dt> </dt><dt>Pero vamos a tomarnos un momento para recordar como empezó a llamársele Wei Shan a Wei Shan. </dt><dt> </dt><dt>El nombre original de Wei Shan era Ling You y era de la Provincia de FuJian. Estudió Chan bajo el Maestro Bai Zhang Huai Hai. </dt><dt> </dt><dt>Ahora bien, el Maestro Bai Zhang Huai Hai había nacido a mediados de la Dinastía Tang; pero también se desesperó por la abundancia de hombres mundanos y la escasez de seguidores sinceros del Buda Dharma. </dt><dt> </dt><dt>Bai Zhang Huai Hai estaba tan preocupado sobre el estado del Chan que decidió solventar el problema construyendo un nuevo monasterio en el Monte Wei, Wei Shan, que está en la Provincia de Hunan. Naturalmente, ya que pensaba que había disponibles tan pocos hombres que hubiesen alcanzado la iluminación, supuso que tendría que ir allí y hacer el trabajo por él mismo. </dt><dt> </dt><dt>Un día mientras estaba intentando imaginarse cómo llevar a cabo esta proeza, el viejo asceta-adivino [vidente] Si Ma, le hizo una visita. </dt><dt> </dt><dt>"Deme su consejo - le pidió Bai Zhang Huai Hai-. Primero, ¿qué piensa acerca de construir un nuevo monasterio en el Monte Wei?" </dt><dt> </dt><dt>"Excelente idea - dijo Si Ma -. Es un sitio ideal y puede fácilmente mantener una comunidad de mil quinientos monjes." </dt><dt> </dt><dt>Bai Zhang Huai Hai estaba encantado de escuchar esto. Pero entonces Si Ma añadió, "No se haga a la idea de ir allí usted mismo. La montaña es joven y fuerte, y usted es viejo y débil. Tendrá que enviar a algún otro." </dt><dt> </dt><dt>¿Pero quién? Bai Zhang Huai Hai no se podía imaginar que alguien de por allí pudiese remplazarle. </dt><dt> </dt><dt>Si Ma intentó ayudar. Dijo, "Vamos a ver, ¿a quién tiene disponible?" </dt><dt> </dt><dt>Así que, uno por uno, Bai Zhang Huai Hai llamó a todos sus monjes. Naturalmente, comenzó por el monje prior. </dt><dt> </dt><dt>Si Ma echó un vistazo al monje prior y sacudió su cabeza, rechazándolo. Continuó rechazando a cada uno de los candidatos hasta que finalmente fue el turno de Ling You. Cuando Si Ma vio a Ling You, dio su aprobación inclinando la cabeza. "¡Este es el hombre! -dijo- Envíalo a Wei Shan." </dt><dt> </dt><dt>Al monje prior no le gustó mucho este juicio y le pidió al Maestro Bai Zhang Huai Hai que afirmase su decisión mediante un examen, esto es, dejar que cada candidato demostrase activamente la profundidad de su Chan. </dt><dt> </dt><dt>Así que Bai Zhang Huai Hai organizó una prueba. Puso un cántaro en medio del suelo y uno por uno invitó a sus monjes a venir a la habitación y a responder a la pregunta: "Sin llamar a este objeto un cántaro, ¿cómo debería llamársele?" </dt><dt> </dt><dt>Vino el monje prior, miró el cántaro, pensó durante un minuto y entonces respondió, "Bueno, no se le puede llamar una cuña." Bai Zhang Huai Hai se decepcionó. Esta respuesta evidentemente artificial mostraba que el monje prior se estaba acercando al problema demasiado intelectualmente. Seguía demasiado enredado con los nombres y las formas. </dt><dt> </dt><dt>Todos los candidatos dieron una respuesta insatisfactoria hasta que, finalmente, fue el turno de Ling You. Ling You llegó a la habitación, y cuando Bai Zhang Huai Hai le preguntó, "Sin llamar a este objeto un cántaro, ¿cómo debería llamarse?" Ling You dio espontáneamente tal patada al cántaro que lo hizo añicos contra la pared. Bai Zhang Huai Hai echó hacia atrás su cabeza y se rió. Si Ma tenía razón. Ling You era en efecto el hombre. ¿Un cántaro? ¡Se acabó el nombre! ¡Se acabó la forma! </dt><dt> </dt><dt>Así pueden ver que a veces los profesores también necesitan aprender una lección. Bai Zhang Huai Hai pensaba que los gloriosos días del Chan pertenecían al pasado. Estaba equivocado. Ling You fue a la montaña y fundó un monasterio, y esto es por lo que se le terminó llamando Gran Maestro Wei Shan. </dt><dt> </dt><dt>Más de mil años han pasado desde esa prueba y los maestros se siguen desesperando por la abundancia de hombre mundanos y la escasez de seguidores sinceros del Buda Dharma. </dt><dt> </dt><dt>Tomen mi propio caso. Cuando era joven, la mayoría de los monasterios en la zona sur de los tres ríos fueron destruidos durante varias rebeliones. Muchos monjes de las montañas Zhong Nan vinieron al sur, andando, para ayudar a reconstruir estos monasterios. ¿Qué tenían? Nada. Llevaban una calabaza, una pequeña cesta y la ropa a su espalda. Eso era todo. Todo el mundo se preguntaba que era todo lo que podían hacer en la tierra. Pero hicieron el trabajo. Reconstruyeron los monasterios. </dt><dt> </dt><dt>Tiempo después estos monasterios florecieron y se necesitaron más monjes, nuevos monjes comenzaron a llegar. Venían en carros, utilizando bastones y palos sobre sus hombros para transportar todas sus posesiones. Y todo el mundo pensó, "Oh, son demasiado mundanos. No harán nada." Pero lo hicieron. </dt><dt> </dt><dt>Y ahora, cuando viajo a algún lugar y veo monjes tomar trenes y aviones con su equipaje de cuero, me encuentro diciendo, "Oh, son demasiado mundanos. No lograrán nada." Pero lo harán, ¿no? Ustedes lo harán, ¿no? <b> </b></dt><dt><b> </b> </dt><dt><a name="_Toc24082302">Capítulo 7 - Respiración y postura</a> </dt><dt> </dt><dt> </dt><dt>Aunque podemos hacer muchas meditaciones mientras caminamos o trabajamos, cuando nos sentamos formalmente a meditar debemos ser cuidadosos en mantener una actitud reverente, en sentarnos y respirar correctamente. </dt><dt> </dt><dt>Queridos amigos, aunque pueden derivar muchos beneficios de nuestros esfuerzos, la meditación es un ejercicio espiritual, no un régimen terapéutico. No meditamos para contrarrestar alteraciones fisiológicas o para ayudarnos a hacer frente a las frustraciones del ego. Meditamos para trascender el ego-conciencia y realizar nuestro Yo Búdico. Nuestra intención es entrar en el Nirvana, no hacer más tolerable la vida en el Samsara. </dt><dt> </dt><dt>Esta instrucción puede ser desconcertante, lo sé. Mucha gente piensa que está meditando cuando alcanza un estado de paz y tranquilidad. Les hace mucha ilusión practicar debido a la hora de paz y tranquilidad que les proporciona. Pero el quietismo no es meditación. Acorralar un caballo salvaje no le hace manso ni reaccionar a las riendas. Puede reposar durante un rato y parecer tranquilo. Incluso puede comenzar a pacer. Pero cuando se abra la puerta se escapará tan salvaje como siempre. </dt><dt> </dt><dt>Saben, en Nan Hua Si, el monasterio del Sexto Patriarca, una vez hubo un monje que empleaba unas horas cada día en sentarse tranquilamente sobre su cojín, disfrutando de la paz y tranquilidad que le traía. Pensaba que estaba meditando. Hui Neng, el Sexto Patriarca, dándose cuenta del error del monje se acercó a él. "¿Por qué dedicas tanto tiempo a tu cojín cada día?" le preguntó. </dt><dt> </dt><dt>El monje levantó los ojos sorprendido. "Porque quiero hacerme un Buda", respondió." </dt><dt> </dt><dt>Hui Neng sonrió. "¡Hijo mío" dijo, "¡puedes hacer un espejo puliendo un ladrillo antes que hacerte un Buda sentado en el cojín!" </dt><dt> </dt><dt>Deberíamos recordar siempre este intercambio entre un gran maestro y un monje equivocado. </dt><dt> </dt><dt>Antes de entrar en un estado meditativo siempre estamos despiertos y alertas. Nuestras mentes, liberadas de las solicitudes externas, se centran en nuestro ejercicio de meditación. Después de haber tenido éxito en alcanzar el estado meditativo estamos, normalmente, bastante eufóricos. El vértigo alegre es experimentado por practicantes de todas las religiones. Se llama Enfermedad del Chan, Intoxicación de Dios, o Locura Divina. El quietismo no produce euforia. Produce una inactividad parecida a la de un zombi que no tiene nada que ver con el Budismo Chan o cualquier otra religión, excepto, tal vez, el vudú. </dt><dt> </dt><dt>Nunca deberíamos comenzar un ejercicio de meditación si estamos excitados o inquietos. La mente y el cuerpo deben llegar a un estado relajado. Si estamos enfadados, la introspección y la aplicación de los principios Budistas, particularmente los del perdón y la aceptación, pueden ayudarnos a recobrar nuestra compostura; pero si nuestra angustia persiste debemos rogar por orientación o buscar consuelo para resolver nuestros problemas antes de sentarnos a meditar. </dt><dt> </dt><dt>Si nuestra agitación es meramente una condición temporal, debido quizás a estar agitados o fatigados, deberíamos seguir el método de la "vara de incienso de solo media pulgada". Simplemente nos sentamos en silencio y miramos como arde la vara de incienso durante media pulgada. Si en este tiempo no hemos recuperado nuestra compostura, deberíamos terminar la sesión de meditación. Siempre podemos intentarlo más tarde. </dt><dt> </dt><dt>Asimismo, nuestra respiración debe ser suave y rítmica. Ocasionalmente, mientras estemos practicando meditación, pueden nacer pensamientos perturbadores o nos puede costar respirar debido a que estemos realizando incorrectamente una técnica de respiración. De nuevo deberíamos seguir el método de la "vara de incienso de solo media pulgada", y permitir que nuestra mente y nuestra respiración se asienten antes de continuar la práctica. </dt><dt> </dt><dt>La postura </dt><dt> </dt><dt>Una postura natural, relajada pero recta, es la mejor postura. Nos sentamos sin rigidez ni dolor. Esto es muy importante. El dolor inicia una respuesta de alarma, una emergencia percibida que hace aumentar el latido del corazón y la presión de la sangre en el cuerpo; y bajo tales condiciones, la meditación es imposible. Sin embargo, alguien que pueda sentarse fácilmente en una postura más formal como la posición del loto, puede utilizar esta postura para obtener una ventaja. </dt><dt> </dt><dt>Por supuesto debemos sentarnos de forma erguida para que de este modo nuestros pulmones puedan expandirse completamente. No podemos dejarnos caer ni hacia adelante ni hacia los lados. Si nos encontramos al borde del sueño, deberíamos espabilarnos con unos pocos tragos de té, balanceándonos de lado a lado unas pocas veces, y tomando unas pocas respiraciones profundas. </dt><dt> </dt><dt>El fracaso en el control del cuerpo, de la mente y de la respiración, puede producir pequeñas lesiones como malestar emocional o físico, o grandes lesiones, como distensiones musculares u horrendos encuentros con demonios alucinados que, creo que todos podemos estar de acuerdo, son los eventos más dolorosos. </dt><dt> </dt><dt>Ejercicios respiratorios </dt><dt> </dt><dt>Antes de comenzar cualquier técnica de meditación formal, es absolutamente necesario obtener el control de la respiración. </dt><dt> </dt><dt>Hay dos aproximaciones básicas al control de la respiración: desestructuradas y estructuradas. En ambos métodos los pulmones son comparados a un fuelle. Cuando deseamos llenar un fuelle con aire, separamos los mangos. De la misma forma, cuando deseamos inflar el pecho, comenzamos por extender el abdomen, empujándolo hacia afuera, separándolo de la columna vertebral como pensando que estamos apartando los mangos de un fuelle. Cuando exhalamos, primero dejamos que el aire se escurra y entonces contraemos lentamente el abdomen, exprimiendo el aire que queda en los pulmones como si estuviésemos cerrando el fuelle. </dt><dt> </dt><dt>Nuestra intención debería ser siempre la de respirar de manera tan sutil y no forzada, que si alguien pusiera una pluma de avestruz ante nuestra nariz, no la agitáramos ni al aspirar ni al exhalar. </dt><dt> </dt><dt>1. En la respiración desestructurada, bajamos la mirada y simplemente seguimos la respiración, contando diez respiraciones seguidas. Si perdemos la cuenta, simplemente comenzamos de nuevo. Cuando completemos diez cuentas o ciclos de respiración, simplemente comenzamos de nuevo. </dt><dt> </dt><dt>Comenzamos centrando nuestra atención en la inspiración, fijándonos como el aire entra en la nariz, desciende por la garganta y llena los pulmones. Vemos mentalmente expandirse el pecho y levantarse los hombros. </dt><dt> </dt><dt>Cuando nos preparemos para exhalar, tomemos nota de la cuenta; y entonces veremos como el aire se escurre de nuestros pulmones hacia la nariz. Nos damos cuenta de que nuestros hombros se relajan y caen, y también de que nuestros pulmones se vacían. Cuando completemos la exhalación, observamos contraerse nuestros músculos abdominales. Con práctica, todos los músculos de nuestro abdomen, ingle y nalgas se contraerán para hacer salir el aire residual de los pulmones. </dt><dt> </dt><dt>Por la misma razón, es más fácil contar ciclos de respiración cuando comencemos a exhalar que cuando comencemos a inhalar. Pero cada uno de nosotros es diferente. Contar inhalaciones o exhalaciones es un asunto de elección personal. </dt><dt> </dt><dt>2. En la respiración estructurada, inhalamos, retenemos la respiración, exhalamos y, o bien comenzamos un nuevo ciclo, o bien mantenemos los pulmones vacíos antes de comenzar otro ciclo de respiración. La cantidad de tiempo que destinamos a cada parte del ciclo depende de la fórmula particular que sigamos. Ya que la capacidad de los pulmones varía de individuo a individuo, no puede ser suficiente una única fórmula. Los practicantes pueden escoger entre las variadas proporciones: </dt><dt> </dt><dt>a. La proporción 4:16:8, requiere que la inhalación tome 4 cuentas, que la retención tome 16 cuentas, y la exhalación tome ocho cuentas. </dt><dt> </dt><dt>La proporción 4:16:8:4 requiere un periodo adicional en el que los pulmones quedan vacíos durante cuatro cuentas. Esto es más difícil, pero muchos practicantes la encuentran más propicia para alcanzar estados meditativos profundos. </dt><dt> </dt><dt>Normalmente, un segundo por cuenta es la cadencia prescrita. Sin embargo, hay quien tiene gran dificultad en mantener su respiración, por ejemplo, durante dieciséis segundos. Estos individuos deberían entonces mantener su respiración simplemente durante doce segundos. Con práctica alcanzarán rápidamente la cuenta de dieciséis. Si doce también es muy difícil, entonces pueden probar con ocho y trabajar hasta llegar a doce, y después a dieciséis. </dt><dt> </dt><dt>b. La proporción 5:5:5:5 u otras cuentas igualadas similares también son muy efectivas. Los principiantes pueden encontrar más fácil eliminar la cuenta final de mantener los pulmones vacíos. </dt><dt> </dt><dt>La intención de todos los ejercicios de respiración es establecer una respiración controlada y rítmica. </dt><dt> </dt><dt>Resistiendo el impulso de abandonar </dt><dt> </dt><dt>Por una razón que nadie ha podido determinar aún, a menudo encontramos que cuando nos sentamos a meditar nuestro cojín se convierte en una montaña de hormigas. Los principiantes en Chan experimentan con más frecuencia esta misteriosa transformación del cojín, pero antes o después nos sucede a todos. Comenzamos a retorcernos y la única cosa en que podemos pensar es en marcharnos de ese sitio que provoca comezón. </dt><dt> </dt><dt>Cuando nos sentamos por primera vez, estamos llenos de buenas intenciones. Planeamos hacer un programa completo - como mínimo, veinte ciclos de respiración. Pero después, tras cuatro o cinco ciclos, nos damos cuenta de que estamos sentados sobre una montaña de hormigas y tenemos que cortar nuestro corto programa. </dt><dt> </dt><dt>A veces no hay hormigas ahí. Pero todos nos acordamos de repente de muchas cosas importantes que hemos olvidado hacer; ordenar los libros de nuestra biblioteca; comprar fideos para la cena de mañana; leer el periódico de ayer. Claramente estas cosas deben ser atendidas y así, con gran pesar, nos levantamos de nuestro cojín. </dt><dt> </dt><dt>Queridos amigos, ¿cómo podemos mantener nuestras buenas intenciones? ¿Cómo podemos prevenir nuestra resolución de dimitir tan drásticamente? </dt><dt> </dt><dt>Primero debemos reconocer cómo nos estamos engañando a nosotros mismos. Saben, hay una vieja historia en Chan sobre un rico que contrajo una enfermedad y estaba en gran peligro de muerte. Así que hizo un pacto con el Buda Amitaba. "Perdona mi vida, Señor, y venderé mi casa y le daré a los pobres todo lo que obtenga de su venta." Toda su familia y amigos le escucharon hacer esta promesa. Entonces, milagrosamente, comenzó a recuperarse. Pero a medida que su condición mejoraba, su resolución empezó a disminuir; y cuando estuvo completamente curado, se preguntaba por qué habría hecho tal promesa. Pero ya que todo el mundo esperaba que vendiera su casa, la puso en venta. </dt><dt> </dt><dt>Además de la casa, sin embargo, vendía el gato de la casa. Vendió su casa por un total de diez mil y una monedas de oro. Pero una promesa es una promesa, así que le dio una moneda de oro a los pobres. Esto fue por lo que vendió la casa. El gato, como veis, era un gato muy costoso. Cuando no queremos hacer algo, las cosas triviales se hacen muy importantes. Un gato tiene un valor de diez mil veces el de una casa. </dt><dt> </dt><dt>Todos deberíamos recordar a este hombre siempre que tengamos el deseo de saltar del cojín. Todos deberíamos recordarlo siempre que decidamos cortar repentinamente nuestro programa antes de haberlo finalizado. Pero si no nos disculpamos de realizar nuestra práctica, no deberíamos permanecer en nuestro cojín debido a nuestro sentido de culpabilidad. </dt><dt> </dt><dt>A veces la gente actúa como si estuvieran haciendo un gran sacrificio cuando realizan su práctica de meditación. Piensan: "Lo haré y lo terminaré de una vez". Pero esta no es la actitud adecuada. El tiempo que empleamos en la meditación debería ser el tiempo más maravilloso de nuestro día. Debemos apreciar este tiempo. </dt><dt> </dt><dt>Queridos amigos, estén agradecidos por el Dharma de Buda. Estén agradecidos por los Tres Tesoros. No olviden el refugio eterno que existe para todos en el Buda, en el Dharma y en la Sangha. Den las gracias a la Lámpara que nos lleva desde la oscuridad hasta la luz. <b> </b></dt><dt><b> </b> </dt><dt><a name="_Toc24082303">Capítulo 8 - Perseverancia e Iniciativa</a> </dt><dt> </dt></span><span style="font-family:Arial;font-size:100%;"> </span><span style="font-family:Arial;font-size:100%;"> <dt> </dt></span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>En cierta ocasión, un señor de la guerra que regresaba a casa tras una exitosa campaña militar, se detuvo en un monasterio. Fue a visitar al abad que era un antiguo profesor suyo. </dt><dt> </dt><dt>El abad y el señor de la guerra estaban sentados en el patio charlando agradablemente y bebiendo té, cuando fueron distraídos por una discusión entre un novicio y un monje veterano. El novicio se quejaba de que la técnica de meditación que le había dado el monje veterano era inefectiva e inútil. "No puede enseñarme a concentrarme y mucho menos meditar – gritó el novicio. Deme una técnica más fiable." </dt><dt> </dt><dt>Observando que la discusión estaba afligiendo a su viejo maestro, el señor de la guerra se levantó y dijo, "Por favor, Maestro, permítame ayudar a este joven." Cuando el maestro asintió con la cabeza, el señor de la guerra llamó a seis de sus arqueros. </dt><dt> </dt><dt>Entonces el señor de la guerra llenó su taza de té hasta el borde y se la dio cuidadosamente al novicio. "Toma esta taza de té – ordenó – y sin derramar una sola gota, llévala al rededor de toda la periferia de este patio." </dt><dt> </dt><dt>Cuando el novicio cogió la copa, el señor de la guerra ordenó a sus arqueros: "¡Seguidle! Si derrama una sola gota, ¡disparadle!" Los arqueros tensaron sus arcos y comenzaron a caminar detrás del novicio que, durante los veinte minutos siguientes, aprendió a concentrarse. </dt><dt> </dt><dt>Queridos amigos, no hay substituto para la determinación. La Iluminación es un asunto serio. Nunca se puede alcanzar con una actitud despreocupada o negligente. Deben estar determinados a tener éxito y deben ser firmes en su determinación. </dt><dt> </dt><dt>Aunque parezca mentira, tener éxito en meditación tiene los mismos requerimientos que el ser sospechoso de un crimen; una persona tiene que tener un motivo, unos medios y una oportunidad. No es suficiente con cumplir una o dos de estas condiciones para ser considerado un criminal sospechoso. Deben cumplir las tres: motivo, medios y oportunidad. </dt><dt> </dt><dt>Para ayudarles a comprender esto les contaré varias historias. La primera la he presenciado personalmente. </dt><dt> </dt><dt>En el año mil novecientos surgió la famosa Rebelión Boxer contra los extranjeros, ocho potencias extranjeras, provocadas por el ataque de sus consulados, enviaron fuerzas expedicionarias a Pekín. El Emperador Manchú Guang Sui y la Emperatriz Viuda Zi Xi habían apoyado a los Boxers en sus ataques contra los extranjeros, y por eso temieron naturalmente por sus vidas. Disfrazados, huyeron de Pekín buscando la seguridad de la Provincia Shanxi. Yo era miembro de su séquito. </dt><dt> </dt><dt>Nadie estaba preparado para el viaje. Habíamos partido tan repentinamente y bajo tales condiciones de emergencia, que no hubo tiempo de aprovisionarse para el viaje. No teníamos nada de comida. Tampoco caballos o dinero. </dt><dt>Como se pueden imaginar, esta situación fue particularmente difícil para la familia imperial. No fue solamente que nunca hubieran experimentado hambre, sino que todos sus caprichos de apetito se habían satisfecho siempre por los manjares más delicados. Y por supuesto, nunca habían caminado a ninguna parte. Sillas de manos y carruajes siempre habían mantenido sus pies a una buena distancia del suelo. Y ahí estaban... ¡intentando pasar por ciudadanos normales! </dt><dt> </dt><dt>El primer día caminamos mucho y teníamos un hambre terrible, pero los establos y las cocinas imperiales eran solo un recuerdo continuo. </dt><dt> </dt><dt>Finalmente, exhaustos y hambrientos, suplicamos por comida; y un campesino nos complació dándonos parras de boniatos y sobras de comida que normalmente se reservaban para los cerdos. </dt><dt> </dt><dt>Pues bien, el Emperador, que estaba completamente débil y destrozado, en realidad nunca antes había tomado comida de cerdo; pero a causa de su mucha hambre pensó en verdad que las parras y las sobras estaban deliciosas. "¿Qué es esta excelente comida?" preguntó; y desde luego se quedó sorprendido al conocer su identidad. "Más, más", dijo y se comió con gusto todo lo que pudo. </dt><dt> </dt><dt>No podíamos demorarnos en tomar tan placentera comida ya que, desafortunadamente, estábamos escapando de ocho ejércitos diferentes. Como decían, teníamos que "comer y correr". Apresuradamente nos pusimos en marcha. </dt><dt>Así estaba el poderoso Emperador de China, que anteriormente era llevado a dondequiera que fuese y que nunca comía nada que no fuesen los platos más delicados del gourmet, corriendo el camino y cenando comida para animales. Me imagino que podrán decir que estaba perdiendo las formas... también mentalmente, pues perdió todos sus aires imperiales y parecía encontrarse bien en la simplicidad y humildad de la situación. </dt><dt> </dt><dt>Pero, ¿qué fue lo que motivó al Emperador a caminar tan deprisa y comer con gusto tal comida común? Y, ¿por qué descartó su porte imperial? Se lo diré: ocho ejércitos extranjeros querían matarle y él lo sabía. Estaba corriendo por su vida y de repente desarrolló un sentido bastante agudo para distinguir en que era importante esforzarse y en que no. </dt><dt> </dt><dt>Tiempo después, cuando se reestableció la paz, se marcharon los extranjeros y el Emperador y la Emperatriz Viuda pudieron al fin regresar a Pekín, él volvió a sus viejas maneras. Se convirtió de nuevo en el importante y poderoso señor. Siempre que sentía la más insignificante muestra de hambre, se atiborraba de delicias; y por supuesto, nunca más volvió a caminar a ningún sitio. Cuando estaba huyendo por su vida, se hizo de acero. Pero ahora era de nuevo estúpido y se echó a perder. </dt><dt> </dt><dt>Si hubiera aplicado la misma determinación para huir de los enemigos de su espíritu como el que mostró para huir de los enemigos de su persona, ¿habría algo en este mundo que no pudiera llevar a cabo? Bueno, todos sabemos lo que le sucedió a la Dinastía Manchú. </dt><dt> </dt><dt>Queridos amigos, los demonios de la pereza, del orgullo y de la glotonería nunca negocian la paz. Siempre están en guerra. Solamente una determinación feroz puede dominarlos. Y dominados, se echan y esperan a que aflojemos nuestra resolución, pueden estar seguros de que reaparecerán a la primera oportunidad. </dt><dt> </dt><dt>Determinación e iniciativa. Son indispensables. No se conviertan nunca en esclavos de la conveniencia y del complacer. Aprendan a adaptarse a cualquier situación que se encuentren. Den la bienvenida con más énfasis a los apuros en vez de a la facilidad. Los apuros se presentan con retos... y es superando estos obstáculos como desarrollarán carácter y habilidad. Los retos son nuestros mejores profesores. </dt><dt> </dt><dt>No tengan miedo de fracasar. Inténtenlo una y otra vez. Hay un viejo proverbio que merece la pena recordar: El buen juicio viene de la experiencia, y la experiencia viene del mal juicio. </dt><dt> </dt><dt>No permitan que los fracasos les derroten, se convertirán en la base sobre la que seguramente descansarán sus éxitos. </dt><dt> </dt><dt>Permítanme que les hable de un hombre humilde que adquirió el nombre poco común de, "Maestro Imperial Pantalones de Dragón". </dt><dt> </dt><dt>Una vez hace tiempo – en realidad en la segunda mitad del siglo dieciséis – había un hombre pobre y analfabeto que con devoción deseaba alcanzar la iluminación. Se creía miserable e indigno para convertirse en monje budista, pero con todo fue a un monasterio y preguntó si le dejarían trabajar en sus campos. </dt><dt> </dt><dt>Todos los días este humilde hombre trabajaba alegremente desde el amanecer hasta el anochecer. Era demasiado vergonzoso para presentarse y pedir directamente la ayuda de alguien. Simplemente esperaba que observando a los monjes descubriría un método por el cual poder alcanzar la iluminación. </dt><dt> </dt><dt>Un día vino un monje de visita al monasterio. Este monje había llegado al punto más bajo de su vida espiritual y estaba viajando por varios monasterios intentando hallar un camino para recuperar su fe. Por casualidad se fijó en el hombre que trabajaba tan alegremente en los campos, y le maravilló el entusiasmo del hombre por el trabajo duro. ¿Qué provocaba en el hombre una vida tan feliz? ¿Cuál podría ser su secreto? </dt><dt> </dt><dt>Así que el monje se acercó al hombre y con humildad y admiración preguntó: "Señor, ¿sería tan amable de explicarme su método? ¿Qué práctica sigue?" </dt><dt> </dt><dt>"No tengo práctica – dijo el hombre – pero ciertamente me gustaría aprender una. Venerable Maestro, ¿sería tan amable de darme alguna pequeña instrucción?" </dt><dt> </dt><dt>El monje visitante vio la humildad y sinceridad del hombre y se conmovió bastante. Dijo: "Ha hecho por mí lo que los maestros no han podido." Y estando verdaderamente inspirado, renovó su voto y su determinación por alcanzar la iluminación en aquel mismo momento y lugar. Entonces le dijo al hombre: "Aunque no puedo darle ninguna instrucción que sea tan valiosa como la que usted me ha dado con su ejemplo, estaría encantando de ofrecerle cualquier consejo que pueda. Le sugiero, Buen Señor, que se esfuerce por comprender el Hua T'ou, "¡Amitaba! ¿Quién es el que ahora repite el nombre de Buda?" </dt><dt> </dt><dt>Todo el día mientras trabajaba, el hombre pensaba en este Hua T’ou. Y después, cuando llegó el invierno y no había más trabajo que hacer en el campo, se retiró a una cueva en la montaña y siguió trabajando en su Hua T’ou. Hizo una cama de olorosas espinas de pino. Para la comida recogía piñones y sacaba raíces de la tierra. Con arcilla se hacía un puchero, y después de cocerlo al fuego, podía hervir nieve para hacer té y sopa. </dt><dt> </dt><dt>Cerca de su cueva había una pequeña aldea y cuando el invierno se estaba terminando, y la gente agotó sus provisiones, comenzaron a acudir a él rogando comida. Les daba lo que podía y les enseñaba donde estaban los mejores pinos y raíces, pero muchos estaban demasiado débiles para buscar comida. Peor aún, en su hambre todos se volvieron tacaños, egoístas y pocos dispuestos a ayudar. </dt><dt> </dt><dt>El hombre tuvo una idea. Sabía lo que hacer. Hizo un gran puchero de arcilla y lo llevó al centro de la aldea. Llenó el puchero con nieve y prendió fuego bajo él. Naturalmente todos los aldeanos vinieron a ver lo que estaba haciendo. </dt><dt> </dt><dt>"Hoy – anunció – les enseñaré como hacer sopa de piedra." Todos se rieron. No es posible hacer sopa de piedras. Pero el hombre escogió varias piedras de la falda de la montaña y después de lavarlas cuidadosamente las echó al puchero. </dt><dt> </dt><dt>Entonces, del bolsillo de su gastado abrigo sacó unos pocos piñones y algunas raíces secas. </dt><dt> </dt><dt>Uno de los aldeanos dijo: "Necesitará algo de sal para la sopa." </dt><dt> </dt><dt>"¡Ah! – dijo el hombre – No tengo sal." </dt><dt> </dt><dt>"Yo sí – dijo el aldeano – correré a casa y la cogeré." </dt><dt> </dt><dt>Otro aldeano dijo: "Sabe, por casualidad tengo un repollo en mi bodega. ¿Le gustaría incluirlo en la sopa?" </dt><dt> </dt><dt>Y el aldeano corrió a casa para ir a buscar su viejo repollo. </dt><dt> </dt><dt>Otro aldeano le ofreció dos zanahorias secas mientras que otro recordó una cebolla que tenía guardada. Puñados de arroz vinieron de muchas casas. </dt><dt> </dt><dt>Unos pocos más de vegetales viejos, un pequeño apio silvestre, un poco de pimienta, y entonces, para el deleite de todo el mundo, el delicioso olor de la sopa llenó el aire. </dt><dt> </dt><dt>¡La gente trajo sus cuencos y comió con placer! Había sopa para todo el mundo. Todos estuvieron de acuerdo: "¡Qué hombre más inteligente que es capaz de hacer esta delicada sopa de piedras!" Le agradecieron al hombre su receta, cuyos principales ingredientes eran amor y generosidad. </dt><dt> </dt><dt>De nuevo el hombre regresó a su cueva y continuó trabajando en su Hua T'ou, "¡Amitaba! ¿Quién es, él que ahora repite el nombre de Buda?" </dt><dt> </dt><dt>Pero se extendió su fama por ser una especie de "chef de sopa de piedra"; y cuando su madre y hermana oyeron hablar de su poder maravilloso, le fueron a visitar, trayendo y ofreciéndole un rollo de fina seda. Pero cuando entraron en su cueva, estaba en un profundo Samadhi, y ni respondía a sus comentarios lisonjeros ni agradecía su regalo. Decepcionadas y enfadadas, su madre y su hermana apoyaron el rollo contra la pared y se marcharon. </dt><dt> </dt><dt>Durante trece años vivió en esa cueva y al finalizar este tiempo, su madre murió y su hermana vino sola a llamarlo. Estaba agitada y deprimida, y sentía que su vida no tenía ningún sentido real. </dt><dt> </dt><dt>Cuando entró en la cueva se quedó sorprendida al encontrar el rollo de seda apoyado contra el muro exactamente como lo había dejado. </dt><dt> </dt><dt>"¿Qué secreto poder tienes que te hace tan independiente de las cosas del mundo?" preguntó su hermana. </dt><dt>"No tengo ningún poder secreto – dijo. Me esfuerzo en seguir la vida del Yo Búdico. Me esfuerzo en vivir el Dharma." </dt><dt>Eso no le parecía a ella mucha respuesta, así que se puso en pie para irse. </dt><dt> </dt><dt>"Llévate este rollo de seda contigo – dijo-. Llévate también algo que es más valioso." Y le dio la preciosa instrucción del Hua T’ou. "Todos los días, desde la mañana hasta la noche, repítete a ti misma, ¡Amitaba! ¿Quién es, él que ahora repite el nombre de Buda?" </dt><dt> </dt><dt>El Hua T’ou capturó su atención inmediatamente. Incluso antes de marchar había comenzado a hacer progresos espirituales con esto. Sus pensamientos, en vez de estar dispersos y agitados, de repente asentaron la cabeza para centrarse en el Hua T’ou. En vez de estar deprimida y sin rumbo, se había involucrado activamente en la resolución del problema. </dt><dt> </dt><dt>El hombre, al ver lo fascinada y encantada que estaba con este método, se dio cuenta de que era tiempo para volver al mundo e intentar ayudar a la gente. </dt><dt> </dt><dt>Volvió al monasterio donde anteriormente había trabajado los campos y recibió la ordenación en el Dharma. Pero rehusó vivir en el monasterio. En vez de ello, siguió viaje a Xia Men, una ciudad en la costa sur de la Provincia FuJian, donde construyó una cabaña al borde del camino. Todos los días cogía raíces y vegetales silvestres, y hacía té que ofrecía gratuitamente a los peregrinos y otros viajeros. </dt><dt> </dt><dt>Siempre que alguien le pedía consejo sobre cuestiones espirituales, repetía el consejo que le había dado el monje visitante: ¡recomendaba el Hua T’ou! </dt><dt> </dt><dt>Entonces, durante el reinado del Emperador Wan Li, la Emperatriz Madre murió, y el Emperador, destrozado por el dolor, planeó una suntuosa ceremonia funeral, una que fuera digna de su recuerdo. Pero, ¿qué sacerdote era digno de conducir el servicio? ¡Era un problema! Hay un viejo proverbio que dice: "La familiaridad es la causa del menosprecio", y el Emperador evidentemente conocía muy bien a los sacerdotes budistas de la capital. No creyó que ninguno de ellos fuera lo suficientemente santo para conducir el sagrado servicio. </dt><dt> </dt><dt>Día tras día se enfrentaba con el problema de encontrar un sacerdote adecuado, y entonces una noche su madre le habló en sueños. "En la prefactura de Chang Zou en la Provincia Fujian – dijo – hay un monje que es adecuado para conducir mi servicio funeral." No le dio más información. </dt><dt> </dt><dt>Inmediatamente, el Emperador envió oficiales del gobierno a la Provincia FuJian para buscar a los monjes más santos. Y los oficiales, no teniendo mejor juicio de santidad que la que tenían entonces, simplemente cogieron a los monjes más eminentes que pudieron encontrar. Naturalmente, estos monjes estaban encantados de haber sido elegidos para el honor y, naturalmente, los oficiales estaban encantados de haber cumplido su cometido; y de este modo un grupo de oficiales y monjes muy felices regresaban a la capital. Por el camino se pararon en la cabaña del monje para tomar té. </dt><dt>"Venerables Maestros – dijo el monje. Por favor, cuéntenme la razón por la que están tan felices." </dt><dt> </dt><dt>Uno de los eminentes sacerdotes no pudo resistir el fanfarronear: "Estamos de camino hacia la capital para conducir los servicios funerales de la Emperatriz Madre." </dt><dt> </dt><dt>Esta no le parecía al monje una ocasión para la diversión. Respetaba al Emperador y a la Emperatriz Madre que eran ambos budistas devotos. "Me gustaría ayudadles – dijo – ¿Podría acompañarles a la capital?" </dt><dt> </dt><dt>Todos los oficiales y sacerdotes se rieron de él por ser tan tosco. Entonces se burlaron del sacerdote preguntándole incrédulamente, "¿En realidad espera ayudarnos a conducir los servicios?" </dt><dt> </dt><dt>"¡Oh, no! – dijo el monje – sencillamente me gustaría llevar su equipaje." "Eso está mejor – dijo el sacerdote. Muy bien, puedes venir en calidad de porteador." </dt><dt> </dt><dt>Mientras tanto, el Emperador había ideado una prueba para determinar qué sacerdote de los muchos que había convocado era digno de conducir la ceremonia. Tenía el Sutra del Diamante esculpido en una piedra, y cuando escuchó que los oficiales y sacerdotes se acercaban a palacio, situó esa piedra en el umbral de la Puerta de Palacio. </dt><dt> </dt><dt>Tristemente el Emperador vio como, uno por uno, los oficiales y los sacerdotes cruzaban la piedra, charlando unos con otros sobre diferentes cosas que harían para hacer la ceremonia más impresionante. </dt><dt> </dt><dt>El monje porteador fue el último monje en acercarse a la piedra. Cuando la vio, a pesar de que no la sabía leer, notó que era, ¡una Escritura Santa! y le preguntó a uno de los sacerdotes, "¿Qué dicen estos caracteres?" </dt><dt> </dt><dt>Los sacerdotes dieron la vuelta, miraron hacia abajo y leyeron, "¡Qué! ¡Es el Sutra del Diamante!" dijeron sorprendidos; pero siguieron caminando y hablando unos con otros. El monje, sin embargo, no cruzó el umbral. En vez de ello, se arrodilló ante la piedra, y se quedó fuera de la puerta del palacio. </dt><dt> </dt><dt>El Emperador vio todo esto y entonces mandó entrar al monje. </dt><dt> </dt><dt>"¡Señor! – dijo el monje – siento desobedecerle, pero no puedo deshonrar estas sagradas palabras caminando sobre ellas." </dt><dt> </dt><dt>"Si estuvieras leyendo el sutra, podrías sostenerlo en tus manos sin deshonrarlo, ¿no?" preguntó el Emperador. </dt><dt> </dt><dt>"Si pudiera leerlo, Señor, entonces no deshonraría las palabras sosteniéndolas en mi mano." </dt><dt> </dt><dt>El Emperador sonrió. "Entonces cruza el umbral caminando sobre tus manos." </dt><dt> </dt><dt>Así que el monje dio un salto mortal y entró al Palacio poniendo solo las manos sobre el suelo. </dt><dt> </dt><dt>Entonces el Emperador decretó que este humilde monje conduciría la ceremonia funeral. Pero cuando el Emperador preguntó al monje cómo tenía intención de proceder, el monje simplemente respondió, "Conduciré la ceremonia mañana por la mañana. Me hará falta un pequeño altar, un estandarte procesional, algo de incienso, candelabros y fruta para ofrecer." </dt><dt> </dt><dt>Esta no era la gran ceremonia que el Emperador tenía en mente. Así que, inspirado por los refunfuños de los eminentes sacerdotes, comenzó a dudar sobre su decisión de permitir al monje conducir los servicios. </dt><dt> </dt><dt>Inmediatamente ideó otra prueba. Ordenó a dos de sus más bellas y experimentadas concubinas que fueran a los aposentos del monje y le ayudaran en su ablución para la ceremonia. </dt><dt> </dt><dt>Y esa noche, por orden Imperial, esas dos mujeres fueron hasta el monje y procedieron a lavarlo y a masajearlo; pero aunque usaron los ungüentos y perfumes más sensuales, e hicieron todo lo que sabían hacer para estimularlo sexualmente, permaneció impasible ante sus esfuerzos. Cuando terminaron, les dio políticamente las gracias por su amable asistencia y les deseó buenas noches. Las mujeres le contaron esto al Emperador que se tranquilizó enormemente. Ordenó que la ceremonia se celebrara de acuerdo al diseño del monje. </dt><dt> </dt><dt>Durante la ceremonia, el monje fue al ataúd de la Emperatriz Madre y dijo, "Míreme, querida Dama, como su propio Rostro Original. Sabed que en realidad no hay dos de nosotros sino solo uno. Piense que no hay nada que conducir y nada que seguir, por favor, acepte mis instrucciones y de un paso para entrar en el Paraíso." </dt><dt> </dt><dt>El Emperador oyó esto por casualidad y se consternó de nuevo por la simplicidad del discurso. "¿Es esto suficiente para liberar a Su Majestad, la Emperatriz Madre?" preguntó. Pero antes de que el monje pudiera responder, la voz de la Emperatriz Madre, sonando un poco molesta, resonó por todo el Palacio. "¡Ahora estoy liberada, hijo mío! ¡Inclina tu cabeza y dale las gracias a este santo maestro!" </dt><dt> </dt><dt>El Emperador se quedó pasmado, pero tan feliz de escuchar la voz de su madre que sonrió con alegría. Inmediatamente ordenó que se celebrara un banquete en honor del monje. </dt><dt> </dt><dt>En ese banquete ocurrió algo extraño. El Emperador se presentó ataviado suntuosamente y cuando el monje vio los pantalones del Emperador, que estaban ricamente bordados con dorados dragones del cielo, se quedó prendado por su belleza. El Emperador le vio mirar fijamente sus pantalones y dijo, "¡Virtuoso! ¿Le gustan estos pantalones?" </dt><dt> </dt><dt>"Sí, Señor – respondió el monje. Creo que son muy luminosos y muy bellos. Brillan como lámparas." </dt><dt> </dt><dt>"Lo mejor para que la gente te siga" dijo el Emperador; ¡y en el acto se quitó los pantalones y se los dio al monje! Después de eso, el monje fue conocido como "Maestro Imperial Pantalones de Dragón". </dt><dt> </dt><dt>Les cuento esta bella historia porque quiero que siempre recuerden estos Pantalones de Dragón y al monje perseverante que los recibió. </dt><dt> </dt><dt>Queridos amigos, imagínense que ustedes también visten estos luminosos pantalones y son una lámpara hacia los pies de otros, una luz reluciente que pueden seguir. Recuerden también cómo ese monje se fijó rápidamente en los pantalones del Emperador, otros se fijarán en el suyo. No se rindan a la tentación o a la distracción. Mantengan siempre su Hua T'ou en mente. Nunca se separen de él. Se convertirá en la fuente de su iniciativa. </dt><dt> </dt><dt>Y así es como deberían siempre ayudar a los demás, no se permitan nunca convertirse en desamparados. </dt><dt> </dt><dt>Recuerden: motivo, medios y oportunidad. ¡Conserven su motivación! ¡Busquen los medios de la Iluminación! </dt><dt> </dt><dt>¡Encuentren la oportunidad de practicar! Entonces, cuando alguien pregunta, "¿Quién es culpable del éxito en Chan?", puedan decir, "Yo soy." </dt><dt> <b> </b></dt><dt><b> </b> </dt><dt><a name="_Toc24082304">Capítulo 9 - Transmisión Sin Palabras</a> </dt><dt> </dt><dt> </dt><dt>¡Quedarse con el Chan! Esta es la manera más efectiva de alcanzar la iluminación. No se dejen atraer por otros métodos. </dt><dt> </dt><dt>Incluso Yong Jia, por confesión propia, gastó un montón de tiempo filosofeando intelectualmente antes de intentar el método Chan con el Patriarca Hui Neng. "En mi juventud – dijo – estudié sutras, shatras y comentarios intentado discriminar sin parar entre nombre y forma. Podría también haber intentado contar los granos de arena del océano. </dt><dt> </dt><dt>Había olvidado la cuestión del Buda. '¿Puede un hombre que cuente las joyas de otros hombres hacerse rico?'" </dt><dt> </dt><dt>El método Chan es verdaderamente como la espada del Rey Vajra. De un golpe puede cortar la ilusión para alcanzar la Budeidad. </dt><dt> </dt><dt>Siempre que pienso sobre los años de práctica que a menudo preceden a la experiencia momentánea de la iluminación, pienso sobre el Maestro Chan Shan Zan. Todos podemos aprender mucho de él. </dt><dt> </dt><dt>Shan Zan tuvo un maestro que desdichadamente no estaba iluminado. Uno no puede dar lo que no tiene; y así, sin nada, Shan Zan abandonó a su antiguo maestro para ir a estudiar con el Maestro Bai Zang. </dt><dt> </dt><dt>Bajo la guía del Maestro Bai Zang, Shan Zan alcanzó la iluminación y entonces, con afectuoso respeto, volvió a visitar a su antiguo maestro. </dt><dt> </dt><dt>El anciano le preguntó, "¿Qué aprendiste después de abandonarme?" Y como estaba iluminado, Shan Zan pudo responder amablemente "Nada, absolutamente nada." Para el viejo, fue una noticia agridulce. Sentía que su estudiante no hubiera aprendido nada, pero estaba feliz de tenerlo de vuelta. "Si quieres, puedes quedarte aquí – dijo." </dt><dt>Así que Shan Zan se quedó y sirvió a su antiguo maestro. </dt><dt> </dt><dt>Un día, mientras tomaba un baño, el anciano le pidió a Shan Zan que le restregara la espalda porque la tenía muy sucia. Cuando Shan Zan comenzó a frotársela dijo: "Qué curiosos ventanales de cristal hay en el vestíbulo de su Buda." Su maestro no sabía lo que él quería decir. "Por favor – le pidió – explícame tu comentario." </dt><dt> </dt><dt>Mientras Shen Zan continuaba limpiando la suciedad dijo: "Aunque usted no lo pueda ver, su Yo Búdico emana tales rayos luminosos." Esta respuesta confundió al maestro. </dt><dt> </dt><dt>Unos días mas tarde, cuando el maestro se sentó bajo una ventana de papel encerado para estudiar un sutra, una abeja comenzó a zumbar por la habitación; y la abeja, atraída por la luz exterior, siguió chocando contra la ventana de papel, intentando salir de la habitación. Shen Zan observó a la frustrada abeja y dijo, "¡Así que quieres salir fuera y entrar en la infinidad del espacio! Bueno, no lo harás penetrando el viejo papel encerado..." Entonces simplemente dijo, "Las puertas están y continúan abiertas pero la abeja rehuye a salir por ellas. Mira cómo se golpea la cabeza contra la ventana cerrada. ¡Estúpida abeja! ¿Cuándo comprenderá que el Camino está bloqueado por el papel?" </dt><dt> </dt><dt>Entonces una chispa de luz comenzó a penetrar la mente del profesor. Sintió el más profundo significado de las palabras de Shan Zan. Preguntó astutamente, "Te has ido un largo tiempo. ¿Estás seguro de que no has aprendido nada mientas estabas fuera?" </dt><dt> </dt><dt>Shan Zan rió y confesó: "Después de abandonarle estudié bajo el Maestro Bai Zhang. A través de él aprendí cómo detener mi mente discriminatoria... dejar de ser crítico... trascender el mundo del ego. A través de él alcancé la Sagrada Fruta de la iluminación." </dt><dt> </dt><dt>Entonces, cuando el viejo maestro escuchó esta maravillosa noticia, reunió a todos los monjes y mandó preparar un banquete en honor de Shan Zan. Estaba muy contento. "Por favor – le pidió a Shan Zan – permite a tu viejo maestro que se convierta en tu estudiante. Por favor, explícame el Dharma... especialmente lo relativo a los baños y las abejas." </dt><dt> </dt><dt>Shan Zan rió. "Tu Yo Búdico resplandece en ti aunque no puedas verlo por ti mismo. Siempre es puro y ninguna cantidad de basura puede mancharlo jamás. Además, tus ojos siempre están mirando hacia afuera, fijados en páginas impresas; pero el Infinito no puede ser atrapado por las palabras. Son los libros solamente los que nos ocupan y entretienen en debates. Si quieres liberarte de la ilusión debes mirar hacia el interior. El Camino hacia el Infinito está en la otra cara de tu contemplación. ¡Mira hacia adentro para ver tu resplandeciente y deslumbrante Yo Búdico!" </dt><dt> </dt><dt>¡De repente el viejo profesor comprendió! ¡De repente vio su propia Naturaleza búdica! Se excitó tanto que declaró que Shan Zan sería el Abad del monasterio. "¡Quién hubiera pensado que en mi vejez finalmente lo conseguiría! gritó." </dt><dt> </dt><dt>Pero esto es lo más bonito del Momento Eterno, ¿no? Caminen fuera del tiempo una sola vez, y todos los años que han gastado en la ignorancia y el sufrimiento retroceden y se alejan en la vaguedad. Solo hay una cosa que parecen recordar. Su propio ‘yo’ viejo se ha ido y todos los viejos amigos, enemigos y familiares, y todas sus viejas experiencias, amargas o dulces, han perdido su poder sobre él. Eran como una película... creíble mientras él estaba en el teatro, pero no cuando salió a la luz de Sol. La Realidad desvanece la ilusión. </dt><dt> </dt><dt>En el Nirvana no eres joven ni viejo. Simplemente eres. Y, ¿quién eres? Eso es fácil. </dt><dt> </dt><dt>El Buda. <b> </b></dt><dt><b> </b> </dt><dt><a name="_Toc24082305">Capítulo 10 - Pang el Seglar</a> </dt></span><span style="font-family:Arial;font-size:100%;"> </span><span style="font-family:Arial;font-size:100%;"> <dt> </dt></span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt> </dt><dt>A veces la gente normal tiene la idea de que el significado del Chan es tan profundo que, posiblemente, solo los hombres y mujeres que han sido ordenados en el Dharma pueden penetrar en él. Pero esto no es así. En realidad los sacerdotes sentimos a menudo que estamos más allá de nuestro alcance. Y siempre, mientras chapoteamos en el agua intentando mantenernos a flote en nuestros bonitos uniformes, viene un civil que pasa como relámpago por nuestro lado, nadando como un campeón Olímpico. Un civil como este, fue Pang el Seglar, él habría ganado la medalla de oro del Chan. Ha sido un héroe no solo para cientos de seglares dignos, sino también, lo confieso, para cada sacerdote que alguna vez haya estudiado su estilo triunfal. </dt><dt> </dt><dt>Pang el Seglar vivió durante la segunda mitad del siglo ocho, una edad dorada del Chan. Era un hombre culto y de familia – tenía una mujer, un hijo y una hija – y estaba bastante sobrado económicamente como para poder dedicar su tiempo a los estudios budistas. </dt><dt> </dt><dt>Tenía la idea de que una persona necesitaba soledad para meditar y estudiar el Dharma, así que se construyó un pequeño monasterio de una habitación cerca de la casa familiar. Iba allí todos los días a estudiar y practicar. </dt><dt> </dt><dt>Sus hijos y su mujer también estudiaban el Dharma; pero permanecían en la casa familiar, llevando sus negocios y haciendo sus cosas, incorporando el Budismo a su vida diaria. </dt><dt> </dt><dt>Pang el Seglar se sumergió en los sutras y un día se encontró que él también estaba fuera de su alcance. No había aprendido a nadar todavía. Ese día, se marchó enfadado de su cabaña-monasterio y, en humilde frustración se quejó a su mujer, "¡Difícil! ¡Difícil! ¡Difícil! ¡Intentar comprender tantos hechos es como intentar guardar semillas de sésamo en las hojas de la copa de un árbol!" </dt><dt> </dt><dt>Su mujer respondió, "¡Fácil! ¡Fácil! ¡Fácil! Has estado estudiando palabras, pero yo estudio la hierba y encuentro al Yo Búdico reflejado en cada gota de rocío." </dt><dt> </dt><dt>Entonces, la hija de Pang el Seglar, Ling Zhao, estaba escuchando este chapoteo verbal, así se fue nadando. "¡Dos viejos – dijo – charlando estúpidamente!" </dt><dt> </dt><dt>"¡Un momento! -gritó Pang el Seglar- Si eres tan lista, cuéntanos tu método." </dt><dt> </dt><dt>Ling Zhao regresó hasta donde estaban sus padres y dijo gentilmente, "No es difícil y no es fácil. Cuando tengo hambre, como. Cuando estoy cansada, duermo." Ling Zhao había dominado el Chan Natural. </dt><dt> </dt><dt>Pang el Seglar aprendió mucho ese día. Aprendió tanto que apartó sus libros, cerró su pequeña cabaña-monasterio, y decidió visitar a diferentes maestros Chan para probar su comprensión. Seguía sin poder competir con su propia hija, pero había hecho un gran progreso y se estaba haciendo bastante bueno. </dt><dt> </dt><dt>Finalmente llegó a la Montaña Nan Yueh donde el Maestro Shi Tou tenía un refugio monástico. Pang el Seglar fue directamente al maestro y le preguntó, "¿Dónde puedo encontrar a un hombre que no esté apegado a las cosas materiales?" El Maestro Shi Tou alzó lentamente sus manos y cerró la boca de Pang. En este gesto, el Chan de Pang se hizo verdaderamente más profundo. Se quedó en Nan Yueh muchos meses. </dt><dt> </dt><dt>Todos los monjes que allí había le observaban y se hicieron bastante curiosos hacia su Chan Natural, su perfecta ecuanimidad. Incluso el Maestro Shi Tou fue movido a preguntarle cuál era su secreto. "Todo el mundo se maravilla con sus métodos, dijo Shi Tou, dígame, ¿tiene poderes especiales?" </dt><dt> </dt><dt>Pang el Seglar sonrió y dijo, "No, no tengo poderes especiales. Mi día está lleno de actividades humildes y solo mantengo mi mente en armonía con mis tareas. Acepto lo que viene sin deseo o aversión. Cuando me encuentro con otra gente, mantengo una actitud no crítica, nunca admiro, nunca censuro. Para mí, lo rojo es rojo y no carmesí o escarlata. Así que, ¿qué maravilloso método utilizo? Bueno, cuando corto madera, corto madera; y cuando llevo agua, llevo agua. </dt><dt> </dt><dt>Comprensiblemente el Maestro Shi Tou se quedó impresionado con esta respuesta. Quería que Pang se uniera a la Sangha. "Alguien como usted no debería seguir siendo un Seglar – dijo Shi Tou – ¿Por qué no se afeita la cabeza y se hace monje?" </dt><dt> </dt><dt>La proposición marcó el final de la estancia de Pang con Shi Tou. De manera clara, no podía aprender más de este maestro. Pang respondió con un simple comentario. "Haré lo que haga", y lo que hizo fue marcharse. </dt><dt> </dt><dt>Después subió al peldaño de la puerta del formidable Maestro Ma Zu. Le preguntó de nuevo al maestro, "¿Dónde puedo encontrar un hombre que no esté apegado a las cosas materiales?" Ma Zu frunció el ceño y respondió, "Te lo diré cuando hayas bebido el Río del Oeste de un solo trago." </dt><dt> </dt><dt>Cuando comprendió ese comentario, Pang pudo completar su iluminación. Vio que la Mente No-Crítica no era suficiente. Su mente tenía que hacerse tan inmensa como la Mente del Buda; tenía que abarcar todo, el Samsara y el Nirvana, para expandirse hasta el Vació del Infinito. Una mente como ésta, puede beberse el Pacífico. </dt><dt> </dt><dt>Pang el Seglar siguió con el Maestro Ma Zu hasta que un día descubrió que tampoco tenía más que aprender con él. En esa ocasión en particular Pang se acercó a Ma Zu y observándole dijo, "Alguien que ha alcanzado la Iluminación le pide que levante los ojos." Ma Zu deliberadamente miró hacia abajo." Pang el Seglar suspiró, "¡Qué bonito toca el laúd sin cuerdas!" </dt><dt> </dt><dt>En este punto, Ma Zu había confirmado <u>que no hay diferencia entre los seres humanos</u>, <u>que en realidad eran uno y el mismo individuo</u>. Cuando Pang bajó los ojos, Ma Zu bajó los suyos. No había nadie para poder mirar hacia arriba. Pero entonces, inexplicablemente, Ma Zu lo miró directamente y rompió el encanto, por así decirlo. Así que Pang el Seglar se doblegó y permaneció en obediencia hasta que Ma Zu se puso en pie y comenzó a alejarse. Cuando el Maestro le rozó al pasar, el Seglar susurró, "Échelo a perder, no lo ha hecho ya... tratando de intentar ser listo." </dt><dt> </dt><dt>Pang el Seglar había alcanzado la maestría y todos los maestros con que se encontraba lo reconocían. Pero lo que es evidente para un maestro no siempre lo es para un simple monje. Un día de invierno, mientras Pang abandonaba el monasterio del Maestro Yao Shan, algunos monjes jóvenes, que eran desdeñosos de su posición de simple seglar, le acompañaron hasta la puerta principal. Cuando Pang miró fuera vio que estaba nevando. "¡Cuánta nieve! -dijo- Los copos no caen en otra parte." Un monje llamado Quan, que era tan insolente como estúpido, se equivocó completamente en la inteligencia del comentario de Pang, "¿Dónde esperabas que cayeran los copos?" </dt><dt> </dt><dt>Entonces, Pang tuvo un buen detalle felicitando a la nieve por no caer en la cocina o en la sala de meditación, que es como decir, por caer donde la nieve se supone tiene que caer - en el patio y los campos, sobre los árboles y caminos. Pang sabía que tendría que caminar una gran distancia en esa nieve de frío cortante, y había aceptado este hecho sin angustia. </dt><dt> </dt><dt>Pero Pang no solo tenía la sabiduría de un maestro, también tenía el temperamento. Cuando vio la mofa en el rostro del joven monje, le golpeó. </dt><dt> </dt><dt>"¡Cómo osas!" dijo el monje. </dt><dt> </dt><dt>"¿Y tú eres un monje ordenado? -preguntó Pang incrédulamente- ¡Serás rechazado en las puertas del Infierno!" </dt><dt> </dt><dt>"¿Qué quieres decir con esto?" preguntó el monje. </dt><dt> </dt><dt>Pang le golpeó de nuevo. "Quiero decir que aunque tengas ojos, orejas y lengua, estás completamente ciego, sordo, y mudo." Entonces calmadamente salió a la nieve como si fuese la luz de Sol. Le había dado al monje toda una lección. </dt><dt> </dt><dt>Pero normalmente era extremadamente amable y paciente con aquellos a quien instruía. </dt><dt> </dt><dt>Un día, cuando escuchó a un hombre que estaba intentado explicar el Sutra del Diamante, se dio cuenta de que aquel estaba luchando con el significado de una línea que trataba sobre la no-existencia de la personalidad del ego, "Quizás pueda ayudarle – dijo Pang – ¿Usted comprende que lo que es condicional y cambiante no es real, y lo que es incondicional e inmutable es real?" </dt><dt> </dt><dt>"Sí" respondió el comentador. </dt><dt> </dt><dt>"Entonces, ¿no es verdad que los egos son condicionales y cambiantes, que el no-ego es el mismo de un minuto a otro? ¿No es verdad que cada minuto que pasa, dependiendo de las circunstancias y las condiciones, adquirimos nueva información y nuevas experiencias así como olvidamos antigua información y antiguas experiencias?" </dt><dt> </dt><dt>"Sí" añadió el comentador. </dt><dt> </dt><dt>"Pero – pregunto Pang – ¿qué hay en nosotros que es incondicional y permanente?" </dt><dt> </dt><dt>"¡Nuestra Naturaleza búdica común! -respondió el comentador, sonriendo de repente, comprendiendo de repente – ¡Solo esto es real! ¡El resto es mera ilusión!" Estaba tan feliz que inspiró a Pang para escribir un poema: </dt><dt> </dt><dt>Dado que no hay ni ego ni personalidad </dt><dt>¿Quién está lejos y quién está cerca? </dt><dt>Toma mi consejo y deja de hablar sobre la realidad. </dt><dt>Experiméntala directamente por ti mismo. </dt><dt>La naturaleza de la Sabiduría del Diamante </dt><dt>Es verdad en toda su pureza única. </dt><dt>Los egos ficticios o falsos no pueden dividirla ni ensuciarla. </dt><dt>Las expresiones, "escucho", "creo", "comprendo" </dt><dt>Son simplemente recursos, </dt><dt>Herramientas en las manos del cortador del diamante. </dt><dt>Cuando el trabajo está hecho, termina con ellas. </dt><dt> </dt><dt>Pang el Seglar y su hija Ling Zhao viajaron por China cubriendo sus gastos mediante la venta de artículos de bambú que ellos mismos hacían. Envejecieron juntos, convirtiéndose en leyendas de la iluminación. Su última residencia fue una cueva en la montaña. </dt><dt> </dt><dt>Pang sabía que había llegado la hora de poner a un lado su carga. Estaba muy cansado y no podía seguir adelante. Dentro de la cueva había una roca en particular donde siempre se sentaba a meditar; tomó asiento y, pensando en fallecer cuando el Sol estuviera justamente sobre su cabeza, envió a Ling Zhao para mirar el momento en que llegaba el mediodía. En pocas minutos, sin embargo Ling Zhao volvió a la cueva sin aliento por la emoción, "¡Oh Padre – gritó – debes venir afuera y ver esto! ¡Ha habido un eclipse de Sol!" </dt><dt> </dt><dt>Bueno, era un hecho extraordinario, si es que alguna vez hubo uno. Pang no pudo resistirse a echar un vistazo. Se levantó de su roca de meditación y salió afuera. Miró una y otra vez pero no había ningún eclipse. El mediodía había llegado, eso era todo. Pero, ¿dónde estaba Ling Zhao? </dt><dt> </dt><dt>Pang regresó a la cueva y la encontró muerta, su cuerpo sentado derecho en su roca de meditación. "¡Oh, esta chica! – lloró Pang – Siempre me ha llevado la ventaja." </dt><dt> </dt><dt>La incineró y entonces, una semana después, él también entró en el Nirvana. Su cuerpo fue incinerado y las cenizas esparcidas en las aguas de un lago cercano. <b> </b></dt><dt><b> </b> </dt><dt><a name="_Toc24082306">Capítulo 11 - El Dao Inmortal</a> </dt><dt> </dt><dt> </dt><dt>Cuarenta y tres generaciones de maestros Chan han pasado desde que el Sexto Patriarca sostuviera en alto la Lámpara del Dharma. Cuarenta y tres generaciones de buscadores han encontrado el Camino, guiados por su Luz. </dt><dt>Sin importar lo ratificada que esté una persona en otro Camino, puede ser guiada por el Chan. Cuando entra la luz del sol por la ventana, no ilumina algunas partes de la habitación dejando otras en la oscuridad. La habitación entera se ilumina por la Verdad del Sol. Así que, una persona, sin importar el Camino que haya escogido, puede recibir los beneficios de la Lámpara del Chan. </dt><dt> </dt><dt>Tomen el famoso caso del Dao Inmortal Lu Dong Bin. </dt><dt> </dt><dt>Lu Dong Bin era el más joven y más desenfrenado de todos los Dao Inmortales. En realidad, pueden decir que era bastante salvaje. Al menos así es como empezó. </dt><dt> </dt><dt>En sus días mortales fue llamado Chuan Yang... un nativo de Jing Chuan que vivió al final de la Dinastía T'ang. Pasó hace más de mil años, pero aquellos días no eran tan diferentes a los nuestros. Si un hombre joven quiere abrirse camino, necesita una educación. En nuestro tiempo, sacaría un titulo en el colegio mayor. Pero en aquellos días tuvo que pasar el temible Examen del Alumno. Si alguien no podía pasar este examen tenía que pensar seriamente en la agricultura. </dt><dt> </dt><dt>Bueno, Chuan Yang intentó pasar tres veces el Examen del Alumno, y lo suspendió las tres veces. Estaba frustrado y deprimido. Sabía que había defraudado a su familia, y que tampoco había hecho mucho por él mismo. Fue su propio futuro profesional lo que había condenado. </dt><dt> </dt><dt>Así que Chuan Yang hizo lo que haría un joven muy desesperado, comenzó a pasar el rato en vinaterías intentando alcoholizarse hasta morir. </dt><dt> </dt><dt>El camino que toma el alcohol tenía la misma dirección para Chuan Yang que para cualquier otro: directamente desde la garganta hasta el estómago. Como dice una vieja expresión, primero Shun Yung bebía vino, después el vino bebía vino, y por último el vino bebía Shu Yung. Shu Yung estaba en muy mal estado cuando el Dao Inmortal, Zhong Li Quan, se encontró por casualidad con él en una de esas tabernas. </dt><dt> </dt><dt>El Dao Inmortal se interesó por el joven. "En vez de intentar acortar tu vida con el vino – dijo – por qué no intentas alargarla con el Dao." </dt><dt> </dt><dt>En vez de una vida corta y miserable, Zhong Li Quan le ofrecía a Chuan Yang una vida larga y feliz. El ofrecimiento parecía un buen negocio. Chuan Yang podría no tener lo que hacía falta para ser un burócrata gubernamental, pero desde luego tenía todo lo necesario para intentar una alquimia espiritual. </dt><dt> </dt><dt>Chuan Yang no tenía otra cosa que hacer con su tiempo así que tenía muchas oportunidades para practicar. Definitivamente estaba motivado. Supongo que comenzaba a darse cuenta de lo lejos que había ido, que había golpeado bajo, por así decirlo. Cuando una persona se da cuenta de que no tiene nada que perder mirando la vida desde otro punto de vista, está más abierto a nuevas ideas. </dt><dt> </dt><dt>Así que Chuan Yang tenía la motivación y la oportunidad. Solo le quedaba adquirir los medios. Y eso era lo que Zhong Li Quan le estaba ofreciendo. Le enseñaría las técnicas necesarias. </dt><dt> </dt><dt>Chuan Yang puso su corazón y alma al dominio de lo que se conoce como Pequeña Orbita Cósmica, una poderosa práctica de yoga que utiliza la energía sexual para transmutar la escoria de la naturaleza humana en el Oro de la Inmortalidad. Se hizo tan bueno que podía hacerse invisible o aparecer en dos lugares a la vez... eso es bastante bueno. </dt><dt> </dt><dt>Un día decidió volar sobre el Monasterio de Chan Hai Hui que estaba situado en la Montaña Lu Shan. Los Santos y los Inmortales pueden hacer eso, saben. Son como pilotos sin aeroplano... o paracaídas. </dt><dt> </dt><dt>Mientras estaba volando por allí, observó la cabeza de los monjes Budistas salmodiando y trabajando duro haciendo todas las cosas comunes y ordinarias que los monjes Budistas hacen. Así que para alardear de sus poderes y burlarse de los monjes industriosos, escribió un pequeño y cruel poema en la pared de la torre del campanario del monasterio: </dt><dt> </dt><dt>Con la Joya dentro de mi tesoro del Hara, </dt><dt>cada verdad se convierte en mi placer. </dt><dt>Cuando se termina el día puedo relajarme </dt><dt>Mi mente no tiene que preocuparse de obligaciones. </dt><dt>Vuestro estúpido Chan carece de propósito. </dt><dt> </dt><dt>Entonces se alejó volando. Todos los días que el Abad, el Maestro Chan Huang Lung, miraba la torre del campanario tenía que leer esa horrible poesía. </dt><dt> </dt><dt>Un día cuando el anteriormente llamado Chuan Yang – entonces se le conocía como el Inmortal Lu Dong Bin – estaba volando por las proximidades del monasterio, vio una nube púrpura con forma de paraguas sobre el mismo. Esa era una clara indicación de que algo muy espiritual estaba sucediendo, así que Lu Dong Bin pensó en bajar para echar un vistazo. </dt><dt> </dt><dt>Todos los monjes se estaban dirigiendo a la Sala del Dharma así que se disfrazó de monje y les siguió. Pero no podía engañar al viejo Abad Huang Lung. </dt><dt> </dt><dt>"No creo que exponga hoy el Dharma – gruñó Huang Lung. Parece que tenemos un Ladrón del Dharma entre nosotros." </dt><dt> </dt><dt>Lu Dong Bin dio un paso al frente y arrogantemente hizo una reverencia al Maestro. "¿Sería usted tan amable – le desafió sarcásticamente – de iluminarme al significado de la expresión, 'Un grano de trigo puede contener el universo, y las montañas y los ríos pueden caber en un pequeño puchero de cocina’?" Lu Dong Bin no creía en el estado vacío de no-ego. Aceptaba la falsa creencia de que el ego de alguna forma sobrevivía a la muerte. </dt><dt>Huang Lung se rió de él. "¡Mirad! Un diablo guarda un cadáver." </dt><dt> </dt><dt>"¿Un cadáver? -replicó Lu Tun Pin- ¡Ja! ¡Mi ‘calabaza’ está llena con el elixir de la inmortalidad!" </dt><dt> </dt><dt>"Por mí puedes arrastrar tu cadáver durante toda la eternidad – dijo Huang Lung – Pero ahora, ¡vete de aquí!" </dt><dt> </dt><dt>"¿No puedes responder a mi pregunta?" se mofó Lu Dong Bin. </dt><dt> </dt><dt>"Pensé que tenías todas las respuestas que necesitabas – se burló Huang Lung – " Recordó el poema. </dt><dt> </dt><dt>Lu Dong Bin respondió con furia. Arrojó su temida espada, el "Diablo Asesino", a Huang Lung; pero el Maestro simplemente señaló con su dedo la espada voladora, y ella, parándose en medio del vuelo, cayó inofensivamente al suelo. ¡El Inmortal estaba pasmado! Nunca se había imaginado que un maestro Chan pudiera ser tan poderoso. Arrepentido, se arrodilló en una muestra de respeto. "Por favor, maestro – dijo – verdaderamente deseo comprender." </dt><dt> </dt><dt>Huang Lung se suavizó con él. "Vamos a olvidar la segunda parte del puchero de cocinar – dijo generosamente. En vez de ello, concéntrate en la primera parte. La misma mente que da forma a una disposición de materia que se llama "un grano de trigo" es la misma mente que da forma a una disposición de materia que se llama "universo". Los conceptos están en la mente. 'El estúpido Chan,' como anteriormente has declarado, es en realidad la práctica de vaciar la mente de conceptos,<u> </u>de juicios,<u> </u>de opiniones, de ego." Después añadió, probablemente recordando el poema, "¡Especialmente el concepto de ego!" </dt><dt> </dt><dt>Lu Dong Bin meditó la respuesta hasta que de repente la entendió. Durante el tiempo que había discriminado entre él mismo y los demás, entre deseable e indeseable, entre insignificante e importante, estaba dominado por el mundo conceptual, era simplemente un Arbitro de Ilusiones. ¡Nadie en su sano juicio quiere ser eso! Y desde luego el Dao Inmortal no quiere gastar su vida, tampoco toda la eternidad, juzgando entre mentiras, decidiendo cuales son más convincentes que otras. </dt><dt> </dt><dt>Pensaba que había dominado mi pequeña mente, </dt><dt>Pero era al revez. </dt><dt>Buscaba oro en el mercurio, </dt><dt>Ilusión fue todo lo que encontré </dt><dt>Mi espada chocó contra el suelo </dt><dt>Cuando Huang Lung señaló la Luna; </dt><dt>Vi la luz, su verdad se abrió paso </dt><dt>Y me salvó al fin. </dt><dt> </dt><dt>Desgraciadamente, la Iluminación no le hizo un mejor poeta. </dt><dt> </dt><dt>Lo importante es, sin embargo, que Lu Dong Bin, a pesar de ser un Dao Inmortal, pudo beneficiarse del Chan. Apreció tanto las Tres Joyas – el Buda, el Dharma y la Sangha – que en realidad adquirió el título de Guardián del Dharma. Por supuesto, no le fue necesario convertirse y llamarse a sí mismo un Hombre de Chan. La lección íntegra de su Iluminación es que los ‘nombres’ carecen de sentido, así que continuó siendo un Dao Inmortal. Solo que ahora, después de haber entendido tanto, subió inmediatamente a la categoría de los Inmortales; y aunque era el más joven de todos, se convirtió en el más prominente. Bajo su inspirado liderazgo, en el norte la Secta Daoísta realmente comenzó a prosperar. Lu Dong Bin fue llamado el Quinto Patriarca Dao del Norte. </dt><dt> </dt><dt>Abajo, en el sur, otro gran Daoísta, Zi Yang, también alcanzó la Iluminación después de leer sutras budistas. Fue conocido como el Quinto Patriarca Dao del Sur,... pero esa es otra historia. <b> </b></dt><dt><b> </b> </dt><dt><a name="_Toc24082307">Capítulo 12 - Mo Shan</a> </dt><dt> </dt></span><span style="font-family:Arial;font-size:78%;"> </span><span style="font-family:Arial;font-size:78%;"> <dt> </dt></span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> </span><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:100%;"> <dt>Muchas mujeres han sobresalido en la práctica del Chan. Muchas han alcanzado la maestría y algunas de éstas, de hecho, han tenido éxito donde eminentes maestros masculinos han fracasado. </dt><dt> </dt><dt>Tomen el caso de la Maestra Mo Shan. Siguiendo la costumbre de muchos maestros, Mo Shan tomó su nombre de la montaña en que estaba situado su monasterio. Se hizo bastante famosa por la profundidad de su comprensión del Chan y su habilidad para conducir estudiantes a la iluminación. </dt><dt> </dt><dt>El monje Quan Xi, que más tarde se convertiría en el Maestro Chan Quan Xi, había oído hablar sobre el éxito de sus métodos; y después de pasar unos pocos años con no otro que el Maestro Lin Ji - años en que había aprendido mucho pero no había alcanzado la iluminación – Quan Xi decidió visitar a Mo Shan para ver si sus métodos podían ayudarle. </dt><dt>Supongo que Quan Xi había caído víctima de la clase de orgullo que infecta a muchos estudiantes de grandes maestros. Piensan que es mejor ser un discípulo no iluminado de un maestro famoso que ser un discípulo iluminado de uno no conocido. Algunos sienten de la misma forma sobre el sexo. Suponen que un estudiante masculino no iluminado es superior a una maestra iluminada. Pueden llamar a esto Machismo Chan. </dt><dt> </dt><dt>De todas formas, el monje estudiante Quan Xi se presentó en el monasterio de Mo Shan con un sentimiento de hostilidad. Era altivo y arrogante, y estaba muy convencido de que era un practicante Chan masculino superior. No se encabritaba y golpeaba su pecho, ni rugía de la forma en que lo hacen los imitadores de monos, pero estaba próximo a esto. </dt><dt> </dt><dt>Quan Xi entró en la sala justo cuando Mo Shan estaba tomando su acostumbrado alto asiento de autoridad. Debería haberla saludado humildemente como un suplicante y suplicarle que le aceptara como estudiante; pero no podía postrarse ante una mujer. </dt><dt> </dt><dt>Mo Shan lo estudió por un momento, entonces llamó a un acompañante, "¿Qué es, un excursionista o un estudiante suplicante?" </dt><dt> </dt><dt>Quan Xi habló alto: "No soy turista. Soy un seguidor del Dharma del Buda." </dt><dt> </dt><dt>"¡Ah! – dijo Mo Shan intentando parecer sorprendida – ¡Sigues el Dharma! Dime, ¿cómo has llegado aquí?" </dt><dt> </dt><dt>"He entrado caminando desde el camino principal." </dt><dt> </dt><dt>"¿Piensas que has dejado el Dharma en el camino, que no puede ser seguido o encontrado aquí?" </dt><dt> </dt><dt>Quan Xi no sabía que decir. Hizo una especie de reverencia arrodillada, más para cubrir su confusión que para mostrar su respeto. </dt><dt> </dt><dt>Mo Shan apenas estaba satisfecha con esta concesión de arrogancia. "El Dharmakaya no tiene límites que puedas trazar para acomodar tu presunción y tus conceptos – dijo. Así como el Dharmakaya está en todas partes, también están las normas, la Ley, el Dharma del Buda. Ajustarás tu comportamiento y proceder a las normas establecidas. Cumplirás esta condición." </dt><dt> </dt><dt>Quan Xi se postró ante Mo Shan de mala gana. Pero cuando se puso en pie no pudo resistirse a preguntar, "¿Cuál es la condición de la mente directiva de Mo Shan?" Estaba solamente practicando con ella verbalmente. Lo que quería saber era si estaba o no iluminada. </dt><dt> </dt><dt>Mo Shan sonrió ante su impertinencia. "¿Cuál de los discípulos del Buda pudo ver su ‘usnisa’, la santa protuberancia en lo alto de su cabeza?" Quería decir, por supuesto, que hace falta tenerla para reconocerla; y si Quan Xi no podía ver si ella estaba iluminada era porque él mismo no lo estaba. </dt><dt> </dt><dt>"¿Dónde puedo encontrar al hombre que está a cargo de Mo Shan?" replicó con desdén, utilizando Mo Shan con el doble significado de "mujer" y "montaña del monasterio". </dt><dt> </dt><dt>"El Uno que está a cargo de Mo Shan ni es hombre ni es mujer." Replicó dándole un poco más de cuerda. </dt><dt> </dt><dt>"La persona que esté a cargo debe ser suficientemente poderosa para completar la transformación." Dijo él desafiándola, y de nuevo su machismo escogió lo mejor de su cerebro. </dt><dt> </dt><dt>Mo Shan miró deliberadamente a Quan Xi. Lenta y amablemente dijo, "El Uno que está a cargo de Mo Shan no es un fantasma ni un demonio ni una persona. ¿En qué debería ese Uno transformarse?" </dt><dt> </dt><dt>¡Quan Xi cogió el mensaje de repente! Se quedó allí durante un momento golpeado por el terror de su atrevida ignorancia. Entonces dejó caer sus rodillas y se postró de verdad ante Mo Shan. Esta vez había comprendido. </dt><dt> </dt><dt>Se quedó en el monasterio de Mo Shan durante tres años trabajando como jardinero. Bajo la guía de la Maestra Mo Shan alcanzó la iluminación. </dt><dt> </dt><dt>Años después, cuando se convirtió en maestro y tuvo sus propios discípulos, solía decirles, "La Iluminación requiere que el Gran Cazo esté lleno. De mi padre espiritual, Lin Ji, recibí solo la mitad del cazo. Fue mi madre espiritual, Mo Shan, quien me dio la otra mitad; y desde que ella me la dio, nunca más he tenido sed." <b> </b></dt><dt><b> </b> </dt><dt><a name="_Toc24082308">Capítulo 13 - Conclusión</a> </dt><dt> </dt><dt>Los antiguos tenían los mismos problemas con el tiempo que los nuestros. "Los días pasan como una lanzadera en un telar." Primero un camino, después el otro. De acá para allá, de un lado al otro. A veces decían, "Los días pasan como flechas." Nos quedamos ahí y las vemos pasar rápidamente, preguntándonos adónde van. </dt><dt> </dt><dt>En una sesión de enseñanza Chan el periodo de instrucción pasa rápidamente. Al igual que el tiempo, las ideas y las opiniones van y vienen. ¿En qué lado terminará el hilo? Las flechas de la perspicacia pasan por sobre nuestras cabezas. ¿Alcanzará alguna su objetivo? No lo sabremos hasta el gran conteo, al final de la sesión de enseñanza. </dt><dt> </dt><dt>En Chan, como en la mayoría de las cosas de la vida, nunca estamos seguros de comprender algo que hemos estado estudiando hasta haberlo comprobado. Los profesores llaman a esta prueba, "Pagar la cuenta." El último día de la sesión de enseñanza, todos los estudiantes se reúnen y el profesor llama al azar a una persona y luego a otra, y así sucesivamente, haciendo toda clase de agudas preguntas. Eso es a lo que llamamos presentarle a un estudiante la cuenta. Tiene que levantarse delante de toda la clase y someterse a la interrogación. "¿Cuánto has aprendido? ¡A pagar!" Los profesores esperan ser pagados con buenas respuestas. </dt><dt> </dt><dt>Por supuesto, si en alguna sesión una persona consigue alcanzar la Iluminación, paga la cuenta para todo el mundo. Todos comparten la alegría cuando alguien tiene éxito en alcanzar la Verdad. </dt><dt> </dt><dt>Bueno, ¿qué han aprendido de estas lecciones? Puede ser que hayan pagado la cuenta para todo el mundo y hayan obtenido la Iluminación. Puede ser que no estén seguros y necesiten un poco más de tiempo para pensar en ello, para reflexionar sobre estas ideas Chan en su cabeza, para permitir que los pensamientos se asienten un poco y ver lo que tienen. Tómense el tiempo que necesiten - tan solo no dejen de reflexionar. Mantengan el Chan en su cabeza. Redefinan sus prioridades. Cultiven la paciencia. </dt><dt> </dt><dt>Un día de verano el Buda decidió dar un largo paseo. Anduvo solitario por el camino, solamente disfrutando de la belleza de la Tierra. Entonces, en un cruce -- de caminos – se encontró con un hombre que rezaba. </dt><dt> </dt><dt>El hombre, reconociendo al Tathagata, se arrodilló ante él y lloró, "¡Señor, la vida es en efecto amarga y dolorosa! Una vez fui feliz y próspero, pero a través de artimañas y fraude los que amaba me lo quitaron todo. Soy rechazado y despreciado. Dime, Señor –preguntó – ¿cuántas veces debo renacer en tal infeliz existencia antes de conocer la bendición del Nirvana?" </dt><dt> </dt><dt>El Buda miró a su alrededor y vio un mango. "¿Ves ese árbol?", preguntó. El hombre asintió con la cabeza. Entonces el Buda dijo, "Antes de conocer la libertad del dolor debes renacer tantas veces como mangos hay en el árbol." </dt><dt> </dt><dt>Entonces el árbol estaba lleno de fruta y docenas de mangos lo cubrían. El hombre suspiró. "¡Pero Señor – protestó – he guardado sus preceptos! ¡He vivido honradamente! ¿Por qué debo ser condenado a sufrir tanto tiempo?" </dt><dt> </dt><dt>El Buda susurró, "Porque así es como debe ser." Y continuó su paseo. </dt><dt> </dt><dt>Llegó a otro cruce de caminos y encontró a otro hombre rezando; y este también se arrodilló ante él. "Señor, la vida en efecto es amarga y dolorosa – dijo el hombre. He conocido mucha angustia. Cuando era un niño perdí a mis padres; cuando fui mayor, perdí a mi mujer y a mis lindos hijos. ¿Cuántas veces debo renacer en tal infeliz existencia antes de conocer definitivamente el refugio de su amor?" </dt><dt> </dt><dt>El Buda miró alrededor y vio un campo de flores silvestres. "¿Ves ese campo de flores silvestres?", preguntó. El hombre asintió con la cabeza. Entonces el Buda dijo, "Antes de conocer la libertad del dolor debes renacer tantas veces como flores hay en ese campo." </dt><dt> </dt><dt>Viendo tantos cientos de flores, el hombre lloró, "¡Pero Señor! He sido una buena persona. ¡Siempre he sido honesto y justo, no he hecho el mal a nadie! ¿Por qué debo soportar tanto sufrimiento?" </dt><dt> </dt><dt>El Buda susurró, "Porque así es como debe ser," y continuó su camino. </dt><dt> </dt><dt>En el siguiente cruce de camino se encontró con otro hombre que se arrodilló ante él en súplica. "¡Señor, la vida en efecto es amarga y dolorosa! – dijo el hombre. Días de trabajo bajo el Sol abrasador, noches acostándose sobre la fría y húmeda tierra. ¡Tanta hambre, sed y soledad! ¿Cuántas veces más debo renacer en tal infeliz existencia antes de caminar con usted al Paraíso?" </dt><dt> </dt><dt>El Buda miró alrededor y vio un tamarindo. Entonces, cada rama del tamarindo tenía muchos tallos, y cada tallo docenas de pequeñas hojas. "¿Ves ese tamarindo?", preguntó el Buda. El hombre asintió con la cabeza, "Antes de conocer la libertad del dolor debes renacer tantas veces como hojas hay en el tamarindo." </dt><dt> </dt><dt>El hombre miró el tamarindo y sus miles de hojas, y sus ojos se llenaron de lágrimas de gratitud. "¡Qué misericordioso es mi Señor!", dijo y apoyó su frente en el suelo antes los pies del Buda. </dt><dt> </dt><dt>Y el Buda dijo, "Levántate mi buen amigo. Ven ahora conmigo." </dt><dt> </dt><dt>Y hasta el día de hoy las semillas de tamarindo son el símbolo de fidelidad y paciencia. </dt><dt> </dt><dt>No podemos hacer un contrato con el universo. No podemos decir, "He seguido las normas y las reglas, y por lo tanto tengo derecho a recibir beneficios" ó "He tolerado mucho más de lo que me tocaba de mala suerte. Debo tener algo de buena suerte ahora." El universo no reconoce nuestras frívolas demandas de justicia. Hay héroes que ponen sus vidas a un lado por el beneficio de los demás. No tienen nada de que quejarse. Sin embargo, sabemos que porque ellos no son egoístas caminan en el Paraíso. </dt><dt> </dt><dt>¿Y no es este el camino de la felicidad? ¿No es así como entramos al Nirvana? ¿Perdiendo nuestros egos individuales y alcanzado el Yo Búdico universal? El Paraíso viene cuando nos entregamos a él. </dt><dt> </dt><dt>Así que cuando se les pregunta, "¿Cuánto han aprendido?", incluso si no pueden ofrecer respuestas específicas, pagarán su cuenta si dicen simplemente, <b><span style="color:#ff0000;">"<a name="Por">Por</a> mucho que cueste, seguiré con el Chan. Seguiré intentando librarme del egoísmo y nunca olvidar mantener mi frente apoyada en el suelo ante los pies del Buda."</span></b> </dt><dt> </dt><dt>La humildad y la paciencia son monedas de oro. Y aquí va un consejo: Intenten encontrar un Buda en cada hombre y podrán pagar la cuenta por miles. </dt><dt> </dt><dt>¡Cuándo se trata de amar, sean generosos! </dt><dt> </dt></span><dt> </dt><dt><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:85%;"><b>Gran Maestro Jy Din Shakya</b></span> <b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span></b> <b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span></b></dt><dt> <b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span></b> <b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span></b> <b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span></b><br /></dt><dt><b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"><a name="_Toc24082309">Final de ‘Las Enseñanzas de Xu Yun o Nube Vacía’</a> </span></b> <b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span></b> <b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span></b></dt><dt><b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;">Última Revisión: 18 de julio de 2002 </span></b> <b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span></b> <b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;"> </span></b></dt><dt><b><span style="font-family:Trebuchet MS;font-size:78%;">Revisado por la Rev. Yin Zhi Shakya, OHY </span></b></dt></dl>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-83606423066044101342009-09-16T14:55:00.000-07:002009-09-16T14:56:41.016-07:00De la serie, Playas<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEVO9gkBi7Ml6tpkpDbH6gU3WM2y_Qtp5c672iLmhx7CLWSmFuV-0FcZ4H6lkaA68xUjY_eouuHMBZ73MI9xTQs8BUmqEWcs3R52jKNES_H7ulm8Ilag3gcWVM3DzGtJ_7CKVZofBd8PyG/s1600-h/nuevo-1_small.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 320px; height: 133px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEVO9gkBi7Ml6tpkpDbH6gU3WM2y_Qtp5c672iLmhx7CLWSmFuV-0FcZ4H6lkaA68xUjY_eouuHMBZ73MI9xTQs8BUmqEWcs3R52jKNES_H7ulm8Ilag3gcWVM3DzGtJ_7CKVZofBd8PyG/s320/nuevo-1_small.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5382187386349756882" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-68079258577220391732009-09-16T14:50:00.000-07:002009-09-16T14:51:10.497-07:00Caminos del sur<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhMCtP-n-93qRqhxngmscgQWSaqtnBH03_7GRB9nqPYxkhofVPisT0yB53gh8UlM1TAjVCZoMONy06gXMcDF_vbS2FyhZK5GKpcvoX0idi8E3GMMGWDZ53JASY-5ntbZCwvCx6y0H0HHBo9/s1600-h/caminos+del+sur.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 320px; height: 141px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhMCtP-n-93qRqhxngmscgQWSaqtnBH03_7GRB9nqPYxkhofVPisT0yB53gh8UlM1TAjVCZoMONy06gXMcDF_vbS2FyhZK5GKpcvoX0idi8E3GMMGWDZ53JASY-5ntbZCwvCx6y0H0HHBo9/s320/caminos+del+sur.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5382186071580879458" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-78221569072387066872009-09-16T14:47:00.000-07:002009-09-16T14:49:16.842-07:00Crepúsculo<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNXlEyJWnIkc2_Z7wRORUJxZHJapU_L1dBvYj7CV8FrnAT0HmGdRoh9X_y0hmLGc1Fue1oFa3g_nMlfRH24SX36BX9SJ3oNEsBgARQs2jJsuOjYy8zSjr5kDl2Bt7yki4lI7nfdcZAT3Mf/s1600-h/crep%C3%BAsculo.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 320px; height: 130px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNXlEyJWnIkc2_Z7wRORUJxZHJapU_L1dBvYj7CV8FrnAT0HmGdRoh9X_y0hmLGc1Fue1oFa3g_nMlfRH24SX36BX9SJ3oNEsBgARQs2jJsuOjYy8zSjr5kDl2Bt7yki4lI7nfdcZAT3Mf/s320/crep%C3%BAsculo.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5382185539052369890" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-62516798512005225082009-09-11T03:08:00.000-07:002009-09-11T03:09:13.594-07:00Willigis JägerWilligis Jägerupasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-76382766290388850552009-09-11T02:54:00.001-07:002009-09-11T02:54:53.388-07:00<div id="box_left"> <div id="box_left_inner"> <ul class="menulevel1"><li class="doc"><a href="http://www.willigis-jaeger.de/es/?Retrato&PHPSESSID=d625c6d200db2da508436db52c6a900c">Retrato</a></li><li class="doc"><a href="http://www.willigis-jaeger.de/es/?Contemplaci%F3n&PHPSESSID=d625c6d200db2da508436db52c6a900c">Contemplación</a></li><li class="sdoc">Zen</li><li class="doc"><a href="http://www.willigis-jaeger.de/es/?Art%EDculos_y_ensayos&PHPSESSID=d625c6d200db2da508436db52c6a900c">Artículos y ensayos</a></li><li class="doc"><a href="http://www.willigis-jaeger.de/es/?Books_%2F_Audio_%2F_Fotos&PHPSESSID=d625c6d200db2da508436db52c6a900c">Books / Audio / Fotos</a></li><li class="doc"><a href="http://www.willigis-jaeger.de/es/?Contacto&PHPSESSID=d625c6d200db2da508436db52c6a900c">Contacto</a></li><li class="doc"><a href="http://www.willigis-jaeger.de/es/?Links&PHPSESSID=d625c6d200db2da508436db52c6a900c">Links</a></li></ul><p id="menulinks"><a href="http://www.willigis-jaeger.de/es/?&sitemap&PHPSESSID=d625c6d200db2da508436db52c6a900c">Mapa de la web</a><br /><a href="http://www.willigis-jaeger.de/es/?Zen&PHPSESSID=d625c6d200db2da508436db52c6a900c&print&PHPSESSID=d625c6d200db2da508436db52c6a900c">Versión para imprimir</a><br /></p><form action="/es/" method="post"><input name="PHPSESSID" value="d625c6d200db2da508436db52c6a900c" type="hidden"><div id="searchbox"><input class="text" name="search" size="12" type="text"><input name="function" value="search" type="hidden"> <input class="submit" value="Buscar" type="submit"></div></form><br /><br /></div> </div> <div id="box_main"> <div id="box_main_inner"> <h1>Zen</h1><span style="font-weight: bold;">Zen en Occidente</span><br /><br /><div id="boxr"><img src="http://www.willigis-jaeger.de/images/sesshin.JPG" alt="Sesshin am Benediktushof" /></div>El zen nació en China en los siglos sexto y sétimo después de Cristo. La transformación de la palabra muestra ya un largo desarrollo antes de esa época. Zen es la abreviatura de la palabra japonesa 'zenna', que se derivó de la palabra china chan. Ésta a su vez es una forma de leer la palabra sánscrita dhyana, la cual significa 'recogimiento de la mente', que lleva a un abismamiento en el que desaparece toda diferenciación dualista. Tiene por meta una experiencia de iluminación como le tocó en suerte a Shakyamuni Buda, en el siglo quinto antes de Cristo.<br /><br />Desde el punto de vista esotérico el zen no se puede considerar religión, es la realización de la realidad no dual, como les sucedió a los grandes santos, sabios y fundadores de las religiones de todos los tiempos y lugares. Zen es probablemente el camino mas recto hacia el despertar, a pesar de que no se le puede clasificar como camino. Mucho más se parece a un irrumpir al, siempre presente y nunca perdido, origen de todo lo existente. Con ello su procedencia es transconfesional y mas antigua que todas las religiones existentes. Todas las grandes religiones que existen lo han integrado de una u otra forma bajo nombres diferentes.<br /><br />El zen también puede verse de forma exotérica. Entonces es una escuela de sabiduría del Budismo Mahayana, que se desarrolló en China del encuentro de las enseñanzas del indú Bodhidharma con el taoísmo. Bajo este aspecto el zen es una religión que a través de enseñanzas y prácticas debe guíar a la autocontemplación del Ser. Pero Shakyamuni no quiso fundar una religión; al contrario, él destacó la inutilidad de los ejercicios religiosos y rituales.<br /><br />El zen es transconfesional por naturaleza. Por ello no hay enseñanzas sobre zen, tampoco sobre budismo. Es una trasmisión fuera de las escrituras. El Maestro Yuansou dijo con razón: 'No hay enseñanza para ti, para que medites o te asientes en ella. Cuando no crees en ti mismo, tomas tu hatillo y rondas ante las casas de otros buscando zen y tao. Buscas misterios, milagros, budas, maestro zen y profesores. Crees que eso es buscar lo supremo y haces de ello tu religión, pero se parece a una carrera hacia el este, para conseguir algo que está en el oeste.'<br /><br />Por eso no se puede instruir a nadie como maestro zen o nombrar roshi sin más. El que ha pasado el koan número seis del Mumokan sabe lo que es una trasmisión. Buda sostiene una flor en alto, en él. El que ha experimentado lo que significa esto, está iluminado. En el sentido estricto de la palabra sólo hay una confirmación, no una trasmisión.<br /><br />El zen está estrechamente ligado a la religión budista, pero transciende esta y toda religión. Todo camino verdaderamente esotérico va más allá de la confesión, ya sea raja-yoga, patanjali, vipassana, sufismo o contemplación. Se trata de esa 'sophia perennis', la sabiduría eterna que hoy en día sólo es vivida por una minoría, pero que algún día será reconocida como la verdadera meta de toda religión. Las personas del futuro serán 'despiertas'. Entonces las religiones se habrán trasformado en caminos a la experiencia de la Realidad. El zen puede jugar un papel importante por su naturaleza transconfesional. Por lo tanto no hay maestros zen cristianos ni budistas. Si el zen no se puede encasillar en ninguna religión, no hay zen cristiano ni zen budista, sino únicamente zen.<br /><br />En occidente solamente tiene perspectivas el zen 'desnudo'. El budismo no ganará apenas terreno en occidente, pero sí el zen. Pero el zen tendrá que 'inculturizarse'. Desaparecerá mucho de lo que en los monasterios zen de oriente se ha desarrollado como forma monástica. Llega un zen laico. Hasta ahora en occidente el zen tiene algo de 'converso'. Ritos, ropas e instrumentos de sonido que a lo largo de la historia fueron utilizados en los monasterios, juegan un papel importante y tapan a menudo lo esencial. En algunas agrupaciones tienen gran importancia los hábitos de los monjes budistas (imitaciones o auténticos), el estilo de un sesshin, las barritas de incienso y hasta las cabezas rapadas. La tendencia a las formas exteriores es una enfermedad de principiantes. Pero el zen desnudo es una corriente constante que en occidente cambiará su estructura externa, como la cambió en China al encontrarse con el taoísmo. Su naturaleza no se dejará falsificar. 'El Dharma no necesita defensor ' dice una frase zen.<br /><br />Las religiones son modelos. En oriente las religiones se miden por la experiencia de los sabios. Por ello no necesitan una congregación de fe. Mi larga estancia en Japón, con un maestro muy libre, me permitió reconocer que las religiones son modelos, que envejecen si no son avivadas continuamente desde la experiencia. Los conceptos religiosos de mis amigos budistas se trasformaron con el zazen, al igual que los conceptos religiosos de mis amigos cristianos. A los seguidores del Budismo Amida les llegó el mismo cambio por el camino del zen que a los cristianos que tenían un concepto personal de Dios. 'Mata a Buda y a los patriarcas si te los encuentras', dice un célebre proverbio zen. 'Pido a Dios (Divinidad) que me quite a Dios' formula el Maestro Eckhart, diciendo lo mismo. El que en el zen irrumpe hasta la experiencia, la idea de sí mismo se trasforma tanto que ya no le resulta un impedimento. Pero no todos están dispuestos a dar este último paso.<br /><br />El significado de la religión para la humanidad no se reduce con estas afirmaciones. Para la mayoría la religión sigue siendo ayuda y orientación en la vida. Por eso yo mismo practico ritos cristianos y budistas. Ellos son celebración y expresión de mi experiencia.<br /><br />Sophia perennis. Si leo los informes de las experiencias del griego Parménides, casi contemporáneo de Shakyamuni, o de Plotino (350 a. C.) que no se contaba perteneciente a ninguna religión, o los sermones de Eckhart, que vivió en tiempos de Dogen Zenji, o los koan del Mumokan, siempre puedo ver el mismo mensaje intemporal: 'Hay una realidad que está antes del cielo y la tierra.' (Daio Kokushi). Es la verdad eterna la que se manifiesta. - Mi maestro se hubiera extrañado si yo hubiese ido a él con el deseo de ser budista. Seguramente hubiera pensado: 'Ahora si que no ha comprendido de lo que realmente se trata.'<br /><br /><br /></div></div>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-52160669824198252482009-09-10T17:34:00.000-07:002009-09-10T17:35:49.777-07:00Huang Po<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj0bMOH977c6VEsJFVHgtViyHQQXAf5UfkdNj6t7p_6FT6vG8yt_F88VKtn4IVUShouJF01lw_0gP4R-BAEuG3V0GFf0JdfCCU1zeKBJvKRF1FmQjvgZBRX8DVdsYrdr8QunheB2u1MwCN1/s1600-h/huang+po.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 42px; height: 129px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj0bMOH977c6VEsJFVHgtViyHQQXAf5UfkdNj6t7p_6FT6vG8yt_F88VKtn4IVUShouJF01lw_0gP4R-BAEuG3V0GFf0JdfCCU1zeKBJvKRF1FmQjvgZBRX8DVdsYrdr8QunheB2u1MwCN1/s320/huang+po.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5380001987087841426" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-82247531685531255492009-09-10T17:31:00.000-07:002009-09-10T17:33:15.038-07:00Lin Chi (Rinzai)<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEig-kKFJXSWgj1fP14s3IQw4MKgsb0pI07yEUbvDedRth94dnw_fQbSr-VCfCE90YXpCm1yR3z-YNfWbG9-7V4OGhpwa1B3siTFeJoiGTYr_yC7IrwBaIRw2Uj-9Udc09HDu9OnwG8L_6zq/s1600-h/rinzai.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 135px; height: 135px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEig-kKFJXSWgj1fP14s3IQw4MKgsb0pI07yEUbvDedRth94dnw_fQbSr-VCfCE90YXpCm1yR3z-YNfWbG9-7V4OGhpwa1B3siTFeJoiGTYr_yC7IrwBaIRw2Uj-9Udc09HDu9OnwG8L_6zq/s320/rinzai.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5380001187454747522" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-51802306377727861162009-09-10T17:28:00.000-07:002009-09-10T17:29:09.112-07:00Hui Neng<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEij8SyOPFEV8DmOwq6oy4J6vOpE5Htby2zhPKwUF4k-agqlVJ91-w3KU0M18-P9CvqK6JFyGfeEiZUYnt5-QpaCj-B8XGoJLBU5V4eU9DDfCrIKAyTd6jXSJ_o29wNDEiqaa2l-pJwskwdK/s1600-h/hui+neng.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 111px; height: 113px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEij8SyOPFEV8DmOwq6oy4J6vOpE5Htby2zhPKwUF4k-agqlVJ91-w3KU0M18-P9CvqK6JFyGfeEiZUYnt5-QpaCj-B8XGoJLBU5V4eU9DDfCrIKAyTd6jXSJ_o29wNDEiqaa2l-pJwskwdK/s320/hui+neng.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5380000261960046930" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-1288201698065218532009-09-10T16:56:00.000-07:002009-09-10T16:57:48.049-07:00Bhodidharma<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEib9Hh3h5buEaeZvVxTzSQvTJ_bYcLwcjq6XNskqlr8gyScr14dJmh7igFzEAow-49lnoe34Jes4VYhklG-bngEuy7dgsiy0EgYJMxUa3TWId8dGn-Z_VxEd6oHtImUY5Cfbl9OJOR9BbvI/s1600-h/bodhidharma.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 202px; height: 317px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEib9Hh3h5buEaeZvVxTzSQvTJ_bYcLwcjq6XNskqlr8gyScr14dJmh7igFzEAow-49lnoe34Jes4VYhklG-bngEuy7dgsiy0EgYJMxUa3TWId8dGn-Z_VxEd6oHtImUY5Cfbl9OJOR9BbvI/s320/bodhidharma.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5379992165622082322" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4568766909954801953.post-12166036840057397942009-09-10T03:16:00.001-07:002009-09-10T03:16:47.542-07:00<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiqHwu5O8du1QalWhgyZJeCR9k9Fnualfd18lU5jjhrslv4eFXJwdXBRXTH6ZzYo7d2ZJBKGs_CLlH-5_NpkijQ1EIBJoVN1d85FpR97PqfyvYa7ijpMLASYq2r0GTwUXiZBVC2jhsbwgEs/s1600-h/1713a.jpg"><img style="margin: 0pt 10px 10px 0pt; float: left; cursor: pointer; width: 320px; height: 218px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiqHwu5O8du1QalWhgyZJeCR9k9Fnualfd18lU5jjhrslv4eFXJwdXBRXTH6ZzYo7d2ZJBKGs_CLlH-5_NpkijQ1EIBJoVN1d85FpR97PqfyvYa7ijpMLASYq2r0GTwUXiZBVC2jhsbwgEs/s320/1713a.jpg" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5379780686957748930" border="0" /></a>upasaka Zhéng Góng,OHY- Alberto Tenagliahttp://www.blogger.com/profile/09608564986542335451noreply@blogger.com0